Mi mujer no supo quien la habia penetrado y todo era un plan para verla culiar con otro.
Relato
Hola a todos los lectores, mi nombre no lo dare, pues alguien de mis amigos me puede conocer, solo dire que vivo en Santiago de chile ,tengo 35 años, y 8 de un matrimonio bien avenido, aunque mi mujer es muy recatada y poco sociable , compartimos muchos intereses y gustos, en la cama no nos negamos a nada y aunque ella no sabe mucho, mi pasado de juergas y fiestas que terminaba con una que otra chica, alimento mi expediente sexual ;sin embargo había algo que desde hacia tiempo quería disfrutar , el ver a mi mujer ser penetrada por otro hombre, fornicando con el. Aunque esta idea me rondaba la cabeza, sé, que seria imposible de cumplirla , por lo que hace unos meses atrás ideé la manera de llevarla a cabo, todos los dias me desplazaba a mi trabajo, en taxi, prefiriendo dejar mi vehículo en la casa, luego de un tiempo y a una hora exacta tomaba el taxi de don Víctor , un caballero de unos 50 años , canoso y gordo, muy simpático , con el cual hablábamos de política y fútbol, un día y pensando en que podría ser él, el candidato mas cercano para compartir mi mujer, un día viernes le propuse juntarnos después de las 8 de la noche al bar , para tomarnos unas cervezas, a lo cual ,acepto.
Ese día llegue al paradero a esperarlo y luego de llamar a mi esposa y avisar que me juntaría con unos amigos de universidad me reuní con Don Víctor, recogiéndome en su taxi, amable como siempre , nos dirigimos al bar, entre conversaciones y cervezas, asomo el tema de las mujeres y de sus aventuras sexuales, el era separado y tenia hijos grandes, hablaba que estaba solo hace tiempo y que continuamente visitaba casa de prostitutas, donde saciaba su apetito, hablaba sinceramente , el era un hombre de campo, fortachon y de rurales maneras , luego pasada la medianoche y con bastantes copas, me anime a contarle mi idea, le conté de mi mujer, la idea que tenia de verla con alguien …..Al principio se sorprendió de mi propuesta pero inmediatamente me pregunto como era físicamente mi mujer , contándole que tenia 32 años , de tez muy blanca, menuda de 1,70 , generosos pechos , trasero no muy parado pero bonito y delicado, piernas largas y bien torneadas………me pregunto como tenia esperado el encuentro a lo que procedí a contarle mi plan.
-me gustaría verla que un hombre ,que le masajeara solamente, me entiende…?
O sea cabro -me dijo , que no la quieres ver follando con otro tipo?
-no, o sea no se , no creo estar preparado, solo quiero que un hombre , le masajee los pechos, que le tocara un poco sus partes , pero solo eso, don Víctor.
- Bueno yo algo de experiencia tengo en ese tipo de cosas, durante mi juventud hicimos muchas locuras con jovencitas, me explico.Y luego me decidi a preguntarle¿ Don Víctor, usted estaria dispuesto a hacer eso con mi mujer?-
Lo principal, chiquillo es que no te arrepientas de lo que hagas, me replico, y sellando el trato con un ¡salud¡ quedamos de acuerdo para el domingo a las 9 de la noche, el me esperaria al frente de la casa.
Paso el día siguiente y le propuse a mi mujer que esa noche se pusiera bien atractiva, que nos íbamos a tomar algunos tragos en la casa y que pasariamos una velada romantica, y así fue, ella se puso con un vestido que yo le regale tiempo atrás, y aunque le pedí que no se pusiera medias veladas como ligas, lo hizo y se puso unos zapatos de tacón, y una sosten negro muy pequeño y evidente. Al rato aparecio muy perfumada y con un pequeño citillo negro en el cuello, se veia maravillosa.
Comenzamos a tomar y yo prepare un cocktail para ella, que era bastante fuerte, y a ella no le gusta mucho la bebida, pero sin embargo aceptó.
La noche nos la pasamos hablando de recuerdos de nuestro pololeo y luego le propuse que nos fueramos a la habitacion al segundo piso, Ahí despue des de unos besos y uno que otro morreo, le dije que me permitiera realizar una fantasia.
