Soy Elena, tengo 16 años recién cumplidos y toda mi vida he vivido en un pueblo grande de la provincia de La Rioja, Estudio Bachillerato y se puede decir que soy buena estudiante ya que saqué todo en Junio. Hace mas o menos 6 meses que salgo con Mario, un chico dos años mayor que yo. Siempre me había gustado y reconozco que me las hizo pasar canutas hasta que conseguí salir con el, pero... ahora es el quien vive atenazado por los celos y las ganas que tiene de hacerme el amor por vez primera.
Me considero una chica normal y corriente con sus vicios y virtudes, pero desde hace tiempo mi amiga Eva me comenta que le da envidia ya que conoce a mas de uno que se muere de ganas por estar conmigo. Soy morena, de pelo largo, mis ojos son verdes, mido 1,70 y desde que mis caderas se ancharon un poco, noto como la mayoría de los chicos se vuelven a mi paso, es una sensación que me encanta y me produce morbo, por lo que a menudo intento ponerme los vaqueros lo mas ajustados posible, cosa que a Mario le pone enfermo. La verdad es que lo único que me acompleja son mis tetitas, son bonitas pero no se han desarrollado lo suficiente y aun están es plena floración, paso bastante envidia cuando veo como mis amigas pueden llevar bikinis marcando unas tetas generosas, que hacen enloquecer a la mayoría de los chicos.
Hace tiempo que Mario quiere que hagamos el amor, soy virgen y la verdad es que no estoy muy segura de que sea el el hombre adecuado para perder la virginidad. A el no le digo la verdad, siempre le cuento que me da mucho miedo y que si un día lo hago me gustaría que fuera en un sitio especial, al menos en una cama como dios manda... cosa que ahora no tenemos.
Pero la verdad es que cada día que pasa me siento menos a traída por el... sus celos compulsivos, el hecho de tenerlo comiendo a mis manos y porque no decirlo... lo pésimo amante que es, hacen que cada día que pasa este menos convencida a entregarle ese tesoro que tengo guardado.
A menudo cuando estamos solos tengo que fingir que lo que me hace me gusta, es torpe, rudo y la sensibilidad en el brilla por su ausencia... como muchos otros hombres solo esta lleno de si. La inmensa mayoría de las veces me excita muchísimo más hacérmelo yo misma que me lo haga el, a menudo cuando estamos juntos y llego a casa, tengo que ser yo la que me haga un “apaño”, ya que con Mario me suelo quedar como estaba.
Bueno, mi historia transcurre en el mes de Julio, como ya dije soy de un pueblo grande de La Rioja y en el pueblo de al lado son las fiestas patronales, desde hace dos años suelo ir allí a cuidar a los niños de una pareja que conocen a mis padres, el trabajo consiste en estar con los niños por la mañana y por la noche de esa forma sus padres pueden salir con los amigos a cenar, sin preocuparse de volver a casa temprano, porque al día siguiente tienen que estar con sus hijos, por lo general si los niños no son revoltosos, suele ser un trabajo tranquilo y te sacas unos euros para algún capricho.
Este año la cosa ha cambiado y la pareja amiga de mis padres se han marchado de vacaciones y voy a ir a otra casa recomendada por ellos mismos.
La verdad es que estoy preocupada por varios motivos, primero porque no se que tal será la nueva pareja y segundo porque mi novio esta empeñado en ir un día, cuando los niños duerman y sus padres salgan por ahí. El ya lo ha planeado todo ya que según el...
“Ahora no tendrás excusa ya que vamos a tener una cama y una noche para los dos solos”.
En esos pensamientos estoy cuando cargada con mi bolsa de de viaje me presento en casa de María y Nestor (que así se llaman la pareja), los niños son dos angelitos de 2 y de 5 años llamados Hector y Hugo, desde el primer instante percibo que no serán para nada de los que me van a crear problemas, todos son gente muy educada, María me presenta a toda la familia y me da una vuelta para que conozca la casa, es un unifamiliar de dos plantas y un garaje en la planta baja tienen el salón la cocina y un baño y en la parte de arriba hay 4 habitaciones una ocupada por cada hijo, una de matrimonio y la de invitados, que por supuesto es en la que yo dormiré.
Maria y Nestor son un matrimonio de unos 35 años, la verdad es que hacen una pareja perfecta, los dos son muy guapos eso si, cada uno en su estilo... María es una mujer rubia de media melena que medirá algo menos que yo, tiene unos bonitos ojos azules, un cuerpo delgado y bien cuidado, me llama la atención sus pechos, la verdad es que los pechos grandes siempre me llaman la atención... a través de su blusa se puede adivinar que son bien proporcionados y generosos, es sofisticada y elegante, la verdad es que tiene mucha clase al vestir, cada complemento que lleva es acertado. Nestor también es un hombre muy guapo, es moreno y se adivina alguna canita en su cabellera que lo hace mas interesante, tiene los ojos oscuros y su cuerpo esta trabajado por algún deporte y la verdad es que tiene una sonrisa cautivadora...
