la Colegiala X

Esta mañana Susana esta más alegre de lo habitual, se levanta de muy buen humor, algo de lo más inusual siendo que Susana detesta levantarse temprano, y desayuna junto a Andrés. “¿Qué te traes entre manos?” le pregunta Andrés, “¿yo?, nada” responde haciéndose la tonta, pero él algo sospecha. “Cuando andas así realmente me das un muy mal presentimiento” comenta Andrés, Susana lo mira de reojo con una gran sonrisa en sus labios como si estuviera conteniendo la risa.

Andrés esta en su habitación leyendo una revista tras volver de clases cuando siente que alguien ha llegado, como no ve autos afuera supone que es Susana. Al salir de su habitación escucha una serie de risas y carcajadas, al principio él cree que Susana esta con alguna amiga, sin embargo a poco andar esa voz se le hace familiar. Al bajar al living se encuentra con alguien a quien no había visto en un buen tiempo y a quien ciertamente no deseaba volver a ver. “Vaya, vaya, vaya, si es el pequeño Andrés, por lo visto algo has crecido bastante” le dicen con un tono algo burlesco, Andrés aprieta los dientes y no disimula para nada su malestar “y por lo visto tú aun pareces una pu---“, en el momento en que Andrés le iba a responder aparecen sus padres y él se queda callado. “Te quedaras con nosotros un tiempo mientras tus padres regresan” dice la mama de Andrés, “¡genial!, lo ultimo que necesitaba” dice Andrés en voz alta ganándose codazo en las costillas de parte de su hermana.

El motivo del malestar de Andrés tiene nombre, Ángela, su prima. Ángela es un año mayor que Susana, ambas son uña y mugre y cuando se reúnen son simplemente terribles. Andrés no la quiere cerca por ningún motivo, apenas la soporta ya que tiene pésimos recuerdos de ella. Ángela es muy alegre y extrovertida es muy parecida a Susana y por ello ambas se llevan muy bien. Cuando eran niños Ángela siempre andaba molestando a Andrés y haciéndole bromas de todo tipo, algunas bastante pesadas, él aun se acuerda cuando su prima le bajo los pantalones en plena calle o cuando le puso agua ardiente a un jugo que estaba tomando o la vez en que rompió una figura de porcelana de su tía e hizo que lo culparan a él por ello.

“¿Y bien, donde voy a dormir?” pregunta Ángela, “¡con el perro!” le dice Susana en tono de broma, “por su puesto que no eso seria terrible” dice Andrés con sarcasmo, “gracias tan considerado, ¿se te conmovió el corazón por mi?”, “lo digo por el perro, seria terrible que te tenga cerca toda la noche” contesta él. Susana nuevamente lo golpea en las costillas, definitivamente él no quiere cerca de su prima. “Entonces podríamos dormir juntos, ¿Qué te parece?, Susana me ha hablado bastante de ti”, al tiempo que le dice esto Ángela se le acerca poniéndose frente a él, “¡en tus sueños cabeza de cobre!” responde Andrés en clara alusión a la frondosa cabellera pelirroja de su prima. Tras decir esto Andrés se quita a Ángela de encima con algo de rudeza y se va a su habitación visiblemente ofuscado. “Por lo visto aun se acuerda de todo” comenta Ángela con cierta pesadumbres, “ya se le pasara” le dice Susana.

Ángela posee un rostro de facciones más suaves y nariz respingona, además posee ojos negros grandes y muy bellos y se tiño el pelo de un vivo color rojo cosa que contrasta con su blanca piel. Su figura es bastante sugerente, muy comparable a la de Susana, aunque Ángela es algo más recatada a la hora de vestirse, en todo caso su busto es considerable aunque no tanto como el de Susana. Los padres de Ángela salieron fuera del país así que durante un tiempo así que ella les hará compañía pese al evidente disgusto de Andrés.

