El Profesor: Con su novia y un alumno.

Llevo 13 años siendo profesor de gimnasia, normalmente de chavales de 16 a 18 años. Tengo 33 años, soy moreno, 1,80, con unos pocos kilos de más, con barbita de varios días y suelen decir que soy bastante guapete.
Para meteros en situación, mi pene no es especialmente grande, 14cm a máxima excitación y 8cm blanda.

La historia que vengo a contar ocurrió el trimestre del año pasado, al terminar una clase de última hora con los chavales que entrenaba, todos ellos de 16 años. Mi novia, me recogía siempre al finalizar las clases, es una chica muy guapa, con tetas pequeñas y bajita, tenía 28 años en aquel momento.
El entrenamiento que realizaron terminó, y como siempre fuimos al vestuario, di una pequeña charla y dejé a los chavales ducharse. Mientras, me fui yo a duchar al vestuario que tenemos para los profesores. Tenía que marcar sus notas en mi cuaderno mientras mi novia estaba esperando.
Al terminar me desnudé y me dirigí a la ducha, abrí el agua, pero no salió nada.
-Una pena cariño me apetecía ducharme contigo -Me dijo Bea.
-Espera un momento vuelvo unos minutos -Le contesté mientras me tocaba el paquete.
Algún problema había con el agua, y me pregunté si en el vestuario de los chicos tampoco había agua. Me colgué una toalla de la cintura y me dirigí al vestuario, donde la humareda me confirmó que ellos sí tenían agua.

Yo no me suelo desnudar delante de nadie porque tengo un poco de complejo por mi pene, aunque delante de unos chicos de 16 años no tendría de qué preocuparme, al fin y al cabo todavía están en la pubertad.
Así que me dirigí a la ducha, con la toalla puesta, y cuando ya todos se fueron de los vestuarios, entre para poder darme una ducha. Me quité la toalla donde ya no me podían ver y me comencé a duchar.
Al poco de empezar, escuché una voz entrando en las duchas (las duchas eran sencillas, todas juntas, sin ningún tipo de separación ni nada que impida que todos los que estén duchándose se vean unos a otros) Me giré y vi que era Daniel.

- Yo aún no me duché que estaba fuera despidiéndome de Sául, que hoy iré a clases extraescolares. -me dijo-.

Yo seguí a lo mío, aunque procurando darle la espalda en todo momento. Lo que si pude observar es que tenía una polla muy grande, a pesar de estar flácida mediría unos 13-14cm, casi como la mía dura. Además, parecía bien gordita, lo que la hacía más impresionante.
Creo que miré demasiado tiempo porque se dio cuenta de que se la había visto, pero me sorprendió mucho lo que me dijo:

- Ya sé que es pequeña, todos la tienen un poco más grande, por eso siempre espero para ser el último y ducharme yo solo porque me da vergüenza -me dijo cabizbajo-.

Me quedé atónito. ¿En serio esa era de las pollas más pequeña dela clase?

- Tranquilo, aún te tiene que crecer mucho más - le dije yo tratando de quitar importancia y zanjar la conversación-. El sonrió y yo seguí aclarándome el cabello.

Procedía a ir saliendo de las duchas, ya que se me estaba empezando a poner morcillona con la tontería y no quería que él viese nada, al momento escuche una voz femenina acercarse.

- Profe ya todos se fueron he venido a cobrar mi recompensa-. Era mi novia Bea estaba totalmente desnuda entrando en las duchas, tenía un cinturón de bata en los ojos.
- Que haces Bea!?, aún falta uno por marchar!, corrí a taparla con mi toalla y sacarnos a los dos de la ducha. Cuando salimos de ella yo estaba totalmente empalmado, ella al verme así no se lo creyó y empezó a tocarme.
- Para Bea, aun está ahí- Le dije.
- Que dices, pero si ya no queda nadie aquí. Dijo Bea; se asomó a mirar a las duchas, se quedó muda y con los ojos atónitos.
Se acercó a mí y me dijo al oído - Madre mía no estaríais haciendo nada no? Ese chaval está también empalmado y joder pedazo rabo tiene.
- Seria de haberte visto a ti cariño igual que me paso a mí, normal que se excite. -Conteste
- Estoy muy cachonda, ese niño tiene una polla enorme, es mucho más grande que la tuya. -Dijo Bea mientras ella empezaba a frotarse contra mí con su espalda, estaba tan excitado que empece a tocarle las tetas y su depiladito coño - Cuanto le medirá ese bicho?, como se llama? - me pregunto Bea.
- Se llama Daniel- Conteste.
- Daniel! Ven un momento que necesito una cosita de ti!-
Daniel salió de la ducha, parece que un poco tímido, ya que se estaba tapando la polla aunque sin mucho exito, pues aún estaba empalmado.
- Tienes una regla? Necesito medir vuestras cositas-
- Si, aquí tengo una toma- Contesto mientras rebuscaba en su mochila.
En ese momento una mezcla de miedo y excitación invadió mi cuerpo, sabía que yo era el perdedor, humillado por un chavalín de 16 años, y excitado a la vez. A mi novia se la veía también muy excitada, se le notaba como su coñito ya estaba bien lubricado.
- Daniel, ponte junto a tu profesor. Vamos a empezar con el rival a batir, el profesor -dijo Bea.
Estaba totalmente empalmado al igual que él, pues la situación, aunque algo humillante, me tenía a mil. Además, era la primera vez que Bea me media la polla.
- Bueno, pues la cifra a batir es 14,5cm! Las tengo visto más grandes -dijo ella riéndose. El comentario también le hizo gracia a Daniel.