Durante la visita por la casa, María me comenta que trabaja como abogada en un bufete de Logroño y que su marido Nestor tiene una tienda de deportes en la localidad, que durante el año, la semana de fiestas es la única que coinciden en las vacaciones y la verdad es que tenían ganas de pasarla juntos disfrutando un poco sin hijos, María es simpática y agradable, alguien con quien enseguida coges confianza y no duda en ofrecerme cualquier vestido que me guste al pasar por su habitación. Por su casa y por la forma de vestir que tienen, una se da cuenta enseguida que son una pareja acomodada de clase media alta.
Por último María me comenta alguna de las normas que tienen sus hijos a la hora de las comidas y de acostarse y me pide que sea lo menos permisiva posible a la hora de la aplicación, no es muy amiga de las chuches y caramelos y me pide que les de los menos posible, tampoco le gusta que anden levantados mas tarde de las 10, la verdad es que a mi también me parecen unas buenas normas por lo que asiento sin rechistar ni pío.
Ya en la habitación mientras estaba guardando mi ropa en el armario, recibo la llamada de Mario, el pobre esta loco por venir el Sábado a lo que yo contesto; que ya veremos y me invento que los dueños de la casa son muy rectos y que no dudaran ni un instante en llamar a mis padres, si pillaran algún novio por allí, Mario hace oídos sordos y esta “erre que erre” con ir el Sábado, por lo que yo cansada siempre de lo mismo cuelgo el móvil sin despedirme.
La noche del primer días fue de lo mas tranquila, después de darles la cena y acostarlos, estuve un rato viendo la tele y me acosté temprano ya que no sabía si los peques se despertarían esa noche a darme la tabarra, me costó un poco conciliar el sueño, por ser la habitación un lugar extraño y por lo incomoda que me hacia sentir Mario con su monotema. A eso de las 4 de la mañana un ruido me despertó, pude escuchar como alguien abría la puerta y entraba en casa, acto seguido escucho como suben las escaleras, sin duda son Nestor y María, van cuchicheando mientras ríen por lo bajo, entran primero a la habitación de los niños y mas tarde en la suya, a los pocos segundos puedo escuchar un ligero bamboleo acompañado de unos gemidos ahogados, por lo que a mi me es imposible conciliar el sueño y al imaginar la escena, noto como mi coñito se humedece y no puedo evitar hacerme un dedito a su salud.
Al día siguiente Nestor es el primero en levantarse, yo estaba con los peques en la cocina y al entrar me pregunta que como ha sido la noche a la vez que su mano se posa en mi hombro, sentir ese primer contacto me ruboriza e intentando mantener la compostura le contesto que no ha habido ningún problema, que los peques has dormido de un tirón y yo también a lo que el contesta con un, me alegro acompañado de su embriagadora sonrisa. A los dos minutos aparece María dándome los buenos días, y preguntándome lo mismo que su marido. A pesar de ser por la mañana y de haber estado parte de la noche de juerga, María esta preciosa, sigue manteniendo ese aspecto interesante incluso con zapatillas y bata de casa.
Durante el tiempo que coincido en casa con Nestor, he notado que nuestras miradas se han cruzado en algún momento, la verdad que no tiene una mirada para nada viciosa, pero da la impresión que algo se siente atraído por mi y para que negarlo, a mi me produce muchísimo morbo también. Tiene por costumbre poner las manos sobre los hombros y mirar a los ojos, por lo que a mi me ruboriza y me produce un ligero escalofrío cada vez que hablamos.
La segunda noche y no tengo noticias de Mario, en el fondo me siento aliviada, estaba cansada de tener que inventar excusas, muchas veces me dan ganas de decirle la verdad... decirle;
(Mira Mario no me apetece hacerlo contigo, sabes porque no me apetece lo mas mínimo?
“Porque eres un zoquete en la cama que no piensa mas que en su propio placer, que cree que el sobar es acariciar y que no llegaría al orgasmo ni estando un año en la cama contigo”)
Pero bueno, tampoco quiero ser cruel con el, al fin y al cabo creo que me quiere y yo aunque con muchas dudas también.
En esos pensamientos estoy cuando cansada de la tele basura me levanto y me voy a curiosear un poco por la casa, me encamino a la habitación de matrimonio y una vez dentro comienzo a curiosear por los armarios, viendo cada uno de los vestidos de María, verdaderamente tiene cosas maravillosas y que para nada me había equivocado cuando pensé que era una mujer con mucha clase, mirando por los cajones encuentro el de la lencería, y ahí si que tiene autenticas maravillas... una a una me voy probando las braguitas y tangas. Me hubiera gustado probarme todos los conjuntos, pero María tiene dos o tres tallas mas de pecho que yo, así que prefiero probarme lo de abajo, lo paso genial quitando y poniendo lencería después me recuesto sobre la cama e imagino que Nestor esta ahí a mi lado y me arrancá de un tirón el tanga, antes de hacerme suya.
