Después de haber comenzado a penetrar a la vecinita, me iba invadiendo ese placer morboso, porque otra hubiera sido la historia si hubiera cometido el hecho de de violarla, u otra barbaridad, de lo caníbal sexual, pase ante su confesión, un maestro en la cama, la chiquilla, estaba feliz, se la notaba rebozante; me cruzo en el mercado, la mama, me comento que la nena estaba chocha con migo, le conteste, seguro es que la deje bañarse, en mi piscina, se ve que le encanta me dice, pero con que malla se baña, si no tiene, le digo desnuda no, ella viene , con una dos piezas, color bordo puesta “ ah con razón, agarro la malla de baño, que mi hermana, que se olvido una vez que fuimos al río, que audaz es y tras cartón me mango, $ 100 que se había quedado corta no quería ir a la casa y volver, se los dí, con gusto, mujer piratona, si lo hay, no deja de aprovechar.
Tuve que ir al centro comercial, a pagar el resumen de la tarjeta de crédito, al pasar por un negocio de ropa de mujeres, le compre una bikini, muy sensual, tanguita, y sostenes, provocativos, y me jugué, con un Jean, y una remera, cuando vino a mi casa, para la hora de la piscina, se desnudo, antes de entrar le dije que abra los paquetes, lo hizo, ah no puedo narra la alegría de esa chica, saltaba, se lo media sin ponérselos, vino corriendo me abrazo, me besaba, me agarraba, le comente lo que me había dicho la mama, y lo de la malla de la tía, le dije que se la pusiera y la estrenara, se puso la bikini, era igual, que nada, le traslucía el culo, sus senos, solo se tapaba, los pezones, y se imaginan quien se alerto, el muñeco, que latía debajo mi pantalón, se metió al agua, yo no tenía ganas, estaba medio nublado, como para llover me fui para mi cuarto, no tardo mas de unos minutos que estaba, en mi cuarto era evidente que quería seguir con lo empezado en materia sexual, de un brinco se coloco al lado mío, sin nada puesto, ya, el perreo, comenzó, con besos, que hacían que nuestras lenguas, se cruzaran, y provocaran en mi el sentirme como un chico dado que ella llevaba, la delantera, esto los chicos lo hacen permanentemente, solo que yole fui poniendo lo otro que era ir bajando con mis labios, tomar sus pezones, mordelos suavemente, ponerme los dos pomelos en mi boca, y hacerla sentir un goce profundo, que ya sabía, que le gustaría porque ya la había llevado al máximo, a punto que fui al blanco que era su vagina, pero la lleve a la posición de 69, lo que como yo la excitaba a fondo, casi no me chupo, era mas lo que la excitaba, no podía mantener una contante, con mi pene en ,ya no solo, lamí, afondo su rajita, también avance en darle besos negros, mi lengua, abordó el penetrar su agujerito negro, ella luego de darle es infernal ritmo, se vino, era hermoso verla de abajo en ese momento, de explosión su pelvis pegando a mi cara, su
Meneo, me mato, salí de abajo, quedo en perrito, se quiso, acostar le dije quédate me excite, y le pedí que se quede así, obediente dejo todo sus encantos, volvía fregar mi pene en sus labios vaginales, se le dilato, comencé a penetrar de a poco, muy lento entre, le dije esto te va a doler un poquito, claramente, sentí cuando termine de romper su himen, y llegue a fondo, pego un gritito, deje que su dilatación viniera, fui saliendo y entrando, primero lento, algunos quejidos, hasta que de a poco aumente, hasta que me enloquecí, tanto que llegue aparecer un perrito, que golpeaba, sus cachetes con mi pelvis, con un poco de dolor y placer mezclado, pudo tener su orgasmo, yo embutía, sentía, una tentación por eso redondito, que me deslumbraba, en esto si me abuse, le dije que me encantaba su culito, si me daba el gusto de entrar allí, que dolía un poquitito a lo primero, pero yo lo deseaba, estaba seguro que no sabía de que se trataba, así, que en una corrida hasta la cómoda, traje un pote ve vaselina, en crema, la acomode, lubrique muy bien todo, hasta su agujerito con mi dedo, sobado, bien con vaselina, tome su cintura, y alli, fui, ay me costo un poco, se resbalaba, ella quietita hasta que mi cabeza , calzo, su agujero, y se sintió un grito me duele, me duele, no solté, sentí ese túnel estrecho, apretando mi pene entrando, los gritos no cesaban, no sesgue, le dije aguanta, que ya llego, y es por que es la primera vez después no te va a doler, era tal la calentura, que salí hasta la mitad un par de veces y salto un chorro, de leche, tras otro le llene todo su culo , cuando saque mi sable, salio con algo de sangre, y semen, no puedo negar que en algo salio mi instinto salvaje, del principio, pero claro, mi experiencia, las caricias, los mimos, dejo de quejarse hasta que me abrazo, posando , su cabeza, sobre mi hombro, le dije este pedacito no te gusto seguro, pero me hiciste un regalo que nunca hubiera pensado y me hiciste muy feliz, espero que sigamos así seamos felices, ella levanto la cabeza, y con su cabeza, hizo seña que si, y me prendió, un beso de lengua fondo para sellar lo que le pedí