Estaba caminando por los pasillos del centro comercial y sentí ganas de ir al baño y descargar las ganas de orinar. Entre, fui directamente a los urinarios y alli estaba el.
Relato
Hace un tiempo, no más de 5 meses estaba yo caminando por un centro comercial muy conocido acá en Caracas.
Tengo 21 años, cabello negro, ojos marrones claros y buen buen cuerpo, muy pocos amigos saben acerca de mis gustos por los hombres y no soy nada afeminado cosa que hace que pueda ligarme chicos heteros discretos.
Para volver al día en el que paso algo que no imaginaba podía suceder asi tan públicamente. Estaba caminando por los pasillos del centro comercial y sentí ganas de ir al baño y descargar las ganas de orinar. Entre, fui directamente a los urinarios y alli estaba parado un chico que me impacto por su altura y su cuerpo tan bien marcado. Yo tenía jeans negros y franela blanca y calzaba unos converse. El alto de 1.84 aproximadamente, tenía un pantalón de mono, franelilla muy varonil y bien parecido, me pare a su lado y no poder evitar mirar a los lados y lanzar mi mirada su urinario para ver su guevo. La primera vez vi sólo un poco y me di cuenta que terminaba de orinar, volvió a mirar por segunda vez y está vez me atrapó en mi travesura y me murió con cierta cara de enojo y a la vez invitándome a volver a mirar... Para este momento yo habia orinado y mi guevo se estaba poniendo cada vez más duro. El no se quito de ahí y volvió a mirarme separándose un poco del urinario y mostrando un delicioso tronco de unos 21cm, grueso, blanco y con una piel suave de esos que parecen sacados de una película pornográfica.
Lo mire con las ganas de tocarlo y sentirlo,más de cerca y fue cuando lo tome con mi mano izquierda y lo comencé a masturbar sintiendo cómo casi no cerraba mi mano. Estuvimos así unos minutos y empezó a entrar gente al baño, cruzamos miradas y salimos del bajo juntos y me hizo senas para bajar al estacionamiento finos a su carro y nos montamos.
Con una mirada de picardía sexual me enseño lo duro que todavía tenía el grueso guevo que ya habia podido tocar y que quería meter a mi boca. El carro con vidrios ahumados escondia todo nuestro deseo y ganas de tirar. Acerque mi mano sin una palabra y lo fui tocando. Lo masturbaba por encima del pantalón mientras el sin mirarme cerraba sus ojos y sentía el placer de un chico serio y varonil disfrutando de su rico y largo pene. Baje su mono y llevaba unos bóxer blancos que hacían ver su guevo más y más provocativo. El con los ojos cerrados aun disfrutando y sudando por lo encerrado que,estábamos y por el nivel de excitación que teníamos los dos. Baje su bóxer y disparado salió su guevo que a estas horas me tenía la boca hecha agua y,moria del morbo que me provocaba ver a un tipo tan macho y atractivo dejándome tocarlo.
Me puse en posición y me fui acercando poco a poco para oler su guevo y sus bolas y comencé a pasar la lengua por su cabeza en forma circular y poco a poco fui metiendo su cabeza en mi boca que ya estaba bastante lubricada por mi saliva.
En menos de lo que pensaba lo meti todo en mi boca y le di una mamada de aproximadamente 15 minutos. El ahi reclinado en el asiento y Absoluto placer, nopodía creer todo lo que estaba pasando en ese carro detrás de sus vidrios ahumados.
El me mamo el culo por unos cinco minutos penetrándome duro con su lengua.
Me volteo cómo si estuviera sentado en el asiento sólo que más arriba de lo normal y el con el mono puesto en una sola prensa se puso delante de mi y se puso frente a mi haciendo que sintiera su verga en la puerta de mi culo. Me fue empujando poco a poco su guevo metiendo su cabeza dentro de mi, al principio me causó dolor pero con todas las ganas que tenía de ser penetrado por el no le preste atención al dolor sólo me deje hacer y así fue cómo me dijo:
El: Quieres guevo, no?
Yo: si, pero ponte un condón para que,le demos bien.
El: no tengo. Tu tienes?
Yo: no...
El silencio nos ganó por un instante y sólo sentía cómo movía la cabeza de su guevo dentro de mi culo lubricado por su saliva mirándome con un morbo y un placer indescriptible... de pronto se inclino un poco hacia atrás y sentí que salia de mi puerto no fue así devolvió si movimiento hacia delante y terminó de enterrarme completo el guevo en el culo, yo solté un gemido entre dolor y placer y el tapo mi boca con fuerza para que no hiciera ruido mientras empezó sus embestidas hacia mi. Me empezó a coger suave y cada vez subida más la velocidad de su cogida y yo sentía como entraba y salia de mi. Lo tenía frente a mi haciendo conmigo lo que quería mientras yo sólo podía recibir su guevo dentro de mi. Así estuvo dándome por el culo como Por quince minutos, los vidrios del carro estaban empanados y había vapor de nuestro sudor.
Yo sentí libertad de moverme y comencé a sacar y meter su guevo de mi culo... De su boca sólo salían palabras como:
El: "rico, que culo tan divino, me vas a hacer acabar si te sigues moviendo así. Mira como te gusta el guevo...
Tan tranquilo que te ves y te gusta que te cojan así de duro"...
sus palabras eran.musica para mis oídos. verlo disfrutar era una delicia, tan alto y tan macho sintiendose a merced de mis movimientos.
Yo quería ver como acababa y luego de cogerme un poco más le pedi que se pusiera al lado y desde allí se masturbara para verlo acabar.
Sentado allí me puse cerca de el y sentía su respiración cerca de mi cara, no me atrevia a besarlo porque hasta ahora no había visto intensión de el en hacerlo.
pero estábamos ahi tan cerca y yo sentía su respiración en mi oído, me volteba y rozaba su barbilla con la mia mientas nos masturbábamos de pronto el calor y la sensación de placer fue tan grande que me atreví y pase mi lengua por su cuello hasta llegar hasta su boca y probe Sus labios... Nos besamos así por unos minutos y fue así cómo juntos soltamos varios chorros de leche en nuestros pechos. Fue un sexo muy caliente y es la primera de muchas historias que voy a contarles acá...
El me acariciaba mi vagina muy placenteramente y ahí fue cuando comencé a disfrutar y sentir placer. Me estaba excitando ser tocada de esa forma tan morbosa y decidí abrir mis piernitas para darle paso completo, al instante sentí clarito como me metió las dos manos bajo mi falda tocándome con más libertad.
Relato erótico enviado por Anonymous el 31 de August de 2009 a las 00:02:20 - Relato porno leído 208399 veces
la tia culona no tubo mas remedio que pegarse a mí y practicamente me hizo sentir su culo, estaba apoyada en mi, el bus estaba repletísimo y yo estaba ya sintiendo el culo de esa tia en mi verga, su espalda estaba completamente pegada a mi pecho asi que tenía la oportunidad perfecta
Relato erótico enviado por lucas fernandez el 16 de February de 2010 a las 23:47:20 - Relato porno leído 169201 veces