Mientras mis labios la besaban, mi lengua jugaba con la suya, mis manos fueron de su cintura a sus hermosos glúteos, acariciándolos primero, apretándolos después...mis genitales dentro de ella bañaron sus entrañas y ella recibía por primera vez el semen de un macho en su matriz..., que tibio es, me dice besándome y relajándose satisfecha.
Soledad fue mía durante meses, cuando se caso me dice ahora quiero ser fiel a mi marido
Relato
Al día siguiente me dice prepárate hoy es tu cumpleaños te tengo un regalo que te gustara o por lo menos lo vas a disfrutar..., sorprendido la miro y quedo a las expectativas...
Pronto llega su comadre y vecina del predio de al lado Sandra una mujer mayor que ella de 36 años, casada con tres hijos, la mayor Soledad de mi edad, Sandrita de 12 y el bebé de tres años en brazos..., según mi tía este último era del fecundación infiel con el socio de su marido.
Al verme le dice este es el semental que te aplasta..., quien decía esto era una mujer de
las que llaman la atención por su estructura de caderas, eran voluminosas, pero había algo en ella que para mí, no me era muy atractiva. Eloisa me indica con un movimiento de cabeza el dormitorio y me dice demuéstrale como aplastas a las mujeres y como las haces satisfaces... Miro a la recién llegada y esta le dice a sus hijos que venían con ella..., a jugar su madre necesita tranquilidad para poder concentrarse, los chicos se fueron a jugar con Martín. Sandra me mira y me dice veamos..., si eres tan semental como dice mi comadre, caminando hacia el dormitorio. Me sonrío y la sigo.
Al entrar ambas mujeres estaban recostadas en la cama conversando y me acomodan en un extremo al lado de Sandra Eloisa conversaba sobre lo gorda que estaba con el embarazo y mirándome me dice ella dice que me ayudara en satisfacerte para que no dañes el bebé. En verdad no estaba entusiasmado cuando veo que Sandra saca su falda y calzones mostrándome una muy bien depilada vagina, ahí despertó mi curiosidad, lleve mis manos a su cadera y con una mano recorrí esa exquisita vagina que me llamaba.
No me apetecía sentirla como mi mujer por que no me gusta que se entreguen, me gusta conquistarlas a las que deseo poseer y esta estaba totalmente entregada y deseándome como su profanador de su cuerpo...
Como estaba desnuda aproveché de saciarme en ella, pero hice algo que nunca hago, le saque fotos desnuda y cuando arremetía contra su trasero enorme, o, cuando gritaba apasionada al trabajarla mi miembro en sus entrañas...
A ella le encanto aparearse conmigo a mi no tanto, eso si me excito cuando trajo a su hija de mi edad 17 años a observar como se debía una mujer entregarse a un hombre y saciar sus deseos eróticos con pasión... esta loca me dice esta pololeando con un tipo mayor de edad y este la va a consolar carnalmente cualquier día y esta va a quedar frustrada si no sabe hacerlo bien y tengo que enseñarle... a la segunda vez que la trajo le digo que es ella la que debe practicar y tú vigilarla si lo hace bien... me ofrezco a ser quien le saque estremecimientos de pasión y excitación en la cama y tú nos corriges..., me miro y me encontró razón..., obligo a su hija a desnudarse, espera le digo déjame colaborar con ella así la provoco con el roce de mis dedos y la puedo penetrar excitada. Como quieras dice...., mientras ayudaba a la chica compañera de colegio la recorría con mis dedos cuando quedo desnuda siseaba ya excitada, era mas ardiente que su madre... entrecerraba sus ojos y siseaba diciendo..., esto quiero...., te deseo, déjame sin mi himen... ¡ah...,oh...., quiero ser tuya!
Prontamente la monté y cabalgué espoleándole mi pene en su vagina, grito y gimió más que su madre..., cunado ya mi pene comenzó a penetrarla solicito clemencia, pero movía sus caderas angustiada, la mamá le toma sus caderas y diciéndole así, así se mueven y la movía en circulo, cuando su excitación llena de placeres sus hormonas... ¡ que mujer!
Se sacudía y se estremecía con pasión gritaba y sollozaba escandalosamente, se apareaba desesperadamente, su cuerpo se meneaba activado con lujuria y entregándose con pasión al coito que en esos instante estaba explotando en su cuerpo..., me asombra su entrega hasta casi desmontarme, pero me abrazaba del cuello y sus piernas cruzaban por mis nalgas apretujándome a ella, estaba ardiente y excitada al entregarme entre gemidos y suspiros sus orgasmos, ya que fueron dos seguidos, luego se queja quedando entre mis brazos semi desmayada.
Mientras mis labios la besaban, mi lengua jugaba con la suya, mis manos fueron de su cintura a sus hermosos glúteos, acariciándolos primero, apretándolos después...mis genitales dentro de ella bañaron sus entrañas y ella recibía por primera vez el semen de un macho en su matriz..., que tibio es, me dice besándome y relajándose satisfecha.
Soledad fue mía durante meses, cuando se caso me dice ahora quiero ser fiel a mi marido y nunca mas volvió a mí.
La mamá Sandra venía semanalmente a reemplazarla me decía, pero la diferencia era enorme
Hoy he decido seguir estudiando a mis 23 años y viajo todos los martes jueves y sábado a la universidad. Solo me queda tiempo para mi tía.