Inmersa en esos pensamientos estoy cuando al intentar dejar las braguitas dobladas tal y como estaban, noto como una caja en el fondo del cajón, lo cojo y veo que es un CD, en el que no hay título ni anagrama, lo miro y con una curiosidad enorme, me encamino a la parte de abajo de la casa, con las prisas no me percato que solo llevo puesto el tanga de María y la parte de arriba del pijama. Una vez en el salón introduzco el CD en el DVD y clavo la mirada en la televisión... Las primeras imágenes no me dicen nada, se ve oscuro una imagen balanceándose, al poco la imagen se estabiliza, una cara que no distingo adivinar mira un segundo y desaparece, tras unos segundos una lampara de mesilla de noche se enciende y comienzo a conocer el lugar donde se encontraba, sin duda era la habitación de María y Nestor, la misma habitación en la que hace tan solo unos instantes me probaba la lencería de María e imaginaba que Nestor me hacia suya una y otra vez. Durante un tiempo la cama de matrimonio es la única imagen, aunque se nota que en la estancia hay alguien porque se puede escuchar hablar y reír en el ángulo muerto de la cámara.
Tras unos minutos observo una figura de mujer caer sobre la cama, lleva puesto un vestido de fiesta, frente a ella la figura de un hombre introduce su rostro entre las piernas y levanta la la falda ligeramente, ella dobla las piernas y las arquea ,mientras el prácticamente arranca por la fuerza su diminuto tanga, clava su lengua en su coño y ella arquea hacia atrás la cabeza a la vez que lanza un gemido de placer, el continua saboreando todos los fluidos que emanan de su cuerpo mientras ella rodea su cabeza con sus manos y presiona hacia si, intentando aplacar el deseo, las piernas de ella se elevan y se entrelazan a sus hombros. No puedo apartar la vista de la pantalla y mi cuerpo comienza a estremecerse con la visión que contemplan mis ojos, siento como mi coñito se humedece por instantes...
La mujer se da la vuelta y queda delante de la cámara...son María y Nestor!!! dios mio!!! mi corazón en ese instante da un vuelco, noto como mi garganta esta seca y como mi pecho respira acelerado mientras en la pantalla María queda postrada de espaldas y Nestor hunde su lengua entre su culito y lame una y otra vez cada uno de sus rincones mas íntimos, María gime de placer, sus ojos cerrados y su boca entreabierta son la viva expresión del placer y mientras sin darme cuenta apenas, mis dedos comienzan a acariciar mi coñito, el tanguita de Maria ha quedado empapado, con una mano rozo mi clitoris y con la otra acaricio mis pezones duros y erectos.
El deseo me embriaga, reseca mi garganta y hace que mi respiración se entrecorte al ver como Nestor arranca el vestido y deja semidesnuda a María, la coloca a cuatro patas, es una imagen maravillosa, María lleva puesto una medias con ligero y su vestido ha quedado enrollado en su cintura, sus preciosos pechos cuelgan mientras Nestor roza con su pene su coñito, tras unos instantes... Nestor hunde su polla en María y esta lanza un gemido de placer, sus brazos musculosas sujetan sus caderas mientras la atrae una hacia el una y otra vez, su culo se endurece con cada embestida, su cuerpo se tensa dejando al descubierto el fibroso cuerpo, María gime y se mueve como una loca con cada sacudida... mientras, mis dedos no pueden dejar de acariciar mi húmedo coñito, mi cuerpo no puede dejar de mirar la pantalla mientras estoy entregada por completo a un punto de no retorno.
En la pantalla Nestor ha perdido el control por completo, entra y sale en María en un éxtasis total, a la llegada el clímax los gemidos y gritos de ambos se entremezclan en la habitación. Mientras... mi cuerpo, todo mi cuerpo comienza a estremecerse, comienzo a sentir espasmos de placer que me recorren una y otra vez mientras mis gemidos se pierden en aquel salón, tras unos instantes de pequeñas convulsiones y placer maravilloso quedo tendida sobre el sofá. Sin apenas haberme repuesto observo como el bonito tanguita de María esta empapado y en ese instante...
Mi corazón da un vuelvo al escuchar ruido de llaves al otro lado de la puerta de entrada, de un salto me levanto y apago el televisor, apago las luces lo mas aprisa de lo que soy capaz y subo a mi habitación, salto sobre la cama y me tumbo jadeante, mi corazón late a mil, cierro los ojos y rezo para que no se de de cuenta de que en el DVD encendido hay algo que no debería de haber visto... Durante unos minutos no se escucha a nadie que suba a las habitaciones y poco a poco voy recuperando el aliento, tras unos instantes escucho como se abren las puertas de las habitaciones de los niños y vuelven a cerrarse a los pocos segundos, es en ese instante cuando se abre mi puerta, mi corazon se acelera por el miedo, permanezco con los ojos cerrados como una avestruz que introduce su cabeza en el hueco ante el peligro, intento pensar cual va a ser las historia que voy a contar cuando María y Nestor descubran que he visto el CD, ¿como voy a poder explicarle que llevo su tanga puesto? Una vez abierta la puerta noto como unos pasos se a cecan hacia mi y se detienen a poca distancia de la cama, durante varios segundos no puedo escuchar nada, permanezco con los ojos cerrados muerta de vergüenza imaginando una escusa creible y en ese instante noto como una mano templada se introduce entre mi camiseta y mi piel, recorriendo mi estomago y terminando acariciando dulcemente mis pechitos, un ahogado suspiro dejo escapar de manera casi imprevisible mientras toda mi piel se eriza con ese primer contacto inesperado. La mano se mueve en el interior de mi camiseta y acaricia mis pechos pellizcando con dulzura mis pezones duros y erectos por la impresión inesperada...
