De novia a mucamita humillada

Mi nombre es juliana, tengo 28 años y mi relato sucedió hace mas o menos 4 años, vivo en Bogota, Colombia y tenia una relación estable con un hombre muy bueno, todo empezó cuando cumplíamos 3 años de novios y decidí hacerle una invitación a cenar a un buen restaurante a las afueras de la ciudad fuimos atendidos por una mesera novata que supo arruinarme la noche con sus torpezas, tenia mucha ira y decidí quejarme con el administrador del sitio quien dándome la razón opto por echar a la mesera ese mismo día. Yo me sentí realmente feliz ya que si me había dañado el rato pues ahora debía ponerse a buscar trabajo, aunque a mi amado novio no le gusto para nada mi actuación y me dijo que yo debía recibir una lección por humillar aquella muchacha, yo no le preste atención y me fui a mi casa.

Dos días después me dijo que ya sabia como me iba a dar una lección, y que si no accedía a cumplir con mi castigo me olvidara de el, ante estas amenazas yo acepte sin mayor problema. El fin de semana siguiente me llevo a la casa un paquete diciendo que debía usarlo esa noche, yo acepte y me despedí, cuando revise su contenido vi que era un pequeño delantal, una botella de trago, unas verduras y unos preservativos…. Yo pensé que esa iba a ser una noche muy apasionada de reconciliación, mi novio llego hacia las ocho de la noche y al verme inmediatamente enfureció “perra estupida” te dije que solo debías usar lo que había en el maletín y de inmediato me quito el pantalón y rompió mi blusa, estaba desnuda y me ordeno colocarme el delantal únicamente.

A los 10 minutos tocaron a la puerta, el me ordeno abrirla y recibir a sus invitados como ellos se lo merecían, cuando abrí habían 4 hombres quienes entraron y su saludo fue manosear y chupar mis tetas, yo me sentía muy avergonzada por estar completamente desnuda y a merced de estas personas que no conocía. Mi novio me dijo que les ofreciera un trago y que trajera las verduras y los preservativos que me había entregado, y se los entrego a cada uno de ellos pidiéndoles el favor de que colocaran el preservativo a cada pepino y cuando quisieran compañía solo debían llamarme que yo iría a sentarme a lado de cada uno, pero que debía sentarme sobre el pepino que sostenían ellos…. Yo los atendí como mejor pude no sin sentirme bastante incomoda por mi situación.


Al rato uno de ellos me llamo para que me sentara a su lado donde sostenía verticalmente el pepino, con gran esfuerzo fui penetrada por es verdura todos me observaban con morbosidad ya que el siguiente paso era que me debia levantar y continuar atendiéndolos sin que se saliera el pepino de mi vagina, cuando me levante todos se burlaron y me dijeron que si sentía que el pepino salia debia pedir ayuda y que uno de ellmos me haria el favor de acomodarlo bien adentro de mi vagina, obviamente no alcance a dar mas de dos pasos cuando el pepino empezó a resbalarse, me incliné en frente de uno de ellos quien con fuerza me empujo el pepino hasta dejarlo completamente metido dentro de mi, asi sucedió con cada uno de ellos quienes me insultaban cada vez que cometía un error en sus pedidos.

Ya cada uno tenia su verga afuera y se masturbaban al verme colocar mi vagina en sus cara para acomodar la verdura dentro de mi, la siguiente orden fue que me acostara en una de las sillas con mis rodillas en mis hombros de tal manera que quedara bien expuesta mi vagina y mi orificio anal allí empezaron a depositar los cunchos de trago que tenia cada uno y como mi vagina ya estaba bien abierta me entro mucho trago, y para colocar los cigarrillos utilizaron mi culo, primero introducían uno o dos dedos y luego colocaban allí sus cigarrillos encendidos, el cenicero era mi vagina llena de alcohol y para entretenerse durante la charla pellizcaban mis tetas y cuando iban a orinar salían con sus vergas escurriendo para que yo las limpiara con mi boca, asi estuve en esa posición casi por una hora cuando empezaron a despedirse, para esto me colocaron en la puerta agachada para que cada uno me penetrara y me llenara de leche a la salida diciendo que era mi propina por el servicio.

A partir de este día se repite la cesión cada 15 días y cada vez son mas invitados es decir cada vez tengo mas propinas en mi vagina, ya me gusta y lo disfruto me siento la mas puta pero la mejor mesera creo que todos se han sentido bien atendidos.