Esta vez la morena se peleara con su hermano, pero terminaran en una placentera "reconciliacion"
El 4 relato del gran escrtitor Tillman
Por si se lo preguntan mande "La Colegiala III" pero parece que no permitieron la historia, porque la envie 2 veces y aun no aparece... bueno sera
Relato
Susana esta en su habitación reuniendo sus cosas, no tendrá clases durante una semana y ahora planea juntarse con sus amigas para irse a la playa. Con la plata que ganó la semana pasada tiene más que suficiente para estar unos días, sin embargo problemas se le vienen encima. En ese momento aparece Andrés, el hermano menor de Susana, y le dice que la necesitan en el living, “¡deja de fastidiar!” le dice ella sin creerle, “si quieres vas sino le diré a la mama que te venga a buscar”, de malos modos Susana va. La morena encuentra a sus padres sentados en el living esperándola y por la cara que tienen ella siente que se dirige frente a un pelotón de ejecución.
Se queda con la boca abierta cuando sus padres le dicen que ella no ira a ningún lado, esta castigada hasta nuevo aviso, Susana reacciona furiosa exigiendo saber por qué, “¿¡Por qué!?, ¡por estas horribles notas que tienes!” le responde su papá muy molesto mostrándole la libreta de notas. Susana no lo puede creer, su panorama perfecto arruinado y sus padres aún no terminan, “¡deberás estudiar con Andrés hasta que subas tus notas y empezarás aprovechando que estas de vacaciones por una semana!”, esto último no se lo esperaba ni Susana ni Andrés. Ella furiosa se va llorando, Andrés por su lado solo piensa en el lió que se le viene encima.
Decir que Susana y Andrés se llevan mal es decir poco, en el mejor de los casos su relación es difícil. A pesar de ser hermanos ambos son tan diferentes como el día y la noche, Susana es muy extrovertida con gran personalidad y con un carácter bastante fuerte, Andrés por su parte es más tímido y callado, hasta sumiso en ocasiones y continuamente debe aguantar la actitud tan prepotente de Susana hacia él. Por otro lado mientras que Susana es una pésima estudiante Andrés es uno muy brillante con excelentes notas, esta en otro colegio a petición de él, aunque Susana no sabe el motivo, ella cree que su hermano la detesta y siempre anda pensando lo peor de él sin siquiera considerar que puede estar equivocada.
Andrés decide dejar sola a Susana para que se calme, al día siguiente va hablar con ella pero Susana lo trata muy mal, esta vez va demasiado lejos y Andrés la confronta, le dice que no es culpa de él, que siempre la ha ayudado cuando ella se lo ha pedido y que es muy injusta al tratarlo así, pero Susana no lo escucha y solo sigue atacándolo solo por culpar a alguien que no sea ella misma. “¡Para ti es fácil decirlo, como te sacas buenas notas y eres el consentido, a ti no te humillan de esta forma!”, esta vez Andrés se enoja de verdad, “¡y tú qué sabes, ¿sabes lo que es humillarse?, tú te enojas conmigo por que te quiero ayudar como lo he hecho siempre, siempre me atacas, siempre me insultas, siempre me tratas mal, si quieres que te ayude, bien, sino vete al mismísimo infierno, y sabes que más, en ocasiones es un verdadero martirio ser tu hermano!”, Andrés toma sus cosas y se va dando un violento portazo tras de él. Susana queda totalmente descolocada por su reacción, jamás le había hablado o más bien gritado de esa forma, pero ella igual no quiere saber nada de él.
Los días siguientes ambos no se dirigieron la palabra ni por accidente, el ambiente entre ellos es muy tenso. Andrés se comporta de forma muy dura con ella, con suerte le habla y en ocasiones la ignora completamente. Susana esta muy desconcertada por ello, aunque siempre pelean nunca Andrés había actuado así con ella.
