la fiesta de fin de cursos

Todos estaban expectantes con la fiesta final del colegio. Eran una treintena de estudiantes que se preparaban para dejar esos ciclos pre universitarios e ingresar a la facultad.
La fiesta se realizaba en un lugar muy hermoso, un hermoso lago con una pista de baile en el centro, había que llegar a ella por medio de una pasarela.La orquesta tocaba en un alto montículo y en las orillas del lago estaban dispuestas las mesas , las reposeras y los distintos locales que oficiaban de oficinas, de cocina, de bar, de baños.
La noche estaba teñida de estrellas. Las chicas concurrieron con sus vestimentas más provocativas esperando tener una gran noche, y los chicos concurrieron ya con unas cuantas copas entre pecho y espalda a sabiendas que iban a pasar una noche muy intensa. En la pista las parejas se movían y se apretaban al compas de las músicas, mientras en las mesas los profesores, invitados especiales compartían con algunos estudiantes, entre risas copas y charadas.
Sandrí estaba muy arreglada para matar y la presa era el profesor de historia de ciencias, el señor Milton, un hombre de cabello gris, y de un fisico todavía conservado, frisando los cincuenta, tal vez algunos más. Sandrí lo venía " adobando" desde hacía meses en las clases, se sentaba en la primera fila, y cruzaba las piernas en forma alevosa, ya que iba con una falda muy corta, que le dejaba ver el inicio de sus bien fornidos muslos, Y como tenía muy buenas tetas, inspiraba y las hacía rebotar contra su sosten que levantaba la blusa de hilo blanco, algunas veces, cuando el profe pasaba cerca de ella, se desprendía un botón o dos botones de su blusa, para que pudiera ver el nacimiento de aquellos portentosos y turgentes senos .
Ella sabía que estas cosas lo ponían tenso, la cara se enrojecía un poco, y cuando miraba su pantalón lo veía algo levantado en la entrepierna.
Ahora estaba para matar, con una falda de lamé corta, con tacos bien altos , sus piernas bien formadas sin medias y en su torso estaba cubierto por una blusa amarilla muy escotada, su cara producida, era una hermosa y apetecible mujer.
El profe se sintió invadido de placer ante aquella imagen que se acercaba y lo invitaba a bailar, cuando la tomó entre sus brazos, ella colocó su pelvis contra la de él, bien apretada y clavó sus pechos enormes y duros en su torso, en seguida sintió como se levantaba el miembro del profe dentro de su pantalón.
Mientras bailaban, le mordisqueo le lóbulo de la oreja y le respira quedo, sabía que estaba caliente, hasta que le dijo, - me deseas profe , verda?
El sintió un aguijón , y quedo en silencio. pero ella volvió a preguntar, - estás caliente conmigo, me quieres cojee, me quieres chupar mis tetas, verdad?
y sin decir nada más lo sacó de la pista móvil y lo llevó de la mano hacia las oficinas, estaban oscuras, pero ella tenía llaves, cuando entraron y cerró la puerta, le colocó su suave mano sobre el bulto que resaltaba en el pantalón, uy que rico, lo que estoy tocando, ahora me lo voy a comer todo, y sin dejarlo reaccionar, le desprendió el cierre del pantalón, y tomo el pene con la mano, uy que grande que es, dijo mientras se ponía sobre las rodillas y se lo comenzaba a lamer, suavemente, y luego a chupas, el hombre se enloqueció de placer y busco aviesamente los pechos que tanto había soñado, ahora los tenía a su disposición, y los apretó, los acaricio, y ella seguía mamando aquel pene que cada vez crecía más, ahora la que se calentó fue ella, y le dijo, acaríciame el chochis, papito, que esta pija me tiene enloquecida, el le quito la corta falda y diminuta braga y comenzó a acariciar aquella húmeda concha , luego la comenzó a lamer, a besar despacio, después fuerte, largos lambetones, y ella gemía , ahora le pedía cojeme papito, cojeme, pero el profe seguía besando aquellos labios calientes y mojados, hasta que sintió que sandri se venía en un gran orgasmo, la dejo terminar, y luego le colocó su pija entre las grandes tetas, y le dijo haceme una paja con tus tetas, y ella se comenzó a volver loca al sentir aquel pedazo entre sus senos, cuando la glande le quedaba cerca la besaba, mientras que con sus manos se acariciaba la vagina, ahora te voy a romper el culo, le dijo el profe, y la puso con las nalgas para arriba, si rompeme el culo profe, y sintió que aquel mango le entraba en su orto enorme y bien formado, ah, ah, y movía las caderas, y sintió que el pijo del profe se hacía más grande , más grueso, y de pronto lo sintió explotar y su culo quedó lleno de semen. que bueno dijo, quiero más, y en eso sintieron gemidos en la habitación de al lado, gemidos de mujer, que gozaba ...... y bueno ya lo sabremos en el próximo encuentro. kabra .