A mi alumna, veterana, le practique su primer anal

Me llamo Dionisio, tengo 31 años y soy profesor de gimnasia y personal trainer
Mi debilidad son las mujeres, en especial, las maduras, con tetas grandes y buen culo. Dado mi trabajo en el gimnasio, muchas mujeres con estas características, están al alcance de mis manos. Por lo que casi siempre logro el objetivo de cogerme alguna de mis alumnas.
Al conocer a Margarita centre mi atención de 45 años, alta, tetas bien formadas, y algo grandes y un culo bien redondo y goloso mas que eso perfecto para penetrarlo, y hacerla bramar.
Ya en las primeras clases yo no podía despegar mis ojos del cuerpo de esta hembra. Cualquier motivo, era bueno para tocar su cuerpo con el pretexto de corregir algún ejercicio.
Al poco tiempo note que ella no se quedaba atrás y me provocaba todo el tiempo. Comenzó a venir a clase, vestida muy provocativamente.
Casi siempre usaba unas calzas blancas y un musculosa de algodón ajustada, que era como si no tuviera nada, dado que marcaba cada uno de los rincones de su cuerpo. Se notaba claramente que no usaba corpiño, se podía apreciar por completo lo grande de sus pezones. También se marcaba una tanga muy chiquita ya que con las calzas blancas yo podía ver cómo se notaban sus labios vaginales a la perfección, donde de se metía profundamente la tela de las calzas.
A las dos semanas de tomar clases conmigo, Me espera al finalizar, me pregunta si ejercía como personal trainer, le conteste que si, me pidió si no podía darle clases en su casa, aunque sea una vez por semana ya que necesitaba una rutina mucho más exigente. Le dije que no había problema. Les juro que esto me excitó mas, en lo único que pensaba era tener ese cuerpo todo transpirado y pidiendo sexo a gritos, pegado a mí. Quería hacerle hacer otro tipo de "ejercicios" mucho más placenteros.
Acordamos los días y las horas y mis honorarios como pretexto ya que se lo haría gratis con tal de poseerla.
Llego a su casa, conversamos un poco, mañana de mucho calor, le digo que empiece con la entrada en calor.
Como siempre vestía una sudadera , por supuesto sin corpiño, y ese día se notaba claramente la muy caliente no llevaba bombacha, por lo que la calza se le metía en su entrepierna y no se marcaba nada .
Los ejercicios era mas personalizados y con toda intención , mis manos, ayudaban a perfeccionar sus movimientos y a la vez manosearla, de forma descarada, al punto que mi pene estaba por estallar. le dije que podía descansar. Yo estaba completamente excitado, ya que ver tremenda mujer toda transpirada y sin ropa interior, era imposible no estarlo.
En la pausa me sorprende preguntándome, si era verdad que el sexo ayudaba a quemar calorías, casi me atraganto, me cambio el ángulo, era ella la que me insinuaba. Profundice Le digo que sí, pero que debe ser sexo con mucho movimiento y por largo rato.
Entonces me manda una estocada directa, con cara de compasión, sin anestesia me dice que lamentablemente su marido ya no la atendía como ella quería y necesitaba. Yo le dije “cómo puede ser que siendo una mujer hermosa como era sos, tu esposo no te preste la atención necesaria” No sé, me contestó ella. Tal vez ya no le guste mi cuerpo”, se paró y continuo diciendo “tal vez no le gustan mis pechos o mi cola”. Yo estaba completamente al palo. Me dolía la pija de ver cómo me mostraba su cuerpo. No deje pasar la oportunidad, al decirle “que tenía un cuerpo hermoso. Que a mí me encantaban las mujeres con muchas formas. Que yo en lugar de su esposo no dejaría de mimarla un minuto.


Tras ello me acerqué a ella y tomándola de la cintura, con mi mirada profunda de posesión le di uno de esos besos que nuestras lenguas empezaron a entrecruzarse. Comencé a meterle mano por todos lados, su mojado cuerpo de transpiración. A lo pulpo metí las dos manos por debajo de sus calzas y le pasaba mis dedos por la raya del culo que estaba todo sudado.
Ella no era nada tímida ya me sobaba la verga por encimas de mis jogins.
La senté en el sillón, le bajé las calzas, y quedó ante mí toda desnuda de la cintura hacia abajo. Solo le dejé las zapatillas. Su piel era completamente blanca y tenía la concha toda depilada. No tenía ni un pelito. Se veían sus labios mayores bien hacia afuera. El rosa fuerte de su concha más el brillo de su transpiración más su excitación hicieron que me lanzara a chuparle la concha como a mí me gusta. No les puedo contar con palabras el sabor de los flujos que Margarita emitía de su concha. Era riquísimo. El sabor agridulce de su flujo se mezclaba con el sabor a transpiración de su vulva. me apretaba la cabeza, excitada gritaba que no pare, a los pocos instantes se vino estridentemente
(Según me confesó más tarde, hacía cuatro meses que no tenía sexo). Margarita gritaba y gemía como una condenada. Y yo chupaba y tragaba sus jugos, chupaba y tragaba. Le hundía la lengua tan adentro como podía. Estuve chupándole la concha cerca de media hora en donde Margarita volvió a acabar.
Yo me deleitaba verla retorcerse, en un sin fin de estado de placer. No dejaba de aullar, Y seguía gritando y pidiendo más. Me mande a fondo comencé cada tanto a dejar de chuparle la concha y bajar hacia el agujero de su orto. Lo tenía bien cerrado Esto no me importaba en lo mas mínimo y le jugué en su culo con la lengua.
Mientras más combinaba, mas se enloquecía, me Salió decirle “Qué cerrado que tenés tu culito, Margarita” “ si , si” me contesta digo “No te preocupes eso tiene solución”
“No se te ocurra, intentar cogerme el culo, por que nunca permití, soy virgen por ahí”!.
. Exclamé “yo soy experto en desvirgar culitos, mamita”.” No de ninguna manera” hoy vas a conocer el placer anal, y apreciar lo que te estuviste perdiendo”
Le saqué todo y sus dos senos quedaron colgando como dos melones.. Se los chupé hasta que le quedaron rojos de la irritación. Me levanté de arriba de su cuerpazo, me saqué todo, quedo mi verga dura, a la luz a la altura de su boquita. Margarita Solo dijo “UUUYYY y tomándolo con las dos manos me lo empezó a chupar, lo hacía como todas las mujeres de experiencia con una delicada, calidad, al rato casi le inundo su boca con mi semen, pero la tentación de penetrar su culo , me llevo a dominarme, así que la coloque en perrito, y como era lógico, me made a penetrar su vagina, muy velozmente, era, un túnel, tan lubricado, que mi pene chapoteaba, dentro de esa vagina, caliente y sedienta, fue inevitable, que acabara, estrepitosamente. Momento que mientras que corcoveaba yo delicadamente, fui a poner mi sable,, en la puerta de su culo, trate de no ser brusco, y pude pese a la resistencia a ser penetrada, poner la cabeza, de mi pene,, ella se quedo dura, al sentir la punta por primera vez entrando, se quejo, me ayudo, lo mojada que estaba, y como era algo, muy anhelado, al entrar hasta la mitad, no aguante, mas, y escupí mucha leche, dentro de ese culazo, que solo a medias en ese momento pude apenas doblegar. Claro, no se me iba a escapar por que en el segundo, polvo, se lo traspase, como una trepano, ella grito un poco hasta que de a poco pude entrar y salir con facilidad, esa parte según ella es solo para mi, ya se ha convertido, ya que ahora se ppone solita en posición para que yo haga la tarea.-