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Alquilé negro para mi esposa

Relato enviado por : Anonymous el 10/04/2023. Lecturas: 3032

etiquetas relato Alquilé negro para mi esposa   Confesiones .
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Resumen
Buscando el perdón de mi señora por mis infidelidades le alquilé un negro para que estemos parejos


Relato
Llevamos casados con mi esposa 10 años y en ese lapso de tiempo hemos tenido varios problemas a pesar de que cuando vino nuestra crisis de monotonía lo supimos superar viendo juntos pelis porno y les diré que fue difícil convencerla por ser un poco moralista.

Éstas películas nos abrieron más los ojos por qué aparecían cosas que nunca nos imaginamos con mi esposa que sucedían, si bien es cierto todas las poses yá la habíamos disfrutado, pero vimos una que creo le dicen el murciélago la cual era penetrarla analmente y luego pararme y ella en el aire de espalda a mi mirando al suelo y suspendida recibía mis empujones estando completamente a mi Merced hasta terminar vaciandonos los dos terminando súper cansados .

Luego dimos uso de los pepinos los cuales comenzamos con pequeños hasta llegar a penetrarla previo condón hasta con los más grandes por la concha por qué su culo solo resistía pequeños.

Me faltó decirles nuestra descripción, ella blanca de pelo largo negro con una altura de 1.55 y de cuerpo delgada con unas lindas piernas y buen culo y también de buenas tetas. Yo soy un tipo blanco con 1.70 de altura y un poco rellenito, no gordo diríamos un poco grueso. Administrador de profesión y Mi señora se dedica a cuidar la casa y a nuestro único hijo.

Resulta que en estos diez años de casado tuve que viajar por motivos de trabajo al interior del país y ella se negaba a acompañarme por qué le dan miedo los viajes aéreos y me iba solo, al inicio era por dos días y a veces por dos meses.

Cuando era por un lapso corto de tiempo no me inquietaba sexualmente y también no quería defraudar la confianza de mi señora y me abstenía hasta regresar y con ella disfrutar y ponerme al día como se dice. El asunto comenzó cuando tuve que estar solo en provincia por 15 días y al pasar la semana ya estaba inquieto y más me animaba cuando veía desfilar a unas lindas chicas de compañía basta las habitaciones de huéspedes que estaban solos como yo.

Era tanta mi fidelidad que quería llamarla para pedirle me autorize estar con una de estas chicas aunque sea por una hora, pero después pensé en su negativa y aunque no lo haga, ella yá lo daría por hecho y mi vida sería un infierno. Traté de aguantar pero a los dos días una hermosa jovencita ticoy mi puerta y al abrir pude ver una Diosa ofreciendome sus servicios sexuales lo cual con mucho remordimiento lo acepté y lo disfruté toda la noche y de regreso a casa no le dije nada a mi señora quien me recibió muy contenta pidiéndome referencias del viaje y tuvimos sexo ésa y todas las noches sin aparecer en ella ninguna sospecha.

Y así continúo mi vida familiar y laboral, hasta que en uno de esos viajes largos yo me encame con la chica que hacía limpieza en el hotel toda la noche y cuando me estaba bañando ella contestó la llamada de mi señora y lo peor fue que preguntó quién llamaba y gritó mi nombre dos veces diciendo que era mi señora y lo hizo con una confianza que dejaba sospechas y sin tapar la bocina del fondo. Con gritos mi señora comenzó a ofender me y a decirme que por puto nuestra relación la daba por terminada. Los días siguientes fueron para mi de mucha angustia, no me contestaba el teléfono y yo temía lo peor, pero al regresar a casa después de una semana más la encontré llorosa y aunque me acerqué para explicarle que no era lo que ella estaba pensando me botaba y durante seis meses viví una vida triste, si bien es cierto ya me permite penetrarla y acabar dentro de ella lo hace como si fuera una muñeca inflable.

Pasaron dos años y otra vez llegó la felicidad a mi hogar debido a que ella veía mi esfuerzo por complacerla y lo más contundente fué al mostrarle la solicitud que presenté a mi Gerencia para que cambie de puesto para no verme obligado a viajar. Pero yo que me reconozco calentón seguía cachandome a las chicas en mis viajes largos, pero con mucho cuidado para no volver a ser descubierto.