-¡Cual sera?- me pregunto
-¡el amarrarte suavemente y vendarte los ojos, mi amor?. Ella sorprendida primero y para complacerme acepto, procedi a bajarle el vestido, quedando solo con las bragas, su calzon escotado y su sosten, le vende los ojos firmemente con un pañuelo negro, le indique que se acostara en nuestra cama y tomando sus brazos, le amarre ambas manos a la barandilla. Le di un beso y luego con el pretexto de ir a buscar nuestras copas, baje las escaleras, me asome a la ventana y ahí estaba el tipo esperando, andaba con unos jeans camisa y chaleco, le indique que me siguiera y que al entrar se sacara, solo la parte de arriba subimos despacio las escaleras le indique a victor que entrara silenciosamente Él me mira y yo le dije bajito:
- Tranquilo compadre, que ella cree que solo estoy yo y le di un somnifero suave junto con algo de trago-
- ya poh- dijo el como un poco emocionado y nada más.
Procedi entonces a sentarme en el pequeño sillon para contamplar el espectaculo tan anhelado por mi desde hace tiempo.
El viejo miro a mi mujer extasiado, contemplandola un buen rato, se acerco a mi mujer arrodillandose al lado de la cama,la miro y comenzó a manosear su seno derecho primero suavemente, levantando ela copa del estrecho sosten de mi mujer, provocando un ligero estremecieminto de esta, luego deslizo su peluda mano hacia el vientre de ella y poco a poco la introdujo en el calzon alcanzando la fruta que hasta ese momento estaba destinada solo a mi satisfaccion, el tipo comenzó a chupar el seno de Camila, mientra que con su mano derecha introducia sus dedos en la vulva de ella, ahí me di cuenta que me encontraba masturbandome vertiginosamente, disfrutando ese espectaculo tan deseado.
Luego de un rato , y de los movimientos de Camila, el tipo se levanto y suavemente la volteo boca abajo, siempre amarreada, don victor siempre mirándome y solicitando como consentimiento de lo que hacia , yo solo le guiñaba el ojo y le señalaba que siguiera, el tipo agarrándole las caderas le levanto el culo, dejándola en cuclillas en la cama, a lo perro, le puso una mano en la nalga y se quedo quieto un rato, luego se agacho detrás de ella y comenzó a acariciarla y ella ni se movía entonces note que con la mano le intentaba correr el hilo dental ya que al tener las piernas así, se le notaba la vulva tapada con el calzonzito negro. Luego de correr el calzoncito lo mejor posible, comenzó a meter un dedito en la concha de mi esposa y yo miraba todo desde allí y me excitaba. Logre ver como logro metia todo el dedo y lo sacaba lentamente al principio seco y luego brillante , por la humedad de su conchita, mostrandome sonriente su trofeo. Ella ni se movía solo exclamaba un Ahhhhhhh…… suavemente, estuvo masturbandola así como unos diez minutos y luego le bajo definitivamente los calzones hasta sus blancos muslos, en ese momento pense que ya se estaba propasando, pero don Victor me miro y luego coloco su cara frente su pompis y comenzó a pasar su lengua por sus labios vaginales buscando el clítoris, para ese entonces yo ya había acabado 2 veces y continuaba masturbándome, el tipo siguió y siguió chupando los labios de mi mujer y observe que con la otra mano se desabrochaba el pantalon al cual ya se le notaba una evidente ereccion, reconozco que sentí un poco de resquemor, puesto que no estaba en el trato la penetración a mi mujer, se bajo el pantalón y se saco la verga, era una verga grande y ancha, aunque llena de canas por todos lados, pero erecta y roja. Se hecho el forro hacia atrás y comenzó a masturbarse mientras le seguia chupando los jugos a mi mujercita, me fije que en la punta de su pene estaba asomando el liquido seminal, en eso se levanta y acercandose a mi me dice en voz baja.
