Caris la esposa del pastor

La mujer del pastor guía de las mujeres de sus miembros de la comunidad de credo, es ahora una mujer más abierta a algunos espontáneos sucesos de la vida normal, permitiéndose ella misma tener un amigo con particulares favoritismos que muchas veces termina con ella en la cama. Ese soy yo que de mis visitas semanales a su culto, cuatro al mes, tres terminamos en la cama. Esto la tiene muy preocupada a Caris por que su marido y pastor del rebaño de su iglesia puede salir dañado…, pero sabe también que en su iglesia hay varias mujeres con el mal de ser pésimamente atendidas por sus maridos y estén carnalmente insatisfechas sin ser compensadas y sus cuerpos estén desposeídas de las satisfacciones que deben cumplir sus machos consolándolas en tranquilizar sus hormonas y anhelos de apareamiento para sentirse juntos a estos satisfechas y felices de sus emociones amatorias satisfechas. Estas faltas de tácticas y técnicas de sus machos las llevaban a una vida desentendida a su entrega de sus principios religiosos.

Caris lo estaba apreciando satisfecha carnalmente era mas asequible a los problemas y tenía mejor esperanzas de resolverlos. Pronto fijo una idea en su mente, mujer satisfecha de sus deseos sexuales, con sus hormonas tranquilizadas por el placer del gozo carnal entregado por un joven amante, tendría mujeres mas colaboradoras…, puso a prueba su teoría con su cuñada Filomena, una mujer madura de 38 años madre de tres hijos y pésimamente saciada por su marido hermano de su esposo, quien siempre se quejaba de este y de sus desequilibrios hormonales…, un día la cita a su casa sin hijos y sin apuros por volver a su casa, debería venir tierna y ligera en su vestir eso si estupenda que los hombres la miraran como lobos hambrientos.

Cumple esta y llega a su casa ese martes citada, la recibe la pastora su cuñada y le comienza a convencer de que debe ella despertar sus anhelos y satisfacerse de sus deseos sexuales y como ella desde que logra estas liberaciones de placer es otra mujer y le conversa de que forma cambia su vida al entregarse al placer del coito…, claro le dice esto es secreto y esto se hace entre dos y como nuestros maridos no computan nuestros anhelos y emociones debemos acceder a un ayudante y tengo uno que es joven, poderoso con un tremendo glande que extrae todas mis pasiones, además lo mejor un caballero que sabe callar y nada dice solo ejecuta, y como ejecuta el apareamiento me deja satisfecha de placeres y gozo, renaciendo en mi una mujer activa y creativa.

La cuñada no sabía si irse de esa casa o quedarse a conocer es semental que le comentaban, no puede pensar mas por que su cuñada la toma de un brazo introduciéndola en uno de los dormitorios en donde en penumbras distingue a este macho…asustada trata de retirarse y su cuñada se lo impide, susurrándole al oído no te vas a arrepentir, y le entrega esta hembra a su amante para que calme en ella sus ardientes pasiones.., saliendo de este dormitorio, espera en el pasillo mirando por una ventanal no pasan más de diez minutos y comienza a sentir susurros, suspiros apasionados y escucha el crujir de la cama…, se asoma por la puerta y tiene el espectáculo de ver a su cuñada con sus vestidos sobre su cadera, sus piernas abiertas y entre ella al macho que ubicado en medio aporrea su cuerpo contra la cama penetrándola por su vagina y esta solo suspira y solloza empotrada recibiendo la entrada y salida de ese pene en sus entrañas, las manos de esta están clavadas en los brazos del macho que delirante la esta disfrutando, gozándola…, en esos instante escucha como su cuñada brama al sentir la llegada de sus orgasmos calmando sus apetitos genéticos ardientes y se entrega con pasión al macho que la tiene enclavada con su pene mientras ambos calman los placeres de un apareamiento glorioso de gozos y meneándose desesperados en la cama se entregan el uno al otro.

Minutos después aparece por la oficina donde está Caris la pastora Filomena, con una sonrisa en sus labios y una actitud positiva en su cara sonriente comenta a Caris, tenías razón un buen abrazo con un buen pene entre las piernas y un satisfecho apareamiento hace que uno mire la vida positivamente. Ahora como se lo digo a mi marido hermano de tu esposo…, has lo que yo hago le contesta la pastora Caris, guardo el secreto de mi infidelidad en lo mas profundo de mis pensamientos y vivo feliz, soy casada, soy una líder en la iglesia, soy feliz emocionalmente por que cada cierto tiempo descargo mis infelicidades de tener un marido poco activo en lo sexual con un buen amante. Hoy lo has conocido y como te zarandeo copulándote y saciándote. Ahora eres otra mujer una feliz y activa mujer. Vamos a tomarnos un café dice, feliz de saber que no es la única mujer que a resignado su moral por la pasión de un apareamiento.

Tomamos café con pastelillos y al termino de estos tanto observar a ambas mujeres que he tenido en posición de misionero y en cuatro patas me excita la sangre y me estimula a querer nuevamente copular con cualquier de ellas dos. Se los hago saber y ambas ponen cara de sorpresa y me dicen ¿en verdad quieres mas emociones amatorias con algunas de nosotras en una cama?, contesto sí…. Filomena sorprendida dice sería la primera vez que me repetiría el deleite de empotrarme dos veces seguidas en una mañana con el mismo macho activado.

La llevo al dormitorio y no se opone me permite desnudarla y ambos desnudos nos acomodamos en la cama, ella me dice me vas a responder con la verdad, cuantas mujeres ha tenido en tu vida empotradas…, contesto siempre hay que respetar a las mujeres y saber callar, aún cuando te estén atormentando, por que un macho no solo se enreda con una hembra sino que entra en su vida y debe saber protegerla aunque no estén siempre juntos…, me sonríe y dice ya se que eres buen hombre y no hablaras solo deseo el número no los nombres…, no se digo creo que tu eres la décima y todas han sido mayores maduras y con hijos. Me excitan las mujeres casadas y mas si tienen hijos. Sabes le digo me encanta embarazar a las mujeres que tienen sexo conmigo… ¿quieres un hijo mío en ti vientre?... no estoy en fecha de procrear me dice, cuando lo este lo pensaré y te lo comunicaré. Ahora hazme satisfacerme con placer aunque grite. Y como grito, dejándome estirado sobre la cama con los movimientos de pelvis exagerados de su pelvis casi arranco mi miembro, dejándome fatigado y mal trecho.

Días después se lo escribiré mañana en Fátima y su suegra Ignacia