Aqui les comparto mi hermosa experiencia que trata de como hice el amor con otra de mis profesoras de mi colegio. Historia real y espero les agrade.
Relato
Hola muy queridos lectores, antes que nada quiero agradecerles por el tiempo que le dedican en leer mis historias y todas de los demás que las mandan, ahora nuevamente les comparto mi rica nueva experiencia de sexo con otra de mis profesoras que me dan clases en el colegio preparatoria donde estudio. Yo ya me he presentado en historias anteriores pero creo que ahora amerita que de nuevo lo haga. Soy un joven de 18 años de edad, caucásico, piel blanca, pelo claro un poco rubio, ojos azules claros, rostro varonil, cejas pobladas y labios carnosos. Mi cuerpo es atlético gracias a que asisto a un gimnasio diariamente, con esto poseo buenos músculos claro no tanto como un luchador de la triple A pero bueno no me quejo pues estoy en forma, además tengo una fuerza física muy fuerte, soy de estatura alta, mis muslos están bien torneados y fuertes. Creo que me considero un joven guapo pues me lo han dicho las mismas mujeres (Sin presumir claro). También déjenme comentarles que curso el último año de preparatoria por lo que para el siguiente año ya entrare a la universidad a estudiar derecho, esto por una parte, por la otra como ya se los había comentado anteriormente estoy también estudiando piano pues pienso igual tomar una licenciatura en música pianística, creo que también recuerdan que les comente en otro relato como tuve sexo igual con mi profesora de piano. En fin ya he tenido bastantes experiencias de sexo a pesar de mis apenas 18 años y en mis sentimientos pues bueno les diré que soy muy romántico con las mujeres que de verdad me enamoro, como es en el caso de mi novia actual, pero claro sin que ella sepa que tengo varias aventuras, en el caso de las demás pues únicamente me gusta tener sexo y ya, también me gusta experimentar cosas nuevas y nunca caigo en la rutina, con todo esto las chicas me buscan, por ello no descanso hasta lograr tener sexo con ellas no importando mucho la edad. Mi familia es de clase alta por lo que vivo cómodamente, estudio en colegios privados y tengo diversos lujos que mi posición me lo permite, me gusta vestir siempre elegante con trajes caros y perfumes finos, al igual que tengo mi propio auto aunque mis padres no me dejan conducir muy bien aun, así que tengo un chofer. Y por último les comento que vivo en México en un estado del mismo país llamado Tlaxcala.
Mi hermoso y deliciosa profesora con quien hice el amor se llama Rebecca, ella es una mujer de 30 años de edad, caucásica, piel blanca, pelo rubio un poco obscuro, ojos color verde claro, rostro muy femenino y labios sensuales decorados con labial rosa. Es esbelta con buenas curvas, senos preciosos, poseo unas piernas hermosas y bien sensuales pues de sólo mirárselas dan ganas de chupárselas, pero sin duda lo mejor de ella es su exquisita vagina rosadita, bien depilada y con una rajita perfecta, al igual que sus nalgas bien formadas y abultaditas. Le encanta vestir con trajes claros, casi siempre de color beige o verde pastel, cuyos trajes incluyen, una falda a la altura de las rodillas, usa también medias obscuras con las cual decora sus bellas piernas, igual utiliza saco del mismo traje y blusas bastante escotadas con las cuales luce sus senos preciosos y para completar ni usa sostén, sus bragas las utiliza tipo bikini casi siempre de color negro. Ella imparte clases de matemáticas en el colegio donde estudio desde hace ya dos años pero en mi aula apenas desde hace un mes. Es de clase alta igual y vive en mi mismo estado aunque en diferente ciudad. Y bueno ella es una profesora bastante coqueta y dulce, le gusta calentar a todos los profesores especialmente pero de vez en cuando con esas coqueteadas también nos calienta a nosotros sus alumnos, yo había escuchado rumores que varios profesoras ya la habían cogido e incluso un amigo del grupo que daba clases anteriormente me dijo que se había logrado acostar con la profesora de matemáticas, más no le creí hasta ahora que se que es muy caliente la profesora Rebecca, aparte de esto es una de nuestras profesoras consentidas puesto que como ya dije es dócil, no nos deja tarea y de vez en cuando ella misma nos pone un punto extra por regalo y bueno me gustaría comentarles más de ella pero con base al tiempo, únicamente me limitara aquí e iniciare la historia ahora.