Una tarde Susana consigue salir de su “encarcelamiento”, fue al centro comercial a dar una vuelta, se toma un helado y aprovecha de vitrinear un poco viendo en que gastar la plata que se ha ganado en vista que sus planes se frustraron. Como no ve nada interesante regresa a su casa caminando. Esta a un par de calles de la casa cuando ve a su hermano, que había salido, regresando también, un poco más atrás vienen tres amigos de él, Susana ubica a dos de ellos, por la cara de Andrés no anda de muy buen humor, Susana se acerca sin que la vean.
“¿Así que tiene una hermana muy buena?” dice en voz alta uno de los amigos de Andrés, precisamente aquel que Susana no conoce, “en serio, es una morenita que tiene un cuerpo de miedo, es la chica más popular en su colegio y con las tremendas tetas que tiene no es para menos”, Andrés se muerde la lengua ante esos comentarios, “hace unos días la vi en el centro, tiene unas piernas y un culo de miedo, ¿no es cierto cuñado?” hablándole a Andrés que sigue haciéndose el sordo. “Con esa boquita que tiene ya me gustaría tener mi verga metida entre esos carnosos labios”, “a lo mejor es tan popular por que se la pasa mamando pollas, debe ser una experta”, “ya lo creo” agrega otro riéndose. Ella esta muy ofendida por esos comentarios. Susana será muy mala con Andrés pero para él ella aún es su hermana mayor y la quiere mucho a pesar de todo, aunque él nunca se lo ha dicho, así que decide poner las cosas en orden y no duda un instante en ponerse a pelear con ellos por hablar así de su hermana, Susana observa anonadada lo que ocurre. Andrés recibe sus buenos golpes también pero consigue dejarlos fuera de combate a todos, Susana después lo ve alejarse, ella apura el paso para llegar a la casa.
Ambos se encuentran cuando Andrés venia saliendo del baño, ella se impresiona al verlo con un ojo bastante hinchado y varios moretones en la cara, aun sangra de sus labios, Andrés la mira pero no la saluda y se va a su pieza. Susana no sabe que decirle, siente un gran remordimiento de conciencia, ella tratándolo tan mal y él peleando con medio mundo por defender su honor. Tragándose su orgullo Susana va a hablar con él, al principio le toca varias veces la puerta pero él no abre, Susana entra por su cuenta y lo ve acostado en la cama leyendo una revista. “Ahora que quieres, vienes a culparme de todo otra vez o a burlarte” le dice de forma muy agresiva, “vengo a disculparme” le responde Susana que se sienta a su lado, sobre el escritorio ve una foto donde aparece ella en la ultima navidad.
Al principio Andrés no le cree nada, pero Susana insiste y le dice que vio lo que ocurrió, Andrés baja la cabeza. “¿Esto había pasado antes?” le pregunta ella conmovida hasta las lagrimas, “sí, varias veces, por eso nunca quise que estuviéramos en el mismo colegio” le responde él. Ahora Susana entiende todo y ve que él tiene razón, si estuvieran juntos él se la pasaría peleando con sus compañeros de curso por ella, además Susana sabe muy bien las cosas que ha hecho. Con lágrimas en sus ojos ella le pide perdón por haberlo tratado tan mal y le da un abrazo finalmente haciendo las paces, “ven, ahora necesito tu ayuda para salir del lió en que estoy metida”, “ya lo creo” le responde Andrés, Susana le hace una pequeña curación en la cara y en el living de la casa ambos se ponen a estudiar con Susana poniéndole mucha atención.
Poco a poco se va creando una relación de confianza y se van conociendo mejor, pero Andrés aún se muestra reservado en temas personales a pesar de los esfuerzos de Susana por sacarle algo más. Andrés intercede ante sus papas para que le levanten los castigos a ella, no consigue mucho pero al menos Susana ya puede salir ocasionalmente. El fin de semana los padres de ellos salieron de la ciudad tras recibir la invitación de unos amigos. El sábado en la noche Susana invita a Andrés a que la acompañe a una fiesta, pero él no quiere ir, finalmente le reconoce a Susana que el no sabe bailar, “no importa yo te enseño” le dice ella riéndose, al final lo convence. Andrés se cambia de ropa y en el living espera a Susana, él se queda con la boca abierta cuando la ve aparecer con su pelo negro tomado en un simple moño, usando un peto con tirantes y con un profundo escote que prácticamente no esconde nada y una diminuta minifalda de mezclilla. “¿Y tú sales vestida así?” le pregunta él, “no seas tan anticuado, ¿y, como me veo?”, “muy bien” le responde él, sin duda alguna Susana se veía espectacular, muy guapa y muy sexy también, “esta será una larga noche” se dice Andrés a si mismo.
