el piano de mi vecina

Como estaba solo en casa puso mis músicas favoritas a todo volumen, como me divertía escuchándolas… de pronto el timbre de casa, abro y hay una señora para mi desconocida, hola me dice soy tu vecina llegamos este fin de semanas a habitar la casa del lado que estaba vacía hoy es nuestro hogar, te molestarías en poner mas despacio tus musicales coléricos o escucha otro tipo de música, solo tengo este CD que me lo regalaron , bueno me dice ven a casa y elige algunos agradable de escuchar… me lleva a su casa al entrar veo un piano y le digo si sabe tocarlo y me contesta soy profesora de piano y toco en la misma orquesta de mi marido, auque este toca violín y toca en tres orquesta musicales y por eso paso mas sola que con él.
Tócame una canción romántica en el piano, digo, me sonríe y se sienta tocándome una hermosa melodía, la observaba y ella en su ternura entregada a la melodía no se fija que en su blusa desabotonada desde arriba mostraba unos apetitosos senos, que entre mas los miraba, mas los deseaba, de repente se detiene y mirándome me dice… que te tiene hipnotizados mis senos o la música, sonriéndome.
La miro a sus ojos y digo tus senos y en general tu maravilloso cuerpo, para mí eres una diosa en la distribución de tus formas, eres distinguida…
Eres un adulador me dice y ten cuidado conmigo estoy mal tratada por mi marido en la cama y siempre estoy vehemente a las ternuras y tu edad me es atractiva a mis 32 años. Necesito ser equilibrada sexualmente y un chico de tu edad es un toro embravecido Me roza con sus dedos mis piernas y mis hormonas responden perturbándose pretendiéndola y la abrazo. Gime entre mis brazos diciéndome si nada vas a lograr déjame… soy virgen le digo, pero te deseo apretándola entre mis brazos… ella gime y me deja recorrerla…que edad tienes me dice…, 17 respondo… eres un potrillito impúberes, comienzo a meter mis manos en su valle central de sus pechos, se retuerce y la llevo al sillón… no…no dice en la cama estaremos mas cómodos, en ella la abrazo y trato de forzarla para introducir mi pene ella me dice espera no sabes hacerlo te enseñaré, se movía como una serpiente debajo de mi, mientras me exigía abrázame bésame, chupa mis tetas, era una mujer golosa revolcándose en la cama, era ua gatita enfurecida, se retorcía y no me dejaba penetrarla de pronto se tranquiliza y tomando mi pene duro como palo lo lleva a su entrepierna, estaba tan mojada que este se introduce en su vagina sin oposición hasta el fondo sacándole gemidos de placer a ella y gritos de gozo a mi…, creo que la lucha no duró más de diez minutos y mi pene borboteó todo su semen en su maravillosa vagina mientras ella se estremecía de placer…
Luego paz y tranquilidad cual de los dos mas agotados.
Esa tentadora y ardiente mujer de hermosos ojos y carnosos labios, una esposa dueña de dos hermosos y excitantes senos, una mujer que además de su femenina y natural belleza que irradiaba desde su angelical rostro y sinuoso cuerpo, era además para mi una agradable excitación, además era frenética y muy lujuriosa a la hora de hacer el amor, se volvía tremendamente erótica y apasionada con las diferentes poses que experimentábamos haciendo el amor, donde el sexo oral que hacia o que recibía ya sea de una manera individual por turno, o de a dos, eran unos morbosos momentos que disfrutábamos ambos a morir de lujuriosa y apasionada entrega.
Cada vez que me la estaba tirando, no era sólo yo quien pensaba que ella estaba siendo infiel, sino que también le calentaba a ella saber que se estaba acostando en secreto con otro juvenil hombre, y no con el hombre que la había conquistado y con el cual tenía una hija donde a veces, en medio de nuestra morbosa excitación, le decía que pensara en ella y que yo le atrajese sexualmente, que imaginara que, yo era su esposo, quien se la estaba tirando rico y a sus espaldas, era así que el realismo de nuestras fantasías se iban acrecentando cada vez mas y mas, haciendo que en medio de nuestro furor sexual, representara con imaginado realismo como amantes, aumentaba su excitación cuando le decía en voz alta y en un morboso y excitado tono: "Soy tu marido, que se encuentra trabajándote sexualmente en estos momentos, lo rico que me estoy tirando en este instante, y tu verdadero marido ni se entera que su amada y respetada mujercita, de la cual ni siquiera sospecha él, que apenas hace un minuto que se fue y tu me has estado chupado hasta el cansancio todita mi verga dura y erecta al palo, no sabe que la deliciosa vaginita rica y apretadita que tienes, y que cree él, que es sólo de su exclusiva propiedad, que cree que sólo él y nadie más la puedo gozar rico, gracias a su creencia de mujer fiel que te tiene de ti de manera indubitable, mujer que es sólo de él y para él, le daba la certeza de ser el único hombre sobre la tierra que podía penetrar y gozar de toda la intimidad sexual de su deliciosa y excitante mujercita. .. el cornudo de tu esposo no sabe lo rico que te la estoy metiendo en la vagina en este mismísimo instante, no sabe que mientras él se rompe el lomo para mantener tus gustos y tus caprichos, tú me está dejando a mi la tarea de cacharte rico todos los días, hasta hacer que te vengas diariamente en los lujuriosos orgasmos que yo te hago sentir y que el carnudo de tu esposo no ha sabido nunca como arrancártelos".
