La Familia Ingalls X

• Pero Charles, no eras ningún santito, no habrá quedado mujer que no te cogieras, nunca pensé que un hombre pudiera tener tal trayectoria, ya de chico eras tremendo, ahora me doy cuenta como haces para satisfacernos a ambas, no eras ningún caído del catre pero lo que me llama la atención que un monaguillo hiciera lo que nos acaba de narrar.
• Mami, sabes lo que ocurre, Charles tuvo la suerte de meterse siendo virgen con Sandra que era una flor de puta, no había acabado de enterrar a su marido que ya estaba culeando con él, sabes que los otros días le pedí que me hiciera el culo sin decírtelo a vos, pero tuvo miedo de lastimarme y me dijo que solo me lo hará si estas presente, nos acompañarías en ese momento.
• Por supuesto que quiero estar presente, va a ser lo más excitante que vea en mi vida, como nuestro amor te culea, pero antes debemos pasar por lo del boticario para comprar algunas cosas para poderte atender limpiándote y curando los posibles daños que pueda ocasionarte, piensa que por el solamente cagas, nunca recibió nada por lo que la primera vez hay que ser cautos, ahora a prepararnos, que debemos acudir la cita con el doctor, pero a él le diremos que fue un noviecito tuyo que te rompió la concha y no tu hermano.
Cada uno se puso en lo suyo, Harriet y Nellie se fueron a higienizarse sobre todo la zona de la concha que sería la que quedaría a la vista del doctor. Al llegar al consultorio, el doctor las hizo pasar pidiéndome que esperara afuera, ya dentro empezó a revisarla le tomo una muestra de orina para asegurarse que no estuviera embarazada vio que no había daños internos pero si estaba usada, que pasara al otro día a retirar los resultados para que podamos regresar a nuestro pueblo con un diagnostico certero.
• Discúlpeme la intromisión, a acaso usted no es la esposa de Nels Oleson, por que la veo acompañada por su esposo que no es el.
• Hay doctor, lo que pasa que al hacer este viaje nos acompaña un buen amigo de papá y se hace pasar por mi padre y por su esposo para que estemos más seguras, usted sabrá que en lugares alejadas de casa donde nadie nos conocen, y al verla a mamá tan bella tratarían de hacerle algo, pero si ya desde que llegamos y en el hotel se presentan como esposos nos encontramos más seguras.
• Ya me parecía que algo estaba pasando, pero hicieron muy bien, mejor prevenir que curar, por lo que mañana tienen los resultados y si gustan pasado podrán regresa a sus hogares.
Salió primero Harriet con una sonrisa de boca en boca, su hija contenta, por lo que podía deducir que todo estaba más que bien, el doctor me saludo y me descoloco cuando me dijo que el mundo necesitaba más hombres como yo, en verdad no entendí el mensaje, se habrá dado cuenta de lo que ocurría entre la madre, la hija y yo, en verdad no me importaba mucho ya que en casa no tendría ningún problema con mi mujer, por el contrario, contándole todo lo que les había hecho a ambas terminaríamos cogiendo en forma desaforada. Ya en la calle Harriet me conto todo lo ocurrido dentro del consultorio y de la contestación de su hija cuando le pregunto si Nels no era su esposo, reímos y nos fuimos a desayunar, pero al pasar frente a lo del boticario, fue la misma Harriet que nos hizo entrar, donde compro gasas, agua no se de que, una pomada antiinflamatoria, pago y seguimos camino mientras le comentaba en voz baja que todo eso era para su culito que Charles te va a romper a la hora de la siesta, no les puedo describir la cara de felicidad de Nellie, se le ilumino la cara y lo único que logre sentir fue lo mucho se querían. Desayunamos y salimos a caminar por el pueblo, al pasar por una tienda quiso entrar para ver las novedades en cuanto a vestidos había, compraron vestidos, bombachas, enaguas y camisones pero al irse con la empleada hacia el mostrador ve algo raro.
• Querida, que es esto, yo no los conozco y ni se para que se podría usar.
• Señora, es algo nuevo traído de los Estados Unidos, hicimos un pequeño pedido ya que las mujeres no conocen el producto y no están acostumbradas a usar este tipo de prenda, allá lo quieren imponer pero creo que sin éxito, se trata según me explicaron de un brassiere sin espalda, el cual es una prenda ligeramente suave que separa los senos de manera natural.
