Me sentía tan caliente ese dia, que no me basto que me cogiera mi amigo....
Relato
Hola mi nombre es Sara y quiero platicarles algo que me sucedio, soy casada, pero como les comente en un relato anterior, engañe a mi esposo por calentura con un compañero de trabajo, las visitas a mi casa continuaron casi dos veces por semana, ya que disfrutaba muchisimo que me llegara a coger, ya que tenía una verga riquisima. Cierto dia mi amigo llego como acostumbraba por la tarde noche, para que no lo vieran, yo mientras tanto ya me habia dado un baño y puesto una linda y muy sexy tanguita para que lo disfrutara, ya que me habia comentado que eso lo excitaba mucho. Desde el momento que llego lo recibi con un beso y bajando mi mano para sentir su verga sobre su pantalon, ese día no se que me paso pero andaba super caliente, que lo que mas deseaba era sentir su hermosa verga dentro de mi...., le dije vamos a mi cama que quiero que me cojas como nunca, el no lo acabo de escuchar, entramos a mi habitación, empezandonos a quitar la ropa, el me gustaba mucho como me besaba, abrazaba y poco a poco me iva quitando mi ropa, quedándome únicamente con mi tanguita, yo tambien hacia lo mio, me gustaba tocarle su verga mientras le quitaba sus pantalones, una verga como nunca habia visto, grande y dura y muy duradera... ya los dos en mi cama nos empezamos a besar y tocar, dándome una chupada sabrosa en mis senos, excitandome cada vez mas, yo mientras tanto tenía agarrada su verga sobándola cariñosamente, después de un buen rato, se empezo a bajar para darme una buena chuapada en mi critorís, mientras con una de sus manos me seguia tocando mis senos y con sus dedos de su otra mano metiendomelo despasito en mi anito, eso me volvia loca, por eso me gustaba mucho que llegara a cogerme, ya que me sentía muy bien a su lado como mujer, el era un estupendo amante en la cama, a pesar de tener menos años que yo, se ve que tenía experiencia por hacerme sentir tan bien en el sexo, cuando llegaba el momento de penetrarme, era otra cosa sensacional, sentir su hermosa verga dentro de mi, metiendomela y sacandola con un buen ritmo, mientras nos seguiamos besandonos de una manera muy sensual, si por el fuera me podia seguir cogiendo mucho mas tiempo, pero por la hora que llegaba mi esposo, teniamos el tiempo medido, despues de haberme dando una gran cogida y venirse jjuntos, quedabamos exhaustos y felices de haber disfrutado tan rica cogida.
Mas tarde mi esposo llego, mi amigo ya se habia ido, llego la hora de acostarnos, nos dimos un baño, pero yo seguia con la sensación de seguir cogiendo, notando que mi esposo andaba tambien un poco caliente, para lo cual le comente, quieres cogerme cariño??? sin dudarlo nos empezamos a tocar y a besar, tocando su verga que tambien esta riquisima, la verdad tengo dos vergas hermosas, las disfruto muchisimo las dos, mi esposo normalmente me empieza a calentar besándome mi clitoris, que es algo que me gusta mucho de el, cuando siente que me tiene muy caliente me empieza a coger a un ritmo similar al de mi amigo, no voy a negar que me gusta que me cogan los dos, me siento deseada por los dos, ellos lo disfrutan muchisimo y eso me gusta, me gusta que se vuelvan locos por mi..., las cogidas que mi esposo me ha dado no lo cambiaría por nada, pero las de mi amigo tampoco... ambos son muy buenos en la cama... y vivir la sensación de lo prohibido siento que lo hace mas rico y mucho mas despues de haberme cogido mi amigo que me coja mi esposo... mmmmmmm todo muy rico, lo disfruto mucho a los dos!!!!
Ambos iniciamos a besarnos con toda pasión, con aun más pasión que la primera vez, mientras nos besamos Armando comenzó a tocarme mi zona intima debajo la falda de mi vestido y como consecuencia a esto de inmediato me moje toda, ¡Quiero hacerte el amor! Me dijo suavemente al oído, -Lo sé y también quiero- le conteste.
Relato erótico enviado por putita golosa el 29 de August de 2010 a las 23:31:22 - Relato porno leído 513554 veces