Como ya dije la profesora daba clases en otro grupo del colegio, pero a causa de que el profesor de matemáticas anterior pidió permiso por unas semanas, el director tuvo que poner a la profesora Rebecca en su lugar para dar clases en mi grupo de tercero de preparatoria. Como todos los chicos la deseamos y la queremos por ser tan coqueta y buena, al instante que nos enteremos que ella nos daría clases, todos nos regocijamos de alegría, morbosidad y deseo a la vez. Y para que ella se sintiera bienvenida en nuestro grupo le organizamos entre todos una pequeña pero gran fiesta de bienvenida, incluso como nuestros recursos nos lo permiten le regalamos cada quien diversos obsequios finos, en mi caso le obsequie un frasco de perfume francés que ella se aplica. Con todo esto la linda profesora se sintió bien alagada, más ella no sabía que todo esto lo hicimos con la condición de que se dejara tener sexo con nosotros y por mi suerte, claro también ayudado de que soy guapo por lo menos a mí me concedió ese gran deseo que había guardado en los últimos dos años que era hacerle el amor. Las primeras dos semanas transcurrieron casi normalmente a acepción de que nos calentaba viendo sus piernas con esa falda tan sexy que usaba, sus zapatillas de tacón alto con las que caminaba como toda una modelo, cada día nuestra oportunidad de verla era cada vez que se sentaba en su escritorio y ella descuidadamente de vez en cuando abría un poco sus piernas y lográbamos verle sus bragas por debajo el escritorio, con todo esto mi deseo hacia ella aumentaba cada día más, pero sin embargo no encontraba la manera de decirle lo mucho que me gustaba, hasta empecé a descuidar la relación amorosa con mi novia que de verdad amo pues la profesora estaba todos los días en mi mente, sólo anhelando el momento de poder hacer el amor con ella.
Todo esto continuo hasta que me decidí por dar mi primer paso hacia ella y esto lo pude lograr cuando ella aplico un pequeño examen no oficial, si no nomás de ella misma para ver el adelanto de todos, aunque mi deseo con la profesora estaba a mil y era muy evidente mis miradas de lujuria que le daba a sus piernas, culo y senos, no quise desatender mis estudios pues sabía que otra manera de agradarle más ella era placándome más y así lo hice, en fin yo fui el segundo alumno quien termino el examen y al revisarlo noto que casi todo era correcto y como consecuencia me anoto una calificación orgullosa de 9.7, en total fueron como 20 operaciones matemáticas de distintas clases y de las 20 operaciones escasamente reprobé 3, así que vio mi capacidad. Aunque debo aclarar que esto lo hice por amor a la profesora pues en realidad mi materia menos preciada es la de las matemáticas, esto también causo asombro entre mis compañeros pues mi calificación normal en esta materia es de 8.9, así que me saque el record esta vez, con esto les invito a todos a que me dieran un aplauso. Bueno en fin como termine pronto y tuve excelente calificación me dijo que le ayudara a calificar los exámenes de todos para que acabáramos más rápido pues limitadamente teníamos quince minutos para terminar antes que sonara el timbre de salida, eran ya como las 2:15 de la tarde. Me senté en su escritorio junta a ella, esto me puso más que caliente y de inmediato pensé en aprovechar el momento y como todos estaban apresurados en terminar su examen nadie veía nada, los primeros minutos no hice nada para no ser tan obvio, únicamente iba revisando las preguntas, ella seguía calificando pero de pronto una calentura terrible me dio y no lo dude más, mientras con una mano calificaba los exámenes, puse mi otra mano sobre sus piernas, ella dio un pequeño salto de asombro pero no me dijo nada, yo empecé a acariciar sus piernas lentamente e iba subiendo su falda para tocar su entrepierna, ambos nos miramos muy pícaramente pero sin ninguna palabra.