Le pregunto cómo se usaban y la empleada la invito a pasar por el probador, le enseño como colocárselo y les gusto, al salir sus tetas estaban más paradas que de costumbre, no sabía bien de lo que se trataba ni a que se debía el cambio en Harriet, le pregunto cuántos tenia, que se los embalara que se los llevaba todos hasta la muestra quería, pidiéndole que se los envié al hotel. Contenta por su compra, fuimos al hotel, Nellie quería saber que había comprado y su madre le decía que en el hotel nos lo contaría, seguro que tenía que ver con sus tetas. Una vez que entramos a la habitación, Harriet dejo los paquetes sobre una mesa y empezaron con su hija viendo lo comprado, retiro un sombrero, dos bombachas, dos enaguas y dos hermosos vestidos.
• Bueno Charles, esto quiero que se lo des a Caroline en nombre de nosotras agradeciéndole de alguna manera que te permitiera venir con nosotras, sabiendo que estas en las garras mías igual te lo permitió, ya que en su mirada había tristeza de que te alejaras de ella por tanto tiempo, al igual que yo se que seguramente mi Nels se le tiro a Caroline, pero el también tiene derecho a disfrutar, te molestaría saber que estuvieron cogiendo.
• Mamá, como se te ocurre pensar eso de papá, ya bastante tiene con tenerla chica te crees que va a querer pasar vergüenza delante de una mujer como Caroline.
• Hija, no es necesario tenerla como la de Willie o la de Charles, lo importante es saberla usar, y te aseguro que cuando tu padre la empieza a usar, difícil que haya una mujer que se la banque, acordate que ustedes nacieron de él, aunque yo ande con otros hombres no significa que no goce con él, todo lo que les pude decir es una manera de no sentirme tan culpable, lo que ocurrió que él le gusta lo no tradicional y ante la presencia de ustedes no lo podíamos hacer como a él le gustaba, por lo que los periodos de coger se fueron extendiendo hasta casi hacerlo dos o tres veces por año, entre su trabajo y el trabajo que ustedes me daban, pues me llevaron a las manos de quien solamente me cogiera rápido y listo, satisfecha de vuelta a casa.
• Mira Harriet, en verdad no me importaría, solo me preocupa que se encuentre junto a mis niñas bien de salud, después si coge o no con Nels no me importa, ya que de esta manera nos estaría abriendo un nuevo horizonte a nosotros.
• Entiendo tu punto de vista Charles, pero lo que no entiendo es en que nos favorecería a nosotros para que se nos abra ese horizonte.
• Sencillo mis amores, si ellos lo hicieron y estando los cuatro juntos nos dicen que sí, blanqueamos lo nuestro y nos podemos reunirnos para coger con quien queramos, ellos lo hicieron por su lado, si es que lo hicieron, nosotros que si lo hicimos, no tenemos porque ocultarnos y podremos hacerlos juntos.
• Sí, todo muy lindo, pero se olvidaron de mí, ustedes estarían cogiendo y yo solita pajeandome de lo lindo perdiéndome el hermoso espectáculo de verte desnudita, eso sí que no me gustaría para nada.
• No mi amor, si todo se da como lo pinta Charles, le tiro onda a tu padre e incluimos al grupo a vos y a tu hermano hasta que tengan novios, entonces el grupo se agrandaría, pero tus hijas Charles, de que juegan, donde las ubicarías durante nuestros encuentros.
Tenía razón Harriet, mis chicas no tenían noción del sexo ni pareja tienen, cuando me vieron desnudo junto a mi esposa se me quedaron mirando, lo que junto a mi esposa queríamos que fuera algo más caliente, pero ante la inocencia de mis chicas hasta tuve que transformarlo de un momento caliente en un juego, en verdad a mi no se me ocurría la manera de incluirlos dentro de nuestro futuro grupo, si es que se daba.
• Bueno mami, me gustaría saber que fue lo que compraste tanta cantidad, te hiciste embalar todo, pero para que sirve.
• Mírame, mi amor, que ves en mi que sea diferente, observarme bien de arriba hacia abajo.
• Espera, te veo pero, espera que les paso a tus tetas mami, mira Charles, las tiene paraditas hasta parece más grande de las que conocemos nosotros, por favor bájate el vestido má que deseo verte desnudita para ver que te hiciste.
