¨El peluda ¨ se cogió a mamá y a una vecina al lado de nuestra casa

Hola me llamo Oswaldo y esto paso hace ya muchos años, cuando yo era un puber, Magdalena nuestra vecina de al lado se llevaba muy bien con mamá y para todos lados andaban juntas, el esposo de Margalena estaba en los Estados Unidos, trabajando. Magda como le decíamos tenía unas piernas de campeonato y un culo igual que hacía que todos los hombres se la tragaran donde pasaba , aparte era sumamente coqueta y bonita, tenía dos hijos pequeños 3 y 5 años.

Cerca de nuestra casa ( rancho ) había comentarios que mamá y ella se iban de putas, y la verdad es que muchas veces no supe, donde andaba mi madre y se tardaba horas, fuera de día o de noche. Pero regresando al tema, esa noche, mi madre me mandó a comprar una carga de leña, ( por lo menos me tardaría unos 45 minutos ) caminé y me despedió junto a Magdalena en su puerta, debieron ser como las 8 de la noche, pero me dieron ganas de cagar y me regresé.

A unos 25 metros de legar a mi casa, vi a ¨El peluda ¨ meterse a la casa de Magdalena, aquien le pasábamos el agua, ya que el papá del peluda, la rentaba esa casa, y luego seguía la nuestra, así las tres una al lado de la otra. pero describiré a el ¨ Peluda ¨ para que se puedan dar una idea, ese mono debía tener entre 17 y 18 años, moreno, con cara de indio, antes nunca le prenté atención , pero ahora que recuerdo las imagenes, tenía una tremenda cola, buenas pienas, siempre andaba en short, ya que jugába mucho fut bol. ( Magdalena rondaría los 26 años y mamá unos 50. Entré a la casa nuestra apresuradamente y el corazón me pulsaba fuerte, yo me preguntaba ¿ qué hacia el peluda ? dentro de la casa de Magadalena.


Como dije antes , nosotros le pasábamos el agua, y para tal efecto había un orificio en el patio de atrás de buen tamaño, mismo que visualmente tenía un rango bastante amplio de las dos habitaciones y el baño, y cocina, cuando me empiné y dirigí la mirada por el agujero aun, con la manguera puesta, ví qué ¨ El peluda ¨ le comía las chiches a Magda y le tocaba la panocha a mi mamá, eso me puso muy nervioso, entonces seguí mirándo y las dos comenzaron a desvertir a ¨El Peluda ¨ al ratito las dos estaban empinadas en la mesa de la cocina, con las faldas levantadas y el peluda comezó a culearlas, primero a una y luego a la otra y así se las estuvo dando.

Ahora que pienso , por la coordinación que tenían, supongo que no era la primera vez, el peluda le daba fuerte a una y luego a la otra, entonces ví, porque estaba cogiéndo con luz, que realmente ¨El peluda ¨ le hacía honor a su sobre-nombre, tenía una verga grande unos 17 centímetros y bastante peluda hasta el abdomen y pecho, luego las siguió cogiendo y las mamaba y las chupaba a las dos, al rato Tomó una silla, y se sentaba a una y a la otra alternadamente en la verga, yo podía ver los gestos que hacían Magadalena, y mi mamá , cuando entraba esa cosota hasta adentro, terminó y honestamente no se en cual de las dos se vino. se subió los calzones y se acomodó la ropa, sacó su cartera y cada una le regaló un billete. y lo despidieron muy contentas, no sin antes mi madre se asomó a la puerta para ver que no viniera nadie. Cuando cerró la puerta, me metí a cagar y luego fui por la carga de leña, pensando en todo eso , llebava la berga bien dura, todo el camino,.

Lo que si tengo que agradecer es que ¨El peluda ¨ nunca andubo de ocico flojo, y todos los escuncles que nos juntábamos en bola y él también, nunca se dijo nada ni se supo nada de eso.