La Boda

Mi nombre es Daniela, soy mexicana, de piel clara, ojos cafés, delgada,
cabello castaño y ondulado, de un cuerpo bonito, aunque no tengo senos grandes lo compensa todo mis pompis, mi edad no la diré.

Habían pasado 6 meses aproximadamente desde mi primera vez, como dije antes no volví a ver al hombre con quien perdí mi virginidad, pero seguimos teniendo contacto por algún tiempo después. Gracias a sus consejos me hice de dos amantes que me complacían cuando yo deseaba, uno de ellos era mi profesor de educación física y otro el papá de uno de mis compañeros. Pero ahora no hablare de ellos, sino de una de las experiencias que marco por completo mi vida.
Empezaba el periodo vacacional y eso me entristeció mucho, ya que por un tiempo no vería ni a mi profesor ni al papá de mi compañero, saciaba mis deseos masturbándome todas las noches por webcam mientras del otro lado me veía el hombre quien robo mi virginidad, era el único medio de placer que tenia en esos días y anhelaba que pronto volviera a clases para ver a alguno de mis dos amantes. A las dos semanas de iniciadas mis vacaciones fui invitada a una boda junto con mis papás, por lo cual decidí que quería un vestido nuevo para esa fiesta. Mi forma de vestir había cambiado un poco, empezaba a usar ropa más justa o faldas cortas, a mi mamá le desagradaba que me vistiera asi, pero a mi papá parecía gustarle mucho. Aunque hubiese pasado poco tiempo desde mi primera vez, sentía que mi cuerpo ya no era el de antes, veía un poquito más grandes mis nalgas y mis piernas se comenzaban a ver más estéticas, lo que me molestaba era que mis senos no crecían, seguían igual de pequeños. Pero bueno, continuando con la historia, mi papá me llevo a un centro comercial a comprar un vestido, pasamos por varias tiendas y ninguno me convencía, hasta que vi un vestido rojo precioso, era corto y ajustado, cuando me lo probé no solo mi papá se quedo con la boca abierta, también uno de los chicos que atendía y uno que otro cliente que acompañaba a sus novias o esposas, mi papá me dijo que me quedaba perfecto, pero que mi bóxer cachetero se me marcaba mucho, me dijo que si quería también podíamos buscar ropa interior que fuese más propia y asi podía llevarme el vestido y obviamente acepte, fuimos a una tienda de lencería y empezamos a buscar tangas, el me ayudo eligiendo unas, me pregunto si quería otras el me las regalaba, me compro unas muy bonitas y sexys con encaje, además de una muy pequeña para el vestido, me dijo que asi como le había modelado el vestido después le modelaría las tangas y yo riendo le dije que si, pensando en que era solo una broma. Pasamos por una tienda de zapatos, me compro unos tacones negros de correa y nos dirigimos a mi hogar.
Cuando llegamos a mi casa y mi mamá vio el vestido casi le da un infarto, me regaño a mi y regaño a mi papá por haber comprado algo tan provocativo, pero le dijimos que era una oferta, que ya no había devoluciones, y después de mucho insistirle me dejo usarlo en la boda, pero por lógica no le enseñe las tangas. El día de la boda, antes de irnos a la fiesta mi papá me dijo al oído,
-No se te olvide que después me modelas lo que te compre- y me dijo un beso en la mejilla.
Yo solo asentí con la cabeza un poco nerviosa y nos fuimos, no sabia si lo decía enserio o era solo una broma, pero decidí no darle mucha importancia. La verdad es que me veía mucho muy bonita, el vestido corto hacia un juego perfecto con mi piel blanca y mis zapatos negros, mi maquillaje era sutil pero hacia ver un poco más grande y mi cabello decidí dejármelo suelto ya que sentía que me veía más sexy.
Llegamos directo a la fiesta y me sorprendí al ver el lugar, era un rancho enorme, con un jardín lleno de arbustos y arboles, en el fondo se veía un bosquecito muy bonito, y todo el salón donde sería la cena estaba adornado en forma muy lujosa.