Se le veía la cara feliz de cómo se veían sus tetas, que se notaba un cambio y que a nosotros nos agradaba, le pidió que se acercara y que le desbotonara el vestido, al sacarle el vestido nos encontramos con algo que le sujetaban las tetas y se las mantenían mas levantadas y algo separadas entre sí más que el vestido, hacia resaltar mucho más firmes de lo que en realidad eran.
• Mami, que tenés en las tetas, eso que te pusiste hacen se vea hermosas tus tetas sobre el vestido, pero que es esa tela y como se pone, yo lo podría usar mami.
• Por supuesto querida, por eso compre todo el stock, cuando lo vea en el pueblo todas las mujeres lo van a desear, no solo duplicaremos las ganancias sino que hasta podemos triplicarlo, por supuesto Charles que ya cuatro son para tus chicas.
Otra vez pensando en mí, ya tenía regalos no solo para mi mujer sino también para mis chiquilinas, pero algo le debía retribuir, debería buscar algo para que me recuerden no solo por mi trato hacia ellas sino algo material, eso es, mañana saldría y les compraría algo, debería ser piezas iguales para no hacer diferencia entre ellas, pero que podría comprarles y que les agradara, pipa no podía ser ya que me ganaron de mano, por lo que debería ser algo que llevaran con ellas como muestra del amor que se tienen y a la vez para que recuerden la travesía que los tres habíamos vivido, en eso ambas chicas pasan a la otra habitación y decidí salir ahora, me levante para salir de la habitación, cerré despacio la puerta y salí a caminar por el pueblo con rumbo incierto ya que no sabía que comprar, pero cuando viera algo apropiado lo sabría, habré estado como una hora caminando cuando me cruce con unas damas que me saludaron, les respondí el saludo y después de dar algunos pasos, me di vuelta y las llame.
• Discúlpenme señoritas, estoy en un aprieto y pienso que ustedes me pueden ayudar, estamos de paso con mi mujer y mi hija y desearía comprarles algo, pero estoy caminando en círculos y no encuentro nada apropiado para ellas, me gustaría que fuera algo no muy caro, pero que les agrade, imagínense que el regalo fuese para ustedes, que les gustaría recibir y donde los podría adquirir.
• Hay mira lo romántico que es el muchacho que desea comprarles algo a su señora e hija, flores no porque desea algo que les agrade y sea duradero, vestidos, seguro que va a tener problemas con los talles, no se me ocurre que podría ser.
• Mira Clotilde, la cruz en su cuello, creo que tu dios tiene la solución, que te parece si lo acompañamos hasta la joyería, seguro que algo va a encontrar nuestro amante de sus mujeres.
Me acompañaron no solo hasta la joyería, sino que entraron conmigo, pobre el joyero, casi le revuelven todo el negocio, cuando encontraban algo, no podía ser o por el elevado precio o porque no tenia dos iguales, después de unos veinte minutos, enloquecido el joyero y yo con los huevos por el piso, vi un anillo que tenía un hermoso corazón engarzados con unas piedras, le pregunte sobre el anillo si tenía dos iguales y me dijo que tenía dos similares, con distintas piedras engarzadas en el corazón, una de Rubelita y el otro con Crisobela, la primera era roja y la segunda amarilla, pero ambos eran iguales, me decidí al saber que perdería la mitad de mis ahorros y los compre, pidiéndole que me los envolviera por separado para regalo. Salí tan alegre y contento que al despedirme de mis benefactoras, le tome de la nuca a la que había visto mi cruz sobre mi cuello, acerque su boca a la mía y le di un flor de chupón, la segunda corrió con la misma suerte, pero como fue la segunda, sabía lo que vendría y lo aprovecho siendo ella la que invadía mi boca con su lengua mientras se apoyaba en mi pija, mientras nos besábamos hacia ciertos movimientos pélvicos disfrutando del momento. Después de la despedida me aleje de las damas viéndolas tan acaloradas con un tono rojillo sobre sus mejillas, me volví al hotel con un paquetito en cada bolsillo de mi nuevo pantalón. Al entrar a la habitación, me encontré con mis dos mujeres con caras de pocos amigos.
• Bueno mami, parece ser que tu maridito se fue a tirar una cañita al aire, mira el rouge en sus labios.
• Charles, que mierda te anda pasando, apenas nos damos vuelta y te desapareces por más de tres horas, quien te creíste que somos, si cogiste, bárbaro, pero al menos podrías habernos avisado que te ibas de parranda.
