Estudiante y mucama

Mariana. Es una estudiante, que tiene 19 años recién cumplidos. estudia en el instituto, de Arte donde yo me desempeño como docente, en un ocasión, por esas cosa de conversar y decirme que tenía necesidad de trabajar. Fue así que Los fines de semana, viene a limpiar unas horas mi apartamento, Tengo 47 años, al que ha mujer ha dejado hace poco tiempo; cansado de lo mujeriego empedernido que soy.
Tengo que reconocer que no me puedo habituar, a las tareas domésticas. Así que me cayo como anillo al dedo De esa manera, ella se saca unos pesos, y a mi me alivia, de lavar la ropa, el orden de todo etc.
Que en realidad gran parte de los días estoy fuera de casa, no es demasiado lo que hay limpiar.
En realidad no la jorobaba mucho, más que es una alumna, y no me meto con el alumnado, pero un sábado mientras ella estaba en tarea yo no pude dejar de mirar la figura, de Mariana, debajo la bata que trabajaba, según ella era más cómoda, me decía de este modo no se estropeara mi ropa de calle, Por primera vez vi que , no me estaba mal, si bien, no se destacaba mucho si se notaba un par de tetas, muy apetecibles las que se dejaban ver, no llevaba sostén cuando se agachaba para pasar el plumero y además un culo, que se marcaba, por el porte de la bata, pero ese sábado yo como dije, estaba en el salón, como siempre, leyendo el diario, mientras realizaba la faena al ver el espectáculo comenzó a rodar por mi cabeza buscar la posibilidad de pasarla por las armas.
Puse la televisión. Me senté en mi butaca favorita, de espaldas a la puerta, para que no me viera, y de frente a un espejo diminuto que coloque en la pared, medio escondido al costado la tele que estaba frente mí, así que se veía, para atrás, aumente el volumen al máximo, puse una película porno y el ruido que provocaban las voces y los gritos de las cogidas que se pegan en esas son ruidos que de seguro la haría venir a ver que pasaba, y por ahí podría abrir algún vericueto para mi loco fin , ( era una treta que había usado en otra ocasión con otra mujer y surtió efecto) se asomo por la puerta que estaba entreabierta, yo estaba con unos auriculares, que mitigaban el ruido, en ese momento las voces eran gemidos de una rubia explosiva que estaba siendo penetrada por todos lados por cuatro negros con unas vergas imponentes, sin descanso, pero mis ojos estaba centrados en el espejo, y no tanto en la tele donde la rubia mamaba los penes de los negros a la par que se la metían por todos los agujeros sin descanso, no te que se había retirado un poco, pero al rato, su curiosidad la hizo volver, y fue un momento muy sublime, ya me olvide de la película, solo mis ojos estaban centrados en el espejo, observando los movimientos de Mariana. La que no se percato que estaba espiándola,
Ella casi sin darse cuenta, Ya estaba con la bata desabrochada y tocándose como una posesa, y de a poco inició, una sutil manera de mover las manos en su monte Venus masturbándose a más no poder.
