Sábado por la noche, terminamos de cenar, Clara nuestra hija de 16 años que ostenta un cuerpo voluptuoso de 1,68 metros de estatura, se levanta de la mesa para ir a su alcoba, pero me llama la atención un disimulado gesto que le hace a su hermano Lino que tiene 19 años y es un muchacho atlético de unos 1,80 metros de estatura, muy parecido al de su padre, Lino a los 15 minutos se levanta también de la mesa para irse a su alcoba.
Relato
Sábado por la noche, terminamos de cenar, Clara nuestra hija de 16 años que ostenta un cuerpo voluptuoso de 1,68 metros de estatura, se levanta de la mesa para ir a su alcoba, pero me llama la atención un disimulado gesto que le hace a su hermano Lino que tiene 19 años y es un muchacho atlético de unos 1,80 metros de estatura, muy parecido al de su padre, Lino a los 15 minutos se levanta también de la mesa para irse a su alcoba.
Mi marido, de 41 años se quedó en el comedor mirando boxeo por la TV.
Yo (tengo 39 años) me dediqué a lavar la vajilla como de costumbre, pero me intrigaba el gesto que había hecho Clara y con eso me decidí recorrer las habitaciones. Pasé primero por la de Lino y observé que estaba en silencio y la luz de su velador encendida, desconté que Lino estaría leyendo, luego pase por la habitación de clara, la puerta estaba cerrada pero por debajo de la puerta es escurría la luz del TV. Y se escuchaba el sonido de voces en ingles de una película y de repente unos sonidos y gemidos raros, me picó la curiosidad y espié por la cerradura, Clara estaba mirando una película porno, yo pensé primero en reprimirla pero me contuve y lo dejé pasar para hacerlo después, con tiempo y tranquilidad.
Yo seguí con la cocina, mientras mi mente corría a mil, imaginaba a mi hija masturbándose, de ahí el desarrollo de su voluptuoso y exuberante cuerpo pues tiene un par de tetas formidables y un culo haciendo juego.
Terminé mis quehaceres y volví a espiar a los muchachos, fui a la alcoba de Lino y ésta seguía igual abrí lentamente la puerta y comprobé que él no estaba, inmediatamente pensé que los dos estaban viendo las películas porno. Pensé en entrar a la alcoba de Clara con todo, pero me contuve y me quedé junto a la puerta escuchando la TV, la habían apagado y se escuchaba las voces de los hermanos, platicando muy bajito.
En eso escucho a Clara bien clarito decir:
-“Guacho que pija enorme que tienes” “¡La tienes más grande que papá!”
-¿Qué? ¿Estás cogiendo con papá? preguntó Lino asombrado.
-¿Y por qué crees, que me da todos los gustos?
-¿Y desde cuando lo haces?
-Desde que le pedí la fiesta de los 15, ¿Cómo crees que lo convencí? Ahí fue mi primera vez, yo me ofrecí a él y él me desvirgó, pero en verdad siempre me trató muy bien y me enseñó a sentir el placer del sexo, pero ahora me está alejando de él, pues anda detrás de otra mina y quiere que me busque novio y que lo deje tranquilo, pero ahora te tengo a vos, con esa enorme y hermosa pija que tú tienes, además si mantenemos nuestra relación sin traicionarnos, no tenemos que temer a las enfermedades de origen sexual, además podes eyacular tranquilo dentro de mí, que yo sigo tomando anticonceptivos para evitar los embarazos.
Yo escuchaba todo eso, atónita quería salir corriendo y gritando a los cuatro vientos:
“El quilombo que era mi hogar”, lo único que atiné fue a llorar e irme de allí, pues pensé que todo estaba podrido, si se empezaba a destapar la olla, la casa ardería, opté por callar y planear como seguir, para colmo me enteré de todas las trampas.
Mi hija “una puta profesional”, con un cuerpo de puta traga pijas insansiable, cogiendo con su propio padre y ahora, también con su hermano.
Mi marido, “Un depravado”, desvirgó a la propia hija y se la siguió cogiendo hasta ahora, y ahora, anda detrás de otra puta.
Mi hijo se coge a la hermana, pero él, es el que menos culpa tiene, ahora convertido en el macho de su hermana, por decisión propia de ella.
Yo empecé a recordar las excusas de mi marido para salir solo con su hija toda una tarde, seguro se iban a coger cómodos, sin sobresaltos en algún lugar ya preparado, ella volvía contenta con un regalito (y la concha irritada, seguro).
Yo comencé a pensar en todas las veces que quise que mi marido me atendiera y éste me ponía excusas para zafar.
