Calibrando a mi tia

Hasta hace unos pocos días he tenido la fortuna y el placer de cumplir una de las mayores y el placer de cumplir una de las mayores fantasías sexuales. les voy a relatar como he podido penetrar a mi tía materna de 43 años , una mujer que dobla mi edad.

Ella se llama Judith Bernal, esta casada con una persona mayor que frecuentemente viaja, tiene cuatro hijos y un nieto, actualmente vive vive con dos de sus hijos, ella tuvo su primer hija a los 16 años, desde entonces ha estado comprometida con la misma persona, una que le ha hecho varias infidelidades de las cuales mi tía es consciente. ella es muy celosa y de carácter fuerte, suele tener problemas en su matrimonio.

Mi tía a pesar de sus cuatro hijos, aun se conserva, siempre ha sido la mas rica de todas, tiene unas tetas de las mas ricas que he probado, mide 1, 68 cm, cabello largo, carnuda, caderas y nalgas de gordibuena, hay ocasiones que se viste como toda una perra en celo.

Todo comenzó hace unas semanas, por distintas razones de estudio tuve que quedarme en la casa de ella, nuestra relación es de tía y sobrino con un grado de confianza reducido, es muy servicial cuando estoy en la casa de ella.

En una mañana muy temprano me desperté a preparar temas para una exposición, fui al comedor para estudiar, para mi sorpresa ella me invita a tomar tinto, estaba sentada, tenia un camisón corto descotado que le hacia ver claramente el pecho y gran parte de sus tetas, aparte de eso tenia una tanga negra que le hacían ver la hermosura de sus piernas, mi tía no le presto atención al hecho que ella se encontraba semidesnuda, yo tomo el pocillo de tinto y me regreso al comedor, mi tía sigue en lo suyo, nunca la había visto en un estado erótico, desde ese momento mi percepción del cuerpo de mi tía cambio.

mis primos se despiertan por lo general a las 6 am, ellos tienen clase a partir de la 7 am , mi prima la menor le advierte a tía: - mami tapece que mi primo esta en el comedor y usted esta en cucos y se le ve la cola. Desde entonces mi tía comenzó hacer parte de mis fantasías.

desde ese momento nace en mi un gran morbo y deseo desenfrenado por el cuerpo de mi tía. Pasaron los días y cada vez encontraba la manera para espiarla en su intimidad, rápidamente encontré el lugar donde ella dejaba su ropa interior usada, aveces me encontraba tan excitado que la única manera de calmar mis ganas era pajearme con los diferentes tipos de calzones que usa.

recuerdo bien una ocasión en la cual mis primos se habían marchado al colegio, mi tía pasa a la ducha, después de haberse bañado pasa a su habitación, para mi fortuna ella había dejado entre abierta la puerta de su habitación, silenciosamente observo la escena en que ella se coloca su diminuta ropa interior, ella no se da por advertida de mi presencia, en ese momento la puedo ver claramente desnuda, mientras se coloca el brasier, un pantalón ajustado, camisa y sus botas, mi pene se pone tan duro como para romper rocas.

En ese mismo día en que había podido contemplar la delicia de mi tía, decidí que quería penetrarle esa rajita velluda de su vagina. Mi tía sale al trabajo siempre a las 8 am y regresa a la casa a las 6 pm, trabaja en una casa de adinerados como empleada de servicio, siempre llega cansada porque a parte de su trabajo camina media hora desde el trabajo a su casa. Tiene un carácter volátil, mis primos la ponen de mal humor y pues ese día no había sido la excepción, llega del trabajo cansada, cena y luego va a su habitación en el ultimo piso a descansar.

Esa noche fue la indicada, porque el esposo de mi tía aun estaba de viaje. Espero pacientemente a que anochezca más y sigilosamente me escabullo hasta el lugar donde duerme tía, me acerco a la puerta de la habitación, se escucha la tele encendida, no me preocupa era común que mi tía dejase encendido para que le cogiera el sueño, cuidadosamente abro el cerrojo de la puerta, entro y ella esta como una bella durmiente tendida sobre la cama, apago la televisión me acerco junto junto a ella, coloco mi mano sobre su hombro, la intento despertar diciéndole tía, tía, esperaba que se despertara me sorprende que ella aun profunda en su sueño.