Ya en un instante, desapareció, fue allí que salte de mi butaca, la curiosidad me invadía, mi pedazo era una vara dura, como estaca, fui tras ella que alcance a ver que se metió en el baño. Pare la oreja detrás de la puerta , y pude escuchar claramente, sus gemidos, y sollozos, que emitía y eran cada vez mas profundos, se tocaba sin parar, me dio ganas de sacar mi pija a mi y también darme una buena pajeada, pero, me contuve, además ya estaba sabía que ella se calentaba, y que seguro con eso que estaba haciendo en el baño, la iba a calmar en parte, tenía que pensar para poner en marcha la segunda etapa
Cuando abrió la puerta, yo estaba solo con mis bóxer, a distancia, en la puerta de mi dormitorio, le pego el grito pidiéndole, llamándola, que me alcanzara, un short, que había planchado, tengo un buen porte, lo que lo hace bastante notorio, asi que no pudo evitar mirarme el bulto, Bajo el bóxer blancos, mi verga esta mas gorda, note su curiosidad, a lo que le dije, “¿te gusta lo que vez?”, “Ayy, que dice¡ Señor¡” le digo “que estas hirviendo y se nota que estas deseosa de tocarla” “ Ay, Que Quiere que haga “
Me senté a los pies de la cama. Le dije Veni, tócala y mostrame, como te pones los deditos como lo hacías recién cuando mirabas la película” ella se quedo dura, “Veni, sentate a mi lado”, lo hizo, me miraba a los ojos, yo tome su mano, y la apoye sobre, mi pedazo, y le dije “mostrame, ponete, los deditos”, era notorio que estaba aun muy caliente, por que al ratito estaba, pasándose, la mano, Se abrió de piernas y con una mano comenzó a tocarse la concha , aparte, su bata salieron a la luz sus dos senos, metí su mano, dentro mi bóxer, para que tuviera toda mi carne en sus mano, la empezó a pajear, yo aborde, sus pezones con mi boca, Con la otra mano, le corrí su mano y la introduje, hasta sus labios vaginales, mojados, depilados, puse un dedo en su clítoris, y fui directo, lo que la desarmo, se tiro para atrás, su espalda en la cama, mi pene estaba ya afuera, al ratito, sin dejar de masajear allí en ese punto comencé a bajarse tanguita, hasta que quedo en sus pies ella me facilito, sacar un pie, como una rayo me arrodille posando mi cabeza entre sus piernas, que abrí bien, y emprendí, una de mis mejores mamadas, de concha de mi vida, era fenomenal, la forma que se contraía, y los líquidos que emitía, mis dedos, pellizcaban unos pezones salientes, duritos, se puso a mil, no pudiendo reprimirse, las ganas de explotar, su tibio cuerpo de adolescente llena de deseo, de que le exploraran todo es volcán caliente, que yo estaba dispuesto apaciguar,.
Me pare mi pene estaba que reventaba, me coloque en posición, para comenzar, ella
Intentó apartarme, me dijo no, todavía no, para mi en ese punto no había marcha atrás, entonces, todo lo contrario, le hice abrir mucho las piernas para facilitarme la acción, en su último intento, de detenerme, dijo, “Soy Virgen , nunca lo hice” la verdad, que eso si me detuvo un poco, pero era tan grande mi calentura, y como ya estaba jugado, solo atine a decirle, “Seré suave, e iré despacio” no se si me parecía pero ella estaba mas deseosa que yo en que la penetrara, porqué abrió mucho las piernas, puse la cabeza de mi tremendo pene, que fue entrando lentamente, ella solo fruncía su rostro y sus ojos estaban totalmente cerrados, estaba Jadeando, gimiendo y temblando, . clara fue mi sensación, cuando rompí su himen, y estaba claro como se desgarraba su vagina, al paso de mi trozo para el fondo, ella solo, seguía Gimiendo y temblaba, juro que fui delicado, los primeros metisaca, fueron lentos, y suaves, sentí que se amoldo a mi pene, ejercí mayor rapidez allí la sentí que comenzaba a disfrutar hasta que afloro su primer orgasmo. Un orgasmo pleno. Gritó, se convulsionaba de placer. Era increíble, una y otra vez, jadeos, gritos, se estaba volviendo loca de gusto, abriendo, mas las piernas, no me detuve seguí ese ritmo, se enloqueció de placer, incluso las abría más. Creo que ya estaba entera entregada a la dulce sensación de lujuria Cuando dijo” “, por favor, No pares seguí” a lo que apareció su segundo orgasmo, nos besábamos. abrió la boca, recogí su lengua, me la apretaba, aquello en cambio de ser inexperiencia, entendía que era maravilloso, lo que me gustaba era convertirme en ese animal hambriento, que la sobaba, y ella me mordía y me comía la boca, me hizo retroceder mentalmente a mi época de adolescente, la saque de adentro, mi pene estaba ensangrentado, lo limpie con la sabana, la corrí hasta el filo de la cama me puse de pie ante ella para así le puse mi pene en la boca lo chupo, bien pero duro poco porque no aguante, su cara se le llenó de mi semen espeso, pese a todo lo nuevo en ella , se paro así se paro frente al espejo, y se miraba por un rato, se dio vuelta me dice, “¡fue muy hermoso!, ¿lo vamos a repetir no es cierto?”-