En casa de un primo lejano 2

Miraron y encontraron muy linda la pieza que había arreglado y me dijo que tendría que mejorarle su pieza de planchado. No conocía a la mujer de unos treinta años así que ahí se presentó soy Aurelia me dice, cuando fue Gustavo su marido, a mirar las luces de su entrada al garaje y las del garaje aproveché de decirle a la mujer que era muy linda y si deseaba una frazada para que no se fuera a resfriar sobre su cuerpo… la abrigo y aprovecho de tocarla se estremece al roce.

Eres un monstruo me dice, casi me descalabras mis caderas, besándome se aquieta en mis brazos, pero este semental desea más y vuelvo a embutirla y retirarle mi pene en su vagina hasta nuevamente sentir la llegada de su segundo orgasmo y con esta entrega desesperada de ella la acaricio y palpo todo su cuerpo relajándola. Descansamos a lo menos diez minutos abrazados sobre mi cama y acariciándonos al tiempo que nos besamos.

Vamos a tomar desayuno potrillo desbocado que te puedes desmayar de hambre y lujuria. Dice.

Realizo mis asuntos y vuelvo, no han vuelto su familia y ella esta en la cocina arreglando la mesa.

A mi entrada interrumpe su s labores y me dice ¿listo ya? Tan pronto, es que a mí me gustan las cosas bien hechas aunque sean rápidas le contesto… me mira y explícate dice.

La apreso entre mis brazos y la traslado a la pieza de sus planchados me agacho y metiéndome entre su falda y sus piernas abro estas bajando su calzón al tiempo que mi lengua lame su vulva se dobla excitada y sise de pasión.

Al rato ella apresa mi cabeza contra su vagina solicitándome hazme tuya antes que lleguen los niños o estaré sedienta y ansiosa de macho y necesito estar descargada

La acomodo contra la ropa por planchar. Cuando mi pene comienza a ensanchar su vulva esta me apresa contra ella colmándose con mi miembro en su vagina moviéndose en un perfecto ocho sus caderas logrando acoplarse a mis movimientos por mas de media hora, comienza a gritar entre suspiros se quejaba, no sabes como estoy disfrutando… por favor no me cortes… estoy muy deseosa. Sabes que me gustaría…oh…darme vuelta… Colócame en cuatro patitas… Mm.…Oh si, clávamela, como estoy gozando…….me tienes enferma de caliente…se siente tan rica tu cosa grande dentro de mi sexo... me llenas por completo… si… es mas maciza que la de mi marido…!.Oh…ah…! Dios mío lo que estoy haciendo… ah… más… clávamela… así…Oh… dame tu leche…Ah… pobre Gustavo, tu mujer se entrego a otro hombre… Mm.… es tu…. Oh… es tu culpa, Mm.… ah… Gustavo oh… como estoy gozando…ah… sigue, dame mas…, me llega, seré tuya…., me llega y en un prolongado gruñido entrega sus viscosos líquidos al pene que la espolea en su matriz, abrazándome y recibiendo en su matriz chorros de mi espesa leche que la hace contraerse de satisfacción, encanto y ahogo sexual.

Almorzamos apurados antes que llegue su familia y luego con el postre de helado en mis manos me retiro a mi refugio Cuando llega su familia estoy relajado en mi cama.

Somos el uno para el otro por más de dos meses donde casi a diario la penetro haciéndola gemir y satisfacerse a la vez me satisfago llenándole su matriz de mi leche, ella es feliz y trata de que su familia no se entere que tiene en mí su amante.

Pero como siempre esta mamá poco utilizada y saciada por su marido se olvidan de cuidarse, de no quedar preñadas, al cabo de estos tres meses Aurelia mi amante de 31 años tiene un feto fecundado por mi en su vientre, a mis 17 años sería papá y el dilema como lo hacemos para que el marido de ella no sospeche y se haga cargo del embarazo.
No se como lo hizo, pero su marido estaba feliz por que su mujer daría a luz un tercer hijo, según él suyo.

Con su feto en su barriga Aurelia fue una hembra insaciable a veces se escapaba a media noche cuando su marido dormía profundamente y sus hijos también llegando a mi pieza a buscar con desesperación sus espermas y entregarme sus orgasmos para saciarse con un apareamiento glorioso en donde se quejaba y gemía con pasión en sus entregas recibiendo mis salvajes y profundas estocadas en su vagina que le remecían el vientre con el feto dentro de ella y ya saciada volver al lado de su marido a dormir…