En el cine (Cap II)

Una vez que sin contestar me moví hacia la izquierda y avance hasta los últimos asientos, dejando el ultimo vació, ella se sentó a mi lado, comenzamos a platicar sobre tonterías mientras esperábamos a que empezara la película, de pronto ella se quito la chamarra alegando que tenia calor, yo la imite y le pedí la suya para colocarlas en el lugar vació que había dejado al sentarme.
Seguí contándole sobre mis planes para navidad y sobre el árbol navideño que puse unos días atrás, mientras me escuchaba la notaba distraída incluso un poco desesperada, ansiosa, seria la mejor palabra.
En ese punto ya llevábamos diez minutos dentro y tan solo una pareja entro aparte de nosotras pero se sentaron como 6 filas abajo y en el lado opuesto, yo los miraba distraída hasta que Tanya hablo y me sobresalto.
-¿A que hora piensan apagar las jodidas luces?
-Tranquilízate- le dije- no debe tardar mucho, ya es hora de la función, se paciente.
-Ya he tenido mucha paciencia- me dijo mientras llevaba sus manos a sus pechos y descaradamente los acomodaba como si estuviese sola- me gusta tu blusa- comento mientras yo no podía apartar mis ojos e sus pechos.
-A mi la tuya- conteste distraída
-¿Cambiamos?
-Claro, desnúdate ¿por que no?
-Jajajaja no es que haya mucha gente ¿o si?
-Pues no pero eso no significa nada, ademas...
Justo entonces las luces se apagaron, comenzaron los cortos de películas que estaban futuras a estrenarse, ella sin perder un minuto levanto el reposa-brazos y puso su cabeza sobre mi hombro, mientras seguía contándome quien sabe que tanto, después de unos quince minutos de película mi mente seguía volando hacia sus senos y aprovechando su postura que ella misma tomo me dejaba una hermosa vista de ellos así que pude verlos sin contenerme en absoluto.
De pronto y completamente desprevenida me tomo al darme un beso en el cuello, la mire aparentando que no me habia afectado pero como preguntando ¿que pasa contigo?, ella me dijo entonces:
-¿Sabes en que estaba pensando?
-No
-.¿Recuerdas ese día en que jugábamos a planear nuestro "encuentro"?
-Si, pero ¿por que lo recuerdas ahora? Estas de caliente ¿o que?
-Pues un poco...
-Wow, que directa...
-Se lo que quiero, eres tu. ¿Tu me quieres a mi?
-¿...pero aquí?
-¿Es eso un si?
-Eso es un "abre las piernas"
Comenzamos a reír, quizá por nervios, quizá porque esa frase realmente nos parecía graciosa, pudo sonar como una broma pero la verdad es que era mucho más sincera de lo que sonaba.
Entonces levante su rostro para mirarla fijamente a los ojos.
-¿Estas segura de esto?- le pregunte- eres tu la que tiene novio ¿recuerdas?
-Que se vaya a la mierda, ya nunca tengo ganas de el, adivina la razón- la mire y me lanzé sobre sus labios, pero constó de un minuto o menos para recapacitar y detenerme.
-Tanya... yo...
-¿Que Gaby?
-Te vas a arrepentir de esto
-Jamas; te quiero, me quieres, te deseo...
-Yo a ti
-¿Que te detiene entonces?
-Que somos amigas
-Podemos ser mas que eso, solo anímate.
Esas fueron las palabras que detonaron mi lujuria, amigas desde la secundaria, mejores amigas por siempre, la he visto en ropa interior, ella me ha regalado ropa interior a mi, antes esto no me pasaba, hasta que me aleje de ella y me di cuenta que la extrañaba mas de lo que nunca quise creer, estaba enamorada de mi mejor amiga y según la ultima vez que nos vimos ella también o por lo menos eso dice. Mientras me beso con ella y la toco hasta donde puedo, considerando que la ropa nos estorba, prefiero alejar esos pensamientos de mi mente y disfrutar de todo esto que siento en el cuerpo.
-¿Realmente creíste que llegaría a pasar?- me pregunta en el instante que beso su cuello.
-No con tanta gente... Pero si. Lo esperaba.- le susurro al oido
-Pues... Aquí esta la oportunidad.
-Y la tomó.
-¿Segura...?
Acercó sus labios a los míos y me dejo el espacio necesario para que yo tomara la decision y lo hice, uní mis labios con los suyos, después todo paso muy rápido... En un abrir y cerrar de ojos, estaba mamandome los senos y yo estaba mas que mojada.
Comencé a descontrolarme a tal punto que sentía convulsiones con el solo rocé de mi tanga en mi clítoris al moverme.
"Gabriela ¿que demonios haces? ¿Te orgasmeas en una sala de cine con tu mejor amiga?" me gritaba mi subconciente pero decidí callarlo sin decirle palabra alguna, prefería ocupar mi boca y mi lengua en algo mejor. Aleje a Tanya de mis senos, ella parecía un bebe bebiendo leche de los pechos de su madre.
-Muévete- le dije.
