FUI, SU ANTIGUO ALUMNO

FUI, SU ANTIGUO ALUMNO


Siendo un joven de apenas 14 años y estando en el último año, de l ciclo medio escolar, fantaseaba con la Señorita Mabel, una hermosa mujer de apenas 20años, maestra debutante, fue motivo de la mayoría de mis pajas, por esos tiempos.
La que como soñaba a cada instantes con poseerla, me le pegaba, y con cualquier excusa trataba de llamar su atención, con actos entupidos, o muchas veces, con actos de rebeldía, que la hacían crispar la que llego a decir “va a ser difícil olvidarme de vos me pregunto porque sos tan rebelde” mi silencio era la respuesta no podía confesar mi amor, secreto por ella.
Desapareció de mi vida al dejar de verla, por haber terminado el ciclo, pero nunca la olvide es que era tan hermosa que no era fácil dejar de pensar por un largo tiempo,
Con el paso del tiempo y mi crecimiento, algunas relaciones, deje de lado de mi mente.
Paso toda la etapa de mi secundario y llego a mis 19 años la etapa de la Universidad,
Lo hago en la Carrera de Psicología, un mundo nuevo pero atrayente: Todo andaba sobre ruedas, me comienzo a anotar en las primeras 4 comisiones de cursadas, en una de las materias que se cursaba, aparece ante mi vista una mujer, que para mi sin dudas se trataba de Mabel, mi señorita de la primaria, la que con un poco mas de años conservaba, la figura celestial que me deslumbro cuando niño, era evidente que si era ella de mi no se iba a acordar a simple vista, pero antes de todo podía tratarse de un socias, y me habría equivocado. Me la pase la mayoría de la hora contemplándola, y retrotrayendo mi mente a los tiempos que narre, con lo que casi no tome apuntes, ni escuche a la profesora,
Terminada la hora en el descanso, entre hora y hora estuve como en dos oportunidades en arrimarme,. Y sacarme las dudas, pero no lo hice. Recién al final de la clase, saliendo, me apresure y casi tropezándola, le digo Perdón que te moleste “¿tu nombre es Mabel?” dice “Si, si te conozco” (mi rostro se ilumino, me sonreí, y por dentro por un momento volví a vivir en un segundo, aquellos momentos) ella insistió “te conozco, pero de donde”, con una sonrisa, Yo no sabía como arrancar, mientras caminamos, le digo “no se como arrancar pero a ver, vos eras maestra en el Colegio, San Martín” “ SI hasta el ante año, que me mude aquí a Capital,” Bueno de allí nos conocemos, se rompía la cabeza, hasta que si anestesia le digo, soy Luis, aquel, no me dejo terminar me dice Luis vos aquel terrible alumno, y agregó que vieja que estoy sos un hombre, yo le digo vieja sigue, siendo tan hermosa como en aquellos tiempos, le juro que mi pene se erizo mientras se lo decía, ella me dice hay gracias sos muy gentil, tras ello le pregunto si tenia tiempo para un café, al decir que si, no fuimos aun Barcito cercano, mientras caminábamos ya la quería abrazar, besar en fin todo.
En el Bar, yo embobado, la miraba, libidinosamente, escuchaba y festejaba nervioso, cada cosa que ella relataba de los fastidios, que el ocasionaba, nos reímos, entramos en el presente, le conté de mi vida, donde trabajaba, recalque que estaba soltero, (me falto decirle con muchas ganas de llevarte a la cama y hacer vibrar toda) el de su vida, que se había casado, y que hacia seis meses se había separado, que para distraerse, se anoto en esta carrera, y darle un vuelco a su vida, (esto último, me parecía, un cuento de novela , me habría una posibilidad de comer lo que tanto anhele) casi atolondrado, le pido su celular, donde vivía, que ella me miro como con estupor , pero igual respondió a cada uno de mis pedidos, que entre ellos fue e invitarla a cenar par mi sorpresa ella me dijo, “no te invito yo, soy una excelente cocinera así que si no tenes programa, hoy a eso de las 21 te espero, en casa “ al despedirme, casi me olvido de saber donde vivía, que cuando me di cuenta volví en mis pasos, para preguntarle que con una sonrisa me la dio, todo me parecía mentira después hubo una confesión, de parte de ella, que a medida que avance, en el elato se develara.
Puntualmente, con un ramo e rosas estaba en el lugar golpeando, su puerta, abrió y estaba con un delantal de cocina,
Nos dimos dos besos, al entregarle ese hermoso ramo de rosas roja, ella se ilumino, su mirada me penetro, casi, como un rayo, yo
Sorprendido, por la evolución de la cosa, estaba alzado, mi verga era un volcán, y con su actitud totalmente osada la hacía que me calentara más.
Hablamos durante un rato y ella me invitó a tomar un aperitivo, antes de la cena, la seguía con mi vista, me la quería comer ella, estaba muy sensual, acercó, el aperitivo, con un poquito de queso, y unas papitas, la noche iba de maravillas, impensada, que pasaba solo, en las películas, algo así.