La relación entre Ángela y Andrés siempre fue bastante distante, en especial por que Ángela se aprovechaba de la ingenuidad de su primo para hacerle bromas de todo tipo cuando eran niños. Sin embargo un día Andrés simplemente no dio más y terminó dándole un violento golpe en el rostro a su prima, desde entonces él no la tolera. Más tarde Ángela lo vio llorar con su mama preguntándose por que su prima era tan mala con él si nunca le había hecho algo. Ángela, a pesar del golpe que recibió, sintió un fuerte remordimiento de conciencia tras verlo y cuando quiso disculparse ya era demasiado tarde, Andrés simplemente se arrancaba cada vez que la veía o no le hablaba, incluso en fechas como Navidad y año nuevo evitaba dirigirle la palabra pese a que Susana trataba de mediar entre ellos y cuando lo hacia era simplemente por que lo obligaban pero jamás volvió a confiar en su prima otra vez pese a los intentos de Ángela por disculparse y hacer las paces.

Susana y Ángela van al mall después de clases, la pelirroja aun se lamentaba por que no ha podido hacer las paces con su primo y fue en ese instante cuando Ángela ve a Andrés con un grupo de amigos. Mientras Ángela se toma un helado Susana observa lo que ocurre. Andrés tiene compañeros bastante molestosos y ahora lo fastidian por que no tiene polola e incluso algunos le dicen que si acaso es gay. Ellas siguen con mucha atención lo que sucede. Andrés esta comenzando a perder la paciencia, en especial tras escuchar comentarios acerca de su hermana, y para intentar sacárselos de encima les dice que su polola esta en clases ahora, pero ellos no le creen. Al ver que la cosa esta comenzando a ponerse tensa sorpresivamente Ángela se pone de pie y va hacia él, Susana la sigue de cerca sin saber que trama su prima.

Los intercambios de palabras son cada vez más ásperos y Andrés esta perdiendo la paciencia y visiblemente incomodo con las burlas cuando Ángela aparece de improviso entre todos, “hola mi amor” le dice a Andrés y le da un apasionado beso en la boca, Susana le hace un gesto para que le siga la corriente. Ángela se presenta a si misma como la “polola” de Andrés haciéndolos callar a todos. Los amigos de él se quedan sorprendidos por la belleza de Ángela, “esto no se hace hombre debiste presentarnos antes a esta belleza” dice uno, “mucha mujer para ti” agrega otro, “hablas de picado, para que sepas Andrés es más hombre de lo que te imaginas” responde Ángela y rápidamente ella lo saca de ahí llevándolo abrazado en medio del desconcierto de Andrés, evitando de esta forma que sus amigos sigan molestándolo.

Al salir del Mall Ángela le suelta la mano a Andrés y este la queda mirando, “¿hacemos las paces?” le dice ella ofreciéndole la mano, “si te hubiera querido molestar ya lo habría hecho”, agrega Ángela. Andrés la mira a los ojos y finalmente acepta las disculpas de Ángela y en agradecimiento a ambas las invita a comer para poner definitivamente las diferencias a un lado, de paso Andrés se disculpa por el puñetazo que le dio tiempo atrás pero para Ángela el asunto ya esta superado, “se perfectamente que me lo tenia mecido” agrega después la pelirroja.

Andrés siempre había sabido que Ángela y Susana se llevan muy bien, pero nunca pensó que tan unidas eran hasta que de forma involuntaria las escucho hablar una noche. Como sus padres no están ellas sacaron varias botellas de cerveza y están bebiendo en la habitación que comparten Andrés había ido a la cocina a buscar un vaso de agua cuando al regresar a su habitación las escucha conversar. Al principio su intención era la de entrar a conversar con ellas pero comenzó a poner atención a lo que hablan. Cada una describía las experiencias que han tenido y Andrés sonríe cuando Susana le cuenta a su prima algunas de ellas, en especial en las que él aparece. Fue en ese momento donde se entero que Ángela y Susana han tenido varias experiencias entre ellas y de hecho ahí mismo comenzaron a hacerlo. Él se queda estupefacto cuando comienza a escuchar los besos y gemidos de ellas cuando empezaron a follar, desafortunadamente la curiosidad traiciona a Andrés que se apoya demasiado en la puerta y esta se abre de improviso.

