Hola, soy Jorgito otra vez. Ya les había contado mi sueño, mi deseo intenso de que tío Eli y el señor Manuel me compartieran con otros hombres, con muchos otros hombres. Ellos, primero tío Eli, que me inició sexualmente, y enseguida el señor Manuel, me habían convertido en la putita que soy, una putita insaciable con hambre permanente de vergas; una putita mucho más putita que la más putita de todas las putitas.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 12 de December de 2016 a las 00:05:32 (7716 Lecturas)
Siempre he sido muy tímido, muy vergonzozo y a la tierna edad de trece años me era inimaginable alguna conquista. Pasó el tiempo y ahora, cuando acabo de cumplir dieciocho años -aunque aparento quince- sigo siendo un chico tímido, pero mi timidez convive con el deseo cada vez más fuerte de probar vergas.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 12 de December de 2016 a las 17:50:28 (3769 Lecturas)
Tío Eli estaba tendido de espaldas en el sofacama con los ojos cerrados, normalizando poco a poco su respiración. Yo, aún de rodillas, miraba obsesionado su verga con ganas de que volviera a pararse para entrarme en mi culo hambriento. Entonces decidí ayudar a que esa erección ocurriera lo antes posible. Tomé la verga con mi mano derecha y comencé a sobarla.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 12 de December de 2016 a las 17:51:38 (6019 Lecturas)
Les cuento que me llamo Jorge, que vivo con mis padres y aunque me dé pudor decirlo soy un lindo chico. Cabello castaño, ojos grandes y oscuros, facciones delicadas, estatura media, delgadito y con algunas curvas leves que sugieren algo de femenino en mi aspecto. Lampiño de piel clara y tersa, lindas piernas, tengo que reconocerlo, y un culo empinado y redondo que me abulta los pantalones más de lo que me gustaría.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 12 de December de 2016 a las 23:50:47 (6735 Lecturas)
-Bueno, Aguirre, oíme con mucha atención. -Sí, señor… -Parate firme y pone las manos atrás. -Sí, señor… -Bien, como ya oíste hace un rato, a partir de ahora sos nuestra putita. Mi putita, la putita de Legnani, la putita de Reggiardo, la putita de Lencina. -S… sí… sí, señor Abaroa… -Y la putita de cualquiera que te tenga ganas. ¿Oíste, Aguirre? Esto último estremeció al chico y luego de tragar saliva contestó con voz temblorosa: -Sí… sí, profesor…
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 12 de December de 2016 a las 23:52:34 (3369 Lecturas)
-Bueno, Aguirre, oíme con mucha atención. -Sí, señor… -Parate firme y pone las manos atrás. -Sí, señor… -Bien, como ya oíste hace un rato, a partir de ahora sos nuestra putita. Mi putita, la putita de Legnani, la putita de Reggiardo, la putita de Lencina. -S… sí… sí, señor Abaroa… -Y la putita de cualquiera que te tenga ganas. ¿Oíste, Aguirre? Esto último estremeció al chico, que luego de tragar saliva contestó con voz temblorosa: -Sí… sí, profesor…
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 11 de November de 2016 a las 21:34:46 (4649 Lecturas)
Roque partió dos días después, luego de otra sesión sexual tripartida con Claudito y su madre que esta vez participó más activamente, ya que penetró analmente a su hijo usando dos de sus dedos mientras el chico, en cuatro patas, chupaba la verga de su tío. Una semana después, cuando Sara y su hijo se aprestaban a cenar, sonó el celular de ella. Era Roque.
-¡Buenas noticias, hermana!
-¡Ay, contame ya, Roque!
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 11 de November de 2016 a las 11:40:23 (6211 Lecturas)
el tomó mi cabeza y me acercó hacia ella, la agarré con mi mano derecha tirando todo el cuero tan atrás como pude, desnudando su glande, brillaba, el agua corría por el hasta sus testículos, lo llevé mi boca, lo besé, una y otra vez, lo masturbé con la mano, era tan rico, lo acaricié con mi lengua, por abajo, por arriba, lamía su tronco de punta a punta, tan largo como era, jugué con sus bolas en mi boca.
Relato erótico de gay enviado por dulces.placeres el 11 de November de 2016 a las 00:01:15 (3855 Lecturas)
Al día siguiente el señor Abaroa buscó durante el primer recreo a Lencina, Reggiardo y Legnani y los citó en la Sala de Profesores para cuando terminara la jornada de clases. Los tres se presentaron ante el profesor temerosos de ser castigados por alguna falta que hubieran cometido, y el susto creció cuando el señor Abaroa, después de invitarlos a sentarse a la larga mesa en una de cuyas cebeceras él estaba ubicado, les dijo: -Muchachos, lo ubican a Daniel Aguirre, me imagino.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 11 de November de 2016 a las 18:34:09 (4540 Lecturas)
Al día siguiente el señor Abaroa buscó durante el primer recreo a Lencina, Reggiardo y Legnani y los convocó en la Sala de Profesores para cuando terminara la jornada de clases. Los tres se presentaron ante el profesor temerosos de ser castigados por alguna falta que hubieran cometido, y el susto creció cuando el señor Abaroa, después de invitarlos a sentarse a la larga mesa en una de cuyas cebeceras él estaba ubicado, les dijo: -Muchachos, lo ubican a Daniel Aguirre, me imagino.
Relato erótico de gay enviado por señoreduardo el 11 de November de 2016 a las 23:15:42 (4588 Lecturas)