Los dos estábamos solos, pero nunca imagine, la encontraría y que podría acabar en su cama, cosa que había soñado por largo tiempo, como dije.
Comimos pronto, su exquisita comida, todo acompañado con un buen vino. Se retiro y vino se había sacado el delantal, y madre estaba vestida provocativamente, creo que preparada para el asecho, yo de ten ese clima no atinaba a nada parecía estira, así que ella cuando pasó a mi lado me miró a los ojos y fue como el detonante, me tomó de la nuca y me atrajo, hacia su boca y besándome, a fondo en un torbellino, al que me deje llevar me comió los labios, primero con dulzura pero después con autentica pasión y lujuria. A la vez me conducía al sofá, se arrodillo ante mí, con la mano me soltó el cinturón, seguido bajo el cierre del pantalón, los deje caer al suelo toda una loba con los dientes bajo mi bóxer para dejar mi pija dura erecta ante sus ojos y mas que ello, a su boquita me puso con las piernas bien abiertas y empezó a lamerme la ingle luego mis testículos, armo un ritual, Despacito fue subiendo hasta llegar a mi verga donde absorbió mi pene con sus labios, lamió y chupo era implacable, tanto me gustaba, que me entro un cosquilleo, paso luego a ese sitio que queda entre los huevos y el culo, el punto G, lo lamió, lo chupó y con la punta de la lengua, me enloqueció, arremetí contra ella, la que desvestí salvajemente, ella me facilitaba la cuestión como desesperada por que la penetrara, repetí su juego con mi boca fui a su sexo, al que le aplique, una lamidas terribles que la sentí, como se contraía, y espalmaba, en su acabada, sus jugos salados, quedaron dentro de mi garganta, los labios picaban de sus jugos, pero pese a ello, seguí suministrándole, excitación y placer, así que baje un poco hasta encontrar su culo, donde jugueteé un rato introduciéndole solo un poquito, la lengua lo justo para dejarlo húmedo, y producirle, la reacción de cerrar su esfínter, se contraía a medida que mas se lo abría Con mi lengua, ella se salió creo por que si seguía en lo mió se meaba, se soltó, vino a la carga, redoblo su acción, subió de nuevo para besarme los huevos mientras iba abriendo la boca para terminar haciendo una pequeña succión con lo que consiguió que mis huevos entrasen en su boca, jugó con ellos muy suavemente e hizo el amago de tragar para que notase el fondo de la garganta, Yo de mientras con mi dedo índice situado en su culo fui haciendo círculos y dándole pequeños pellizquitos Ella Sacó los huevos de la boca y fue directo lamiéndole la verga hasta llegar a la punta, tiro el cuerito para atrás, mi cabecita lista fue su blanco, me la chupaba como una paleta, se esmeró bien en succionar mi pija, yo seguí mi juego Con el dedo índice empecé a hacer presión sobre su culo para penetrarlo un poquito, solo la punta del dedo para ir haciendo cada vez mas presión y conseguir que entrase hasta la mitad , una vez el dedo estaba dentro, sin sacarlo hice círculos dentro de ese culito, presionándole bien por dentro siguió chupándome la pija, era tan degenerada que escondiendo bien los dientes y sacando la lengua todo lo que podía, para que mi verga entrase hasta el fondo de su garganta sin problemas, sin roces, con movimientos acompasados y cada vez mas rápidos, mientras mi dedo también empezaba a entrar y salir de su culo al mismo compás.
Cuando note que se iba a venir, saque el dedo del culo y me levante indicándole que se acostara, abriera sus piernas, y el sublime momento comenzó a transcurrir, mientras iba entrando mi pene, en su vagina, mojada, con mi boca chupe sus pechos pequeños, lamí en dos pequeños pezones, esto al hizo enloquecer, me pegaba de conchazos, que me tiraba para arriba, se vino, y ella me dice “seguí, hasta terminar, no pares no tengas miedo tome mi pastilla”, lo que me llevo a darle, como un perrito, llenar de mi leche que salía a borbollones.
Nos pasamos toda la noche cogiendo, acabamos cayendo rendidos en la cama a las ocho de la mañana, del domingo después de toda esa noche de sexo y lujuria. Al medio día despertamos y cunado nos fuimos a la ducha, volvieron en mi esas ganas de seguir dándole, no dejamos de hacerlo por un rato largo bajo el agua que caía, que se mezclaban con los alaridos, de placer, y en confesión luego de venirnos, intensamente, dijo, “al verte que me devorabas, y querías desvestirme, allí en el bar pensé un poco y me dije porque no y la verdad no me arrepiento”, ella había decidido que fuera su amante a partir de ese día fuimos amantes, nos recibimos y ejercemos la profesión y hoy somos algo más que amantes, vivimos en pareja y seguimos siendo muy degenerados en la cama, y tenemos la misma pasión que el día que la encontré y me adopto,-.-