_Dejame correrme encima de ella, NO AGUANTO MAS¡¡¡
_ Pero eso no estaba en el trato viejo¡¡¡¡ le digo despacio
_ Vamos , solo le tirare mi leche en su trasero, te lo ruego, tu mujer me tiene loco¡¡¡¡
_ bueno pero solo eso, le dije muy despacio.
Le separo lo mas que pudo las piernas y ella estaba boca abajo. El seguia meneando su pene Yo estaba superexcitado y seguía mirando. El viejo seguia pajeandose apuntando su pene directo a la ya bien húmeda vulva de mi mujer, en un momento despacio dijo un AHHhhhhh, cortito eyaculo en el pompis de mi mujer, mojando con su leche caliente el ano de mi mujer, mientras se pajeaba , otro poco salto e los labios vaginales de camila, era increible la cantidad de semen que tenia el pobre caballero, que chorreaba y caia por el trasero hastael cubrecama, en ese momento me encontraba super exitado y a punto de eyacular nuevamente, por lo que mi desesperacion por verla atravesada por esa verga fue mas fuerte.
Golpee la espalda del gordo viejo y con las manos le señale que penetrara a mi mujer, el viejo no me creyo pero a la segunda vez no espero y agradeciendome con un guiño de ojo, se subio arriba de la cama y apuntando su dardo introdujo de un golpe, el gordo pene en su interior, yo sorprendido no dije nada; Ella comenzó a moverse hacia atrás y adelante,ella estaba gozando, comenzó a penetrarla una y otra ves, impúdicamente en nuestra cama. Comenzó a moverse fuertemente, sorprendiendome la energia y vitalidad del cincuenton caballero, le tomaba de la cadera, luego se cogió mas confianza y logro tomarle una pierna y se la subió al aire y logro meter mas al fondo su pene. Era una imagen increíble ver como se culiaba a mi esposa y le masajeaba las tetas. Sonaban unos Flap,Flap, debido al aire aatrapado en la vagina de mi mujer, En un momento ella dijo:
-Jaaaaahhhhhhhaaaaaaahhhhhhhhhh, jadeaba ella (creía que era yo el que estaba allí), y el sólo volteo un poco a mirar que opinaba yo , y yo estaba métale que dale , masturbamdome mientras ella gemía y decía:
-Así..asi. rico- cuando yo vi que las bolas de Él sonaban al golpear los cachetes de ella,senti que mi fantasia habia sido cumplida
Todo ese trozo de carne estaba dentro de ella y él con un mete y saca mientras le cogía los senos y se los apretaba haciendole gemir de dolor, y comenzó a hacerlo más rápido hasta que en un momento le agarro por el cintillo negro que ella delicadamente se habia puesto y tomandola fuertemente como una perra, casi ahorcandola, se vino dentro de ella y pude notar como le soltó todo su resto de semen caliente, al mismo tiempo que yo, acababa de soltar solo unas gotitas de liquido ,yo no lo podía creer, gozaba viendo al tipo, con la rudeza como se montaba encima de mi mujer, luego el muy suavemente se bajo y saco su pene ya flácido , note que su conejito estaba empapado y goteaba hacia afuera. Mi amigo se levanto y se vistió despacio, mi mujer ronroneaba como una gata, rápidamente salió del cuarto haciéndome un gesto, yo rápidamente, baje con él , le di las gracias, no se porque y le abrí muy despacio la puerta de la calle , subí inmediatamente a la habitación, me subí ala cama y toque su vaginita y la note bien húmeda me acerque a ella y la abrasé.
-Te amo , le dije
Yo también mi amor, que cabalgada me diste…… por que bajaste, tan deprisa ?…
Es que escuche un ruido afuera y deje el auto en la calle.
Ah, me dijo ella, palticamos un buen rato, luego nos tapamos y dormimos plácidamente esa noche, la noche en que cumplí mi fantasía.
Al otro dia recibi un llamado en mi celular ,era de Don Victor.
_ Alo¡¡¡ -Alo, Don Victor, conteste ,un poco enojado.-Hola ,chiquillo,como estas.-Aquí estamos, consteste secamente.
