Con la chica sexy del café Internet

Hola soy el mismo de antes, esta vez quisiera contar mi aventura con una señorita de un café Internet de mi pueblo, espero les excite.

Todo empezó cuando empecé a entrar a ese Internet, ahí atendía una cachonda mujer llamada Lety. Una mujer de 22 años con riquísimas piernas y nalgas, estatura normal y de piel morena, bastante deliciosa y fácil. Su rajita vaginal ¡umm! Estaba súper buenota y le olia bien rico algo así como fresas.

Al principio como ya había dicho me masturbaba viendo videos porno en ese Internet, por lo cual era discreto para que no me llamaran la atención, pero poco a poco esta muchacha me descubría lo que yo veía. En fin todo era normal hasta que una noche como eso de las 10:00 p.m. escuche que esta muchacha estaba serrando por lo cual me disponía a salir, pero como estaba tan prendido con la porno no lo hice, esa noche ella estaba vestida con una falda bien cortita con la que lucían sus piernas de ramera y una blusa bastante escotada que se le permitían verles sus pechos bien erectos por lo que descubrí que estaba excitada también, por lo cual ya me había entrado la calentura de tirármela.

Más mis ganas no pasaron más, ella apago las luces y entró a donde yo estaba, como la pantalla de la computadora tenia reflejo yo pude ver lo que estaba haciendo, primero se paró atrás de mi y empezó a levantarse su falda, después se quito sus calzones y se sentó en un escritorio y empezó a tentarse su vagina muy fuerte con sus piernitas abiertas muy lentamente lo cual me calentaba más y más pues se estaba masturbando con migo, después se acerco detrás de mí y me dijo que porque no satisfacía mis ganas con ella que estaba también prendida, inmediatamente acepte, le alcé su falda y la senté de nuevo y le empecé a mamar su rica concha que estaba tan húmeda y cerradita bien virgen después me saco mi verga y me la mamo bien bonito al grado de eyacular en su boca y para mi sorpresa se bebió toda mi leche como puta, hasta que no resistí más las ganas y le abrí sus piernas y le metí mi verga en su vagina, por lo cual sangro mucho pues estaba muy estrecha y a mí se me dificulto metérsela y descubrí que yo la había desvirgado pero ella me decía “más, más dentro, métemela toda papacito cógeme a todo fervor” , después le retire mi verga y me la siguió manando, volví a metérsela ella gritaba como fiera a punto de llegar al orgasmo mientas le seguí mamando su rica vagina desvirgada. Meses después la vi de nuevo y embarazada e inmediatamente me entere que ese bebe que esperaba es de mi, pero le ordene guardar silencio.