Llegò en sabado dia en que nos habìa invitado a cenar Carmelita y desde luego que desde la misma tarde estaba yo a la vez que nervioso, ansioso a ver como reaccionarìa al encontrarnos ella y yo enfrente de mi esposa, sobre todo porque mi esposa ya habìa platicado con ella de cómo me habia comportado en su primera lección, mas bien introducción, de verga y no de los principios básicos de la enseñanza para operar una computadora, y además de que después de haberse reunido y haber recordado los tiempos en los que se provocaban el orgasmo mutuamente, habìan renacido, por lo que me calmaba internamente para dejar mi nerviosismo, por fin salimos hacia la casa y mi mujer iba vestida con una falda muy corta, y un sueter muy ajustado con un gran escote, en donde se le notaban claramente los pezones, y me preguntò que te parece mi atuendo?, Le contestè, como siempre mi amor con esa faldita y ese suéter haces que se me pare la verga nomas de verte, que bueno que vamos a una casa porque si no en la calle o en otro lugar, nomas provocas erecciones de verga y gente calentándose por tì, se rio y me dijo, asi me gusta que te provoque erecciones, ya que con eso te tengo dominado, para que no dejes de desearme, dicho esto se acerco dándome un gran beso en la boca y acariciándome sobre el pantalón mi verga semi erecta, y al subirse al automovil en camino a la casa de Carmelita me siguió sobando la verga pero ahora fuera de mi pantalón.
Llegamos a la casa y nos abrìo la sirvienta, pasándonos a la sala, y enseguida que se aparece Carmelita vistiendo tambien una minifalda y un sueter muy ajustado, con un gran escote y unas sandalias que sujetaban sus pies solo por unas tiras de piel mostrándolos completamente, y pintadas las uñas de un rojo subido, pareciendo que se pusieron de acuerdo ella y mi esposa para la ocasión, ya que al voltear a ver a mi esposa, tambièn calzaba unas sandalias casi idénticas y con las uñas pintadas del mismo tono que las de Carmelita, al acercarse a mi esposa le plantò un gran beso en la boca, diciéndole bienvenida querida amiga a la vez que le daba un gran abrazo, y a continuación que se me acerca dándome tambièn un beso en la boca y Abrazandome me dijo bienvenido mi maestro preferido, aquí està tu mejor alumna. Yo la abracè y nos invitò a sentarnos en el sofá quedando yo en medio de las dos, lógicamente que la cortedad de las faldas mostraba las piernas de ambas casi en el nacimiento de las mismas, por lo que se les veìa el triangulo de sus tangas cubriendo sus labios vaginales, nos ofreció una copa de vino y empezamos a charlar cordialmente comentando algunas de las noticias recientes, sin ninguna importancia y al poco rato se levantò hacia la mesa del centro poniendo algo de botana untada en unas galletas e inclinándose hacìa mì me la puso en la boca, y acercándose me mostrò generosamente sus grandes senos, lo que me empezó a poner la verga tiesa, asì lo hizo con mi esposa, quien al recibir la galleta la diò un apretón a sus senos diciéndole esos juguetes ya se quieren salir de su prisión y Carmelita contestò, esperate que ya pronto saldran; Seguimos bebiendo y tomando botana con galletas, y ahora se turnaban mi esposa y Carmelita para proporcionarme la botana en la boca y mostrarme lo generoso de sus atributos, en donde Carmelita tambìen acariciaba los senos de mi esposa cada vez que le ponia la galleta en la boca. Ademas en la platica yo no dejaba de ponerle las manos encima a las piernas de mi esposa, y tambìen a las de Carmelita quien se dejaba acariciar de buen agrado.