Mira te llamaba porque necesito hablar contigo, ojala esta noche , en el bar ,de acuerdo.-Este, no se , mire Don Victor lo de la otra noche...-No, no te preocupes, fue tu fantasia cabro, no te arrepientas de lo que hiciste, conversemos como dos buenos amigos.-Bueno a que hora , le pregunte.-A las 8, te paso a buscar al paradero.-Bueno don Victor, a esa hora estare.
Me recogio a las 8 en punto, y despues de saludarlo, nos dirigimos al bar.
Pidio dos cervezas y comenzo a hablar.-mira chiquillo, lo que paso el otro dia fue un verdadero regalo, nunca pense que tu mujer, y lo digo con todo respeto, fuera tan bella y una compañera sin igual en la cama, tu sabes yo he estado con muchas mujeres y prostitutas y acostumbro a realizar de todo , pero……..te púedo hablar como un verdadero amigo, sin tapujos.
Si, don victor, le dije timidamente, me interesaba lo que el viejo diria.
Mira tu mujer tiene la concha mas apretadita que he conocido, es una perra, la verdad que goze mucho , aunque se que no estaba en el trato montarmela, fue una delicia.
Si lo se, yo tambien disfrute mucho , sinceramente.
Si lo se, posiblemente estes un poco enojado conmigo, es natural , ser un cornudo contento no es algo que pase de la noche a la mañana, pero veras, te quiero hacer una pregunta, ¿te gusto ver gozar a tu mujer como a una perra?
Este….si me gusto,he pensado mucho y disfruto viendo eso.
Bien ahora se me ocurrio otro juego, mira le dices a tu mujer que quieres la fantasia de verla deambular por la casa , como la gallinita ciega y luego entro yo, que te parece?
Este, no se , todo esta pasando tan rapido….que yo…..
Mira te pagare, tengo un dinero ahorrado, te pasare 200.000. mil pesos en efectivo , se que tienes deudas que te apremian de sobremanera por lo que un buen dinero no te haria nada mal eh.
Si estaria de acuerdo.
Si, pero se hara a mi manera, entendido.
Bueno Don Victor.
Me gustaba la manera en que don victor dominaba la situacion
El viernes siguiente le anuncie a mi mujer , que en la noche tendriamos otra velada romantica, a lo que ella no espero en decirme gracias.
Le pedía a mi mujer que se pusiera los más sensual posible, se extrañó un poco, pero la convencí diciéndole que con su edad todavía tenía que mostrar su estupendo cuerpo, se colocó un vestido de tirantes azul claro con un generoso escote, que aunque no tiene los pechos voluminosos, si los tiene muy erguidos y duros, no se puso sujetador, y se colocó una braguita tipo tanga de color negro y un poco transparente por delante.
Esa noche llegue del trabajo, prepara unos tragos mi amor me dijo-, bueno conteste, al rato ella bajo y comenzamos a beber y a charlar, al cabo de unos buenos pisco sour bien cargados, ella un poco mareada me comento-el otro dia te portaste como un toro mi amor, me sorprendiste ,tu no eres asi.
-bueno ,conteste siempre hay una primera vez.al rato comenzamos a besarnos , estaba muy perfumada y bonita, comenzamos a tocarnos y en eso suena el telefono, conteste yo,
alo?-alo cabro ,soy yo victor, vendale los ojos a tu mujer, yo estoy en 2 minutos en tu casa , adios.
-quien era mi amor, - no estaba equivocado, aun no comprendiendo nada.
Con mi mujer continuamos besandonos y en eso le pido que si la puedo vendar nuevamente, ella de inmediato acepto , le vende los ojos y le pedi que se sentara en el sillon, en eso Don Victor se asomo a la ventana indicandole que le abriera la puearta, suavemente la abri y entro acompañado de un tipo barbudo ,chascon, tipo punk y bien desaseado. A Don Victor casi se le salieron los ojos de las órbitas, admirando lo hermosa que estaba mi mujer y viendo las magnificas y muy apetecibles tetas de mi mujer. se acerco y puso su mano encima de una de ellas. acarició y pasó toda su mano muy suavemente por una de sus tetas. Ella estaba roja y acalorada en alcohol, pero yo sabía que también de excitación. Me senté en el sofá de al lado de la mesa, viendo como Victor le comenzaba a sobar las tetas por encima del vestido.