• Saben, lo que paso es que las vi tan entusiasmadas que decidí salir a caminar por el pueblo, donde me encontré a dos hermosas mujeres la que me empezaron a coquetear, no me pude resistir, me ofrecieron un café, me vieron contracturado y se ofrecieron a masajearme el cuello, como mi camisa molestaba, me la sacaron y al ver la protuberancia de mis pantalones, decidieron darme un alivio y me lo sacaron, y mientras una continuaba con los masajes la otra se desnudaba y se dispuso a ayudar a mi pija, primero chupándomela para luego ir metiéndosela dentro de su concha peluda y húmeda, se puede decir que me violo a la vez que su amiga dejaba sus masajes para desnudarse ella, hay mi dios, que pedazos de tetas que tenia, eran dos globos a punto de reventar cuando hacia presión contra mi espalda, ya estaba por acabar cuando….
• Ya basta Charles, una es que nos cuenten tus aventuras juveniles pero otra muy distinta es que estés cuerneando a tu mujer con dos desconocidas, para vos nosotras no tenemos valor sentimental alguno, te vaciaste en nosotras un montón de veces y encima sales afuera en busca de mas, sabes que sos un calentón flor hijo de……..
• Harriet, antes de que te arrepientas de lo que digas, piensa un poco, quiero que me mires a los ojos y me contestes que si realmente piensas que le pueda meter los cuernos, no solo a mi esposa sino a ustedes dos, ustedes que en este momento son el motivo por el que vivo, respiro y vivo juntos a mis dos amores, no sería mejor saber primero que me pudo pasar por la cabeza para hacer los que les hice.
No podía creer, todo el tiempo vivido junto a Caroline, jamás me hizo una escena de celos, y estas dos ya se tomaban ese derecho sin saber lo que había ocurrido, todo por una o dos manchas de rouge, por supuesto que se podría pensar mal, pero por lo ansioso que me encontraba de hacerle el culo a Nellie no había seguido avanzando, pero por lo visto y lo vivido, se las veía a ambas vestidas y enfadadas, por lo que sería mejor no mover mas del avispero, pero la reconciliación, eran ellas las que deberían dar el primer paso, ya que yo al verlas con cara de culo, me di media vuelta, tome mi pipa y me fui a la otra habitación cerrando la puerta me acosté donde me puse a leer la biblia, libro que jamás falta en ningún hotel y siempre es consultada por los pasajeros de paso, en lo que al estar leyendo
«¿No expulsaré a esos pueblos delante de ustedes: ellos no dejarán de hostigarlos, y sus dioses serán una trampa para ustedes», justo lo que estaban haciendo conmigo, me estaban expulsando pero durante mi lectura se abrió la puerta, a lo que no di importancia continuando con mi lectura.
• Bueno charles, ya nos cansamos de toda esta tontería, no quiero que pienses que estamos así por que te encamaste con otra, lo que pasa es que no avisaste y te mandaste a mudar de una sin avisar y demoraste más de tres horas, como quieres que te recibamos.
• Caerán lagrimas de sus mejillas a la vez pedirán ser perdonadas por lo dicho, pero os aseguro que toda la verdad se sabrá a su tiempo, perdonar, si las perdonare pero ya no tendremos la confianza que nos teníamos antes de este ridículo incidente.
• Charles, déjate de filosofar, nos estas asustando por una tontería, sos hombre y de pocas pulgas, no sabíamos que te había pasado, mira si te quisieron hacer algo malo y terminabas peleando y herido.
Ya basta con el martirio que les estaba dando, era al pedo seguirla por lo que decidí romper el hielo ya que fueron ellas que vinieron a mí, se dieron cuenta que no me iba a doblegar por lo que acudieron a mí, podía ser cierto que se preocuparan por mí, pero no les agrado para nada el verme con la mancha de rouge en mi cara, por lo que nunca sabría en realidad lo que estaba pasando por la cabeza de esas dos mujeres, por lo que decidí dejar en estambay el contratiempo sufrido por mis princesas.
• Bueno, por el momento les diré que tuve necesidad de salir a caminar para pensar, tenía en manos una misión y les aseguro que no era la de coger ya que me está esperando mi princesa para ser desflorada por su culito hermoso que tiene con indicaciones de la reina de la belleza, me encontraba algo ansioso y a la vez nervioso por el daño que podría proporcionarle a Nellie.
