Eloisa la esposa de mi tío y mi amante

Había sido dueño del cuerpo de la viuda Roberta y eso me envalento y me fortaleció como hombre y un día mi tío retaba a su llorón hijo y la tía Eloisa quiso protegerlo, mi tío también arremete contra ella, pero yo estaba cerca y me metí entre los dos separándolos . Mi tío me miro y me dice protégela y acaríciala por que lo que soy yo me voy a emborrachar con mis amigos en la cantina, te la dejo es toda tuya...
La tía Eloisa acuesta a su nene que estaba asustado en la cama al lado mío, y cuando este se duerme se traslada a la mía y me dice que siempre estará agradecida de que la defendiera de los golpes que le quería propinar su marido y al decirlo me abraza y acaricia sonriendo... oye le digo mi tío me ordeno a mi protegerte y acariciarte, se ríe y me dice hazlo acaríciame te doy permiso hoy me has demostrado que ya eres un hombre y siempre me protegerás en casa.., ¿verdad?,¿me protegerás siempre?, me dice , mirándome con unos ruiseñor ojos, le contesto que siempre... ahora yo voy hacer tu protector, seré tu macho bien macho a tu lado... ella solo me abraza con mas fuerza y me besa en la boca, estaba en mi cama levanto las tapas y la cubro con ellas quedando bajo esta, déjame sacarme los zapatos y acomodarme mejor sacándose también el vestido diciéndome no quiero que se me arrugue es el mejor que me queda para salir... queda pegada a mi cuerpo solo protegida por sus sujetador en sus pequeños senos y su calzón, no portaba medias...estiro mis brazos y la apreso contra mi cuerpo apretándola con mi abrazo... estas abrigado me dice siento tu calor y yo frescamente digo yo siento una delicada y deliciosa mujer junto a mi que merece ser besada y protegida, además ella debería ser poseída y no agraviada por los machos... ella me mira sorprendido y no hace nada cuando me acerco a su boca y la beso, la mujer de mi tío no reacciona y cuando siente que este macho la besa solo responde al beso con otro beso mas sensual, metiendo su lengua en mi boca, nuestras lenguas juegan en mi boda ella pone sus brazos en mi cuello y apretó mas fuerte, devorándome en la caricia mi lengua..., esto me excita y mi pene comienza a desarrollarse crece fuerte, firme, duro, elevándose en su máxima extensión, Eloisa la mujer de mi tío, siente la presión en su vientre, me mira y baja una mano tocando mi pene, oye me dice es mas grande que el de tu tío y además es mas joven... si lo pruebo me desarticulará mis vagina, tiempo que no veía uno de su tamaño... respira fuertemente y me susurra en mi oído casi llorando mordiéndose sus labios, te ... atreverías .. a metérmelo... y guardar silencio después. El tocártelo me calentó y me estimulo deseándolo, pero debes callar después... la miro y ya deseándola me acomodo sobre ella..., sacándole el calzón, esta mujer abre sus piernas sabiendo que será penetrada por este grandísimo pene que la hará sufrir, toma mi miembro llevándolo a su vagina, pero no lo suelta, ella va dejando que este la penetre suavemente, se queja y se incomoda al sentirlo abrir sus carnes vaginales abriéndola como nunca la abre su marido... le duele, pero ese dolor la excita y suelta el miembro que se clava con furia en su matriz sacándole grandes gemidos de dolor, estos gemidos molestan a su hijo en la cama del lado, ella le ordena duérmete que mamá esta ocupada y no puede atenderte..., y comienza un desesperadamente a menear sus caderas, con todas sus fuerzas, sus caderas se agitaban lujuriosamente, estaba loca de placer, gemía y gritaba, me acariciaba, besaba y su hijo lloraba en la cama del lado... estaba activadísima y nada le importaba solo sentía que en su vientre estaba penetrándola un duro, tieso y caliente miembro que parecía un tronco en su vientre clavándola contra la cama, se atiesa, se desespera y exploto en un orgasmo asombroso quedando entre mis brazos totalmente agotada, casi inconciente por placer que había dado en este apareamiento gemía, jadeaba, chillaba recompensada por este adolescente sobrino de su marido que ahora que lo había tenido siendo dueño y señor de su cuerpo. Este chico era maravilloso, era un experto, sabía dónde y cómo