todo paso muy rapido y despues de ocho años de amistad esa noche el marido se acosto pronto debia de madrugar estabamos en la playa pero el trabajaba estabamos viendo una peli cuando ella me comento que por que no le daba un masage por las piernas asi lo hice hasta el momento de llegar a las ingles le tocaba yo la braguita cuando me dijo que se la iba a manchar hice el amago de bajarselas un poquito y fue ella la que pasado cinco minutos se las quitaba me dijo que siguiera mas por supuesto su temperatura subio al limite durante un rato urgue por su raja enseguida la tumbe en la mesa y me dedique a comerselo poco a poco ella gemia se mordia los dedos mientras yo le levante las piernas y le introduje mi pene que por cierto estaba para reventar estuvimos follando casi hora y media tuvo dos orgasmos yo me corri como un poseso nos lavamos y nos fuimos a dormir mi sorpresa fue por la mañana hoy como se marchaba el marido espere un poco la hoy levantarse a ella me hice el dormido estaba desnudo y con mi polla mas tiesa que nunca me gire para que no me viera y ella creyendo que yo dorimia estaba en la puerta masturbandose es lindo de ver a una mujer tan preciosa masturbarse vi como se marchaba al baño en un proxima vez os contare lo que paso
Ambos iniciamos a besarnos con toda pasión, con aun más pasión que la primera vez, mientras nos besamos Armando comenzó a tocarme mi zona intima debajo la falda de mi vestido y como consecuencia a esto de inmediato me moje toda, ¡Quiero hacerte el amor! Me dijo suavemente al oído, -Lo sé y también quiero- le conteste.
Relato erótico enviado por putita golosa el 29 de August de 2010 a las 23:31:22 - Relato porno leído 513554 veces
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