Ángela y Susana están desnudas sobre la cama, Ángela encima de su prima. Ellas se quedan sorprendidas al ver a Andrés y él no sabe que hacer ni decir por esta intromisión, “lo siento” fue lo único que se le ocurre decir pero antes que él alcance salir de la habitación Ángela y Susana lo detienen y lo tiran sobre la cama. Totalmente tomado por sorpresa Andrés no alcanza a reaccionar cuando ellas usando unos cordones de zapatos y una bufanda lo amarran a la cama. “¡Ya esta suéltenme inmediatamente o las ahorcare a ambas!” rugía molesto Andrés mientras forcejea para liberarse, “nada de eso, ahora tendrás que pagar una penitencia por estarnos espiando” le dice su hermana.

La pelirroja algo le habla a Susana al oído mientras Andrés las observa atentamente. “En vista que hicimos las paces yo creo que es de mostrarte que no soy tan mala como creías” le dice Ángela y antes que él le diga algo ella le sella sus labios con un ardiente y apasionado beso metiendo su lengua en la boca de Andrés también le baja el pantalón dejando su verga al descubierto. Entre Ángela y Susana lo besan y comienza a hacerle una mamada, él aun intenta liberarse pero ellas lo amarraron bastante bien, al final Andrés se rinde.

Él observa como Ángela y Susana pasan sus labios y sus lenguas por su miembro, en especial su prima se muestra muy ansiosa tragándosela toda y envolviéndola con sus labios sin cesar mientras Susana le chupa sus testículos con delicadeza. Cuando ya la tiene bien erecta Susana se acerca a su prima y ambas se besan frente Andrés que las observa totalmente hipnotizado. Las lenguas de ellas se cruzan en cada beso y eventualmente se abrazan frotando sus pechos, el solo roce de sus pezones las hace ponerse a gemir. Ambas se recuestan al lado de Andrés y se manosean intensamente entre ellas, Susana desciende por el cuerpo de Ángela lamiéndole sus pechos cuyos pezones están notablemente erectos. La pelirroja separa sus piernas y estira hacia atrás sus manos cuando Susana hunde su rostro en el sexo de su prima. Los gemidos de Ángela excitan de sobremanera a Andrés que trata de zafarse para participar pero no puede. Susana le mete furiosamente los dedos en el rasurado coño de Ángela y usa hábilmente su lengua para estimular su clítoris. La pelirroja arquea su espalda y se retuerce ante tan intensas caricias.

Con un rápido movimiento Susana hace que Ángela se ponga en cuatro sobre la cama, la pelirroja, viendo lo excitado que esta Andrés, le pone sus pechos en la cara para que él los pueda degustar y con su mano lo pajea intensamente. Ángela, “¡dale, dale con más fuerza, mételos bien adentro!” le pide Ángela a Susana que mete y saca sus dedos de su coño. Susana le separa sus nalgas y carga la punta de su lengua contra el ano de Ángela. Disfrutando del momento la pelirroja volvió a ocuparse de la verga de su primo mientras la morena le devora ansiosamente su culo y su sexo.

Ángela no se pudo resistir al ver y sentir en su boca el miembro tan duro de Andrés, sorpresivamente ella se le monta encima y de una vez se entierra aquella verga en su sexo. De forma salvaje Ángela cabalga sobre Andrés, sus pechos se agitan con vigor mientras le da bien duro a su primo. Susana por detrás le toma sus pechos pellizcándole sus pezones y la besa en el cuello, sin embargo la morena pronto comenzó a meter sus dedos en el culo de su prima mientras ella recibe la verga de Andrés en su coño, él llega a perder el aliento dada la forma tan salvaje en que su prima se lo esta follando. Susana cambia de posición y aprovechando que su hermano esta inmóvil en la cama le pone su coño en el rostro y Andrés de inmediato se le empieza a lamer. Ambas chicas se besan mientras le dan con todo a Andrés, una acoge su verga y la otra su lengua, por instantes da la impresión que la cama se va a desarmar.