hacerla satisfacerse carnalmente no la dejaría y periódicamente solicitaría su cuerpo para copularla y placenteramente hacerla feliz... en eso escucha el llanto de su hijo..., besa a su macho semental diciéndole déjame hacerlo dormir vuelvo... un cuarto de hora se demoro en dormirse el pequeño, Eloisa busca en la cama de Patricio sus calzones, pero este la abraza y vuelve a cobijarla con las frazadas de su cama acomodándola para nuevamente aparearse con ella, trata Eloisa de eludirlo, pero sabe que no es posible ella también lo desea y se acomoda para no ser maltratada por ese duro y firme pedazo de nervio carne que mas parece un tronco taladrándole sus entrañas lo recibe nuevamente en su vagina con grandes suspiros de placer al sentirse empotrada por este sobrino con su fenomenal miembro y comienza amorosamente a menearse en la cama de este macho saboreando con escandalosos movimientos de sus caderas, lujuriosamente estaba loca de placer, gemía y mordía a su poderoso sobrino que le acariciaba sus entrañas desesperándola y ella lo besaba, deseando entregarle rápidamente sus orgasmos para tranquilizarlo y no gritar ella de pasión y calentura despertando nuevamente a su hijo. Estaba excitadísima cuando siente en el fondo de su vientre los morbosos movimientos de sus extravagantes espasmos entregándole a su nuevo señor de su cuerpo los grandiosos orgasmos que el lograba de su cuerpo. Su marido tenía un serio rival carnal en su sobrino.
Mas calmada se acuesta al lado de su hijo acariciándolo y arrullándolo cuando aparece su marido y pregunta si va a dormir ahí por que el viene borracho y desea dormir en paz, bueno le dice ella aquí dormiré y el marido se va a su pieza... Apaga la luz y se duermen.
A media noche siente que la manosean y besan, abre sus ojos y es Patricio acariciándola, ella le sonríe y sabe lo que este quiere... le dice al oído baja una frazada al suelo por que las camas crujen y mi marido esta al lado... ayuda al semental a acomodar la frazada y este a lo perrito la acomoda ensartándole su goloso miembro en su vagina satisfaciéndose ambos en un silencioso, pero no menos bestial unión carnal donde el semental riega nuevamente sus leches en la matriz de la esposa de su tío, quien dormía borracho en la pieza vecina, y Patricio mecía a Eloisa con sus últimos insertada de pasión con su pene, Eloisa se mordía una mano para no gemir ni gritar de placer por estar embutida por ese agradable miembro del sobrino de su marido. Se acarician y cada uno vuelve a la cama a tratar de conciliar su sueño.
A la mañana siguiente el tío poco se acordaba debido a que llego borracho de lo sucedido y la jornada paso sin mayores problemas, solo que cada vez que mi tía pasaba a mi lado me rozaba intencionalmente, eso me excitaba y revolucionaba mis hormonas debido a mis 15 años, deseaba otra vez a esa hembra que la noche anterior fue mía tres veces.
Dos jornadas después por fin logro estar a solas con Eloisa..., recogiendo frutas del damasco me había dañado un brazo, no era mucho, pero me hice el adolorido para que me atendiera Eloisa en eso llega mi tío un machista empedernido iba a ir a jugar al juego de Ranas y al juego de Tejos con sus amigos y ahí, le dijo a su señora, solo habemos hombres llevaré a Martín nuestro hijo y tu me dices vamos , tío digo como voy a ir si me duele el brazo y tu señora me esta lavando la herida y me curara..., machista al fin me dice, tu te lo pierdes y sale avisa que volverán en tres horas mas.
Tenía a Eloisa a mi lado vendándome la herida, en verdad no lo requería, pero había exagerado para que ella estuviera a mi lado, ahora se me presentaba la ocasión de compensar a mi hormonas de los manoseos de Eloisa, apenas subieron a la camioneta los que iban al juego de la rayuela atrape entre mis brazos a la mujer que me tenía desesperadas y excitadas a mis adrenalinas. Eloisa no era una mujer llamativa, tenía poco pecho, piernas largas pero nada excepcionales...., en definitiva una mujer de
las que poco llaman la atención, pero había algo en ella que para mí, la hacía muy
atractiva..., gemía y gozaba a gritos las penetraciones de mi pene en sus entrañas vaginales.