Hasta que una vez después de tiempo me lleve a una puta a mi habitación y como me encontraba bien arrecho le di duro toda la noche dejándola llena de leche por los dos polvos que le dí por la concha y dos también por su culo. Cuando la despedí en la mañana quería que le duplique el pago por que no había dormido toda la noche y había hecho doble trabajo del habitual, yo me negué llamando al administrador para que se la lleve y así pudo dormir toda la mañana.

De regreso a casa después de 20 días de ausencia me recibieron muy felices mi señora y mi hijo y con esa felicidad nos fuimos a comer a la calle un rico detalle de carnes. Al volver pasé a bañarme para descansar y oigo un estruendoso grito que llevaba mi nombre y encerrado en el baño no me imaginaba lo que estaba sucediendo. Apurado salí y mi señora con una truza femenina en su mano lloraba a borbotones y entre sollozos me preguntaba de la truza y yo ponía cara de estúpido pero no encajaba. Lo que pasó era que mi señora al sacar mi ropa de mi maleta para lavar encontró esa truza que con plumón decía " TACAÑO " comprendiendo que era de la última puta que lo había dejado escondido allí por qué sabía que no le iba a pagar sus pretensiones y más bien podría traerme problemas, cómo los que tengo horita.

Paso año y medio y aunque en algo me ha perdonado debido a que sus amigas le echan parte de la culpa por no quererme acompañar en mis viajes y por qué yo sigo haciendo esfuerzos para conseguir su indulgencia y seguimos viendo pelis porno, siempre me dice que en cualquier momento se va a cachar a dos negros para que juntos la revienten.

Al año siguiente se dió el caso que tuve que viajar por tres días a una provincia cercana y tenía que irme en auto, ella como nunca se animó y nos fuimos llegando al medio día, por estar lleno el hotel me ofrecieron la única habitación disponible que según ellos eran de las exclusivas pero quedaba al final del hotel cruzando los juegos para niños, la piscina, el salón de juegos para mayores y una extensión regular de jardín. Lo tomé por qué ya era cliente consentido del hotel.dejamos nuestras cosas y después de bañarnos salimos a recorrer la ciudad almorzando y cenando cosas típicas de la ciudad.

Regresando al hotel por la noche nos bañamos pusimos películas calientes y cuan estábamos en esos jueguitos escuchamos unos gritos fuertes de una señora lo cual nos atemorizó y apando la tv y a oscuras atrás de las cortinas agudizamos nuestros oídos y al rato nos percatamos que eran gemidos de una mujer disfrutando tal vez de un rico sexo. Eso nos calentó y sin necesidad de la televisión dimos pase a disfrutar de nuestras fantasías que ya lo hacíamos en casa. Con dos polvos de ambos descansamos por qué al siguiente día yo tenía que trabajar.

En la mañana nos bañamos y tomando desayuno al acercarse el mozo que ya es conocido mío y de mucha confianza, le conté lo sucedido la noche anterior de los gritos de la señora, él se sonrió y nos dijo que no hiciéramos caso que eran asuntos de parejas. Al quedarme sólo con mi señora dijimos que eso huele medio raro y convinimos en repreguntarle y conseguir una repuesta lógica . Así fué y a costa de perder su propina y pidiendo permiso para hablar por la dama que estaba a mi lado nos contó que en esa ala del hotel van las parejas a divertirse puede ser entre ellos o con otras compañías y normalmente es por sexo. Le pregunté si el hotel les conseguía la compañía o ellos ya la traían. El me contestó que podían ser de las dos formas y su requerían de un tercero los mozoz se encargaban de eso. O sea tú eres el caficho le dije. No señor válgame Dios no, yo sólo lo o la contacto y el trato lo hacen entre ellos. A veces recibo propinas por eso nada más señor. Con todo respeto pero si se anima por un servicio me avisa nomás señor, estaré encantado de atenderlos y ya saben con mucha discreción.

Bueno, después del desayuno deje a mi señora en la habitación quien me dijo que estaría en la piscina y estaría paseando dentro del hotel. Regresé por la noche y después de bañarme hablamos lo ocurrido durante el día y en la noche cuando la tenía piernas al hombro a mi mujer otra vez escuchamos lamentos sexuales en la cual la mujer decía ya no, por favor ya no y al rato una voz ronca dijo algo no entendible y ella respondió sigue nomás, no me hagas caso, sigue, sigue. Eso nos puso más cachondos y la clavé tres veces más esa noche y ella también se vino en cuatro orgasmos y antes de dormir entre preguntas pensamos en contratar a una chica o un chico pero sólo para hablar y más que nada era por curiosidad y quedamos en un macho, ya que yo estaba en deuda con ella y la condición era que si ella se animaba se lo cacharia para quedar parejos en la infidelidad. Muy a mi pesar acepté pero era lo justo entonces le dije así fríamente si te lo cachas volveremos a estar como al principio, SI me respondió y como se que ella siempre cumple con su palabra, solo le dí un beso y nos fuimos a desayunar.