Ella ya también caliente abrió sus ricas piernas para darme más libertad, de esta manera pude logar tocar su zona vaginal sobre la tela de sus bragas, ahí pude notar que ya estaba excitada pues sus flujos vaginales ya fluían de su raja vaginal, sin pensar con mis dedos removí la tela de sus bragas para lograr tocar su vagina que tanto deseaba, esto duro más de diez minutos y ella ya se le notaba su rostro de lujuria pero trataba de ser natural, hasta para de calificar y para no dar sospecha alguna ella fingió estar leyendo una revista mientras continuaba tocando su vagina ya bien mojadita. Lo más bueno fue cuando sonó el timbre de salida y con la sorpresa sin querer empuje mis dedos y le metí en su vaginita dos de mis dedos, ella al sentir mis dedos dentro su vagina dio un salto muy notable que sorprendió a todos pero por suerte nadie logro darse cuenta de lo que habíamos hecho, sin palabras más que decir, únicamente les dijo a todos que se retiraran ya y que mañana terminaría de calificar todos los exámenes, todos se fueron retirando sin embargo yo quería lograr más, así que me quede con el pretexto de pedirle un libro a la profesora.
Al paso de cinco minutos el salón quedo vacio y la profesora no se levanto pues si lo hacía podían ver que su falda estaba desacomodada, pero al irse todos lo demás ella intento retirarse también, al intentar acomodarse sus bragas no la deje hacerlo. Me tire hacia ella como un lobo hambriento y le robe un apasionado beso en sus deliciosos labios de mujer y mientras hacía esto con mis manos levante su falda de nuevo e introducir mis dedos en su vagina de nuevo, esta vez le metí tres dedos, la seguía besando ahora en su cuello y con toda velocidad empecé a meter y sacar mis dedos de su vagina, ella sólo daba suspiros para no delatarnos pues a fuera del salón seguían pasando maestros y alumnos, la velocidad con que la penetraba con mis dedos era tanta que mi mano se comenzó a cansar pero no me detuve, no pasaron ni siete minutos en que mi profesora amada se vino en un increíble orgasmo y me empapo mi mano de sus ricos flujos vaginales de su eyaculación femenina, con esto no pudo evitar dar un breve pero considerable grito de placer. Al terminar sin perder más tiempo se acomodo sus bragas y falda tan rápido como puedo y salió sin decirme una sola palabra, yo hice lo mismo pues sabía que dentro de poco tiempo llegarían los alumnos del segundo turno. Al salir de nuevo seguí a la profesora y vi que fue directamente a los baños de mujeres, al ver esto me puse caliente de nuevo y decidí que ese mismo día haría el amor con ella costara lo que costara, la profesora Rebecca que tanto había deseado al fin seria mía .
Como ya había iniciado las clases del segundo turno, el patio del colegio había quedado vacío de nuevo, así que no había nada de qué preocuparme, medio abrí la puerta del baño y ahí fue donde la vi. Claramente note como con papel higiénico se estaba limpiando su zona vaginal de su mismo flujo vaginal, después al terminar se volvió acomodar sus bragas y falda e inicio lavarse sus manos, ahí pensé que sería ahora o nunca, de nuevo el deseo me volvió invadir y sin pensarlo entre al baño.
Ella me vio de inmediato por el espejo y me dijo.
-¿Qué haces aquí Rey?- Yo sin dudarlo más le confesé
-¡La deseo con todo mi corazón profesora, deseo hacerle el amor!- Ella con mirada llena de lujuria me respondió.
-Está bien mi amor pero antes tienes que prometerme algo si nene- Yo le dije que me pidiera cualquier cosa.
