en el elevador

elevador
El dia de ayer con ese vestido de color café bajito, al ir bajando para irnos de la oficina mientras nos besabamos en el elevador apasionadamente, en eso la luz se apago y el elevador se dejo de mover, la primera reaccion fue de espanto, pero nustras miradas traviesas se cruzaron con una sola intencion.
Nuestros cuerpos se juntaron y nos unimos en un beso apasionado y exitante, baje tu mochila al piso para poderte abrazar mejor y mis manos comenzaron a acariciar tu cintura mientras que tu comenzaste a acariciar mi cabello.
Nuestras lenguas se juntaron y comenzaron a danzar junstas, mis manos no tardarom mucho tiempo antes de que bajaran y te tomara por tu firme y gran trasero.
Pequeños gemidos salieron de tu boca y dijiste mi nombre pero no me detuviste, permitiste que siguiera. Mis manos fueron por debajo de tu falda y rompi tus medias para poder tucar tu piel directamente con mis manos.
Nuestro beso continuo y tu exitacion subia y en varias ocasiones me preguntaste que si no se abriria el elevador, pero en ese momento no me importo mucho, te quite esa gabardina que tenias puesta y despues baje los tirantes de tu vestido para poder apreciar tus hermosos senos y tus lindos pezones.
Voy directamente a tus senos y en cuanto siente mis labios y mi lengua en tus pezones tus gemidos salen si que lo puedas evitar y aun mas cuando sientes mi mano traviesa que se dirigue a tu entrepierna.
Separo un poco tu tanga rosa y mis dedos se intorducen poco a poco en tu intimidad, comenzando a realizar un movimiento de vaiven, introduciendo mi dedo medio dentro de ti poco a poco.
Tus gemidos comienzan a ser sonoros y me pides otro mas acompañado de mas presion, una de tus manos baja y toma mi miembro que aun esta dentro de mi ropa y lo comienzas a acariciar, yo bajo mi sierrre y lo libero ya que me encanta que me toques y me masturbes.
Comenzamos a masturbarnos mutuamente mientras nuestras bocas se unieron nuevamente, la situasion era exitante el saber que se podria abrir el elevador en cualquier momento nos excitaba aun mas.
Deje de masturbarte solo para separarme un poco y darte la vuelta, subi tu falda y baje tu tanga rosa la que yo te compre y la guarde en mi bolsa, despues sentiste la punta de mi pene que jugaba entre tus humedos y jugosos labios vaginales.
Al principio te asustaste un poco y preguntaste que hacia pero solo te bese y dejaste que continuara, puse mi falo entre tus piernas y comence a frotarlo contra tu humeda cavidad. Tu cuerpo comenzó a sudar y tus pesones estaban duros.
Estando en esta posicion y viendo tu trasero puse mi falo en tu entrada y te dije al oido:
-te deso mucho y no pienso detenerme-
Tu solo me miraste muy apenada y afirmaste con la cabeza.
-Solo se delicado conmigo, ¡KYAAAA¡-
Despues de tanto tiempo y tantas veces de estar juntos comece a introducir mi pene dentro de ti, cada centimetro que se introducia en tu cuerpo para mi era como mil explisones de placer, por fin te hacia mia, sentia tu cavidad y como tus jugos bañaban mi miembro.
Comence con un vaiven lento pero potente pero me pediste acelerar mis movimientos, tu te aferraste a mi ropa y otro Kyaa escapo de tu boca, sabiendo lo mucho que eso me gusta.
Yo lo sentia como un sueño hecho realidad, ahí en el elevador me quitabas mi virginidad y nuestros cuerpos se hacian uno. Sali de ti unos intastes para poderte dar la vuelta y mientras contemplaba tu trasero volverte a penetrar.
Así estubimos un tiempo hasta que te anuncie que me correria pero en vez de que me pidieras sacarla me pediste terminar dentro de ti lo cual con mucho gusto te complaci. Hasta ese momento no habia tenido tal exitacion y mi orgasmo fue unico.
Saque mi miembro con la intension de guardarlo pero antes de eso te incaste y comenzaste a lamer mi pene limpiandolo de todos los residuos que tenia en el. Despues con una picara mirada lo seguiste chupando hasta lograr que se volviera a poner como roca.
Pero no me permitiste actuar y estubiste ahí hasta que me volviste hacer que me corriera, terminando en tu boca, saboreaste mi semen y lo tragaste, despues de eso y de vestirnos el elevador se abrio y ambos salimos como si nada hubiese pasado.
Te acompañe al camion y despuesde eso me fui a mi casa y fue cuando descubri que tenia tu canga conmigo, para ser sinsero esa noche me volvi a masturbar con tu tanga mientras la olia, ese olor de tu sexo que me enloquece tanto.