Pero yo permanezco con los ojos cerrados, como si así podría estar libre de cualquier peligro, mientras mi inesperado amante recorre mi cuerpo y se cuela sin permiso entre mi tanguita y mi vello, al rozar por vez primera mi chochito húmedo no puedo evitar, dejar escapar un gemido acompañado de un movimiento involuntario de mis caderas, pero... yo sigo con los ojos cerrados imaginando que mi amante es Nestor, imaginando que es el quien me recorre con sus brazos fibrosos, imaginando que es el quien me mira y me desea.
Tras unos instantes noto desaparecer las manos de mi cuerpo y al segundo son mis piernas las que son acariciadas, recorriendo con dulzura el interior de mis muslos, rozando mi sexo y despojándome de mi tanguita por completo. Esas mismas manos que me hacen estremecer separan mis piernas y dejan mi coñito abierto... en ese instante pienso que voy a ser penetrada y me preparo para un instante de dolor... pero muy al contrario lo que siento es la humedad de una lengua recorriendo mi sexo y haciéndome gemir cono una loca, su lengua se desplaza y me acaricia mi clítoris y mis labios, roza cada zona sensible de mi parte mas íntima como si fuera yo misma la que lo hiciera y siento como creo que en cualquier momento podría desmayarme de placer.
Muy despacio los besos abandonan mi sexo, recorren poco a poco mi cuerpo y a la vez que escalan hacia mis tetitas, sus manos quitan la parte superior del pijama dejándome completamente desnuda sobre la cama. Esos labios maravillosos rozan mis pezones y rodean con la lengua mis aureolas, los pellizcan muy despacio y con sus manos los presiona haciéndome gemir nuevamente de puro placer.
Su rostro casi esta junto al mio, y en el instante que sus labios rozan los mios, abro los ojos por vez primera... El corazón me da un vuelco, y no puedo evitar un suspiro de impresión al ver frente a mi, los labios de María, la preciosa y sensual María es quien ha sido mi amante por unos instantes, mientras en mi mente era su marido quien recorría mi cuerpo. Quedo paralizada por la impresión y María se da cuenta...
• ¿No te gusta mi niña?
Claro que que me gusta pienso para mi, en verdad creo que no es posible sentir el deseo que mi cuerpo esta experimentando en esos instantes.
• Si si me gusta María
• Que te sucede bonita?
• Yo no soy lesbiana.
• Yo tampoco
Y en ese instante María roza mis labios con dulzura... nuestros cuerpos se entrelazan y comienzan a tocarse como dos desesperadas. Mis manos llegan a su culo y se cuelan hasta su sexo húmedo y mientras ella me responde con similares caricias, durante unos instantes el tiempo se detiene mientras nuestros cuerpos se han fundido en uno solo.
María sube muy despacio, hasta quedar arrodillada cobre mi boca, su coñito húmedo, queda dispuesto ante mis labios y comienzo a saborear sus fluidos divinos, maria comienza a moverse intentando que el roce de mis labios la presione mas y mas fuerte, intentando que el deseo que siente quede aplacado con la presión de mi lengua y ante mi puedo ver como sus pechos grandes y perfectos se balancean con cada balanceo...
La respiración de María se ha convertido en gemidos, gemidos que se pierden en la oscuridad de la habitación y en ese instante... Noto como unas manos acarician mis muslos y separan mis piernas dejandolas encogidassobre mi.
Dios mio!! Tiene que ser Nestor, son los dos los que habían entrado en la habitación y estaban junto a mi cama hace unos instantes, mientras... Nestor hunde su boca en mi coñito húmedo y cálido y comienza a besar de la misma manera que hace unos instantes lo hacia su mujer... María sigue sobre mi mientras mi lengua la penetra una y otra vez.
Tras unos minutos maravillosos Nestor se detiene por unos instantes...no puedo alcanzar a ver lo que hace ya que mi única visión son los pechos de Maria moviéndose sobre mi, de repente un escalofrío se apodera de mi al sentir su pene acariciando mi coñito virgen, mis manos instintivamente se aferran a las manos de María entrelazándose con fuerza. Tras las caricias una presión hace que por un momento todo mi cuerpo se tense, espero una embestida pero Nestor solo introduce su puntita introduciendo y sacando una y otra vez, de repente un dolor agudo recorre mi cuerpo cuando en una fuerte embestida la polla de nestor entra en lo mas profundo de mi, todo mi cuerpo se estremece de dolor y mis manos se aferran con tal fuerza a las de maría que creí hacerla daño...