• Bueno mi amor, tenés razón le debes algo y deberás pagar tu deuda, de lo que ocurrió hoy, que te parece si nos preparamos para hacerle realidad a nuestra hija y le rompes bien su culito virgen, y si tienes fuerzas y ganas después me lo haces a mí, no quiero que haya ninguna diferencia entre nosotras, lo que le hagas a mi hija me lo harás a mí.
Todo comenzó como un evento muy importante, todo debía salir a la perfección, cada cosa en su lugar y cuando lo comprado en lo del boticario se encontraba sobre la mesa junto a la cama, Harriet se fue y trajo una palangana con agua y un par de toallas dejándolo al lado de lo comprado en lo del boticario, se dirigió hacia mí, me saco la biblia de las manos, me tomo de ambas manos para ayudarme a levantar y comenzó desnudándome dándome besitos, como si nada hubiera sucedido antes, al sacarme los calzoncillos rio al verme la pija, me la beso y empezó a pasarle solamente la lengua por la cabeza, ya erecta, se retiro y fue hacia su hija, con la que ambas empezaron a desnudarse entre caricias y besos, al bajarse los vestidos a la vez, las manos de cada una fueron acabar cada una sus tetas. Terminaron por desnudarse completamente donde se notaba claramente la diferencia en las tetas de Harriet sin tener puesto lo que había comprado y con él, pero Nellie no le dio importancia, era como si estuviera frente a una perfecta belleza, bella era pero con las tetas caídas. Harriet le pidió a su hija que se recostara sobre la cama boca abajo pero sus piernas abiertas, la madre se puso a chuparle el culo y yo me puse frente a ella para que comenzara a mamarme la pija, estaba tan feliz Nellie con la lengua de su madre en su culito a punto de ser desvirgado y con mi pija dentro de su boca, la guacha se la llego a tragar casi la mitad y sin arcada alguna, su madre dejo los lengüetazos para empezar a introducirle un dedo mientras le pedía a su hija que escupiera sobre mi pija, enseguida lo empezó a hacer, escupía para volver a tragársela, Harriet hacia lo mismo en su culo, trabajando a base de dedos y lubricando poco a poco el agujero con sus escupidas para que se vaya abriendo y dilatando para que yo pudiera metérsela a gusto. Yo sabía, por la experiencia vivida con Sandra, que el momento de romper un culo lo más importante es que debe hacerse despacio y con cuidado para no causar dolor que haga que se contraiga el esfínter y que no se pueda meter la pija.
Hay que ser delicado en ese momento, pero una vez abierto el culo hay que destrozarlo gozándolo y haciendo gozar, cuando su madre me dio el visto bueno para empezar la faena, le metí la cabeza con la guía de la mano de su madre, de a poco fui ganando terreno hasta llegar a metérsela toda con los lamentos de Nellie, empecé a meterla y sacarla a ritmo normal, cuando vi que su culo ya estaba dilatado y aceptaba mi pija fue cuando comencé a sacar y meter el capullo, metiéndosela hasta el estómago para quedarme así varios minutos, sacándola toda esperando unos segundos y metiéndosela entera de una con huevos incluidos, si pudiera, los lamentos de la pequeña Nellie se transformaron en gemidos y su madre le dio sus tetas para que las chupara mientras era cogida por el culo. Ante esta cogida cariñosa y a la vez brutal, después de varios minutos me corrí dentro de su culo ante mis gemidos Harriet se dio cuenta que había finalizado la faena, se incorporo y vino hacia mí a besarme agradeciéndome que le rompiera el culo a su hija, se agacho y empezó a chuparme la pija sucia entre el semen mío y la mierda y sangre de su hija, lo que evidenciaba que una vez mas había logrado mi objetivo, me agache como puede y empecé a pasarle la lengua por el culo de Nellie alternado con besos y algún que otro mordisco. Harriet tomo un paño humedeciéndolo para pasárselo por el culito recién roto, luego uno seco para secárselo y tomo unas gasas humedeciéndolo con el agua de no sé que para terminar de pasárselo sobre la zona afectada para que por fin le puso la pomada antiinflamatoria dando por terminado el trabajo con dulces caricias sobre su culito roto.
• Bueno hija, ahora que pude repararte algo tu hermoso culo, quiero que nos cuente que te pareció que tu padre te la diera por el agujero de atrás, te gusto, lo disfrutaste o sufriste mucho.