Después de algun tiempo la sirvienta anunciò que ya estaba servida la cena por lo que nos levantamos y llegando al comedor estaba iluminado solo por las velas en los candeleros, lo que daba un ambiente muy intimo, nos sentamos en el mismo orden que en la sala yo en medio y mis mujeres a los lados, como la mesa es redonda, me quedaron a la misma distancia las dos, durante la platìca Carmelita no dejò de darle de besos en la boca mi mujer y esta a ella diciéndole lo feliz que estaba al haberse re encontrado y al haber recordado viejos tiempos, y de vez en cuando tambìen a mì comentando que lo que iba a aprender con la computadora la harìa una experta gracias a mì, mi esposa comentò, bueno espero que algùn dìa prendan la computadora o nò?, nos reimos y les dije, bueno en cuanto mi alumna se uniforme de una manera practica, para llevar a cabo las lecciones, y ella me dijo, no te preocupes que ya tengo mi nuevo uniforme, mas formal, nos volvimos a reir, y asì prosiguió la cena entre platillo y platillo y entre copa y copa de vino, al final, nos paramos de la mesa y que le dice a mi mujer, acompañame a mi recamara, ya que te quiero mostrar algo, le diò instrucciones a la sirvienta, que sirviera los postres en la sala y que ya se podìa retirar, y me dijo, ahora regresamos esperanos un momento, mientras puedes empezar a disfrutar el postre, se subieron y me quedè en la sala a a esperar para comerme el postre que inmediatamente llevo la sirvienta, esta recogió todo y se despidió de mì desapareciendo en la cocina.
Al cabo de unos minutos, que oigo que me llama mi mujer desde arriba y me dice, por favor sube, y trae los postres, que consistian en unas bolas de helados recubiertos por una gran cantidad de crema; Asì lo hice y llegue a la recamara en donde no las encontrè, llamándolas, me dijeron en un momento salimos, siéntate, estaban en el vestidor, a los pocos momentos, que se aparecen vestidas con un mini bikini igual, dejándome con la boca abierta, y diciéndome, que te parece nuestro uniforme de amigas, les contestè formidable, se acercaron y Carmelita que pone un disco de música y que empiezan a bailar entre ellas abrazandose y acariciándose todo el cuerpo y dándose de besos en la boca, y mientras bailaban que me piden que las empiece a desnudar, a lo que inmediatamente me parè y a empezar a quitarles los brassieres dejando esos senos al descubierto, posteriormente que les quito la parte inferior del atuendo dejándolas completamente desnudas, y siguieron bailando muy apretadas hasta que termino la melodía, y mi esposa que le dice a Carmelita, ahora vamos a ver quien tiene los senos mas grandes, trae tu cinta para que mi marido nos mida, ella sacò de un cajón una cinta métrica y me la dìo, y empecé a medirles los senos, lógicamente los senos de Carmelita eran mas grandes que los de mi esposa, tambìen su cintura y sus nalgas, aunque no por mucho superaron a las de mi esposa, después de esto, mi esposa le dijo, a Carmelita, ahora déjeme ver como te quedo el trabajo de depilación que te hizo tu maestro, y la llevò a la orilla de la cama, la sentò y le levantò las piernas, mostrándonos su vagina completamente depilada, y me dijo ven acercate para que veas bien tu trabajo, me acerque y entonces mi mujer que se acerca y que empieza a besarle los labios vaginales y a meterle la lengua en su sexo, dandole masaje, entonces que Carmelita la retira y le dijo vamos a enseñarle a tu marido como nos provocamos los orgasmos, pero antes vamos a desnudarlo, y que empiezan a desnudarme y yo acariciando cada parte de sus cuerpos mientras ellas actuaban conmigo, después que se acuesta mi mujer boca arriba, y que se le sube Carmelita encima con la cara hacìa su sexo, y poniéndole el suyo encima de la boca de mi mujer quien enseguida empezo con su lengua a darle masaje en la vagina, y al quedar en esa posición quedò ante mi vista sus