No puedo decir que era la única chica guapa ahí, pero sin duda era de quien atraían más miradas de los hombres. En algunas ocasiones movía mi vestido para que pudieran ver mejor mis piernas, me causaba placer ver la mirada lujuriosa de personas que ni conocía, pensé entonces, ¿Porqué limitarme a los dos amantes que ya tenia? Si soy una chica guapa podría tener a quien yo quisiera, además que tan difícil podía ser convencer a un hombre de tener sexo conmigo.
La cena transcurrió con tranquilidad, vinieron los bailes clásicos del novio y la novia, víbora de la mar, etc. Terminados estos empezaron a poner música para que todos bailaran, algunos chicos (y otros no tan chicos) se acercaron a sacarme a bailar, pero mi mamá no me dejo, por mi cara de molesta mi papá salió a bailar conmigo, al principio fue divertido, pero creo que le dieron celos a mi mamá, por que me dijo que saliera al jardín un rato mientras ella bailaba con mi papá, lo cual acepte con tal de que no se enojara más.
Creo que ninguno de los chicos que me invito a bailar vio que salí, por que sino hubieran ido a buscarme, lo cual si me entristeció mucho. Caminaba por el jardín y veía a lo lejos a algunos niños corriendo, mientras caminaba llamo mi atención una figura masculina que parecía no querer estar cerca de la fiesta, se fumaba un cigarro mientras estaba sentado junto a un arbusto.
Me acerque a el y decidí hablarle, cuando lo vi bien me sorprendí mucho, ya que se trataba del novio de la boda.
-Hola, ¿No deberías estar disfrutando tu fiesta?-
-Ja, ¿Disfrutando?, Este es el inicio de una vida atada a alguien a quien ni siquiera amo-
-Huy, eso suena mal-
-Sí, todo por tratos de mi papá, pero bueno, yo aquí contándote esto y no se si eres prima o algo asi de mi… esposa-
-No, no te preocupes, ni se quien invito a mi mamá jeje-
Mientras hablábamos el se puso de pie, la verdad es que llamo mucho mi atención, era un chico muy guapo y de muy buen cuerpo, hablamos unos minutos más de cosas sin sentido. Dentro de la platica elogio mi belleza y mi forma de vestir, me comento que desde que me vio llegar le parecí una niña muy sexy, que que lastima que fuera tan pequeña, yo solo me reía ante sus cumplidos. A mi mente llego un repentino pensamiento, ¿Por que no intentar tener sexo con el?, se ve que no quería a su esposa y se veía que yo le había gustado, era un completo extraño para mi, pero mis deseos eran demasiado grandes en ese momento, pero no sabia que hacer o que decir, que tal si me rechazaba. Mis pensamientos fueron interrumpidos por sus palabras.
-Sabes, ya no aguanto la presión, el estrés, en verdad no se que hacer-
-Pues, yo te puedo ayudar, mi profesor cuando tiene mucho estrés le gusta que haga yo esto-
Decidí que era el momento perfecto para intentar seducirlo. El me miro desconcertado por lo que le había dicho, sabia que lo que estaba por hacer podía no funcionar, pero sentía muchos deseos de estar con alguien. Me acerque a el y puse mi mano en su pene sobre su pantalón, el se sorprendió pero no se movió, su miembro comenzaba a crecer y yo le sonreí, le baje el cierre de su pantalón y saque aquello que tanto deseaba, hasta ese momento era el más grande que había visto, me lamí los labios al verlo, me hinque y comencé a mamárselo. El miraba hacia todos lados buscando si no se acerba alguien.
-¡Ufff! ¡Nena! ¿Y esto haces con tu profesor? ¡Me estas dando el mejor regalo de boda de todos!, dime, ¿Eres menor de edad?-
Yo solo le sonreí aun con su pene en mi boca.
-Mejor no me digas, prefiero no saberlo, no vaya a arrepentirme jaja ¿No eres virgen verdad?-
Le negué con la cabeza y seguía con lo mío. Después me detuvo, me puso de pie y me dio un beso. Luego me tomo de la mano y me llevo hacia el bosquecito donde de plano nadie pudiera vernos.