Estuvimos durante un largo rato besándonos, hasta que ella poco a poco se fue desnudando, hasta quedar solo, con un diminuto sujetador y un diminuto calzón. Luego empezó a desnudarme, mientras besaba cada parte de mi piel que quedaba al descubierto. Cuando estuvimos totalmente desnudo y yo con mi miembro apuntándola deseoso de gozar de ella, se tumbó en una de las camas y me ordenó que la penetrara.
Por supuesto no me hice de rogar con la orden y en los próximos minutos esa pieza se lleno de gemidos y gritos dados por Eloisa mientras le penetraba, meneaba sus caderas exquisita y libertinamente tratando de complacerme y hacerme eyacular y así descansar de mis duras y profundas clavadas de mi pene en su vagina llegándole según ella hasta cerca de su estómago mis penetraciones por lo largo que era mi pene, de pronto ella se arquea y estremece entregándome su orgasmo gritando de felicidad y placer al entregármelo, sus gemidos y gritos de felicidad me excitan de tal manera que no puedo controlarme y eyecto mis ríos de semen en su matriz, al tiempo que ella cruza sus piernas por detrás de mi trasero apresándome fuertemente contra ella, mientras me besaba con embelesamiento embriagada en la pasión del coito realizado..., me susurra al oído haz de saber que hoy es uno de mis días fértiles, creo que me embarazaste y solo eres un adolescente 19 años menor que yo, tengo 34 años y tu apenas 15años. Pero igual me engendraste un hijo..., eso si llamara papá a tu tío. ¡Ah! me dice y no será el único, quiero tener más hijos tuyos.
Durante el período de preñez Eloisa es una gata fastidiosa y cargante en busca de sexo..., no le importa aparearse conmigo aunque este su hijo cerca, ella desea sexo y del bueno me dice y eso no me lo da tu tío, tú si..
Cumpliré mis 16 años este día y ella aprovecha que el tío viaja a la capital y esa noche me exige dos veces sexo y a la mañana siguiente otras dos veces y recién queda satisfecha, es por tu cumpleaños me dice y por los cinco meses de embarazo de tu hijo que llevo en mi vientre.
Este año finalizo mi primera enseñanza e ingreso a estudios agrícolas en donde de lunes a jueves internado, viernes después de mediodía vuelvo a casa.
Ese día viernes por la tarde mientras aún no llega el tío a casa, sus hijos mayores en el colegio y el bebé duerme siesta Eloisa me espera con ansias y me da al llegar a casa la mejor bienvenida, empotrándose conmigo en su cama.
Esta hembra está desesperada por realizar las faenas de una oprimida cópula durante la semana ya que su marido no se la solicita y cuando lo hace es para molestias de ella por no saber este macho satisfacerla, cuando llego esta desesperada por ser apareada por mi pene y recompensarse de sus acumulados deseos y realizar las posturas de sus pensamientos. Es una alterada mujer en la cama me desnuda y me acaricia con placer y picardía, sobandome con su lengua mi pene y testículos, cuando la desnudo gime de pasión y esperanzas de satisfacerse, cuando pongo mi glande en su vulva se arquea tratando de penetrarse lo mas profundo con mi pene, es una extravagante mujer buscando macho..., cuando la tengo bien dominada con mi pene en su matriz comienza un meneo estremeciéndose desvergonzadamente, sus meneos eran escandalosos, como me sacudía, se apareaba desesperadamente con todas sus fuerzas, sus caderas se agitaban lujuriosamente, estaba loca de placer, gemía y gritaba, me acariciaba, besaba,, estaba activadísima, solo paraba cuando se atiesaba y otorgaba con desesperación sus acumulados espasmos carnales y caía desvanecida entre mis brazos lo que me permitía satisfacerme en ella con duras y salvajes embutidas en sus entrañas sacándole gemidos y gritos de placer. No eran más de quince minutos, pero eran los minutos que yo añoraba en mi internado.
Mis estudios duraron cuatro años y estos cuatro años de vuelta a casa los viernes eran frenéticos y delirantes, hoy mi tía Eloisa fuera de los hijos engendrados por su marido tiene dos más engendrados en estos grandiosos regreso a casa de los viernes.
A mis 21 años me contrataron como administrador de los tres fundos de esta compañía y sigo viviendo con mi tío, quien se siente orgulloso de mis logros y cada día bebe mas alcohol, yo feliz así su mujer, mi tía Eloisa, me puede atender sin problemas en mis mantención alimenticia y me atiende casi a diario mis satisfacciones carnales a sus 39 años. En verdad es mas mi mujer que mi tía.