Al pagarle la cuenta al mizo amigo, le dije que si podía enviar un muchacho para la noche de 10 a 11 pm. Y que me prepare la cuenta por qué dejaría el hotel en la mañana siguiente. Tomando conocimiento de mi retiro me agradeció por la propina diciéndome que el chico es muy estricto en su horario pudiendo quedarse si es que estuviera libre. No hay problema me dijo agregando jefecito le voy a conseguir de mi mejor y nos reímos. Deje a mi señora en la habitación quien me dijo que saldría por el centro de la ciudad para hacer algunas compras. Dejándole dinero me fuí a trabajar a la oficina regresando a las 8 pm y estaba un poco tomada diciéndome que lo hacía por qué estaba nerviosa y hasta quería anular el servicio, pero yo realmente esto me dolía más dolor sentía no tenerla a ella como antes, así que le dí ánimos y otra vez con unos ricos roces de dedoben su concha se animó y previa copa se metió a la ducha, saliendo después de media hora depiladita, ni un solo pelo en todo su cuerpo , comenzó a echarse la crema para lo cual la ayude con su espalda y luego vino para mí lo más tormentoso se puso una portaligas y truza negra que matizaban perfectamente con su cuerpo blanco, luego se puso un sostén diminuto que a las tetas las hacian ver enormes . Luego comenzó a pintarse un poco exagerada para una mujer decente y ante mi observación me dijo que era para que no la reconozca y más bien piense que es una puta. La dejé seguir hasta que se puso unos tacones altos que al verla así en medio de la habitación me estaba animando a tres cosas v: Cacharmela ahí donde estaba y anular el servicio. Anular el servicio por Celos y no quería que ningún hombre la toque. Decía, éste mujerón es para que le paguen para cacharla y no pagar por ella.

Mi esposa un poco mareada con gritos me hizo regresar a la realidad haciéndome sentir como criatura al decirme que éramos gente mayor y por eso debemos cumplir con nuestros compromisos. Es más me aclaró que era ella la que decidía hasta donde íbamos a llegar y no yo. Estando respuestos los dos entre copas de vino esperamos la llegada del privilegiado.

A las 10 en punto tocaron a la puerta, yo en short y polo le abrí la puerta y ella que estaba arrecostada en la cama se paró y presentándose dijo que estaba a nuestra disposición. Era un negrito de 25 años de 1.90 de altura y de cuerpo atlético que al estar cerca a mi señora daba el contraste perfecto de la anatomía humana y mi arrechura se elevaba a mil

Le pregunté si deseaba bañarse, aceptó y en ése lapso mi señora no salía de su asombro del negrazo que tenía a su disposición y más bien lo utilizó para hincarme diciéndome ahora vas a sentir lo que yo sentía cuando te revolcabas con esas putas en el hotel. Yo me mordía los dientes y me agarraba la frente diciéndome " CABALLERO NOMAS ". En eso salió el negro con la toalla amarrada a la cintura y como estaba escuchando una salsa en ese momento le dije si podía bailar con mi señora pero sin la toalla.

Al quitarsela nos quedamos asombrados mi señora y yo al ver una pinga flácida de más o menos 20 Cms y yo que me creía medio dorado con una medida de 15 x 2.5 Cms . A medida que avanzaba la música los movimientos eran más fuertes haciendo que la pinga del negro le crezca a 23 x 3.5 . Terminando la música le invitamos a que se sirva una copa de vino, en eso mi señora aprovecho para decirme al oído. Ni creas que eso me voy a comer hoy día. Yo me sonreí sintiendo un alivio que ella todavía seguiría siendo mía pero por otro lado también pensaba que mi situación con ella seguiría igual al perdernos ésta oportunidad.