Me puso de espaldas a el y comenzó a besar mi cuello y metió su mano en mi vestido para jugar con mis pezones, le fue fácil ya que no llevaba bra, luego me hizo que poyara mis manos en un árbol, me dijo que levantar mi culo, alzó mi vestido y me lo dejo hasta mi cintura.
-¡Mi amor! ¡Es el mejor culo que he visto en mi vida!-
Hizo a un lado mi tanga y comenzó a masturbarme con su mano.
-Co-cojeme ya por-por favor- le dije con la voz entre cortada
-Tus deseos son ordenes mi reina-
Dicho esto tomo su miembro y me la clavo de un solo golpe, no pude evitar gritar, era muy grande y a decir verdad me dolió muchísimo aquella penetración tan repentina. El me tapo la boca, sus envestidas eran rápidas y fuertes, yo gemía y gritaba, disfrutaba muchísimo la cogida que me estaban dando, yo solo le pedía más y más, se detuvo un momento para bajarme y quitarme por completo mi tanga y me la puso en la boca.
-Eres muy gritoncita perrita, no quiero que nos encuentren-
Siguió cogiéndome y dándome nalgadas, lo cual me excitaba aun más. Después el coloco su saco en el piso y se acostó, yo me subí en el y comencé a brincar sobre su pene, era delicioso sentir como entraba todo su miembro en mi.
-¿Te gusta coger verdad perrita?-
-¡Me-me encanta!- grite al tiempo que sacaba la tanga de mi boca y se la botaba en su cara.
-Brinca más princesa, brinca perrita ¡Brinca!- gritaba el mientras apretaba y arañaba mis nalgas.
Yo no dejaba de moverme, estaba excitadísima pensando en que me estaba cogiendo un desconocido en su propia boda.
No se cuanto tiempo estuvimos asi, pero tuvimos que detenernos por una llamada a su celular, era su esposa, estaba gritándole por haberse desaparecido, nos arreglamos un poco para irnos a la fiesta, estaba por ponerme mi tanga cuando el me la quito.
-Esto princesa se me queda de recuerdo, si mi mínimo no pude venirme en ti, al menos me quedo con un recuerdo tuyo-
Yo me reí, saque su miembro de nuevo y comencé a mamárselo, el tomo mi cabeza y la jalaba hacia su pene, después de un par de minutos me aviso que iba a correrse, asi que seguí masturbándolo sin sacarlo de mi boca, se vino y tuve que tragarme todo para que no se manchara mi vestido, pero aun asi, un poco salió por mis labios y lo mancho aunque muy poquito.
-Felicidades, ahí tienes tu regalo, aunque igual quédate con mi tanga-
-Jaja gracias princesa, por una parte estuvo bien que no me vine dentro ti, no quiero casarme ahora por un embarazo jaja-
Después se guardo mi tanga en su saco y se hecho a correr, yo me fui despacio caminando por el jardín, pensando en lo que había ocurrido. En verdad era fácil hacer que cualquier hombre quiera tener sexo, aun si son desconocidos.
Me fui al baño a tratar de componerme el cabello y para arreglarme el poco maquillaje que llevaba. Me fui con mis papás y pensé que me regañarían, pero a mi mamá se le habían subido las copas, asi que no puso mucha atención mi papá a mi ausencia. Nos fuimos a mi casa y en todo el camino nadie dijo una sola palabra. Llegando a mi hogar mi papá recostó a mi mamá en el sillón de la sala, yo fui a la cocina por un poco de agua, mi papá se acerco y me hablo.
-¿A donde fuiste tanto tiempo?-
-A caminar papi-
-Daniela, dime que hiciste, ¿Por qué no traes tu ropa interior puesta?-
Yo solo le sonreí, me acerque y le dijo un beso en la mejilla, lo tome de la mano y caminamos hacia mi cuarto.
-Ven papi, me pediste que te modelara lo que me compraste, vamos a que lo haga-
CONTINUARA…
(Muchos me han pedido mi Facebook, por razones personales no puedo darlo, pero hice uno donde podría hablar con ustedes y puedan conocerme aunque sea en fotos, si gustan pueden dejarme sus Facebooks abajo y yo los agrego, un beso a todos).