Apenas llegan a un lugar Susana esta en su ambiente, se encuentra con sus amigas y les presenta a Andrés, “Salí con un guardaespaldas hoy” comenta ella en todo de broma. Susana se toma varias copas y después sale a bailar con unos amigos, Andrés esta sentado en una mesa algo alejado bebiendo un trago, le molesta cuando ve a su hermana bailar con otro tipo y este la toma de las caderas. Susana de cuenta y comienza a bailar cada vez de forma más provocadora aún. Andrés esta bastante atento a su hermana, y aunque le moleste admitirlo sus amigos tiene razón cuando dicen que Susana esta muy buena. La morena por su lado se ha tomado varias copas más y se le nota en su rostro, ella invita a Andrés a bailar pero este no quiere, finalmente ella habla con una amiga, algo le dice al oído y mira a Andrés, ambas comparten una sonrisa. Él seguía tomándose un trago y conversando con algunos amigos de Susana, de pronto la observa bailar con otra chica, ambas están abrazadas y se mueven con sensualidad, Andrés esta hipnotizado cuando ve como Susana carga sus grandes pechos contra su amiga, ellas quedan cara a cara y Andrés observa como casi se dan un beso, Susana lo esta calentando. La otra chica toma a Susana de las caderas y la pega contra su cuerpo abrazándola de la cintura y subiendo lentamente sus manos casi hasta tomarle los pechos y le da un delicado beso en el cuello, Susana actúa de igual forma moviéndose de una forma muy insinuante.
“¡Ven aquí!” le dice Susana a Andrés, lo toma de las manos y lo saca a bailar, la morena es un verdadero trompo en la pista de baile, Andrés esta impresionado al verla mover sus caderas y su culo con total desenfreno, sus pechos se agitan vigorosamente bajo su peto y él no puede evitar observárselos a través del amplio escote, Susana también esta excitada por estársele insinuando a su hermano de esa forma. Sin embargo Susana comienza a sentirse mal, esta muy mareada, de hecho esta ebria, esto sumado a unos tipos bastante molestosos hacen que Andrés decida llevársela a la casa para evitar algún problema.
Al llegar a la casa Andrés lleva a Susana en brazos al baño donde ella de inmediato comienza a vomitar por haber bebido demasiado, él esta muy preocupado por su hermana. Luego de un rato Susana se siente algo mejor, él le prepara un café y la lleva a su dormitorio, “será mejor que te acuestes de una vez”, Susana aún mareada le asiente con la cabeza. Andrés baja a la cocina, ordena todo y después va a ver a Susana. Al entrar en su pieza ella se esta sacando su minifalda y la observa usando un diminuto calzón, avergonzado mira para otro lado, “no seas tonto, no tengo nada que no hayas visto antes” le dice Susana. Ella se mete a la cama usando aun su peto y ropa interior, esta tan mal que no fue capaz de ponerse ropa de cama, “te dejo, mejor será” le dice Andrés, él va saliendo cuando Susana le habla, “oye, tengo frió, por que no te acuestas conmigo”. Andrés duda pero al final Susana lo convence y él se acuesta a su lado en polera y calzoncillo. Ella se da media vuelta y lo abraza apoyando sus pechos sobre él.