-“¡Ummmm, me tengo que vengar!” me dije.
Un sábado daban un recital de una famosa banda, en un famoso estadio de fútbol pero además lo daban por TV en directo.
Yo comenté a mi marido ¡Oye Pablo! porque no llevas a Clara al recital ya que a ti te gusta ese conjunto y a ella también.
-Pero si lo dan por TV cable, me contestó.
-Es que en el estadio se aprecia mejor y además dan una película por TV que Lino y yo deseamos verla y coinciden los horarios.
Pablo mi marido y Clara nuestra hija aceptaron la propuesta y salieron temprano para ver si conseguían entradas.
Lino y yo nos quedamos solos, cenamos y antes de que se levantara de la mesa lo abracé desde atrás y le dije al oído:
-¡Me acompañas a ver una película por TV, en mi cama! Él me contestó:
¡Sí mami! pues solía hacerlo muchas veces.
Espérame en mi cama mientras me ducho le dije, y así lo hizo. Mientras me duchaba recordé que mientras Lino se quedaba conmigo en la cama viendo TV, mi marido se iba a la alcoba de Clara a hacer lo mismo con ella, ahora no me cabe duda, que seguro hubo toqueteos, como mínimo.
Terminé de ducharme, me sequé y me coloqué solo el camisón, sin nada debajo.
Tenía una obsesión, cuando Clara alabó la enorme y hermosa pija del hermano, me pico la curiosidad de “porque no” verla y “porque no”, tocarla y “porque no” usarla y “porque no” esta misma noche.
Pensaba: ¡Que se vaya todo al carajo! Si todos hacen lo que se les canta “porque yo no”.
Entre a mi alcoba y allí estaba Lino mirando el noticiero por TV yo me acomodé a su lado.
-“¡Oye que bien perfumadita estás!” Comento alegremente Lino, al minuto volví a levantarme y me dirigí a la cómoda pasando lentamente por delante de la televisión para que el muchacho notara mi desnudez contra la luz de ésta, de la cómoda, tomé unas toallas pequeñas que suelo usar para cuando con mi marido, tengo relaciones, volví a pasar frente al aparato tratando de mostrarle a Lino mi cuerpo y me acosté junto a él, le pasé el brazo derecho por debajo de su cuello y lo atraje hacia mi le di un beso filial.
Estuvimos unos minutos quietos, el estaba acostado a mi derecha, yo estaba deseando que me acariciara o aunque sea, que me tocara pero no daba ninguna señal de interés por mí, ahí me puse firme, quería tener su pija en mis manos y si fuera dentro de mi concha mejor.
Lentamente fui arrimando mi pierna a la de él y la pasé sobre su pierna izquierda, bajo mi muslo sentí su bulto bastante firme, yo me detuve allí y esperé su reacción. Lino siguió imperturbable y yo cada vez más desesperada, me acordé, que en el canal I-SAT daban una película Erótica, tomé el control remoto poniéndolo en dicho canal.
En la escena del film mostraban bellas mujeres simulando tener sexo con hombres y entre ellas todos totalmente desnudos. Lino comentó:
-¡Estas películas no calientan a nadie!, Clara tiene unas películas condicionadas en su alcoba que muestran todo el sexo explicito y con lujo de detalles.
-¿Querrías dejármelas ver? Le pregunté ansiosa, nunca vi ninguna, (le mentí).
-¿Quieres verlas aquí o vamos a su alcoba? Preguntó Lino.
-¡Mejor tráelas aquí! le pedí y así lo hizo, colocó la película en la casetera y se acostó nuevamente junto a mí. Comenzó a rodar el film con escenas súper calientes, mostrando conchas primorosamente depiladas y pijas de unos tamaños alucinantes, de eso estábamos comentando cuando sin poder contenerme más, metí la mano dentro de su calzoncillo y tomé su pija acariciándosela con maternal firmeza.
-“¿Tú, no te quedas atrás?” le comenté, pues también tienes lo tuyo y sacándola de su escondite pude apreciar su pija en todo su poder.
-“¡Hijo! ¿Qué cosa más grande y hermosa tienes?” ¿Cómo has podido desarrollarla tanto?
-¡Debe haber sido a fuerza de pajas! Me contestó riendo.
-Tu padre no llega ni a tener la mitad del tamaño de ésta, le comenté.
-¡Oye mamá! ¿Qué es lo que te sucede?
-¿Por qué hijo? Le contesté
-¡Es que estas actuando de manera muy extraña! ¿Qué es lo que deseas?