Nestor se detiene y queda dentro de mi, mi cuerpo esta temblando y siento como un hilo de mi inocencia teñida de rojo discurre por mi culito... tras unos instantes comienza a penetrarme muy despacio, todavía tensa, intento ayudar con mis movimientos, poco a poco el dolor deja paso a un hormigueo de placer que empieza a recorrer mi cuerpo casi sin percatarme, los gritos dejan paso a los gemidos y mi lengua vuelve a hundirse en el coñito de María.
Nestor me penetra una y otra vez mientras que con sus musculosos brazos me atraen hacia el, siento como tu polla se introduce en mi y me llena por completo una y otra vez, el placer me embriaga mientras María cabalga moviendo las caderas sobre mi, María habla entre gemidos...
• No puedo mas, me viene, no pares sigue por favor...
La sujeto por los muslos mientras mi lengua acaricia una y otra vez su clítoris, siento como su cuerpo se estremece con pequeñas convulsiones involuntarias mientras sus manos se vuelven a enlazar con fuerza a las mías, su orgasmo le llega mientras sus caderas se frotan una y otra vez contra mi boca y tras unos instantes maravillosos, su cuerpo queda inerte junto a mi. Mientras... Nestor sigue llenándome una y otra vez, cada vez con mas furia, mis gemidos se mezclan con el sonido de sus músculos golpeando contra mis caderas y mientras mis piernas rodean su culo atrayendo hacia mi y facilitando sus embestidas.
María esta a mi lado acariciándome y besándome cuando su marido lanza un fuerte gemido, todo su cuerpo se tensa a la llegada del orgasmo, su culo se endurece con cada sacudida y las gotas se sudor mojan sus cuerpos desnudos, siento como su semen me llena por completo y es en ese instante todo mi cuerpo me abandona y me traslada a un orgasmo maravilloso cargado de espasmos y placer...
Tras unos segundos los tres nos recostamos en la cama, mi cara frente a María y Nestor tras de mi, tras unos minutos en el que solo se escucha nuestra respiración acelerada, Nestor se levanta nos da un beso en los labios a cada una y sin decir nada se levanta y se marcha a su cama. Maria queda junto a mi, las dos estamos recostadas y desnudas, cierro los ojos mientras Maria recorre con las yemas de sus dedos la piel de mis caderas.
Al despertar, Maria ya no esta ahí, ¿que hora es? mi cama ha quedado desierta, me levanto y me pongo algo de ropa, cambio las sabanas sucias de la noche anterior, bajo a la cocina y veo que toda la familia esta desayunando, todos me dan los buenos días y salvo una sonrisa cómplice de Maria acompañada con un beso en la mejilla, nada hace sospechar lo que durante la noche ha pasado.
Ese día lo paso perdida en mis pensamientos... muchas cosas han cambiado en mi vida, una amalgama de sensaciones invaden mi interior. En una sola noche he sido infiel a mi novio Mario, he perdido la virginidad con un desconocido y me he acostado con una mujer a pesar de tener la certeza de no ser lesbiana, a pesar de todo algo se seguro... la noche pasada ha sido la mejor de toda mi existencia y no puedo evitar desear que quizás vuelvan a visitarme...
Esa noche mientras intento conciliar el sueño escucho la puerta de casa, es pronto, y me extraña que vuelvan ya, pasan los minutos y nadie sube así que decido bajar a tomar un vaso de leche,la puerta de la cocina esta abierta y hay luz, al entrar encuentro a María sentada junto a un vaso de zumo.
• Hola María, como tu por aquí?
• Hola Elena, estaba cansada y decidí acostarme pronto, Nestor se ha quedado un rato mas y volverá mas tarde hoy.
• Ah, yo he bajado a tomar un vaso de leche, no podía dormir...
• Sabes Elena estábamos algo preocupados por lo que paso ayer, no sabíamos que eras virgen...
• No te preocupes María, ¿como ibais a saberlo? Fue maravilloso, la mejor experiencia de mi vida...
• Me alegra mucho saberlo, para nosotros también era la primera vez que estábamos con alguien aparte de nuestro matrimonio, era una fantasía que rondaba por la cabeza de Nestor, a mi no me hacía mucha gracia, pero... cuando te vi, comenzó a gustarme cada vez mas esa posibilidad.
• Te puedo hacer una pregunta María?
• Claro que puedes mi niña...
• Eres lesbiana?
• Jajaja, sabía que preguntarías eso, no no lo soy y nunca lo he sido, pero a pesar de eso no puedo evitar pensar que eres una chica muy dulce y bonita , la verdad me siento muy atraída por ti.
• A mi me pasa lo mismo, me da muchísimo morbo cuando te miro, eres sofisticada, inteligente y dulce no puedo dejar de sentirme atraída por ti y por todo lo que representas, te confieso que Nestor tambien me atrae muchísimo...El primer día os escuche hacer el amor y termine excitadisima, teneis algo que me hace enloquecer..
• Jajajaja te confieso que cuando hacíamos en amor, imaginábamos que estarías escuchando y por eso, no nos cortamos a la hora de expresar lo que sentíamos en ese instante.
