Al escondite lerite

En el pueblo no había mucho que hacer . Niños sí había , pelotas para jugar y mucha imaginación.
Tardes plomizas de calor y juegos a media tarde.
Saltando de casa en casa el juego del escondite era recurrente .
Cinco éramos , dos chicos y tres chicas .
Y mi prima era una de ellas .
Y había crecido , y cómo . Para bien claro .
Mi cuerpo había experimentado un cambio , el vello en el pubis y la primera polución nocturna.
Catorce recién estrenados . Y mi prima trece y medio .
Una tarde de juegos nos escodimos juntos en una habitación del desván.
Allí , debajo de la cama los acurrucados y sin respirar casi frente a frente .
Mi cuerpo tenía sensaciones con ella y sus pezones estaban ya floridos y pimpantes .
Nos pusimos el dedo en la boca pidiendo silencio .
Y seguimos mirándonos . Embelesados . De pronto me dió un beso en los labios .
Tuve una erección y aunque dudé le toqué un pecho .
¿ Te gustan ? me dijo . ¿ Quieres mirar ?
Asentí con la cabeza y ella entreabrió dos botones . Era precioso , toca me dijo .
Y aquella vez toqué y me corrí .
Ella me miró el pantalon mojadoy preguntó ¿ qué pasa ? Nada le dije .
Estás mojado , te has meado. No , no , es otra cosa me has provocado tú esto.
¿ Puedo verlo ? dijo . Ahora no contesté .
Desde aquel día los dos hemos sido cómplices de aquel momento hasta hoy.
He seguido sus pasos y sus cambios .
Y aún me atrae .