como compre un auto con rebaja

 Han pasado 10 años de lo que les contare. Recien nos habiamos mudado a nuestro depto cuando me llamo la atencion el auto de mi vecino. Se trataba de una minicooper colorada con el techo negro que era una belleza. Por entonces yo tenia 32 años y Cecilia, mi mujer, 29. Ella era rubia de cabello largo lacio y una figura bien proporcionada donde llamaba la atencion su cola. Era una preciosidad, paradita y redonda. Volviendo al hecho me encontraba mirando el auto un dia cuando se me acerca un hombre que dijo llamarse Ovidio y que era el propietario del vehiculo y nuestro vecino del piso de abajo. Enseguida congeniamos. Me mostro el auto y hasta me lo dejo manejar. Pasaron los dias en los que no falto la ocasion de seguir admirandolo. Ovidio veia que yo deseaba tenerlo.  Ya nos visitabamos y su mujer y Cecilia se habian hecho muy amigas al igual qe nosotros. Cierto dia Ovidio me sorprendio diciendome que habia decidido vender la mini. Cuando le pregunte el precio , la cifra que me dio era superior a lo que yo tenia ahorrado para comprarme un auto. Pasaron unos dias y Ovidio me dijo que queria hablar conmigo. Nos reunimos en su casa y me adelanto que lo que me iba a decir podia enojarme pero si le prometia que no lo haria fuera lo que fuera, me lo contaria. Acepte intrigado. Mi sorpresa fue extrema cuando me propuso lo siguiente: queria acostarse con Cecilia y a cambio me venderia el minicooper por el importe que yo tenia ahorrado. Me enoje mucho pues me proponia que prostituyera a mi mujer por un auto. Le dije que no y me fui enojado de su casa. Paso una semana. Como eramos amigos nos amigamos. No podia olvidar lo que me habia dicho. En una charla le pregunte como se le habia ocurrido eso. Me comento que Cecilia jugueteaba bastante con sus bromas. Esto me sobresalto y me llevo a decidirme. Le pregunte como creia que lo podria hacer. Ovidio me dijo que el tenia una pastillas que quien las tomaba perdia totalmente su voluntad y actuaba por instinto, es decir, perdia los prejuicios. Quedamos en que nos reuniriamos en casa a tomar cafe y veriamos. Ovidio me dio las pastillas. Durante la reunion ofreci a preparar cafe o te. Cecilia me pidio un te y yo  fui a la cocina a prepararlo. Me decidi y puse las pastillas en la tasa de Cecilia. Lo servi y ella lo tomo. Ovidio me miraba buscando mi señal . A los 20 minutos Cecilia estaba muy tranquila.  Ovidio se dio cuenta y se sento junto a nosotros. Para probar abrace y bese apasionadamente a mi mujer.  Ella se dejo hacer y no le importo estar frente a Ovidio. Le levante la falda a Ceci dejando a la vista su braga blanca. Ella ni se inmuto me beso apasionadamente. Ovidio, dudando un poco,,  puso su mano sobre el sexo de Ceci y ella no lo aparto. La tomo del cuello y la beso. Ella le acaricio el pene por encima del pantalon. Me levante y me sente frente a ellos. Ovidio le ayudo a quitarse la blusa. Sus pechos aparecieron cubiertos por un pequeño brasiere. Ella misma se quito la falda. Quedo en ropa interior mientas se n mi ni pensaba. Ovidio se quito el pantalon y la remera quedando solo en boxer. Tomo un pecho de Cecilia liberandolo del corpiño y lo empezo a besar. Se bajo el boxer y mostro una gran ereccion. Cecilia ni bien la vio la tomo con su mano derecha y la acerco a su boca. Empezo a lamerlo  y chuparlo como si fuera lo mas natural mientras respiraba muy fuerte. Ovidio la hizo pararse y le ayudo a desnudarse completamente. Se acostaron sobre la alfombra. La monto y comenzo a moverse ritmicamente. Ella alcanzo un orgasmo  y lo hizo gimiendo fuerte. Ovidio tan pronto sintio que ella alcanz aba su goce no se contuvo y le acabo adentro. Ahi me di cuenta que no se habia colocado un condon. Por suerte a Cecilia se le habia ido la regla hacia dos dias. Ovidio se levanto me guiño un ojo y me dijo:" mañana firmamos la transferencia del mini .me quedo con las ganas de hacerle el culo". Cecilia permanecia con una sonrisa y se fue durmiendo de a poco. La alce y la lleve a la cama , la tape. A la mañana siguiente no recordaba nada. Solo menciono que habia tenido un sueño chancho en el que tomaba parte Ovidio pero no me lo quiso contar, a mi no me importo total yo ya lo sabia. Tuve mi mini cooper y de esto que hoy cuento pasaron 10 años y yo hoy estoy separado de Cecilia y me he vuelto a casar pero esta vez no quiero ningun auto.