Cuando mi esposo se negó rotundamente a que él me enseñase a manejar, con la excusa de que no me tenía paciencia. La única alternativa que me quedó fue, contratar los servicios de una escuela de manejo. Escuela que mi propio esposo contrató para los efectos, el primer día pensé que se había vuelto loco, ya que la viejecita que se presentó para darme las clases, y la práctica. Seguramente sacó su licencia en un Fort modelo T. y eso no lo digo yo, quien me lo dijo, fue mi esposo.
Relato
No sé que le pasó a la señora, al parecer, yo me le pego mucho a los camiones, ya que al siguiente día, ella no se presentó a darme las practica, y en su lugar apareció un joven que dijo que era el nieto de ella. Yo nada más de ver en la forma en que me miraba, me di cuenta de que a lo que a él le interesaba no era precisamente enseñarme a manejar. Bueno, y la verdad es que como yo no lo busqué, sino que fue mi marido quien por sus estúpidos celos contrató a su abuela.
Cuando me dijo que aprender a manejar, es como aprender a hacer el amor. Que es la práctica, lo que desarrolla la destreza. Yo aprovechando eso, le pregunté si él tenía mucha práctica, no en manejar sino en hacer el amor. Sonriendo me dijo que si yo lo deseaba podíamos ir a algún motel cercano, para que él me enseñase que tanta destreza tenía en eso.
Bueno la verdad es que soy algo curiosa, y cuando le dije que hecho, en cosa de pocos minutos, ya estábamos entrando al motel.
Realmente me sorprendí al ver, su instrumento, ni tan siquiera me puse mentalmente a compararlo con el de mi marido, porque no valía perder el tiempo. El miembro de mi maestro de manejo era soberbio. Así que al principio tras darle una buena mamada, me dediqué hacerle una cubana.
Hasta que él insistió en acelerar, y a los pocos segundos comencé a sentir como aquella gruesa y larga verga, penetraba mi depilado coño, produciéndome un placer infinito. El resto de la tarde no hubo espacio de mi cuerpo por el cual él no me penetrase, para mi mayor satisfacción.
Por espacio de varias semanas, prácticamente a diario, mi maestro me venía a enseñar, y a practicar. Hasta el día del mismo examen de conducir, estuvo presente, habló con un amigo suyo, y al poco rato me entregó mi carnet de conducir, sin necesidad de que yo pasara por todo el proceso.
Los padres de una chica muy rebelde y terrible la internan en un Colegio pupilo donde va a aprender a través de diversos métodos sexuales a comportarse como toda una señorita.
Relato erótico enviado por julieta_s24 el 23 de November de 2007 a las 16:28:43 - Relato porno leído 270394 veces
Allí estabamos con mi amigo tranquilamente tomando unas cervezas cuando vimos que unas adolescentes comenzaban a "histeriquearnos". No podía creer que se tratase de una de mis alumnas del secundario y encima veciinita mía...
Relato erótico enviado por marcelo el 26 de January de 2005 a las 18:23:46 - Relato porno leído 90288 veces
Soy un adolescente de 17 años bien dotado, con buen cuerpo, ojos café oscuros, pelo negro, alto y moreno. En la preparatoria tenia una novia llamada Fernanda muy bonita y muy sexy, no era muy alta, tenia el cabello negro una cinturita bien formada, pechos no tan grandes pero bien formados y un culito perfecto.
Relato erótico enviado por Anonymous el 28 de August de 2008 a las 11:39:13 - Relato porno leído 87257 veces