Susana no se queda de ociosa y cambia de lugar con Ángela, “¡oh si, esta más dura que nunca!” exclama la morena. Ángela decide devolverle el favor y le entierra con fuerza sus dedos en el culo, ella le hace un mete y saca bastante rápido que enloquece a Susana. La morena se besa con su hermano y Ángela no para de follarla por el culo, “¿te gusta por ahí verdad?” le dice la pelirroja viendo lo excitada que esta su prima. Susana le habla algo al oído y la morena se retira.

Ambas nuevamente se dan un gusto mamando la verga de Andrés, en ese momento Ángela nuevamente se pone sobre él pero ahora Susana coge su verga y la guía entre las nalgas de Ángela que lentamente se va dejando caer. Andrés observa como miembro se pierde en el culo de su prima y se va abriendo paso por su estrecho agujero. Ángela fuertes quejidos mientras le abren su estrecho ano, para la pelirroja es su primera experiencia anal. Lentamente al principio Ángela sube y baja por el miembro de Andrés, le cuesta acostumbrarse pero pronto el dolor inicial comienza a desaparecer y se transforma en puro placer. Susana hunde sus dedos en el coño de Ángela dándole unos ardientes besos además, la pelirroja gime como loca y cada vez lo hace con más fuerza sobre la verga de Andrés que suspira profundamente sintiendo su verga envuelta por el estrecho culo de Ángela.

De su armario Susana el consolador que hace un tiempo le regalaron, se lo mete en la boca a Ángela y ella mama un extremo y la morena el otro, Andrés esta estupefacto ya que él no sabia que su hermana tuviera tales cosas. Susana después lo toma con ambas manos y lo introduce en el coño de Ángela. Furiosamente se lo mete y saca mientras Ángela sigue bien empalada en el miembro de Andrés, a la pelirroja le llega a faltar el aliento en esos momentos. Susana separa ampliamente sus piernas y se mete el otro extremo. Ahora los tres follan entre si mientras Ángela se lleva a la mejor parte siendo penetrada en ambos agujeros al mismo tiempo. Susana se carga fuertemente con su prima que esta abrumada por las increíbles sensaciones que recorren su cuerpo, nunca había querido que la cogieran por el culo pero disfruta como loca de la verga de su primo bien metida en el y Susana se la folla al mismo tiempo por su coño. “¡Me voy a correr, me voy a correr!” les grita Andrés y Ángela le ruega que lo haga en su trasero cosa que finalmente ocurre.

Andrés, totalmente exhausto, acaba dentro de Ángela que siente algo muy tibio llenado su culo. Susana queda tendida en la cama rendida también. La pelirroja le pone su trasero en la cara y la morena lame el semen que dejo su hermano ahí tras correrse de forma tan abundante. Luego de un rato ellas están lado a lado de Andrés que respira muy agitado intentando recuperar el aliento. “Vaya realmente me sorprendes, eres muy bueno, cuando Susana me contó lo que hacían al principio no le creí mucho, ¿aun no me explico como no tienes polola?, tus compañeras de curso deben ser bastante estupidas” le dice Ángela mientras acaricia su cabello, “ahora eres tú mi polola o ya te olvidaste” le contesta Andrés. “¿Les puedo pedir que me suelten ahora?” agrega después, Ángela y Susana se miran entre ellas, “por supuesto que no, aun es temprano y nosotras tenemos muchas ganas de follar así que será mejor que pongas esa verga bien dura otra vez” le dice Susana muy seria, “¡hey, hey, hey ya cálmense no me parece gracioso estar amarrado aquí!”, “pero a nosotras si, además así te tenemos perfectamente controlado” le dice Ángela. Resignándose a su suerte Andrés acepta, “esta bien, si quieren mi verga dura de nuevo será mejor que me ayuden”, en ese momento Ángela y Susana se la empiezan a mamar otra vez y los tres se divierten con todo durante la noche.