• Jajajajaja, que malos!!! yo ahí sola sufriendo y vosotros disfrutando como locos...
• No había nada pensado, nunca nos hubiéramos metido en tu habitación pero... el segundo día cuando volvimos y vimos que habías visto nuestro pequeño secreto... nos volvimos locos por el morbo y entramos en tu habitación, cuando te vi tumbada con mi tanguita ya estaba chorreando por dentro.
• Si para mi fue un momento de apuro... me encanta tu lencería y no pude evitar probarme....
• No te preocupes es normal, todas hemos tenido 16 me hace sentir bien que a una niña tan sexi como tu le guste mi lencería.
• Bromeas!!! es maravillosa con ella me sentí la mas bella del mundo!!
• Jajaja vamos! Sube conmigo a mi habitación, te regalo lo que mas te guste...
Las dos subimos a su habitación y María fue sacando lo que mas le gustaba, me lo daba y yo me lo probaba, era una sensación extraña eso de permanecer semidesnuda en su habitación, pero a mi cada vez me producía mas morbo...
María me miraba y sonreía, cada vez que me probaba algo, como en las películas ella daba o no su aprobación, la verdad es que la mayoría de las braguitas y tangas me quedaban bien, lo malo eran los sujetadores, aunque siempre se solucionaba con algo de relleno.
• Mira Elena este conjunto es el que mas le gusta a Nestor...
Era un bonito conjunto de tanga negro con hilo por dentro del culo, llevaba unas medias con ligero y me lo dejó para que me lo probara. Me veía muy sexi con ella y pude adivinar en los ojos de Maria como comenzaba a asomar el deseo.
• Estas preciosa Elena, realmente sexi.
María no puede dejar de mirarme y mi corazón comienza a palpitar con fuerza, no se que tenia esa mujer que hacia que todo mi ser se estremeciera al pensar en ella. Tras unos segundos de miradas en silencio...
• Bueno ahora ponte tu lo que mas te guste, seguro que es muy sexi.
Maria sonrie y rebusca por el armario, saca un culote cortito que dejaban al descubierto dos terceras partes de su precioso culo, y un sujetador de puntilla a juego, no puedo dejar de mirar su cuerpo mientras se desnuda y vuelve a vestirse, tiene dos tetas preciosas, a pesar de haber sido madre dos veces, sus pechos bien podían pasar por los de unos de mis amigas, su culo ligeramente ancho por las caderas, lo suficiente para hacer enloquecer a cualquiera.
Las dos en la habitación con su lencería nos miramos por un instante y María se coloca delante del espejo de su tocador, yo hago lo mismo y me coloco tras de ella, la observo por encima del hombro, observo su rostro y su cuerpo precioso, y no puedo evitar rodearla con mis manos... mis labios se acercan a su cuello y comienzo a besarlo, María se estremece y cierra los ojos, yo los mantengo abiertos y miro en el espejo, mis manos comienzan a recorrer su cuerpo y a acariciar sus pechos, La piel de María se eriza con cada contacto y mis manos pueden sentir sus duros pezones al introducir mi mano entre su sujetador...
Permanecemos junto al espejo durante unos instantes, mis manos recorren su piel tersa y exploran cada rincón de su cuerpo, su respiración es acelerada a la vez que sus manos se mueven hacia atrás intentando acariciar mi culito. Cuando mis dedos se cuelan entre su piel y el tanga Maria tiene una convulsión incontrolada acompañada de un gemido ahogado.
• Sigue mi niña, sigue por favor.... haces que me vuelva loca, lo necesito por favor no pares...
Su coño esta empapado y sus caderas se mueven al compas de mis dedos, siento como su culito se arquea hacia atrás y se frota con fuerza con mis íngles, con la otra mano acaricio una de sus tetas que he sacado con delicadeza de las copas del sujetador, las estrujo muy despacio y pellizco con dulzura sus pezones duros y tersos, mis labios siguen sobre su cuello y orejas...
María esta como loca, sus caderas no dejan de moverse al compás de mis dedos corazón y anular que la penetran una y otra vez, sus manos sobre las mías guiándome por sus zonas mas intimas, gemidos descontrolados..
• No pares mi niña, me corro no puedo mas, me voy a correr , sigue por favor no paress...
María comienza a gemir, a gritar a convulsionar, los espasmos la recorren como un río de placer,miro al espejo y observo la imagen, su rostro es la imagen del deseo y la lujuria, su boca entreabierta deja escapar un grito ahogado de deseo, sus ojos cerrados mientras su cuello se arquea hacia atrás. Maria mantiene las manos sobre mias hasta que los ultimos coletazos del orgasmo llegan a su fin...
• Dios mio... no se que me pasa... que estoy haciendo??
Se da la vuelta y sonríe...
• No se que medas mi niña para que llegue a sentirme a sí pero ahora te toca a ti...