• Mami, fue increíble, nunca soñé con una pija en mi culo y para mi mayor goce tus tetas al alcance de mi boca, no te voy a mentir, al principio estuve a punto de echarme atrás, sentía mucho dolor, pero de pronto deje de lado el dolor para dedicarme a tus tetas y fue como un milagro, ya que empezó a irse el dolor transformándose en molestia y cuando había dejado de pensar en la molestia dedicándome de lleno con mi boca a tus pezones empecé a gozar, con cada embestida de Charles era una sensación placentera nueva para mí, pero como pude acabar como lo hice sin que me tocaran la concha.
• Hija, una mujer puede a veces acabar mirando solamente a un hombre, ante una caricia sobre su cuerpo, sintiendo sensaciones nuevas como lo has hecho hoy y sobre todo el estimulo que estaba recibiendo tu culo, a partir de ahora, dejaste de ser una niña transformándote en mujer, una mujer completa que ha aprendido a gozar del sexo, gracias a tu hermano que te rompió la concha y ahora Charles haciéndote el culo, aprendiste a fumar, a mamar una pija y amar no solo a un hombre sino a tu madre, por lo que de chiquilla malcriada ha quedado en el pasado dando paso a una mujer alegre y dispuesta de disfrutar de un hombre como de una mujer, esa será tu decisión.
• Nellie, me alegra que te gustara que te hiciera el culo y tu madre tiene razón, ya sos una mujer, dejaste de serlo en el momento en que decidiste seguir adelante ante el dolor que te estaba provocando lo que fue premiado con el gozo que obtuviste de tu dolor, nada se consigue sin sudor o dolor, siempre debemos dar algo a cambio, yo a cambio de que me hayas entregado tu culito virgen, te regalare tres cosa, dos verdades y un regalo, la primera verdad es que la que te ato al árbol fui yo, tu madre estaba al tanto de todo lo que me hacías ya que era mi amante y al contarle el incidente del granero me pidió que no te cogiera por miedo a que te hiciera daño, pero si la recibías dentro de tu concha muerta y creciera en ella facilitaría lo que hacemos ahora, disfrutar a pleno tanto por la boca, por la concha y ahora por el culo, te imaginas si te hubiera cogido por primera vez en el granero, no hubieras tenido la atención que recibiste de tu madre y hubieras sufrido mucho.
• Lo sabía, en todo momento supe que eras vos, pero ambos me descolocaron a tal punto que me hicieron dudar, te maldecía miles de veces por haberme hecho coger con mi hermano, pero hoy te lo agradezco ya que si hubiera pasado mi concha como lo paso mi culo hoy seguramente hubiera sufrido mucho, si mi hermano llego a lastimarme y mamá me curo como pudo después del sermón de papá, pero gracias al forajido desconocido pudimos hacer este viaje donde me dejo muchas enseñanzas.
A Harriet se le caían lagrimas de lo emocionada que estaba, la manera en que su hija había tomado mi verdad, tenía razón al decir que ya era una mujer, ya que no reacciono como una chiquilina sino que dedujo pensando en todo lo ocurrido, la tome en mis brazos para besarla como correspondía a la mujer que tenía delante de mí, a Harriet ya no le caían lagrimas sino que lloraba como si estuviera en un velorio, me separe de Nellie para ir con ella, pobre mujer, desnuda alegre ante el desvirgamiento anal y llorando por lo que había dicho su hija, la abrace pero no con idea de lograr algo sexual sino para consolarla y sacarla del estado de shock que había entrado, Nellie me imito abrazándola por detrás, cuando al fin se dio cuenta del papelón que estaba haciendo, se compuso enseguida exigiéndome el regalo prometido a su hija.
• Mamá, por favor no lo apures, te parece poco regalo que me hizo hace un rato, jamás me olvidaría de lo que me hizo sentir, por lo que el regalo esta de mas, solo los quiero a ambos.
• Bueno chicas, primero mis dos verdades, todavía falta una que hizo que sufrieran y les dije que a su tiempo sabrían la verdad, la verdad se las diré ahora, ante el inmediato desfloramiento de Nellie, decidí salir para poderle comprar algo a mi amor, pero después de dar vueltas y vueltas al pueblo me cruce con dos mujeres, quienes me saludaron y les pedí ayuda para que me guiaran donde podría comprarle algo a mi amor, fueron mi guía y logre encontrar lo que buscaba, una vez que lo tenía con la alegría que me embargaba las bese a ambas como agradecimiento, espera un minuto mi amor.