El corazón lo tenia a mil, al constatar que ella seguía como roca tumbada, le bajo las cobijas y levemente la comienzo a cariar sus tetas , sin perder tiempo y cautelosamente bajo mi mano sobre su abdomen llegando hasta sus ricos calzones de encaje, le froto con sumo cuidado, mis dedos rozan con los labios y el vello púbico de su vagina, un calor y sudor a hembra cubre mi mano, sentí una gran emoción pero a la vez un inmenso temor a ser descubierto, en ese instante tuve el impulso de bajarme el boxer y meterle mi pene abruptamente, me retuve lo considere mejor, lo dejara para otra ocasión, me conforme con pajearme me derrame sobre las cobijas de la cama. Aun me sorprendía que después de todo no había sido pillado.

En la mañana siguiente todo marchaba en normalidad, mi primos se fueron a estudiar, nos quedamos los dos en la casa, estando en el comedor ella comenzó hacer la limpieza que acostumbrada hacer, mientras eso sucedida me comencé a excitar al recordar lo sucedido en la noche anterior , mientras ella se movía de un lugar a otro se le mecían esas bellas tetas y sus nalgas me ponían cada vez duro mi pene, en esta ocasión ella tenia un camisón que le llegaba cerca de las rodillas, pero le dejaba lucir que no tenia brasier y tenia una tanguita diminuta que le hacia ver toda la forma completa de su hermoso culo, ella pasa a la cocina y me invita a desayunar, mientras estoy desayunando ella se pone enfrente mio, esta lavando unos platos me da la espalda, mi pene esta listo para clavar y atravesar lo que sea.

Sin pensarlo ni dudarlo le doy una fuerte nalgada a mi tía, ella se sobresalta y dice: "ay" cuando ella ella piensa en reaccionar la tomo por detrás y la abrazo fuerte, le acerco mi lanza de carne sobre su culo ella lo siente, y me dice ruborizada: " que le pasa, yo soy su tía, respete" le hago caso omiso la arrincono contra el mesón donde lava los platos ella suelta lo que tenia en las manos e intenta zafarme de mi, en ese momento le aprieto las tetas fuerte y le meneo mi pene sobre su culo, la intención es clara sobre ella, se intenta voltear con brusquedad y me dice: "suélteme pervertido morboso, me intenta violar, voy a gritar", la aprisiono junto el mesón y le mando mano sobre su vagina, esta mojadita de fluidos, le digo:"cálmese tía, yo se que lo necesita, usted es una mujer que merece ser complacida y consentida por un hombre que le de placer", ella afloja y me responde: " esta manera no, y si su tío se entera es para problemas", mi respuesta es simple:" va ser un secreto entre los dos", noto que ella se encuentra excitada siento como palpita su cuerpo de la emoción.

Ella se queda quieta a la espera de mi reacción y me dice:" tengo que ir a trabajar" en ese momento le beso el cuello, le subo el camisón hasta la cintura y le hago a un lado el trocito de tanga que tiene y sin esperar a mas le incierto mi pene, ciento como me aprieta ,los labios de su vagina y el refrescante sabor a sexo, ella al sentirlo se queja, después ella toma una mejor postura y me dice:" si me lo va meter que sea duro y rápido que su tío hace días que no me consuela" ante esa señal incremento el ritmo, comienza el jadeo de los dos el meta y saca en la cocina me excito tanto que después de unos minutos sentía el orgasmo de mi tía, movia tan rico esas caderas que no me pude contener y me derrame dentro de la vagina de ella, sabia que estaba operada por lo tanto no había riesgo de embarazo, una vez triunfante me senté, ella se fue rápido a bañarse y cambiarse para el trabajo.

No hablamos, al despedirse me dijo que en la noche arreglamos nuestro secreto. En la noche esperamos que mis primos se durmieran en esa ocasión me la chupo y se la chupe y por ser atrevido de premio me ofreció su culo para que se lo rompiera a mi gusto, he sido el primero y el único en tener el placer de taladrarle un hueco del culo a mi tía, desde entonces con mi tía nos hemos vuelto unos depravados sexuales, le encanta que se lo meta cuando mis primos están en la casa, lo hacemos varias veces a la semana.