Realmente no habia nada que deseara mas, Nos recostamos sobre la cama y María comenzó a besarme, era un beso dulce, embriagador, diferente a los besos que hasta entonces habia sentido, su lengua rozaba la mia con delicadeza, sus labios tocaban los mios casi sin rozar y su cuerpo se aferraba al mio mientras las manos comenzaban a recorrer cada rincón de mi.
• Sabes mi niña... me encantan tus tetitas, son muy bonitas, me excita verlas así, me vuelve loca besar los pezones tiesos y duros,...
Sus palabras me hacen estremecer, encanta cuando me mordisquean los pezones, me vuelvo loca cuando muy despacio los mordisquean con los labios, mi coñito ya esta muy húmedo antes de que con su boca siga descendiendo por las curvas de mi cuerpo desnudo.
• Me encanta tu piel tersa y morena, me encanta cuando se te eriza el vello y siento como tu cuerpo se tensa.
Sigue bajando hasta llegar a mi hinchado coñito, ya estoy como una loca antes de que tan siquiera haya tocado mi chochito, mis caderas no dejan de subir y bajar deseosas de sentir su lengua saboreando los fluidos de mi ser.
• Me encanta tu coñito, casi virgen, me encanta introducir mi lengua y rozar tu clítoris, beber cada uno de tus jugos y penetrarte con mi lengua una y otra vez.
Buff no puedo dejar de gemir, mi cuerpo me traiciona cuando Maria roza por primera vez mi chochito húmedo y calido, siento como un espasmo me recorre y cierro los ojos mientras su lengua juega con lo mas intimo de mi. Siento que no puedo aguantar mucho mas, y en ese instante.
• No todavía no mi niña.
María se detiene justo en el momento en el que me iba a llegar, no puedo evitar sentir cierto fastidio, pero al segundo aparto de mi mente ese pensamiento cuando Maria me susurra al oído....
• Voy ha hacerte sentir cosas que nunca has sentido, sensaciones desconocidas para ti... date la vuelta preciosa
Obedezco deseosa de volver a sentir, María se coloca tras de mi y comienca a rozar con sus uñas mi espalda descendiendo por mis caderas y acariciando mi culo, me produce escalofríos y al llegar a mis muslos los separa, y deja la parte de atrás al descubierto, separa mis nalgas e introduce su lengua en mi culito rozando una y otra vez mi puerta de atrás, esa nueva sensación me produce un placer maravilloso y no puedo evitar gemir como una loca. Durante unos minutos su lengua lo acaricia y no puedo evitar arquear el culo una y otra vez.
Sus dedos se cuelan en mi coño a la vez que su lengua roza las zonas sensibles de mi culito, grito como una perra en celo, nunca pensé que se pudiera sentir así... tengo la boca seca y mis manos se aferran a la sabana con fuerza cuando al separar su lengua intruduce su dedo corazón en mi ano... Acompaño sus movimientos levantando mis caderas y quedando recostada en el colchón con el rostro y con el culito en pompa de rodillas, y es en ese instante cuando...
De repente se abre la puerta entrando una tenue luz en la habitación, las dos al unisono nos damos la vuelta sobresaltadas ante el acontecimiento... No pensé que empezarais sin mi.. María muy nerviosa intenta decir algo, pero solo puede mirarme y volver a mirar a su marido con cara de culpabilidad, en sus fantasías nunca habían previsto que fuera ella sola la que se acostara con Elena, mientras...mi cuerpo todavía saborea el placer de hace unos segundos.En el quicio de la puerta Nestor pregunta... Me dejais unirme a mi???
María me mira como pidiendo mi aprobación... en mi interior lo deseo, nunca me había sentido igual que cuando he estado con María, pero necesito volver asentir como una polla me llena, necesito sentir de nuevo esa sensación...
• Me encantaría Nestor
Mientras Nestor se desnuda nuestros cuerpos se funden denuevo en un abrazo de lujuria, yo premanezco sobre María mientras nuestros dedos se cuelan entre las piernas y acarician nuestros coñitos calientes e hinchados, nos fundimos una y otra vez en besos que no logran saciar nuestra sed. En unos segundo ya siento tras de mi a Nestor, su lengua se ha colado entre mis nalgas y acaricia dulcemente mi ano mientras Maria introduce sus dedos en mi húmeda vagina,
La sensación es aluciante, su lengua roza una y otra vez alrededor de mi culito lleno de terminaciones nerviosas que me hacen estremecer de placer, tras unos minutos de caricias, siento como su dedo se introduce poco a poco en mi, produciéndome una sensación nueva hasta ahora, una mezcla de molestia y placer, esa ligera presión hace que mi cuerpo se tense de repente, no esperaba eso... es una situación nueva para mi, aunque es tal el deseo que siento que cualquier cosa que pase se que sera inolvidable.
