despues de que mi ovia se negara a mis caricias en un restorante se acerco una amiga que se sento tomamos unas cervezas y no emborrachamos tuvimos un sexo desenfrenado en un tren
Relato
El primer día que entre a trabajar conocí a una compañera de ahí mismo, entablamos buena relación y nos hicimos novios.
Ella una chica simpática, medio morena, estatura como de1.55, con grandes pechos, caderas estrechas, medio esbelta , ojos medio rasgados, pero más americana que nada, muy eficiente en su trabajo.
En la delegación trabajábamos 24 horas por 48 de descanso, y un día se enojo con migo, porque quería obligarla a hacer cosas que a mi me gustaban, a la que ella era esquiva, varias veces cuando íbamos al cine la trataba de manosear y no dejaba, y trataba de quitarme yo le decía que era muy anticuada ella ponía cara, de poker y me detenía, se que soy muy osado y muy atrevido por eso no me dejaba. Una ocasión en que nos molestamos mucho le dije que era una apretada y amargada, que nunca iba a disfrutar nada de la vida y ella me dijo que me quería aprovechar y buscaba eso y nada mas, se fue dejándome solo en el restaurante donde estábamos almorzando Un rato después se acercó Leticia, una amiga de la oficina, vivía cerca de donde vivo varias veces antes en las mañanas nos íbamos juntos al trabajo, me vio solo magullando bronca y cara de amargura, me preguntó que pasaba, le conté y me contestó que no me preocupara, que era una tonta que no le hiciera caso.
la invite a sentarse pedí unas cervezas y empezamos a tomar, eran como las dos y media de la tarde, yo estoy acostumbrado, ella pero tomo coraje me comenzó a tomar, la charla tomo un tenor profundo y llevo un largo tiempo, luego de un buen rato y después de dos horas y media, ya estábamos medio ebrios, pero yo en verdad no me sentía tan tomado, así que le dije se reportara enferma y que se fuera a la casa, le costo mucho levantarse y con trabajo al verla en ese estado le dije que la acompañaba al metro, entramos en la estación y estaba muy llena, le dije que necesitaba que estaba algo mareado, por la cerveza, ella se reía, sin sentido, le dije creo deberíamos ir despacio para que se me bajara un poco, para llegar a casa, me dijo que regresáramos a y de ahí que tomáramos otro medio, Le hice caso y cuando llegamos al punto de partida, no se si por la cerveza o ver su estado, me anime y le dije que era muy bonita, respondió con una sonrisa y además de tomarme la mano, vi que se sentía halagada con lo que me salía que siguiera diciendo cosas bonitas, decidimos tomar el tren que era mas lento pero que a esa hora era muy tranquilo casi nadie en los mismos, decidimos subirnos al vagón. Escogí uno de los de atrás, que era mejor, así lo hicimos, no pudimos sentarnos pues no estaba repleto pro los asientos estaban todos ocupados, asi que nos pusimos en un rincón y después de dos estaciones, al contrarió de lo pensado, ya el convoy, me acomode a sus espaldas y me dejó enfrente de su culo , estaba recargado en la esquina y a un lado del asiento individual, ahí iba sentada una chica como de veintidós años mas o menos, de repente se me repegaba y su culo quedaba por momentos refregando mi pedazo, que de a poco se fue hinchando, yo muy picadito le seguía diciendo cosas al oído, yo se me sentía muy bien tal vez por el alcohol y como no me decía nada, fue cuando me empecé a bajar las manos por sus caderas, quede bastante que iban a nuestro expuesto los de lado se iban dando cuenta, pero creo que estaba tan extasiada por esas atenciones, que me animó a avanzar más, hice cosas que si estar así borrachito nunca hubiera hecho, le comencé a morder la oreja despacio y ya le había puesto las manos en mis nalgas sobre le vestido, se estaba excitando por lo borracha que iba, no decía nada, se las empecé a acariciar mas descaradamente y con una mano, habíamos quedado solos en el vagón por lo entretenido que estaba manoseándola recién allí me había dado cuenta, cosa que me enardeció mucho mas, ella permisiva seguía allí quietita, de pronto me bajó el cierre y con la otra me empezó a tocar mi bulto, a subir su vestido azul que estaba hasta las rodillas y le seguí tocando el culo, ella estaba en plena excitación, muy enloquecida sin tener mucha noción en lo que estábamos, yo le baje las tanga y cuando se las dejé a media altura, le pedí que separara las piernas un poco y acomode mi verga entre sus nalgas, abracé la cintura y comencé a moverme al ritmo del tren, la había metido sentía su humedad, su calor, casi podía oler chucha, estaba muy excitada, seguía entrando y saliendo mi verga mojada sentía ese gemir, y acompañar cada empujón, con un quejido,
Ya le pedí que se pusiera de puntitas, lo hizo y de pronto sentí como que eso la excito mas y se vino, apretando mi verga, por unos instantes, para seguir la fiestita arrimaba mi verga, yo ya tenia voluntad, de probar el otro agujero, le decía al oído que ya sabía que era una putita, que si parecía mojigata era pura pantalla, que le quería probar su sabroso culito, tenia, que ser buenita, que sabía que le estaba gustando como la estaba cogiendo, no decía nada, tenia la mirada en el piso y tuve que apoyar mis manos en la raya de su culito para abrir uno de sus cachetes hábilmente empezó, a acomodarse yo seguía agarrando las nalgas de los cantos mi trozo, empezó a deslizarse para su hoyito, sin mucha dificultad empezó a surcar su túnel y ella se movía como con regocijo se notaba que sentía gran placer por el sexo anal, me decía si, si dame fuerte dentro de mi, pensé me había disfrutado de una manera que jamás imaginé, se acercaba a mi con sus nalgas casi con euforia, mientras yo le daba con toda la fuerza posible, me decía que tenía una estupenda chota, la muy putita, decía que hacia rato que necesitara una verga así.
necesitaba que se la cogieran por todos lados, así como la estaban cogiendo, después de uno rato no pude mas y eyacule Ens. Canal, deje un rato que mi carne termine de desagitar ella estaba asi quieta dejo que saliera de a poco, me limpie con parte de su vestido; ella llena de semen, escurriendo por entre sus piernas, subió su tanga y bajó cuidadosamente el cierre de su vestido
De pronto se apagaron un momento las luces y se detuvo bruscamente el tren ahí en la oscuridad, no decía nada, nos sentamos un instante, y los dos a medio vestirnos nos quedamos dormidos, no teniendo noción del tiempo trascurrido, el asenso de pasajeros, acompañado de dos policías nos despertaron y fuimos conducidos a la departamental de policía, diciendo que nos ficharían por escándalo público así, que en un momento hicieron que nos sintiéramos avergonzados ella bajó la cabeza, ya no estaba ebria,.
la bese tiernamente en la mejilla, le indique no se preocupara que había declarado que era mi concubina y veníamos de una fiesta y que habíamos sido asaltado me besó tiernamente, Así se quedó un rato, me abrazo Pero no fue todo… Porque luego de eso ya se convirtió en habito y me olvide de mi novia, para seguir con Leticia..-
Relato erótico enviado por Anonymous el 14 de December de 2007 a las 13:35:08 - Relato porno leído 783541 veces
Si te ha gustado Borrachos en un tren lo hicimos muy rico vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Borrachos en un tren lo hicimos muy rico.
felipepan
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:28) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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