Susana se mueve mucho en la cama, esta inquieta, de pronto ella se da vuelta y queda dándole la espalda a Andrés, Susana tiembla de frió y su hermano se le acerca envolviéndola con sus brazos, sin embargo por accidente apoya su miembro contra el culo de Susana y le da una punteada. Andrés se sonroja y trata de alejarse pero solo consigue restregar su miembro que ya se ha puesto bien duro contra el gran culo de su hermana, su verga esta cada vez más erecta y él tiene serios problemas intentando ocultar su erección. “Vaya, parece que estas contento de verme” le dice en broma Susana al sentir como él la puntea de forma involuntaria. Andrés se avergüenza, “mejor me voy a mi habitación” rápidamente se pone de pie y se aleja, pero Susana lo toma de la mano y lo tira de vuelta a la cama, “¡ah no, eso no!”. Ella lo deja acostado sobre la cama y Susana se le monta encima, “dime una cosa, cuándo estaba bailando con mi amiga y después contigo, ¿te excitaste verdad?”, Andrés no sabe que responderle, la actitud tan desinhibida de ella lo desconcierta, lentamente Susana mueve sus caderas frotando su pubis contra el duro bulto que hay bajo la ropa interior de Andrés. Ella le toma una mano y la lleva hacia sus pechos, Andrés no sabe que hacer, esta muy excitado pero a pesar de la calentura le tiene un gran respeto a su hermana.
Ambos se miran a los ojos, ella continua apretando la mano de Andrés sobre sus senos y también sigue moviendo sus caderas, “te preguntaré algo más, ¿has tenido sexo alguna vez?”, algo avergonzado Andrés le responde no. Susana sonríe, “tú has sido muy bueno conmigo y siempre te has preocupado por mí, me has enseñado a estudiar, ahora déjame enseñarte a follar”, Susana le da un ardiente beso, el más ardiente que ella le ha dado a un hombre. Al principio Andrés es tomado por sorpresa pero pronto le sigue el paso, con más confianza le toma los pechos y se impresiona por la firmeza y el tamaño de los mismos, Susana estira una mano y le masajea el miembro que cada vez esta más duro y tieso. Ambos hermanos siguen besándose y acariciándose mutuamente.
La morena se yergue sobre su hermano, con un rápido movimiento se quita su peto dejando sus senos al descubierto, Andrés los observa atraído por su tamaño y forma, sus pezones se ven erectos y Susana lo invita a que se los acaricie. Luego ella se los pasa sobre el rostro a Andrés que de inmediato comienza a lamerlos y chuparlos, “eso es, así mismo, chupa mis pezones, lo haces muy bien” le dice ella. Andrés le agarra el culo a Susana, ahora ella agita sus caderas con más fuerza haciendo que la verga de Andrés se ponga más dura y que su coño se ponga más ardiente también. Susana le quita polera a Andrés y le besa su pecho, lentamente baja por el recorriéndolo con su lengua hasta llegar al bulto. Susana lo atrapa con su boca sin sacarle el calzoncillo, lo aprieta, le masajea los testículos y lo acaricia con la punta de su lengua. Lentamente se lo baja hasta dejar su verga al descubierto, “nada mal” le dice ella con una coqueta sonrisa dibujándose en sus carnosos labios, la verga de Andrés es más grande y gruesa de lo que aparentaba y eso le gusta a Susana.
Ella ensaliva sus manos y se la frota con mucha fuerza, la recorre de arriba abajo, Susana observa como Andrés tiene cerrados los ojos mientras ella le da placer. Con su boca le acaricia sus testículos y después sube por la verga acariciándola con su lengua hasta llegar a su roja cabeza, ella le da rápidas lamidas a su glande para después envolverlo con sus labios y mamarla con mucha intensidad. Susana se la traga toda, la saborea y le hace una tremenda mamada esmerándose mucho en hacerlo gozar, el hecho de estarse follando a su hermano y el que además sea virgen la pone más caliente aún. Andrés comprueba por cuenta propia lo que sus amigos insinuaban acerca que Susana sabía lamer pollas y lo hace muy bien. “¿Quieres algo más?” le pregunta Susana al ver la cara de extasiado que él tiene, “ahora con tus tetas” le responde él. Susana le concede aquel gusto. Con sus impresionantes pechos atrapa la verga de Andrés y la frota incesantemente, mientras lo hace con la punta de su lengua le acaricia el glande que parece que va a explotar, Susana no se detiene y sigue haciéndole una paja con más fuerza cada vez, de pronto él se corre entre sus tetas salpicándole la cara además. “Lo lamento” le dice Andrés algo avergonzado, “no te preocupes, es tu primera vez, además con la mamada y la paja que hice no me extraña que te ocurriera, pero yo la pondré en forma nuevamente” le dice Susana muy segura.
