Cuando por fin siente la penetración de ese abusivo y dominante pene en sus entrañas vaginales grita y gime desesperada, al tiempo que siente a su cuerpo sacudirse gustosa
Relato
Fui en busca de Hortensia y esta con sus ocho meses de embarazo me sube a la camioneta a una de sus amigas Malena una dama de 44 años para mí una señora mas que madura, mi madre tiene 41 años como no la voy a encontrar pasada en años.
Bien ya está arriba y la llevo, me pide ir al Terminal y le digo que si quiere la dejo en la carretera por que voy a la vega, ella me dice que mejor la lleve a la casa vive a diez kilómetros de la vega, diez para allá diez para acá le digo… ya me dice tendrás un buen premio, eso me gusto le digo, pero en ese árbol voy a detenerme y tu miraras para otro lado por que haré una necesidad, me bajo y al orinar esta dama me observa mi pene, oye me dice lo tienes grueso, a mi me gustan fornido y nervudos como el tuyo… la miro sorprendido y le digo ¿quieres tocarlo?, pero corres riesgo si lo manoseas... crees que te temo me dice tomándomelo entre sus manos, aprovecho para poner mis manos en sus senos y noto que a pesar de su edad los tiene firmes y sus pezones están duros. Los pellizco y ella se estremece, la observo y pienso como será estar acompañado por una mujer madura mayor que mi madre en una cama, no pienso mas y me proyecto al ataque de esta hembra para llevarla a la cama, estaba ardiente y ella tendría que calmar mis ímpetus, me acomodo detrás de ella ubicándole mi paquete sexual entre sus nalgas, ella siente como crece este pene está duro, grueso excitado deseando poseerla, ella sabe que este joven semental no se detendrá aquí y como sea la poseerá y la hará su mujer. La abrazo y le solicito al oído quiero sentirte gemir y llorar de pasión con mi miembro en tus entrañas. Ella me mira un poco preocupada, pero sonríe aceptando mis solicitudes.
Nos subimos en la camioneta y al pasar por unas cabañas en el camino nos desviamos a estas. Entramos cansada se tira sobre el lecho con descuido recogiendo sus piernas y me muestra sus bragas y sus piernas. Le digo tienes preciosas piernas y tus calzones celeste son hermoso, pero cuidado no soy de piedra…, no ye temo. Eres muy joven para mí. Cumplo mis 44 el próximo mes dice y tengo una inmensa experiencia además, estoy sola desde hace como cuatro años y deseo con ansias un apareo sabroso, hay veces que deseo un coito, a mi me sobra calentura, no me dejes resentida, disgustada y caliente, te mataría.
Le digo recorriendo suavemente una de sus piernas con mis dedos, noto que su piel se crispa con mi roce, déjame mujeriego desenfrenado que hace mas de tres años que no se disfrutar de una velada sediciosa completa y placentera por que tu tío no se la puede, eso sucede con él, le digo, pero no sucederá conmigo, a mi me gusta ver a mis mujeres retorcerse ardiente de placer y lujuria…. Yo si me la puedo, digo, al tiempo que le introduzco mi mano por su pierna hacia su vagina… se retuerce y me mira con unos ojos de mujer enajenada por un coito, diciéndome cierra la puerta, pueden vernos, luego se acomoda en la cama abriendo sus piernas y noto lo húmedo que esta su calzón. Abro su vestido y ella no se opone, aún más resuella ansiosa al manosear ese bosque de pelos que cubre su vagina oculta entre sus piernas, las bellas piernas que tiene se retuerce, excitado su cuerpo al calor ante una profanación de infidelidad incestuosa con su sobrino, sabe que ese macho la tiene en esos momentos bajo su poder y que la hará su mujer, que será penetrada por ese miembro que ella busca desesperadamente en los pantalones de su sobrino, al encontrarlo se sorprende es un pene majestuoso, duro como un tronco, grueso como el miembro de un animal , largo más largo que el de su marido y lo mejor está ardiente y deseando penetrarla con desfachatez , indisciplina y sin piedad, su vagina era un charco ante la próxima entrada de este macho en sus cuerpo.
Cuando por fin siente la penetración de ese abusivo y dominante pene en sus entrañas vaginales grita y gime desesperada, al tiempo que siente a su cuerpo sacudirse gustosa al ser expandida su vagina hasta casi romperse, mientras sus dedos se enmarañan en el cuero cabelludo del macho que la está bárbaramente insertando en sus paredes vaginales, años que no sentía esa sensación de persuasión al apareamiento demoledor, al sentirse así la hembra se entrega totalmente a este macho violador, incestuoso y ejecutante de las delicias del coito. La cama crujía y ella se aferraba al respaldo del lecho Pronto las embestidas eran mas fuertes sentía el placer y con los orgasmos que comenzaba a sentir, ¡era fantástico!, pensaba que se había olvidado de esos orgasmos luego de años sin uso, ahora sentía que la poseían con pasión y eso la excitaba, llegando a un soberbio orgasmo y gritaba de rabia de sentirme saciada por un joven semental, lo apretaba en contra de su cuerpo atándolo con sus piernas por detrás de los riñones, cuando este evacua su semen mojándome todas las entrañas de mi vientre, dejando que todas las emisiones de su miembro escaparan dentro de mi útero, al no poder despejarse ya que lo tenía atrapado con mis piernas y junto con llegada de los jugos a mis entrañas, le llega un colosal orgasmo, que la hizo olvidar que era viuda…. Dios mío… que rico y apretaba aún más al amante contra su cuerpo…, sorprendida exclamé, cuanto placer, cuanta pasión.
Luego continuamos viaje llegamos a su casa, al llegar a esta se encuentra que ha llegado su nuera Ursula la esposa de su hijo mayor de unos 22 años, con su crío de un año, esta mujer es delgada de pelo trigueño, con ondulantes curvas que despiertan los apetitos de los hombres al mirarla, está dolida por de su marido quien la desprecia por estar movido en conquistar a una compañera de trabajo, olvidando totalmente que es un hombre casado, en verdad se casó con Ursula por exigencias de la familia al quedar esta embarazada.
Y el no perdió ni un segundo de el momento, me dijo con mucha morbosidad ¡Ahora puta súbete la falda y retráncate en la pared! Yo con rabia fui subiendo lentamente la falda de mi vestido hasta mi cintura, el se alejo unos metros deleitándose con mis piernas, yo vi clarito como su verga creció dentro su pantalón, tomo una cama fotográfica sacándome varias fotos en esa pose tan humillante para mí.
Relato erótico enviado por Anonymous el 11 de September de 2009 a las 23:52:41 - Relato porno leído 160822 veces
Lucia es una mujer casada, pero aun joven de unos 34 años senos grandes y un culo generoso además que tenia un rostro muy bello, pero lucia aunque tenia esposo y tres hijos que le hacia parecer una dama, a ella le encantaba follar a menores entre 13...
Relato erótico enviado por sexolito el 10 de April de 2005 a las 00:02:30 - Relato porno leído 156464 veces