-¡Mira hijo! Le comenté:
-Te voy a ser sincera. La otra noche los escuché a tu hermana y a ti teniendo sexo en la alcoba de ella. -No solo eso, Clara te confió que papá tenía sexo con ella desde sus 15 años y que tu padre la estaba abandonando por otra mujer. -¡Además sé bien! Que fue Clara la que te buscó para coger, en un momento la oí comentar que tú tenías la pija más grande que papá, ¡Ahora escúchame bien! - Yo estuve llorando amargada durante varios días, al fin decidí tomar venganza, así como papá se coge a Clara yo me propuse coger contigo, y quitándome el camisón le mostré mi cuerpo totalmente desnudo.
Hoy le propuse a tu padre a que lleve a Clara al recital, yo te pido un gran favor, cuando estés con Clara averigua donde estuvo durante el recital, pues lo están pasando por TV y es muy posible que lo estén viendo desde un hotel mientras, ellos están cogiendo cómodamente.
-¡Mami! voy a confiarte un secreto: Debo confesarte que muchas veces me masturbé pensando en ti, también busque verte totalmente desnuda sin lograrlo, muchas veces me puse celoso cuando algún hombre te miraba con morbo y hasta me masturbé deseando penetrarte por la vagina totalmente, dándote un enorme placer.
Mientras platicábamos, el film seguía rodando en una escena en que la mujer se tragaba profundamente la enorme pija del actor, un negro no muy robusto, pero con una pija colosal.
Yo miré con simpatía la pija de Lino y sin pensarlo dos veces la llevé a mi boca jugando un rato con ella, en eso quise imitar a la actriz porno y trate de tragarla más allá de la garganta pero las arcadas no me lo permitieron, pero no me di por vencida, me prometí lograrlo.
Lino estaba acostado boca arriba con su mástil vertical muy endurecido y su glande lubricado con mi baba muy resbaladiza salida de mi garganta, yo no desperdicié la ocasión, me incorporé colocando un pie a cada lado de las caderas de Lino, fui bajando el cuerpo, aferré la pija de mi hijo y la fui colocando entre mis carnosos labios vaginales, éstos se abrieron dejando el paso libre hacia mi excitadísima vagina, mi vulva humedecida con mis flujos, lubricaban la colosal pija, me deje caer lentamente, sentándome a horcajadas, sobre su enorme pija que se deslizaba victoriosa hacia mis entrañas, jamás experimenté tanto dolor y tanto placer, pues su grosor me desgarraba pero el placer que me causaba hizo que mientras me iba penetrando, yo llegara a alcanzar un orgasmo brutal, una vez que el glande se introdujo por el cuello del útero quedó abotonado a él y chocó contra el fondo de mí matriz, me quedaron unos centímetros de pija sin entrar, me quede quieta unos momentos para retomar fuerzas y comencé a galopar sobre Lino deseando lograr otro orgasmo, su pija volvió a tomar tal rigidez que me la hacía sentir cada centímetro de su enorme envergadura.
Cabalgué enloquecida sin importarme nada, hasta que un calor intenso que me recorrió todo el cuerpo y sentí un estallido brutal dentro de mí, seguido de una paz y un silencio profundo.
Cuando lentamente comencé a ver a mi hijo asustado y con lágrimas en los ojos junto a mí, las sabanas y unas toallas mojadas, se encontraban a mí alrededor, estaba reaccionando de un desmayo, el placer fue tan grande que me desmayé.
Este brutal polvo que me eche con Lino mi hijo, no se me olvidará jamás y pude comprobar que mi hijo tiene una pija brutal, que la guacha puta de mi hija seguro la va a seguir gozando, más y mejor que yo.
Al sábado siguiente nuevamente Clara y su papá salieron de compras y al centro, quedarnos solos, Lino y yo, comenzamos a platicar y lo primero que me dijo Lino fue:
-Sabes mamá, tenías razón, Clara me contó que fue con papá a un hotel y allí vio por TV el recital mientras cogían cómodamente, tal cual tú sospechabas.
Además Clara logró que no siguiera con la otra mujer, pues ella lo amenazó con que lo iba a perseguir y acosar sin tregua, Creo que a Clara le conviene seguir sacando partido extorsionando a papá.
Pese a que yo no aprobaba la relación entre nuestra hija y mi marido, su padre, evité descubrirlos y dejar que sigan con el juego, mientras yo me tomo venganza, cogiendo deliciosamente con nuestro hijo Lino.
Mi próxima meta es, en una felación, tragar profundamente, toda la pija entera de mi hijo, y que algún día me la meta por el culo, como lo hacen las actrices porno.