Aunque no estamos casados formalmente, soy la esposa de Eduard, como dicen en la calle, él es el hombre que mueve el dinero. Y no hay quien no le tema, razón por la cual se cree que todo lo malo le puede pasar a los demás, pero que a él nada.
Relato
Bueno hace poco, el tipo que era su chofer por varios años, por ser sumamente arrastrado, mi marido lo encargó de un nuevo negocio. Así que nombró a Gilberto un chico nuevo, que a penas me di cuenta de la manera en que me miraba, supe que él no le tenía miedo a mi marido.
Aunque yo no dejaba de criticarlo frente a mi esposo, Eduard, siempre encontraba la manera de disculparlo. Pensando que el chico jamás se atrevería a faltar el respeto.
Bueno fueron pasando los días, y una noche que mi esposo se quedó jugando poker con alguno de sus asociados, le dije que deseaba irme a pasear por el hotel, por lo menos para decir que pasé una noche disfrutando de los espectáculos que dan.
Eduard, se me quedó viendo, y sin consultarlo conmigo de inmediato le dijo a su chófer. Acompaña a la señora, no la dejes sola ni un segundo, que nadie se le acerque. Gilberto se sonrió, y colocándose a mi lado comenzó a seguirme a todo lados. Además si me tomaba, o se me ocurría comer algo de inmediato, él mismo pagaba la cuenta.
Ya estaba sintiéndome incomoda, por la continua presencia de Gilberto. Cuando quizás por lo mucho que ya había bebido, me dieron ganas de mear, por lo que tuve que bajar a uno de los baños, ya que los de arriba se encontraban ocupados. Pensando que el chico se quedaría fuera, por joder, le dije. Ya sabes Gilberto no me puedes dejar sola ni un segundo.
Yo seguí caminando dentro del baño de damas pensando que él esperaría a que yo saliera. Pero no fue así, el muy desgraciado estaba de pie tras de mi. Yo que no me había dado cuenta de su presencia, me disponía a orinar, cuando lo sentí, y lo vi.
Ya tenía mis bragas en los tobillos, oriné sin dejar de ver su cara. Fue cuando no bien había terminado de mear, y de subirme las bragas, que Gilberto se me acercó, tomando entre sus brazos. Se bajó los pantalones. Me colocó una de sus manos en mi nuca, y sin decir nada, me obligó a que me pusiera a mamar su parado miembro.
Yo en esos momentos me sentí rara, nunca desde que me uní a Eduard, nadie se había atrevido a tratarme de esa manera, ni aun siquiera el mismo Eduard. Ya que desde que me mandó a operar las tetas, le encanta que todo el mundo me las vea. Pero no deja que nadie se propase conmigo, por lo menos no como su chofer lo estaba haciendo.
Yo seguí mama que mama, a medida que el calor dentro de mi coño iba en aumento, tanto que en cierto momento sacándome la verga de Gilberto de mi boca le pedí que me lo metiera.
Gilberto no se hizo de rogar, ya que de inmediato, dentro del pequeño espacio donde nos encontrábamos, se las arregló para penetrarme de la manera más sabrosa que nadie nunca antes me había enterrado su verga.
El chófer de mi marido, no se conformó con clavarme su verga dentro de mi depilado coño, sino que hasta por el culo me la empujó. Cosa que nunca Eduardo se había atrevido hacerme, ya que la única vez que lo intentó, yo chillé y hasta lloré. Para evitar que me lo metiera, cosa que en esos momentos me funcionó.
Pero encerrada en aquel pequeño baño, con Gilberto, cuando traté de decirle que no, ya me había empujado todo su pedazo de carne por mi culo. Si me dolió, y mucho. Pero a medida que el dolor me fue pasando, comencé a menear mis caderas, restregando mis nalgas contra su cuerpo.
Yo por aquello de no levantar sospechas, apenas regresé donde estaba jugando mi marido, le dije que el tipo ese era un desconsiderado, que ni aun cuando me quise reunir con varias conocidas mías, me dejó sola. Por lo que me tuve que retirar.
Bueno Eduard, está sumamente satisfecho con Gilberto, para mi marido yo no lo paso. Pero cada vez que se nos presenta la ocasión, lo dejo que me follé como le de su real gana….
Mi Madre, a sus 42 años, es una hembra que está rebuena. Mi Padre, un pobre idiota. Así que una noche decidí darle marcha a ella con mis amigos, mientras mi padre miraba..........
Relato erótico enviado por domo54 el 12 de December de 2008 a las 11:35:56 - Relato porno leído 312203 veces
Era un día normal, común y corriente, yo regresaba de la prepa, yo soy un chavo moreno, alto, con buen cuerpo, bien dotado y muy atrevido, no tengo novia y ese día fue uno de los mejores en mi vida
Relato erótico enviado por Anonymous el 29 de August de 2008 a las 13:06:42 - Relato porno leído 212263 veces
Mi nombre es Alicia, y hasta no hace mucho mi familia, y yo desde luego vivíamos en un retirado pueblo, en el que apenas y nos enterábamos de las noticias, ya que ni tan siquiera llegaba la señal de la Tele. Por lo que cuando nos mudamos a la ciudad, lo que más me impresionó fue el baile del perreo
Relato erótico enviado por Narrador el 04 de June de 2012 a las 23:00:35 - Relato porno leído 149874 veces
Si te ha gustado Con el chofer de mi esposo… ( CON fotos) vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Con el chofer de mi esposo… ( CON fotos).
narrador
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
katebrown
(18 de October de 2022 a las 22:30) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF katebrown
(18 de October de 2022 a las 19:59) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
Registrate
y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Con el chofer de mi esposo… ( CON fotos).
Vota el relato el relato "Con el chofer de mi esposo… ( CON fotos)" o agrégalo a tus favoritos