Ambas se me quedaron mirando, no sabían si creerme la historia que era la pura verdad o no, pero empecé a ver la ansiedad en las miradas de ambas mujeres, hacia como que no lo encontraba, pero en realidad no me acordaba en que bolsillo esta el anillo que le correspondía a Nellie, por lo que al ser iguales era lo mismo uno que otro, pero yo había decidido que el rojo fuera para Nellie, pero sería lo mismo por lo que saque un paquete y se lo di a Harriet para que se lo entregara a su hija a la que consideraba mi amor, mientras su hija tenia la mirada alegre se le veía decepcionada, ya siempre se creyó que ella era mi amor,
y ahora estaba confesando delante de ella que mi amor era su hija y a la que le regalaba algo olvidándome de ella, espere hasta que Nellie abrió su paquete y al ver el corazón en el anillo se emociono y me abrazo para besarme.
• Nellie, con este anillo que me gustaría que siempre este en tu dedo, quiero que sepas lo mucho que te quiero y lo importante que eres en mi vida, el color de la piedra amarilla es para que siempre te guie en tus caminos y recuerdes el camino transitado logrando el amor de la persona que deseabas.
Nellie me abrazaba, me besaba, se apoyaba sobre mi pija que estaba descansando, mi pecho sintiendo los pezones duros de esta niña, todo alegría pero un poco alejada estaba su madre, pensando en cómo iba a poder competir con la juventud del cuerpo de su hija, de cómo se dejo usar para llegar a su hija hasta me había ayudado a romperle el culo, y ahora prefería la belleza joven dándole regalos y recibiendo toda su atención, estaba herida de muerte a lo que debería atenderla antes de que muriera.
• Nellie, como te he dicho este regalo es para mi amor, pero yo tengo dos amores, uno vos y el otro la hermosa de Harriet, como no podrían compartir el regalo ya que el anillo será solo para vos, aquí, mi amor tienes mi gratitud junto al amor que siento por ambas.
Pobre Harriet, tenía en sus manos el paquete y sus manos temblaban como una hoja ante el viento vespertino y no lo habría, hasta que su propia hija la incito a que lo abriera, estaba más ansiosa Nellie que su madre, era la segunda vez que lograba descolocar a Harriet por fin logro abrirlo y al ver el anillo con el mismo corazón pero con piedra de distinto color volvieron sus lagrimas a sus ojos, Nellie fue la que lo saco del estuche para colocárselo en su dedo, miraba a su anillo admirándolo y su hija se le acerco para besarla, al fin había logrado la armonía en el grupo.
• Bueno Harriet, como veras el tuyo es rojo, significa la pasión que siento por vos, esta pasión tu hija lo conseguirá muy pronto y vos ya anduviste por muchos caminos, por lo que decidí iluminar a tu hija y para vos brindarte toda la pasión que puedas recibir, no solo de mi si no de quien este a tu lado, lo único que me gustaría es verlas siempre con los anillos colocados ya que es la unión pasional que poseemos los tres.
Bueno, tras el discurso, Harriet vino a abrazarme porque no tenia palabras de agradecimiento, solamente ambas lloraban abrazándome, como es posible que una mujer como Harriet con un temperamento de acero y la mujer que tenia por hija las hubiera doblegado con un simple anillo y un corto versito, el que lo iba a extender mas pero ante las lágrimas asomando por los ojos de Harriet decidí cortarlo rápido, cortito pero emotivo.
• Bueno mis mujeres, basta de llantos, a higienizarse y a cenar que invito yo (sabiendo que Harriet no lo permitiría) ya que mañana tenemos que pasar por lo del doctor para retirar los análisis, telegrafiar a su padre para decirles que todo está bien y que en un par de semanas estaremos por allí, siempre y cuando no tengamos mucho polvo por el camino.
• Pero mamá mira lo que nos está insinuando papá, que nos va a coger en el camino y depende de los polvos que se eche, es lo que dependerá el viaje, más que un par de semanas vamos a demorar un par de meses.
• Por supuesto, ya que deberá trabajar el doble y nos deberá contar historias de porque se tuvieron que mudar de donde vivían para llegar a nuestras colinas.