-Tienes que prometerme que esto quedara entre nosotros y no lo contaras con nadie-
-Pues si lo haces yo puedo perder mi trabajo y a ti te pueden expulsar- Respondí
-Si profesora con gusto guardare el secreto dulce maestra de mi amor-.
Sin más palabras de nuevo me tire a ella como un lobo salvaje, pero no antes de asegurar la puerta con seguro, de una vez hecho. De nuevo subí completamente su falda y baje sus bragas hasta sus rodillas, luego ella misma se sentó en la lava manos frente el espejo y abrió sus ricas piernas invitándome a comerle el coño. Así lo hice, lleve mi cabeza entre sus piernas e inicie a comerle su rico coño que de inmediato comenzó a mojarse de nuevo, yo estaba como loco de placer chupándome cada gota de su flujo vaginal, le mordía ligeramente su clítoris y de nuevo me metía mis dedos en su raja. No sabía qué hacer más para satisfacerle totalmente, la besaba en los labios y luego en el cuello, hasta que llegó el gran momento.
Ella con voz llena de lujuria me dijo ¡Ya métemela mi amor métemela por favor! Yo como pude libere mi pene bien erecto y muy lentamente inicie a metérsela con tanta delicadeza que a ella misma sorprendió, ella se retorcía de placer a cada milímetro que mi verga entraba en su vagina y luego tomando más fuerza le di un empujón más fuerte y se la metí hasta el fondo causando un rico orgasmo en ella, sentí bien bonito como baño mi pene de su eyaculación. Al momento comencé al mete y saca aun más rápido, ella gemía y suspiraba de tanto placer mientras yo le decía algunas vulgaridades excitantes al oído y la seguía besando, ¡Qué rica, qué rica vagina tiene profesora! Le repetía a cada momento en voz baja, sin duda alguna estábamos haciendo el amor al máximo extremo y de manera salvaje. En un momento me descuide y en el bombeo la empuje con tanta fuerza que choco ella contra el espejo pero por suerte no se rompió, le seguía metiendo y sacando a toda velocidad, era un momento de gloria para ambos. Pero por la misma velocidad y excitación al paso de cinco minutos más aproximadamente eyacule soltando todo mi semen dentro su raja y al sacársele escurrió un poco de semen en el piso del baño.
Al terminar de inmediato se vistió de nuevo y salió sin decirme ni una palabra, esta vez directo hacia su auto para retirarse definitivamente del colegio y ya ni siquiera dio su última clase que le tocaba. Al día siguiente no asistió y así la semana estuvo pasando hasta que por fin hace dos días volvió a ir pero como ya regreso nuestro maestro habitual ella se retiro de nuestro grupo. Pero yo con el orgullo de haber logrado follar con la profesora que desee durante tanto tiempo.
...-“Espera”.-Le dije. Me terminé de quitar la blusa, me desabroché el sujetador y liberé mis senos.
Él ni corto ni perezoso acercó los labios y me los empezó a chupar uno a uno. Yo ya no daba, mi vagina se humedecía anhelando tener su erección dentro. Sergio me acariciaba y me chupaba las tetas y pronto puso su mano por encima del pantalón en mi vagina, lo que me hizo soltar un gemido de excitación...
Relato erótico enviado por charly_bo el 19 de February de 2013 a las 00:00:03 - Relato porno leído 150909 veces
Me quitaron mi virginidad mis profesores...en el colegio
Relato erótico enviado por Anonymous el 23 de June de 2013 a las 00:10:01 - Relato porno leído 76476 veces
Si te ha gustado Delicioso sexo con mi profesora de matemáticas vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Delicioso sexo con mi profesora de matemáticas.
reycolegial
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:05) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
Registrate
y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Delicioso sexo con mi profesora de matemáticas.
Vota el relato el relato "Delicioso sexo con mi profesora de matemáticas" o agrégalo a tus favoritos