El negro nos trajo nuestras copas y brindamos por una nueva amistad y que pasemos una linda noche. Volvieron a bailar pero yo no sé si era por el vino pero veía por ratos le crecía más. Sentados le preguntamos si él hace servicios en ese y otros sitios. Nos dijo que en el hotel sus servicios son requeridos unas diez veces a la semana y también lo hace en otros hoteles y en casas particulares y que ya tenía su clientela y había que aprovechar en guardar dinero por qué la juventud se va rápido. Mientras él hablaba mi señora fué perdiendo su timidez y fue aumentando las caricias a su posible próximo cachero de sobarle el pecho con sus manos hasta sentarse encima de él.

Después de otro baile en donde ella le daba la espalda y el se le pegaba bien al cuerpo logrando ponerle bien dura la pinga al negro que cuando venía a sentarse se le balanceaba cómo péndulo de reloj de plaza mayor. Le pedimos nos narre con detalles los cuales yo resumiré para no hacer muy largo el relato, algunos pasajes resaltantes de su servicio y si tenía el tiempo para quedarse un poco más con nosotros. Por el tiempo no había problema nos dijo y comenzó su narrativa. Dice que llegó a una habitación en la cual lo habían contratado y vio dos ancianos de más o menos 70 años y el servicio era para ella que lo esperaba en la cama y después de asombrarse del tamaño comenzó a chuparla queriendo metérsela toda adentro de su boca logrando a veces arcadas originando risotadas de su pareja. Después de media hora en la cama abriéndose de piernas le pedía la penetre ante la atenta mirada del viejito. Así lo hizo y entre pujos y lamentos logró meterle la mitad de la pinga sintiendo haber llegado al tope, él se detuvo pero el compañero le exigía que le meta a la viejita toda la pinga y ella no decía nada solo se quejaba pero no salía de su posición. Con el temor de perder sus honorarios y ver qué la viejita con sus manos abrió más sus piernas, decidió y de un solo empujón se lo hundio todo viendo a la vez que le viejita se desvaneció y la sonrisa de su pareja se extinguió, él se quedó paralizado viendo al viejito correr trayendo algodones con alcohol logrando recuperarse y con una sonrisa exhausta me acariciaba y el viejito le decía lo lograste vieja te lo llegaste a comer completito a este negrito. Dice que ese fué uno de sus peores días y lo hizo reflexionar mucho.

Mi señora yá más arrecha comenzó a acariciarle sus huevos y su pinga al negrito preguntándole si sabía cuánto medía y el dijo que de base 20 Cms x 4 Cms y de acuerdo al grado de su excitación y el tiempo que no cacha puede crecerle hasta cinco Cms más. Mi señora también le pregunto si tenía pareja y él dijo que por el momento no necesita y más bien le traería problemas por el rubro de su trabajo.

Mi señora hizo otro brindis más por las esposas y sus límites. Luego le dijo al negrito que ella se echaría en la cama mirando al cielo y él se echaría encima de ella y sin penetrarla haría los movimientos como su se la estuviera cachando. El le preguntó si podía besarla, ella dijo que si pero sin morder ni dejar marca y al echarse refiriéndose a mi me dijo, que esperas que no te quitas la ropa. Yo pensé, ésta no es mi mujer pero con todo esto parece que la quiero más.

Pude ver cómo esa mole de dos metros le movia la pinga a mi señora que la tenía entre las piernas de ese cuerpito blanquito de apenas metro y medio. El negro era un experto cachero y mientras tenía su boca comiéndose la boca de ella se movía como un ciclón y la golpea a duro contra la cama y ella soportaba todos los movimientos a veces con las piernas bien pegadas a su espalda de él by otras con las piernas bien estiradas dándole mejor figura sus tacones altos negros. Hasta que después de cinco minutos mi señora en convulsiones anunciaba un rico y agradable orgasmo.

El negro con la pinga yá como de 25 cms nos trajo vino para hacer otro brindis. Luego ella dijo al negrito, ahora me echaré boca abajo y tú de igual forma me montas sin penetrarme como si me estuvieras haciendo un anal y así fué y yo desesperado le pregunté a qué hora me tocaba y muy seria me respondió. Tú te esperas hasta cuándo yo tenlo diga. Me quedé de una pieza pero se me pasó al verla abajo del negro y no pudiendo aguantar más quise pajearme y con un grito me quedé quieto con mi pinga al palo y más bien reconocía el aguante del negro, yo ya me hubiera vaciado todo. Ella aguantó el peso y las movidas del negro y a veces levantaba sus pantorrillas cómo jugando hasta que terminaron sudando.

