La madre de mi amigo.

Cuando murió el perro de Ruben (mi amigo de toda la vida), se presentó el problema de enterrar al animalito y como mi amigo no se sentía capaz de hacerlo, me pidió que lo hiciera yo, en el fondo de su casa.
Carmelo, el padre de mi amigo, tiene una fábrica de pastas en el centro comercial de Villa del Parque y como estábamos en visperas de las fiestas de Fin de Año, Ruben iba con su padre a ayudarle los Sábados y Domingos.

El día en cuestión, Sábado , pasado el mediodía,fuí a la casa de Ruben, que no queda más de una cuadra de mi casa, llegando cuando Carmelo y Ruben se iban para el negocio .
-Dani ,- me dijo mi amigo- cuando lleguemos esta noche, espero que hayas términado con la tarea. Yo , la verdad que no tengo ánimo para eso y te agradezco que lo hagas tú.
Les dije que se quedaran tranquilos que yo haría la tarea sin problemas.

Mercedes, la madre , es una mujer relativamente joven. Tiene 43 ó 44 años, pero se mantiene muy bien. Le ayuda quizás el hecho de ser muy estilizada, con una cabellera negra y lacia, que enmarca una cara muy atractiva . tiene un busto bastante interesante y según cuenta mi madre (yá que son muy amigas ) cuando salen de compras al shoping, de vez en cuando algún desubicado lisonjea su trasero.
Hace 20 años, cuando hacía unos meses que había nacido Ruben, mi madre necesito hacerse una pequeña cirugía. Yo por ese entonces tenía aproximadamente 1 año yseguía tomando pecho y como estaba al cuidado de Mercedes y ella le daba el pecho a Ruben, tambien me dió a mi en esos días.
Esa dedicación y cuidado , intensificó la amistad entre las dos familias -

Mercedes me dió una pala de punta y en el jardin del fondo de la casa, hice un pozo bastante grande, ya que el animal era corpulento . Como el día anterior había llovido, la tierra estaba enlodada y con el calor de esa hora de la tarde, realmente cuando términe la tarea, estaba sucio de barro y todo transpirado.

-Dani- me dijo Mercedes- date un baño que no te vas a ir en esas condiciones a tu casa. Tienes un toallón en la pieza de Ruben.Yo mientras te limpio las zapatillas.
Me desvestí en la pieza de Ruben , tomé el toallón y me fui a bañar.

Al salir del baño con el toallón anudado en mi cintura, debía pasar frente a la habitacion matrimonial. Estaba la puerta abierta y en la semipenumbra del dormitorio ví a Mercedes recostada en unas almoadas en la cama y leyendo una revista.
-Ya terminaste, Dani- dijo.
Me detuve a mirarla. Por primera vez, la miraba como mujer y no como la madre de mi amigo.
Estaba con una pierna flexionada, lo que hacía que la desnudez de su pierna (al haberse deslizado su falda), mostrara la perfección de su forma.
Caminé lentamente hasta el borde de la cama y me senté en la orilla.
No se si fué la penumbra de la habitación, el tono suave de su voz o la belleza de su piel, pero notaba que una erección incipiente se apoderaba de mi miembro.
-¡ Cómo pasa el tiempo !- murmuró- me acuerdo cuando eras un niño y te daba el pecho.
-agregando:- comezabas a tener dientitos y te encantaba morderme los pezones.
Con un disimulado y lento movimiento, fui llevando mi mano hasta su rodilla desnuda, y la dejé disimuladamente allí.
Ella no pareció notarlo.
- Hoy, eres un hombre - y con una sonrisa picaresca, agregó- ¡ Y vaya que hombre!
Esto lo decía, mientras su mirada estaba puesta en mi toallón , que dejaba notar el bulto del despertar de mi sexo.
-Debo reconocer que Ud. Mercedes, es una hermosa mujer - y mi mano en su rodilla hacía unos lentos movimientos de caricia- ¡ Y vaya que mujer!- agregue bromeando tambien.
-No exites mi imaginación- musitó- que Carmelo no llega hasta la noche . Aúnque........
-Aúnque .........- agregó.
- Aúnque ¿ Que ?- pregunte.
- Muchas veces Carmelo llega cansado y solo se hace tiempo para cenar y se vá a dormir.
- No puedo creer que no valore lo que tiene la suerte de tener en casa- dije.
Mientras esta conversación seguía, mi mano se deslizaba un poco más abajo de la rodilla y acariciaba suavemente parte de su muslo. El toallón se había abierto y si bien no se veía el miembro erecto, se notaba la erección que tenía.
-La monotonía del matrimonio , apaga las emociones.-y dijo enseguida- No debiera contarte esto, pues los jovenes a veces no son capaces de guardar secretos.
Cuando decía esto me miraba a los ojos intensamente y su mano dejó caer la revista que tenía y la hizo reposar sobre mi pierna descubierta.
-Mercedes- le dije- Lo que me diga o haga esta tarde, quedará solo entre Ud. y yo.
Yá mi mano se deslizaba por su pierna en una caricia franca y audaz. La de ella, acariciaba mi pierna bajo el toallón.
Me estás exitando -dijo- y no debo descontrolarme. Puedes ser mi hijo.
-Pero no lo soy. Somos solamente dos personas en intimidad y exitados.-dije.
Ya mi mano acariciaba su vagina por sobre la falda y cuando mi mano se atrevió a su entrepierna, descubro que estaba sin trusa.
- Estaba acariciandome cuando entraste a este cuarto- explicó.
Desaté el nudo de mi toallón y surgió en toda su envergadura y erección el miembro.
Desprendí el frente de su vestido . Ella se quito el corpiño,dejando libres sus hermosos zenos ,que con devoción me dedique a lamer. Sus pezones estaban endurecidos por la exitación .
- Es una locura- gemía- pero no te detengas. Hazme lo que quieras.
Bese su vagina. Sorbí sus flujos. Pellizque sus pezones endurecidos.
Gemía y se retorcía en la cama.Su cabeza giraba de un lado a otro, acompañando los espasmos que la invadían.
- Por favor. Penetrame.-pedía- Quiero sentirte dentro mío. Destrozame.Llename de semen.
-agregando- no te cuides de acabarme adentro que tomo anticonceptivos.
La penetré lentamente, disfrutando cada centímetro. Miraba su cara exitada y eso me exitaba más aún.
Clavaba sus uñas en mi espalda y mordía mi pecho con ansias. Nuestras bocas se llenaban de saliva amada y deseada.
- Dios mío- gemía- Nunca pensé que podía sentir este placer. Me quiero morir. Acábame y lléname la vagina. Dame más ,más. Así. Si, Si Siiiiiii . Acabo . Acabo. Acaaabbooooo.
Y En medio de convulsiones de placer, me clavó las uñas en la cintura exalando suspiros prolongados y murmurando palabras inentendibles .
Por mi parte , me sentí como si tocara el paraíso con las manos.

Quedamos tendidos en la cama recuperando nuestras respiraciones.
- Dani. Esta tarde fué la más feliz de mi vida. -me dijo- Hace mucho que no tenía sexo intenso, pero jamás lo disfrute tanto como contigo.
y agregó: - Espero que otro Sábado pueda contar contigo.
-Mercedes.-contesté- repetiremos esto y será nuestro secreto. Yo tambien disfruté algo que no sabía que deseaba tanto.

Dani.