La morena se pone de pie en la cama y se quita su calzón frente a la cara de Andrés, ella se humedece sus dedos y se los mete en su coño descaradamente. Luego se pone sobre él haciendo un 69, “ahora quiero que me hagas gozar, usa tu lengua y tus dedos en mi coño”. Andrés se muestra dubitativo, tímidamente se lo empieza a lamer mientras Susana vuelve a poner en forma la verga de Andrés con su boca. “Vamos, con más ganas” le exige ella. Andrés la toma con fuerza y de una vez hunde su lengua en el coño de su hermana moviéndola dentro de su sexo, Susana se agita sobre él para sentir más adentro la lengua de Andrés, “¡así se hace, oh si, vamos más fuerte y más rápido!” le ordena ella que continua haciéndole una mamada, Andrés ya ha tomado confianza y se anima a follarla con los dedos haciendo gemir a su hermana, “en realidad eres una calentona” le dice él.
Susana tras dejar en forma la verga de su hermano se acuesta a su lado, “ahora ven aquí, vamos a ver de lo que eres capaz”. Susana separa ampliamente sus piernas, Andrés se ubica entre ellas y Susana toma su miembro y lo guía hacia su coño, “empuja con fuerza”, un ardiente gemido deja escapar la morena al ser empalada por su hermano. Andrés se carga con mucha fuerza sobre ella metiéndosela toda. Él comienza a darle con rapidez pero Susana lo controla, “espera, espera no tan rápido, más pausado, eso es, ¡ah!, así mismo o te correrás muy pronto”. Como buen estudiante Andrés deja que su “profesora” lo guié. Ambos se besan como locos, intercambia caricias y él no deja de lamer los pechos de su hermana. Susana lo envuelve con sus piernas y aprieta contra su cuerpo, “¡se ve que eres buen alumno, aprendes rápido!” le dice ella con su voz entrecortada por los gemidos. Susana cambia de pose y se le monta encima, Andrés le toma sus pechos y Susana le cabalga salvajemente sobre su verga, para Andrés el escuchar a su hermana gemir como loca y ver sus pechos y su larga cabellera negra agitándose vigorosamente ante cada embestida que él le da es todo un espectáculo, su verga la recorre incesantemente y ella le da con todo. De pronto él la abraza y le da un beso, entonces Susana lo siente correrse y ella hace lo mismo, ambos quedan rendidos sobre la cama.
“Y bien profesora, ¿cómo lo hice?” le pregunta él, “nada mal, nada mal, el sexo es como las matemáticas, entre más lo practicas mejor lo dominas” le responde ella mientras recupera el aliento. “¿Qué hora es?” pregunta Andrés, “van a ser las 4 de la mañana, ¿por qué?”, “los viejos no van a llegar hasta las 9 por lo menos, que te parece si seguimos practicando”, Susana lo mira con una sonrisa, “bueno, ya que lo propones” y la morena vuelve a la carga sobre la verga de su hermano para ponerla en forma una vez más. Tal como dijo Andrés anteriormente aquella fue una larga noche, pero de sexo con Susana.
Relato erótico enviado por Anonymous el 14 de December de 2007 a las 13:35:08 - Relato porno leído 784633 veces
Si te ha gustado La Colegiala IV vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar La Colegiala IV.
phantom_n
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
phantom_n
(8 de November de 2010 a las 02:57) dice:
he tratado muchas veces de enviar la colegiala 5 y 6, pero nunca aparecen, porke pasa eso? si alguien sabe que me responda phantom_n
(7 de October de 2010 a las 00:02) dice:
una correccion, La Colegiala III si esta en esta web, crei que no la habian permitido pero si esta, busquenla y no olviden votar y comentar lobocalientee
(1 de February de 2011 a las 17:49) dice:
MUY buen relato mi amigo me pones muy duro, espero mas de esta rica Ciolegiala la 5 y 6 que no aparecen
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