Bambi, una chica muy caliente

Por petición de Neofilder y dedicado a él por su apoyo aqui traigo otro relato, gracias

Todo comenzó cuando visitaba el hi5 de una amiga, a quien de cariño llamo Bambi, en su página de fotos tenía una de sus labios dando un beso y a mi me pareció muy sexy esa foto por lo que le deje un comentario. Bambi es una chica delgada, morena y practica artes marciales, por lo que tiene un cuerpo muy lindo y unas piernas sensacionales. Lo que mas me gusta de ella son sus pechos, son de tamaño medio, como talla 34 o 36 B diría yo.

En fin, ella leyó mi comentario y ahi comenzó todo, platicamos muy seguido por messenger y ahi comenzamos a lanzarnos indirectas mutuamente, y asi iniciamos con un cibersex soft, primero solo en plan de broma. Ella me preguntaba porque me gustaba la foto y yo le respondí que porque me parecía muy sexy, e incluso exictante. Así pasaron los días de pláticas cada vez más calientes, hasta que llegamos al punto de describir que pasaría si tuviéramos sexo juntos.

Yo empecé a describirle detalladamente que le haría:

Comenzaría acariciando tu cuello y aspirando tu aroma, mis manos recorrerían tu cuello y bajaría entre tus pechos para jugar con tu vientre mientras beso tu cara y saboreo tus labios jugueteando con mi lengua. Mis manos recorren lentamente tu cuerpo para sentir cada centímetro de tu piel. Despacio te quitaría la ropa comenzando por tu blusa para admirar tus pechos y saborear tus pezones y juguetear con mi lengua en ellos. Despúes te quitaría el pantalon para admirar tus perfectas piernas y acariciar tu vagina sobre la ropa para sentir tu humedad. Poco a poco desprenderte de tu ultima prenda y dejar al descubierto tu intimidad y poder deleitarme con tu aroma y tu sabor.

Hay que mencionar que a ambos nos gustan los videojuegos y tambien platicabamos mucho sobre eso, un dia decidimos venir a mi casa a jugar, despues de unos cuantos problemas para llegar finalmente lo logramos. Ambos sabíamos que el pretexto eran los videojuegos y pasarían otras cosas

Estuvimos jugando un par de horas varios juegos, hasta que empezamos a jugar uno en el que ella era muy buena y por mas intentos que hice no pude ganarle, asi que deje que jugara sola meintras me acostaba en la cama y ella jugaba en un sillon moldeable que tengo. Poco despues ella se recostó a mi lado y siguio jugando, pasaron unos pocos minutos cuando me anime a acariciarle el cuello. Inmediatamente cerró los ojos y el juego pasó a segundo plano, le acaricié la cara y me acerque a ella para besarla. Después de un largo beso le levanté la blusa para besarle el vientre primero y después la subí mas para besarle los pechos.

Le empecé a quitar la ropa hasta dejarla unicamente con sus pantaletas, que eran de diseño sencillo y aspecto un tanto infantil, por lo que al verla vestida así se veía tan inocente que me excité mucho y comencé a mordisquearle la vagina sobre la ropa y pocos minutos después la desnudé por completo, quedando yo también sin ropa.

La describiré tal y como la recuerdo, ella estaba allí, recostada en mi cama, completamente desnuda, sus pechos se balanceaban al ritmo de su respiración y sus pezones estaban duros por la excitación y los estímulos. Su vientre plano era precioso y bajando aún mas se apreciaba su monte de venus cubierto por una capa de vello oscuro, pero lo más excitante era que estaba perfectamente delineado en un triangulo sobre su vagina y era natural pues no había señal de que le creciera en otro lado. En conjunto era una hermosa chica morena con un cuerpo perfecto completamente desnuda solo para mí.

Después de desnudarla y contemplarla comencé a lamer su vagina, el sabor y el olor eran exquisitos y me entretuve con su clítoris un momento antes de comenzar a masturbarla con la mano, sin dejar de meterle los dedos subí para besar sus pechos y su boca después. Estuvimos así un rato y después me dije que había llegado el momento de la verdad, me separé de ella para colocarme un preservativo y después coloqué una almohada bajo su cadera para facilitar las cosas y después la penetré poco a poco, sintiendo su estrecha vagina apretar mi verga. Estaba muy húmeda y caliente y con cada embestida se humedecía un poco más.

Luego cambiamos de posición y nos pusimos de lado, yo detrás de ella y la penetré de nuevo así, en esa posición yo sentía su trasero calientito pegandose a mi y podía acariciar y morder su espalda y su cuello a voluntad. Era tan delicioso que no tardamos en acabar casi al mismo tiempo, primero ella con un delicioso chorro de liquidos que le mojo las piernas y mi cama y luego yo que termine por explotar dentro de ella.

Nos separamos con cuidado para no tener problemas con el condón y nos besamos un poco más antes de vestirnos, luego de eso la llevé a su casa. Hasta la fecha hemos querido repetirlo pero no hemos podido por la escuela, no nos deja suficiente tiempo, pero esperamos que pronto lo hagamos de nuevo