Me baje del asiento y me arrodille frente a ella, su cara de desconcierto cambio por la de niña traviesa, le toque el borde del short que llevaba, entonces ella comenzó a respirar con dificultad, pero antes de hacerle justo lo que ella anhelaba tenia un asunto pendiente, le subi la blusa y se la quite completamente, al fin y al cabo no creia que los dos unicos seres vivos en la sala fueran a vernos a tanta distancia, le desabroche el sosten y sus enormes tetas sintieron la gravedad, se movieron unos segundos de arriba abajo, entonces me lance sobre ellos, mamaba uno mientras con mi mano apretaba el otro y con mis dedos estimulada su pezon, alternaba sus senos, uno primero, luego el otro, por fin me sentia satisfecha, al menos de sus tetas, asi que baje entre pequeños besitos hasta su vientre y me detuve unos segundos a ver su rostro, la sentia al borde de un orgasmo al mas mínimo toque, el ansiado momento llegaba.
Tanya se acomodo perfectamente, entonces pude bajar hacia su sexo, aun cuando traía un short se notaba que sus flujos salían como locos de su vagina, al ver la mancha que estos producían en la tela me volví loca, casi arranco su short, mi desesperación me daba una velocidad increíble, cuando ella quedo con tan solo esa diminuta tanga note que estaba aun mas mojada que el short, la mire, aunque era difícil a la falta de luz, no perdí mas tiempo y sobre la tela puse mi lengua, ella gimió, moví la tanga dejando expuestos sus labios vaginales, mi boca los acaricio con un tierno beso y sentí como mis flujos escurrían por mi entrepierna.
La mire con lujuria, desesperada, deseosa de tenerla de que fuera mía, de hacerla gritar que mas daba que nos vetaran del cine, hay mucho otros en los que planeo hacerle lo mismo, tantas veces, de tantas maneras, con tanto placer...
Mi boca se lleno de su sexo, sentía el toque salado de sus flujos y ese delicioso sabor a lo prohibido, a lo anhelado, comencé a besarlo como si se tratara de su boca, bebí todos sus jugos hasta dejar limpia su vagina, me aleje pero ella acerco con brusquedad mi cara a su sexo y decidí continuar pero esta vez me dedique completamente a su clítoris, lo lamí, lo tomaba, lo apretaba con la lengua, con mis labios incluso con mis dientes, ella comenzó a mover su cadera de un lado a otro lo cual hacia mas intenso su sentir, o note porque empezaba a temblar.
No quería que se viniera sola, así que baje mi mano y la metí dentro de mis mayones y comencé a masturbarme, estaba escurriendo flujos, toque mi clítoris con desesperación, quería llegar con ella, me agite, ella se estremeció, gemí con su sexo en mi boca, sus jugos se desbordaban de mi boca escurriendo en mis labios, mi mano también empapada de mis propios jugos, ella grito, no muy alto, lo suficiente para que yo la escuchara -Ya- susurro- me vengo- dijo algo mas bajo. No conteste, estaba ocupada, comenzó a mover mi pelvis de adelante para atrás esto aumentaba el placer, tuve que dejar su clítoris fuera de mi boca para poder gemir y respirar ya que a cada segundo parecía mas difícil, seguí con mi mano libre estimulando su clítoris, basto con menos de 30 segundos para que se viniera, y de que manera, sus flujos salieron en un chorro directo contra mi, tibios y con ese aroma a sexo que tanto me encanta, al sentirlos en mi piel no pude mas que correrme también, no tan intensamente como ella, pero estaba por cambiar.
Me levante, me puse de pie frente a ella, que estaba agotada en la silla del cine, con su cuerpo tirante, y utilizando lo que le quedaba de fuerzas para llevar con su manos sus flujos a su boca, baje mi mayon y mi tanga, ambos empapados, me subí la blusa y quite mi sostén -Mírame- le dije, pero no hacia falta, tenia toda su atención.
Comencé a masturbarme otra vez frente a sus ojos lo que lo hacia mucho mas excitante, tocaba mi clítoris con una mano y con la otra me penetraba con tres dedos, luego cuatro con dificultad, levante una pierna y la apoye en su entrepierna que aun estaba expuesta, el tacto de mi pie con su sexo la hizo tener un espasmo de placer, mientras yo me seguía penetrando ahora con casi toda la mano metida dentro de mi, sentía el orgasmo acercarse, mientra deshacía mi clítoris de tanto tocarlo y me destrozaba la vagina con esa penetración, mi mano salia y entraba cada vez mas rápido, mis dedos se movían hábiles, sentí el cosquilleo y el calor arder en mi vientre, me venia y me vendría sobre ella, sobre mi mujer; así fue, mis jugos esta vez si salieron como los de ella pero en mayor cantidad, ella abrió la boca mientras la mojaba completamente, bebía mis flujos y eso hacia que salieran aun mas, grite lo mas bajo que pude, sentía que me desplomaba, lo único que me detuvo de hacerlo fue que ella recupero fuerzas y se levanto con una velocidad increíble y comenzó a mamarme como queriendo limpiar y secar de los flujos mi sexo, así lo hizo pero no sin antes mojarla completamente otra vez...
-Shh-
La pareja por primera vez nos pidió silencio, ante el pánico ambas nos tiramos sobre los asientos que teníamos, me acosté sobre ella, nuestras tetas se rozaban y nuestros pezones erectos y duros se besaban como nosotras, mientras recuperábamos energía, para vestirnos y aparentar que no había pasado nada.
Pero aquí no termina este encuentro pues ya que aun quedaba tiempo de la película, decidimos ir al baño a limpiarnos... pero no de la manera mas convencional posible, en cambio de la más excitante si...