Ahora, dijo ella al negro, échate en la cama mirando al cielo y yo me echaré encima tuyo de igual forma y tú me dijo a mí, te me echas encima como si fueras la tapa de sánguche y me clavas como tú nomás sabes hacerlo. Así fué y fué muy rico pero lo que no me gustó era que para apretarla más a ella tenía que agarrar al negro, pero fué muy delicioso y con mi señora nos vinimos en un polvo diferente con la ayuda de los movimientos de los tres cuerpos.

Luego de un brindis y un baile el negro seguía con su fusil en ristre y comenze, no sé si le convenía derrepente para su trabajo irse así o tendría que de irse así y sin pareja tendría que pajearse a novser que mi señora lo esté guardando como plato final. Mi señora con la pose tomada esa noche no se le podía preguntar nada. Hasta que le pidió al negrito otro relato y sentado en la silla comenzó a decir que un señor de más o menos 50 años contrato para que se cache a su pareja casual que era una chica de más o menos 25 años. El con filmadora en mano solo nos ordenaba y ella aparentemente racista me trataba mal y yo me la vengaba cuando la tenía piernas al hombro pude disimular y no meterle toda mi pinga por qué le dolía pero aguantaba para no darme el gusto y yo no le dejaba ni un milímetro afuera y aguanto con los ojos llorosos todas las poses hasta que nos vinimos para alegría del señor.

Para esto mi señora arrodillada comenzó a chuparle la cabeza, el tronco y los huevos de esa gran pinga.

Este señor cuando brindamos me felicitó preguntando si podía darle otro polvo a la chica, yo le dije que si pero era nuevo pago y media hora para recuperarme. Aceptó y habló con la chica que aceptó por dinero pero no de muy buena gana. Terminado el tiempo me acerque a la cama de la chica a quien le dijo que prepare el culo que ahora se lo romperán. Puso el grito en el cielo, maldiciendome, negro tal por cual y etc. El sr le dijo que se callara o sino que se vaya y que él podía traer a otra puta. Se calló y rogándole le pedía que no le toque el culo que le pida cualquier otra cosa. El sr ya no contestó sólo dijo que se ponga de perrito y yo por pena le eche saliva y comenze a la orden del sr. Con camara prendida a meterle y bien que aguantó hasta la mitad y comenzó a llorar , yo me detuve y el sr me obligó a seguir empujando , cuándo ya tenía 20 Cms adentro
y ya no soportaba más y yo sentía que su culo hacia mucha presión, ella quiso salirse y el sr le dijo si te sales te vas y no te pago nada y a mí me dijo hundeselo todo de un solo golpe y eso hice, logrando que caiga estirada a la cama y el sr me empujó para que continúe encima de ella hasta vaciarnos y mientras ella lloraba yo me movía sólo ben su culo hasta que le dejé toda mi leche.

El sr me recompensó y lo deje a él al lado de la cama consilandola con caricias y besos.

Bueno, al parecer mi señora estaba haciendo un buen trabajo por qué el negro estaba completamente excitado con las piernas estiradas y la pinga se le veía más larga y más gruesa llena de venas saltadas que de verla nomás causa miedo y como ellas siendo más frágiles que nosotros la pueden soportar,ven eso el negro le agarró fuerte de los pelos a mi señora dando unos gritos extraños indicaba que se venía y así fué que ví chorros de leche salir del hueco de esa pingota y alojarse en la boca de mi señora que algo tragaba hasta que finalizó pegando la cara de mi señora en su pinga que comenzó a cambiar de forma y a bajar su dureza.

Nos bañamos los tres, está demás decir que ellos se enjabonaron teniendo que hacerlo yo solo, al despedirse el negrito le apretó las nalgas diciendo que ojalá se anime y si lo hace se lo puede hacer gratis y con beso en la boca se despidió con sus buenos honorarios.

Nos regresamos y en el camino los dos desbordamos alegría y yo le dije amor ahora sí estamos parejos a lo que ella me respondió has visto que él me ha metido su pinga, no no cierto, entonces eso significa que aún no estamos parejos, pero si amorcito te agradezco tu firmeza esperando que eso suceda, por eso te digo que vamos a estar como antes pero que a mí me falta una rica cachadita con otro macho. Y que a partir de ahora cualquier travesura aceptada si lo hacemos juntos. Nos besamos y retorno la felicidad a mi hogar


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