- Venga Daniel te toca.
- Dani 20cm, sin duda el ganador. Es casi el doble-
Daniel sonreía con orgullo, la verdad que yo no me lo podía creer, esa tremenda polla ya superaba a la mía en estado flácido, ahora era un monstruo que nos mantenía excitados a mi novia y a mí.

- Supongo que esto merece una foto, Daniel ponte al lado del profesor, mereces inmortalizar el momento.
Daniel se colocó a mi lado, yo me sentía totalmente humillado, ahí tenía a mi lado a un niño al que le sacaba 2 cabezas de alto, pero su polla eclipsaba la mía, era casi el doble de grande. Mi novia sacó fotos desde varios ángulos recreándose.
- Mira desde este lado solo se ve la tuya Dani, tapas la de él por completo -dijo Bea- supongo que mi hombre se merece un premio -dijo mi novia poniéndose de rodillas ante nosotros dos.
Yo estaba muy excitado, nunca habíamos hecho un trío y ahora se iba a poner a chupármela delante este chaval??

-Colocaros mirando el uno para el otro- Dijo Bea, en esta posición se notaba más aún lo grande que era.
Ella empezó a hacerme una suave paja solamente a mí y empezando a darle chupaditas, pero pronto empezó a agarrar ese pedazo de carne, mi polla se ocultaba por completo cada vez que la sumergía en su garganta, la de Dani apenas conseguía llegar a su mitad.
-Cariño, necesito que me la metas ya en el coñito, tienes que abrirlo para este pedazo de polla -Sus órdenes eran deseos para mí, así que empece a metérsela, mientras ella estaba en cuatro chupándosela a Dani.

- Te quiero Cari, te doy permiso. -Dijo Bea, era su forma de decir que se la metiera por el culo, pocas veces me dejo hacérselo, ya que decía que le dolía.
-Quero sentiros a los dos dentro de mí! -Dijo Bea mientras se corría, ya era incapaz de seguir chupándole la polla, estaba tan excitada que no podía concentrarse bien para metérsela en la boca.
Fuimos cambiando de postura y de penetrador, excepto porque a Dani no le dejaba que se la metiera por atrás, ya le hacía yo mucho daño y no quería que se lo rompieran del todo, después de 30 min aprox. cambiando de posturas y posiciones tanto yo como Dani estábamos a punto de explotar, ella nos ordenó que nos pusiéramos de pie como antes y empezó a chupárnosla, nuestras pollas estaban cada vez más lubricadas esos movimientos de mano y esas chupaditas nos tenían a mil, el primero en correrse fue Dani que se vino sobre su cara sin previo aviso, a mi novia pareció no importarle lo más mínimo, y siguió chupándonosla , la polla de Dani estaba empezando a desempalmarse y mi novia se centraba cada vez más en mí, esa visión de ella sujetando ese monstruo en estado flácido mientras me la chupaba me tenía a mil.

- Mira cariño -Dijo mientras acercaba nuestras pollas la una a la otra- esta tremenda polla sigue siendo más grande que la tuya incluso flácida. -Continuo ella chupándomela y pajeandome cada vez más rápido, yo ya estaba a puntito, la avisé y se metió toda mi polla en la boca.
Me encanta cuando se come toda mi corrida, y a ella le encanta también, dice que la pone muy cerda y siempre suele hacerlo.

Estábamos exhaustos, pero mi novia fue la primera en irse a duchar, tanto yo como Dani nos quedamos sentados en los bancos. -Gracias por intentar alentarme antes Profe, pero creo que ya no voy a tener ninguna vergüenza de mi polla, visto lo visto parece que la mía es grande después de todo. Tu novia esta buenísima
es la mejor actividad extraescolar que he tenido en mi vida, a ver cuando la repetimos eh! -Me dijo Daniel.
- Me alegra que ya no tengas complejos Dani, aunque no pienso que se volverá a repetir. -Le repliqué.
- Tranquilo, esto quedará entre los nosotros dos, cuando me necesitéis otra vez, me volvéis a llamar vale? -Dijo Daniel muy orgulloso.

Bea ya salió de la ducha y se dirigió hacia mi Vestuario privado, yo y Daniel nos duchamos y luego nos despedimos. Cuando volví a mi vestuario estaba Bea esperándome, no sabía muy bien que quería decirme, si dejarme o repetirlo tenía una cara muy dubitativa y ese fue sin duda nuestro mejor sexo, yo note que
disfruto más con Dani que cuando los dos lo hacíamos, lo cual me preocupaba bastante, tenía sentimientos encontrados, miedo por perderla y miedo porque me gusto más cuando nos comparaba y aun así seguía queriendo mi polla.
- Cari, esto ha sido nuestro punto y aparte. -Me espeto. - Creo que lo nuestro tiene que llevarse al siguiente nivel, te amo demasiado y no quiero que me dejes, pero lo de hoy ha sido espectacular, he disfrutado cada segundo que tú me dejabas jugar con tu polla y con ese pedazo de carne.
Necesito volver a repetirlo más veces, quiero que tú me dejes hacerlo y seas mi amo, aunque te duela que yo te ponga los cuernos. - termino de decirme.
- Princesa, esto no a hecho más que empezar.