grandes nalgas y mostrando su culo, que me subo a la cama y que me pongo a gatas acercando mi verga a la cara de mi mujer, quien se dìo cuenta y me empezó a mamar la verga por momentos y a seguir mamando la vagina de Carmelita, ante la oportunidad que se me presentò, que me pongo lubricante en los dedos y que empiezo a darle masaje en el culo a Carmelita, y al pincipiò sentì que estaba muy cerrado su ano, y que me dice, soy virgen del culo, por favor tratamelo bien, asì que le contestè, solo relajalo y aflojalo, y asi lo hizo, empezando a aceptar un dedo dándole masaje circular y metiendoselo poco a poco, después de que recibiò mi dedo le empecé a meter el otro, y lo fuè aceptando, hasta que entraban y salìan con facilidad, mientras mi mujer me mamaba la verga a intervalos y en un momento dado que me lubrico la verga y que se la pongo en la entrada del ano y que empiezo a metersela despacito, y ella a decir que estaba sintiendo algo de dolor, a lo que le dije que si la sacaba, a lo que me dijo que no, solo que me esperara un momento, asì lo hice y le dije, deja que tu esfínter se acostumbre a tener mi verga adentro, mientras mi mujer seguia con su masaje en su vagina, después de unos momentos y cuando ya tenìa media verga adentro empece a bombearla y Carmelita que empieza a gemir de placer pidiéndome mas verga, y asi lo hice, que le dejo ir la verga hasta los testículos, sintiendo muy bien al empezar a gritar como loca, y yo a sentir la gloria, ya que al mismo tiempo que estaba en el mete saca, mi esposa me estaba dando de lenguetazos en los testículos, después de unos momentos, que le digo que apretara el esfínter porque me iba a derramar, lo que sucedió después de unos momentos, y tambien empezó a derramarse en la boca de mi mujer quien le provoco el orgasmo, y ella a su vez se lo provocò a mi mujer, asi que casi fue un orgasmo simultaneo, yo me quedè con la verga metida en el culo de Carmelita hasta que se me desinflamò, y sacándosela, me fùi al baño a lavarmela, cuando regresè, ya estaban las dos mujeres acostadas boca arriba dándose de besos y disfrutando sus respectivos flujos vaginales, al llegar donde estaban que me toma la verga Carmelita y que me la empieza a besar diciéndome, ahora eres amo de mi culo ya que me desvirgaste divinamente, yo tenìa miedo de que me cogieran por atrás, ya que a mi marido nunca se le ocurrìo, pero ahora sentì maravilloso, asì que soy mas feliz, dicho esto con los besos que me estaba dando me la para de nuevo, y que se la empieza a meter en la boca y que me empieza a dar una mamada, a los pocos momentos que se la saco y que las pongo a la orilla de la cama lado con lado, y que les levanto las piernas dejando expuestas sus vaginas, y que me las empiezo a coger, metiendole a cada una por un momento la verga, y sacándosela para metertsela a la otra, asi estuve hasta que me derramè en la vagina de mi mujer, quedando los tres acostados yo en medio de las dos y acariciándoles sus senos hasta saciarme.
Después de estar unos momentos, nos fuimos a bañar los tres y nos enjabonamos entre nosotros, nos secamos y volvimos a comer nuestros postres a la recamara.
Nos vestimos y nos despedimos de Carmelita dándonos un beso y quedando que nos llamaríamos para empezar a enseñarle computación. Ya en el automovil de regreso me comentò mi esposa que se sentìa feliz de que nos comprendiéramos tanto en la cuestion sexual, ella a satisfacerse con Carmelita y conmigo, y a no sentir celos de que yo me cogiera a su mejor amiga.
yo le metia la verga en el culo una otra ves mientras ella le mamaba la verga ami compadre como una puta desesperada por momentos ella dejaba de mamarle la verga ami compadre por que el ya estaba a punto de venirse para luego mamarle el queso humedo y rojo de mi esposa
Relato erótico enviado por Anonymous el 24 de February de 2010 a las 00:07:43 - Relato porno leído 144232 veces