Un momento después empezó a meterle la punta de uno de sus dedos por debajo del sujetador. El dedo fue desapareciendo bajo la sensual prenda. Ahora ya no veía prácticamente nada del dedo, lo tenía todo dentro y lo movía despacito, le estaba pasando el dedo por encima del pezón, movía el dedo y el pezón se adivinaba duro, muy duro.
Me removí en mi sillón y observé que ella había echado la cabeza hacia atrás y se mordía el labio inferior. Ahora, con la otra mano, Victor le había sacado la cazoleta del sujetador de la otra teta y ésta había saltado dura y desafiante, pidiendo guerra, hacia fuera. Su pezón, como yo suponía, estaba duro. Grande, rojo y duro. Su aureola, más oscura, estaba hinchada.
Don Victor, sin llegárselo a quitar del todo, tiró hacia abajo del sujetador y se lanzó a besar, chupar, morder... las tetas de mi mujer. Tan pronto le chupaba una como la otra, en algunos momentos ponía su cara en medio de las dos y con las manos las apretaba sobre su ella.
Ante tamaño espectáculo no pude aguantar más, me bajé la cremallera y me saqué el pene. La tenía como un auténtico poste. Ver como don Victor nuevamente, le sobaba y chupaba las tetas a mi mujer me ponía a mil. Viendo la escena, empecé a meneármela.
Mi mujer estaba en un estado de excitación que no tenía nada que envidiar al mío. Sus manos empezaban a buscar ávidamente la entrepierna de Don Victor. Cuando una de ellas alcanzó su paquete lo sobó con la mano abierta, a conciencia. Apretaba los huevos, subía y hacía lo propio con su pene, que por cierto se le notaba con un tremendo estado de excitación.
No podía poner mucho ímpetu en la paja que me estaba haciendo porque me hubiera corrido en aquel mismo instante..., y no quería hacerlo todavía. Estuve a punto de correrme cuando vi que le bajaba la cremallera, le metía la mano bajo el pantalón y le tocaba el pene por encima del calzoncillo. Se arrodilló suavemente ante él y llevo su boca hacia las inmediaciones de su polla. Lentamente mordió la tela de los calzoncillos y con la boca tiró suavemente de ellos hacia abajo. Ver a mi mujer hacer eso me sorprendio.Su pene saltó como un resorte. Vi en ella una cara de puta. Una puta en celo. Que cara de vicio tenía la puta de mi mujer.
Con aquella cara de vicio sacó su lengua y se la pasó despacito por todo el capullo, se lo mojaba con su saliva y seguía con su tarea. Lentamente fue lamiendo de arriba a abajo todo el pene. El cabrón de Don Victor tenía tal pedazo de pene que parecía que no llegaba nunca a sus huevos. Cundo lo hizo abrió su boca y se metió uno en la boca, lo chupo e hizo lo propio con el otro. Lentamente comenzó a deslizar su lengua hacia el capullo para, una vez en él, abrir un poco su boca de puta y metérselo todo de la boca.
Todo me ponía a mil, pero creo que lo que más lo hacía era ver la cara de viciosa, de glotona, de lasciva, de hembra sedienta de sexo... que ponía mi mujer. Estaba como loca, nunca la había visto así. Ahora chupaba con toda la boca abierta, estoy seguro que el pene de don Victor le tocaba la garganta, desaparecía toda en su boca. Entraba y salía, entraba y salía.
Supongo que él estaba a punto de correrse pues detuvo con la mano, le ayudó a ponerse de pie quedando el uno delante del otro, rozándose pero casi sin tocarse. Empezó a acariciar su espalda, con sus dos manos abiertas, jugando con la los tirantes de su sujetador. Ella, mientras tanto, con una mano le hacía una lenta paja y con la otra sobaba sus huevos, se los sopesaba con su mano totalmente abierta, llegando con su dedo hasta su culo, jugueteando con su dedo en el agujero, volviendo a subir después su mano hasta los huevos.