Esta mujer animada por mis excitantes y morbosas palabras que le digo mientras me la estoy disfrutando, extremadamente excitada me responde, si soy tuya mi adoradísimo mocoso, soy tu amante, cosas como estas: Si papito, penétrame rico, hazme tuya, métemela toda hasta el fondo, uf. Cada vez que me la estaba tirando, no era sólo yo quien imaginaba que ella me estaba siendo infiel, sino que también la alentaba a ella a imaginar que se estaba acostando en secreto con otro hombre, con cualquier otro hombre en vez de mi, donde a veces, en medio de nuestra morbosa excitación, le decía que pensara en algún conocido que a ella le atrajese sexualmente, que imaginara que ese alguien era quien se la estaba tirando rico y a mis espaldas, era así que el realismo de nuestras fantasías se iban acrecentando cada vez mas y mas, haciendo que en medio de nuestro furor sexual, representara con imaginado realismo a sus amantes, aumentaba su excitación cuando le decía en voz alta y en un morboso y excitado tono: "Tu marido, que se encuentra trabajando en estos momentos, no sabe ni de lejos, lo rico que me estoy tirando en este instante, a su amada y respetada mujercita, ni siquiera sospecha él, que apenas hace un minuto me has estado chupado hasta el cansancio todita mi verga dura y erecta al palo, no sabe que la deliciosa vaginita rica y apretadita que tienes, y que cree él, que es sólo de su exclusiva propiedad, que cree que sólo él y nadie más la puede gozar rico, gracias a su creencia de mujer fiel que te tiene de ti de manera indubitable, mujer que siendo sólo de él y para él, le daba la certeza de ser el único hombre sobre la tierra que podía penetrar y gozar de toda la intimidad sexual de su deliciosa y excitante mujercita. .. el carnudo de tu esposo no sabe lo rico que te la estoy metiendo en la chucha en este mismísimo instante, no sabe que mientras él se rompe el lomo para mantener tus gustos y tus caprichos, me está dejando a mi la tarea de cacharte rico todos los días, hasta hacer que te vengas diariamente en los lujuriosos orgasmos que yo te hago sentir y que el carnudo de tu esposo no ha sabido nunca como arrancarte".
Mi mujer animada por mis excitantes y morbosas palabras que le digo mientras me la estoy follando, extremadamente excitada me responde, no a mi, sino a su imaginario amante, cosas como estas: Si papito, dame rico, hazme tuya, métemela toda hasta el fondo, uf que rica verga que tienes, tú siempre me cachas mas rico que mi marido, por eso te pido que vengas a metérmela cuando tu quieras, cuando te provoque y tengas ganas de cacharme, de hacerme tuya a espaldas del carnudo de mi marido, no te preocupes por él que está de viaje hasta fin de mes, tampoco te preocupes por mis hijos que estarán todos los días en el colegio hasta las dos de la tarde, ¿ya vez papacito que puedes cacharme rico y sin preocupaciones, que me puedes hacer tuya, si quieres todas las mañanas puedes venir a metérmela, oh, ah que deliciosa pinga tienes mi amor, ahg así, así, sigue así, que rico" y es que así, extremadamente excitada, siento que se viene en un intenso y salvaje orgasmo, que rica verga que tienes, tú siempre me posees mas rico que mi marido, por eso te pido que vengas a metérmela cuando tu quieras, cuando te provoque y tengas ganas de hacerme tuya, si de hacerme tuya a espaldas del carnudo de mi marido, no te preocupes por él, tampoco te preocupes por mi hija que estarán todos los días en el colegio hasta las dos de la tarde, ¿ya vez papacito que puedes cacharme rico y sin preocupaciones, que me puedes hacer tuya, si quieres todas las mañanas puedes venir a metérmela, uf que deliciosa pinga tienes mi amor, ahg así, así, sigue así, Hoa que rico" a si así, extremadamente excitada, siento que se viene en un intenso y salvaje orgasmo, esa mujer era mía y lo sería por mucho tiempo mas, yo voy a clases en las vespertinas por lo que seguiría satisfaciéndola.