Somos un grupo de amigas bastante talluditas y tenemos reuniones alegres en una ciudad que no es la nuestra y hacemos confesiones íntimas en pijama y bebemos solamente champán.
Relato
Somos cinco , alquilamos una casa rural para seis con baño en cada habitación y un buen salón y chimenea .
La cena corre por cuenta de una cocinitas con mucho gusto .
Tres estamos casadas y dos ya viudas pero de muy buen ver .
Nos conocemos desde el colegio cuatro y la quinta de la piscina y el gimnasio .
Somos deportistas y hacemos gimnasio y zumba .
Solo mujeres , viva el mujerío.
Somos bastante liberales y frecuentamos locales de nivel y como estamos de buen ver , los hombres nos dan repasos visuales .
Las conversaciones muy a menudo derivan a temas bien familiares o bien sexuales .Preferimos los sexuales y así no entramos en la vida privada y sí en la de fantasía y sexo.
Yo soy viuda desde hace cinco años , tuve una vida sexual creo que plena pero hoy lo haría de otra forma .
Más abierta y con más gente y de todo tipo . Incluídas mujeres .
Bueno de hecho hay una amiga que me sofoca y me cita de vez en cuando .
Hablamos de lo nuestro y hablamos de moda , de su marido y nos lanzamos miradas muy atrevidas y coqueteos
escabrosos . Nos damos piquitos y un poco de lengua.
Está estupenda y yo le gusto .
Las amigas lo notan y procuran ponernos juntas y nos provocan . A ellas les va la marcha también , además alguna tiene problemas con el marido y noto que le gusta sobarme un poco.
Así que hasta las tantas estamos dos noches completas . Sexo de palabra y exhibición de lencería y busto generoso .
La parte genital es aparte . Con mi amiga más íntima nos hemos enseñado nuestro sexo y hemos concluído
que debemos hacerlo para probar de una vez .
Esta vez procuró dormir conmigo y teníamos cama de matrimonio .
Así que maginad lo que ocurrió.