A mi madre le gusta que mi padre le lama la vagina , cuando ella está enfadada mi padre la toma la lleva a la cama le baja los calzones y le lame su vagina ella grita y se revuelca gozosa, luego le introduce el pene y a gozar de mi madre la cual se entrega totalmente.
Sin querer mi amigo me había dado el secreto para poseer a su mamá,
Relato
Doña Filomena una doña dama era la madre de mi compañero y amigo Federico, ambos congeniábamos a lo mejor por tener los mismos 17 años.
Un día en su casa vimos como su madre y su tía Julieta, que se entretenían ante la ausencia por mas de diez días de sus maridos en trabajo por el su, se probaban ropas del vestidor ambas mujeres estaban solo en calzones y sostenes cada vez que se sacaban las ropas probadas, Les contaré que la mama de mi amigo es de precioso cuerpo y lo mantiene en excitantes condiciones a sus 36 años era de admirar a pesar de estar casada desde los 19 años y tener tres hijos de 17 mi amigo, su hermano de 14 y la hermana una nena de 6 años, la tía no andaba mal de cuerpo casada a los 20 años y ahora con 33 años se veía divina a pesar de sus dos hijas de 12 y de 8 años, Federico al verlas desnudarse y vestirse tantas veces se excitó y comenzó a desear a su tía, imagínate me decía con ella empotrada en la cama balaríamos un delicioso baile de apareamiento gozando y gritando de placer mientras la lleno de semen en su matriz ¡Ah! me dice y te contaré que una vez la vi como mi vecino la montana en el estacionamiento y ella solo gemía y gemía recibiendo las arremetidas de este contra su cuerpo es caliente y se excita rápidamente si eres capas de meter tus manos en su entrepiernas… mi madre le gusta que mi padre le lama la vagina , cuando ella está enfadada mi padre la toma la lleva a la cama le baja los calzones y le lame su vagina ella grita y se revuelca gozosa, luego le introduce el pene y a gozar de mi madre la cual se entrega totalmente.
Sin querer mi amigo me había dado el secreto para poseer a su mamá, luego me cuenta otro secreto de su madre mi mamá en una fiesta de parejas aquí en la casa, la vi como la montaba el jefe de mi papá, le acarició este con la lengua su culo y mi madre a gozar entregada totalmente al coito, de esas fiesta creo que salio mi hermana, yo lo veía todo desde una ventana que hay en mi pieza y da hacia el comedor grande.
No aguanto más dice voy contra la tía ayúdame para que mamá no se oponga chúpale su vagina y tenla ocupada sin meterle el pene eso si, me dice… y sale en pos de la tía esta al verlo se sorprende y mas sorprendida es al sentir que Federico la abre de piernas y se comienza acariciar a estas y de pasada saca su calzón, Julieta estaba ya excitada tanto cambiarse de ropa y sentir que este mini macho sobaba su entrepiernas fue su condenación, trata al comienzo de oponerse y después lo único que sabe es sisear anhelante de lo que sucederá …, la mamá trata de ayudar a la tía, pero yo me interfiero y llevándola a un sofá le saco calzón y meto mi cabeza entre sus piernas lamiendo mi lengua dentro de su vagina buscándole su clítoris, se opone, pero al encontrar mi lengua su clítoris solo sabe atrapar mi cabeza contra sus piernas y suspirar de pasión y al mirarla veo que en sus ojos se lee su entrega al coito… gruñía excitada y su respiración era un resoplido vehemente ardoroso, estaba lista para aparearse y lo lamente por mi amigo y clavé en su vagina mi pene como trepidó la mujer y tomándome de mi cuello me abrazo ansiosa de ser emparejada con mi pene en su vagina, se agitaba de una manera deliciosa cada vez tirando con su vagina de mi pene, hasta ahí recuerdo después fui un toro furioso embistiendo a la madre de mi amigo y ella gemía y gemía pidiéndome más…, quiero más… hasta que le llene de semen su matriz y ella mojo mi pene con sus destilados proveniente de sus espasmos carnales.
Cuando relajado me recuesto al lado de ella Federico ya descansaba después de haber copulado con su tía y me reta diciéndome te dije sin meterle el pene…, yo le contesto ella me lo pidió…
Dos días después mi amigo solicita si puedo guardar sus pertenencias escolares que el fue invitado a jugar a la pelota y desea ir, pero no sabe donde guardar sus útiles, se los llevo y al pasar frente a su casa viene llegando su madre… le informo que este se fue de futbolista y volverá en dos horas mas, que bien me dice mi madre se lleva a la pequeña a su casa y los hijos hombres de parranda, tendré que almorzar sola…, si deseas te acompaño le digo, claro me dice y luego vas a reclamar tu postre y que postre, ¿verdad?... entramos y ella me dice me cambiare de ropas…, y va al dormitorio, la sigo… al comenzar a cambiarse de ropa le digo acariciándole sus piernas, por que no empezamos por el postre…, me mira y dice ansioso el macho… me mira y se recuesta en su cama solo en ropas interiores y sus medias verdes oscura,,, no me demoro en desnudarme y comienzo a lamer su vagina, luego sus senos y por último la penetro con mi pene elevado, rígido, ancho, carnoso y excitado… de su boca solo salen suspiros y resuellos, le elevo sus piernas sobre mis hombros y con ellos sobre mis hombros la penetro duramente, como se quejaba y gozaba esa mujer me abrazaba me rasguñaba mi espalda antes mis duras penetraciones y finalmente termina encogida, doblada recibiendo mis ríos de leche en sus entrañas mientras ella se contoneaba arrebatada y arqueada ante el placer de un apareamiento placentero y bien consumado.
Luego me dice te estas acostumbrando que sea tuya y yo tengo dueño y este volverá, me olvidare de ti y él será nuevamente mi macho, ¿Qué harás?, le contesto me tendré que conformar con la pedazos de esa entrega que me des, ¿lo harás? Bueno te daré debes en cuando una sabrosa entrega de mi parte, eres un buen macho y me satisface bien, pero yo te llamaré para consolarte.
A la semana siguiente dos días antes de que llegue el marido me cita y me recibe enfadada y asustada…, que pasa le digo…, y me contesta solo esto mostrándome unos exámenes del médico … decía embarazo de dos semanas o menos… la miro sorprendido y me dice si…, estoy embarazada de tus entusiastas y jubilosas copulas, llega mi marido ni una palabra a nadie de que espero un hijo tuyo se lo cargaré a él…, ¡ah! ni siquiera a tu mejor amigo…mi hijo. Ahora te acercaras a mi cuando yo te cite.