Las mande a higienizarse y se fueron ambas abrazadas hacia el baño, el culo de mi Nellie era una delicia el verlo en movimiento, el de Harriet no se quedaba atrás pero se lo veía más baqueteado, ya no tenía la dureza que ostentaba su hija, pero se las arreglaba para que se viese bien. Ambas chicas lucían un hermoso vestido que estaban estrenando por el acontecimiento de la ruptura del culo de Nellie y ambas se habían colocado eso que no se que era en las tetas, era impresionante verlas a ambas, como se destacaban sus tetas separaditas una de la otra y bien paraditas. Al entrar al restaurante las mujeres se daban vuelta al verlas y las miradas de los hombres parecía que se la iban a comer, más de un codazo se ligaron por parte de sus respectivas parejas ante la mirada descarada de ellos, cenamos, charlando, riendo y al finalizar pedí una botella del mejor champán que tuvieran ya que deberíamos brindar por lo acontecido, nos tomamos toda la botella y al llamar al mozo para que nos traiga la cuenta, saque mi billetera, a lo que Nellie le gano de mano a su madre enojándose que las que pagarían la cuenta serian ellas, vino el mozo y fue Harriet que saco de su bolso los billetes para pagar y nos retiramos. Mientras caminábamos hacia el hotel charlábamos de lo bien que se veían ambas y de las miradas de todo el restaurante hacia mis dos mujeres y que de ahora en mas tendría que salir con el rifle para espantar los moscardones.
• Hay papi, que ocurrencias que tienes, me parece que estas exagerando un poco, está bien que mamá es una diosa, pero quien podría mirar a una niña inocente como yo.
• Mira Charles a la inocente, ya no hay agujeros que no haya entrado una pija, las mama mejor que yo y hasta me enseño a fumar en pipa, y vos niña inocente no es que mi esposo está exagerando, sino que esta celoso y no lo quiere que lo sepamos.
• Pero celoso de que voy a estar, de que la miren, que se la quieran comer con la mirada, si hasta llegue a ver los codazos de las mujeres a esos degenerados que su mirada iba directamente a sus tetas, miren si voy a estar celoso, pues sí estoy celoso de las pasiones que despiertan en este pueblo.
• Tenías razón mami, papi esta celoso, celoso, celoso.
Entre chiste y chiste pudimos llegar al hotel donde entramos riendo y festejando las ocurrencias, pedimos nuestras llaves y el conserje se les quedo mirando las tetas de mis chicas, fue Nellie que la que lo increpo.
• Me puede prestar atención a lo que le voy a decir, parece mentira que un hombre como usted mire en forma descarada no solo las tetas de mi madre sino es tan degenerado que también lo hace con las de una niña inocente y pura, que clase de hotel es este que tiene a un pervertido como conserje, me parece que pediremos el libro de quejas y nos iremos ya mismo sin pagar.
• Perdonen ustedes, lo que pasa que por este pueblo no pasan mujeres tan lindas como ustedes dos, recién hoy me he dado cuenta de lo bellas que eran y si las moleste les pido disculpas.
• Que está ocurriendo aquí, algún problema mi amor.
• No querido, Nellie estaba teniendo un entre dicho con el señor pero todo está bien, ya se pusieron de acuerdo, no es cierto hija, a lo que abrace a Harriet y nos retiramos.
• Escuche bien lo que le voy a decir, la próxima vez que nos moleste como lo hizo hoy, yo misma se lo cuento a papá, y si lo hago empiece a correr porque es muy celoso y si se entera que no solo molesta a mamá sino que también a mí, le va a hacer pasar un mal rato y hasta puede terminar internado con varios huesos rotos, papá es leñador y sus brazos tiene la fuerza de un oso, me entendió, sin esperar respuesta se dio media vuelta para alcanzarnos y dirigirnos los tres a nuestras habitaciones. Las chicas reían mientras me contaba lo ocurrido con el conserje y de la manera en que le había parado el carro, a ese no le quedarían más ganas de mirar ninguna teta más, Harriet le pregunto por su culito pero Nellie no le dio importancia pero tenía ganas de fumar nos desnudamos y nos pusimos a fumar los tres compartiendo la misma pipa hasta que nos dio sueño y decidí dejar a ambas mujeres en la habitación matrimonial para que durmieran juntitas mientras yo me acosté en la habitación de al lado donde empecé a recrear todo lo vivido hasta el día de hoy y pensando en mi familia, en mis chiquilinas y en mi Caroline, mi verdadero y único amor.

Gracias y espero sus comentarios para saber si les gusta.-
Esta historia continuará.