Su dedo corazón se introduce una y otra vez en mi culito, mientras comienzo a sentir como la molestia ha desaparecido y comienzo a saborear el placer de sus dedos resbalando una y otra vez dentro de mi, unas sensaciones que se unen a las que ya me hace sentir María con sus maravillosos dedos rozando mi coñito babeante. Nestor se detiene por un segundo y parece haber desaparecido del lugar... tras unos segundos comienzo a sentir como el aceite baja por mi culito y sus dedos lo esparcen por el ano, esparciéndolo con suavidad por cada uno de sus rincones, vuelve a meter el dedo esta vez entra si el mayor problema, lo saca y vuelvo a sentir el aceite sobre mi, todo mi ano esta empapado y comienzo mover mis caderas al compás de su dedo en mi...
Sus manos sujetan mis caderas, siento como sus fuertes manos sujetan mis caderas y me atraen hacia el, en ese instante siento como su polla roza mi culito empapado por el aceite, siento como una pequeña presión y todo mi cuerpo se tensa, estoy muerta de miedo y mis manos se vuelven a entrelazar con las de Maria, ella me mira a la cara y me dice..
• Tranquila mi niña yo estoy aquí confía en el.
Cierro los ojos y me preparo para el momento de sentir su furia entrando en mi... tengo miedo, mucho miedo, pero a la vez lo deseo, necesito que ese hombre penetre en mi una y otra vez, necesito sentir de todas las formas posibles su polla en mi...Comienzo a sentir la presión cada vez mas intensa, cada vez se parece mas y mas al dolor, sin embargo lo deseo con todas mis fuerzas, Nestor comienza a penetrar centímetro a centímetro cada vez un poco mas a dentro, cada vez mas presión... sale de mi y vuelvo a sentir el aceite impregnando todo mi ser, sus dedos empapados colándose en mi culito con facilidad y tras eso, su polla de nuevo a las puertas empujando de nuevo, cada vez con mas fuerza se abre paso en mi como un toro en el callejón. Cuando se encuentra a mitad de camino dentro de mi, se detiene por un segundo, su cuerpo me encula con una fuerte embestida y todo su miembro erecto entra en mi como un cuchillo en una naranja, siendo un dolor agudo y lanzo un grito de autentico dolor, mis manos se aferran a las de María que me mira con dulzura, Nestor se detiene con su pene clavado por completo dentro de mis entrañas y tras unos segundos comienza a moverse muy despacio, apenas se aprecia el movimiento pero mi cuerpo sigue tenso...
He caido sobre María mientras mis manos rodean su cuello y se sujetan firmes a la almohada, mi cara cae recostada sobre el hueco de su hombre y su cara, mientras gemidos de dolor se mezclan con el ruido de su cuerpo colpeando mis nalgas en cada acometida, María me susurra al oído...
• Tranquila mi niña pronto pasa el dolor y estoy aquí a tu lado..
• Ahhh me duele, dios mio me va a romper, no puedo
Casi llorando continuo recostada sobre María mientras mi cuerpo continua con el culito en ponpa. Nestor me sujeta firmemente e introduce su polla una y otra vez sin compasión, sus huevos golpean mi culo mientras el chasquido de los cuerpos sonando se acelera por momentos.
Casi sin darme cuenta el dolor ha desaparecido, María ha vuelto a jugar con sus manos en mi coñito y cada embestida de Nestor hace que los gemidos amargos sean de lujuria de pasión...
• Ahh sigue, no pares, dios mio no pares...
• Me gusta, me gusta, sigue no pares, llename de ti, ahhh ahhh
Estoy completamente loca de lujuria, sentir a Nestor entrando en mi culito mientras María acaricia mi coño es un placer inexplicable y tras unos instantes, siento como todo mi cuerpo comienza a abandonarme, mis caderas comienzan a cunvulsionar a la vez que llego al clímax, mi cuerpo se estremece, y grito como una autentica perra en celo, mientras... siento como Nestor comienza a moverse con mas furia, sus manos se aferran con fuerza a mis caderas y su cuerpo se convulsiona una y otra vez, mientras a la vez que lanza un gruñido de placer siento como chorros de esperma cálido entran en mi y me llenan...
Permanecemos los tras recostados sobre la cama hasta la mañana siguiente, tras la tempestad reina una calma tensa, demasiadas cosas han pasado... estoy ahí en una cama en mitad de un matrimonio, el olor del sudor mezclado con el pecado lo impregna todo, jamas los hubiera imaginado... y sin embargo soy feliz, mi corazón sigue latiendo con fuerza horas después...
A mis 12 años, con unas chavas de 12 13 y 14, algo nuevo para mi, mi iniciacion hacia el sexo, practicamente una orgia con ellas y con mis amigos, simplemente algo que recordare por el resto de mis dias.
Relato erótico enviado por Anonymous el 08 de June de 2004 a las 09:55:40 - Relato porno leído 465074 veces
La lleve a su recamara dentro los aposentos de la iglesia, ella repetía que era una locura pero también ya estaba caliente, lo note por su humedad que tenía ya en su vagina, ella me dijo que nunca había estado con un hombre y que no sabía ni como se hacía el sexo más yo le dije, “No te preocupes mamacita yo te guio” le subí totalmente su vestido y le abrí sus sexys piernas.
Relato erótico enviado por reycolegial el 07 de September de 2009 a las 16:44:00 - Relato porno leído 201047 veces