Las manos de él fueron entrando poco a poco en contacto con las tetas de mi mujer, primero por ambos costados, después tocándolas y sobándoselas por delante. Desde ahí, una de ellas fue bajando hasta su ombligo, debajo de él aparecían esa finísima filita de pelos negros que llegan hasta el bosque oscuro y grande de su pubis. Alcanzó el vuelo de su vestido y se lo subió hasta la cintura dejando al descubierto sus preciosas braguitas caladas blancas.
Cuando Don Victor vio los pelos negros que sobresalían por los laterales de la braguita de mi mujer, creo que estuvo apunto de correrse, lo noté en su cara. Además, al ser la prenda semitransparente, podía apreciarse perfectamente la negrura de su sexo y el abultamiento, por la tremenda excitación, de los labios de su concha.
Poco a poco los dedos de Don Victor fueron casi desapareciendo debajo de la goma de su braga, y digo casi porque continuaba viendo casi con total nitidez como jugueteaban con sus pelos y con su clítoris dada la transparencia de la prenda. Ella entreabrió sus piernas para que él pudiese explorarla mejor. Ahora noté perfectamente como le introducía un dedo en su vagina. En su braga se había hecho una mancha más que considerable como consecuencia de sus jugos. Mi mujer estaba literalmente chorreando.
Don Victor metió cada una de sus manos por uno de los laterales de la braga, fue tirando hacia debajo de la sugerente prenda hasta que ésta quedó depositada a la altura de sus rodillas quedando todo su coño a la vista. Se mostraba con todo su esplendor, los pelos que rodeaban su parte más íntima estaban salpicados por pequeñas gotitas producto sin duda de los jugos que producía su tremenda excitación, estaba como una auténtica perra en celo, sedienta de sexo.
Ahora fue Don Victor el que se arrodilló ante ella, la empujó suavemente para que se sentara en el sillón, le abrió sus piernas dejándola totalmente despatarrada mostrándonos toda su más preciada intimidad, ella confiando que se trataba de mi. Don Victor jugueteó con su lengua con los abundantes pelos negros de su pubis, más de una vez tuvo que llevarse los dedos a la boca para sacarse pelos que le quedaban en ella.
Su lengua se fue acercando a su sexo cada vez con lametones más intensos, separó sus labios y la introdujo en él, frotó con ella el clítoris. Ella en estos momentos estaba bramando como una perra en celo. Los lametones le producían unos espasmos incontrolables, gritaba, chillaba, aullaba... Sus convulsiones me indicaron que había llegado al orgasmo, pero observé que quería más, quería que la penetrase con aquella polla que tanto le había impresionado.
Se lo pidió susurrandole, -Metemelo, pensando que era yo, él no se hizo de rogar, la hizo agachar y detrás de ella, agarró con una mano su tremendo pene y la dirigió hacia la abertura de mi mujer. Puso la el capullo en la entrada y ella, con un movimiento de caderas hizo que se introdujese sin problemas, su extrema lubricación facilitó mucho las cosas, entró toda en el coño con un solo empujón hacia delante de mi esposa.
Empezó una sesión de follada impresionante, ella se movía como una posesa, él entraba y salía de su coño como si le fuese la vida en ello. Yo, sentado en mi sillón, seguía moviendo mi mano, masturbándome sin dejar de mirar la escena ni un momento.
Estaban esos dos en eso , cuando don Victor, del bolsillo de su pantalon , saco una bolsa plastica , la abrio , saco una paño blanco, todo esto mientras seguia metiendoselo a mi mujer, y se lo puso en la boca , presionando fuertemente, ella se estremecio y luego se desvanecio, -¡¡¡tranquilo cabro , me dijo , es solo éter , le durara unos minutos , luego la amordazo.
yo le metia la verga en el culo una otra ves mientras ella le mamaba la verga ami compadre como una puta desesperada por momentos ella dejaba de mamarle la verga ami compadre por que el ya estaba a punto de venirse para luego mamarle el queso humedo y rojo de mi esposa
Relato erótico enviado por Anonymous el 24 de February de 2010 a las 00:07:43 - Relato porno leído 144234 veces