Esta historia ocurrio cuando tenia 18 años durante las vacaciones en una casa de veraneo de unos de
mis familiares, tenia pocas habitaciones pero muy amplias, cabian hasta 6 camas en cada una. Toda la
famila solia ir alli en Enero lo que nos permitia encontrarnos con primos y tios que hacia tiempo
que no veiamos, entre ellos estaba Vicky, tenia 16 años y ya desde los 13 demostraba que cada año se
ponia mas bella.
La tercera noche que estaba alli me fui a acostar temprano, era Martes y como es un pueblo chico los
boliches abren solo el fin de semana. En la habitacion que me encontraba estaba tambien mi primo
Ivan que dormian como piedra.
No podia conciliar el sueño cuando de pronto veo que alguien ingresa y se mete rapidamente en mi
cama, era mi prima Vicky (hermana de Ivan).
- ¿Que estas haciendo?- le pregunte.
- Shhh, no digas nada - me contesto en voz baja y luego me beso en los labios.
Se escondio bajo las sabanas y llego hasta mi cintura. Me hizo a un lado los boxer y comenzo a jugar
con mi pija la que no tardo en ponerse como un tronco. Acto seguido se la metio entera en su boca.
Me la chupaba de una manera extraordinaria, se la tragaba completa, mientras con sus manitos iba
masturbandome, la lamia de costado, pasaba su lengua por el glande y el frenillo lo que me hacia
llegar hasta el extasis total y hasta se daba tiempo para ocuparse de los huevos. Yo estaba
totalmente desorientado y confundido, estaba disfrutando de un momento unico con una chica hermosa a
la cual varias veces e deseado poseerla, pero esto no debiamos hacerlo porque eramos primos, toda
nuestra familia se encontraba en la casa y si alguien nos descubria se iba a armar un bardo
terrible, ademas su hermano estaba en la cama de al lado (aunque solo un terremoto lo podria
despertar a estas horas). No sabia como (ni queria tampoco) decirle que parara.
Ella seguia con su silencioso y muy exitante trabajo, luego comenzo a girar hasta dejar su sexo
sobre mi cara, corri un poco su tanguita y note que estaba bastante humeda (quizas se estuvo
masturbando antes de venir) comenzamos un 69 de pelicula, cada cual se esmeraba por darle al otro el
mayor placer posible. Pasaba la lengua por su rajita, metia un dedo, lo movia de un lado a otro,
luego dos y hasta tres que pasaban sin pedir permiso por la excelente lubricacion que tenia, luego
mis dedos se ocuparon de su clitoris comenze a masajearlo suavemente en pequeños circulos y ella
gemia con mi pija atorada en su boquita, cada vez se mojaba mas y yo estaba a punto de estallar,
Vicky se dio cuenta de esto y me dijo que me aguantara. Rapidamente se coloco sobre mi y me beso con
pasion, nuestra lenguas se trenzaron en una batalla campal, nos giramos lentamente y quede sobre
ella.
- Ahora, metela toda.
Por la oscuridad no podia ver su cara pero me la imaginaba con una sonrisa deseosa de ser penetrada.
Eso me exito mucho mas y sin medir palabras se la meti hasta el fondo de un solo envion, ella gimio
fuerte, por suerte Ivan ni se entero. Empeze con mis bombeos al principio suave y fui aumentando la
velocidad de a poco, ella gozaba gimiendo suavemente para que nadie la escuchara aunque descargaba
toda su furia clavandome las uñas en la espalda (por suerte, no las tenia largas), me imaginaba su
cara demostrando gozo y dolor y eso me hacia que cada vez se la meta con mas fuerza pero debia
serenarme cuando la cama comenzaba a chillar muy fuerte. A esa altura no pensaba en que haria si
alguien nos veia pero trataba de hacerlo con sigilo. Con la mano derecha le masajeaba los senos y
ella intentaba meterme un dedito en el culo, cuando ya no me podia aguantar mas le susurre al oido:
- No doy mas, me vengo.
- Te espero, te espero...
Aumente la velocidad, ella subio el tono de sus gemidos hasta que sucedio: un chorro espeso y tibio
de leche llenó su vagina, le segui dando antes que se me baje hasta que le llego a ella, dio un par
de gemidos fuertes y luego quedamos acostados abrazados, agitados y sin poder pronuniar una palabra.
Cuando nuestros cuerpos recobraron la calma Vicky se acomodo el pijama (una tanguita y una diminuta
remera) me beso en los labios y se retiro de la pieza.
Me quede toda la noche sin poder pegar los ojos. Al dia siguiente en el desayuno no la podia ver, me
daba verguenza. Luego cuando no habia nadie cerca la detuve para que me explique el porque:
- ¿Disfrutaste anoche?- me dijo.
- Claro, como nunca en mi vida.
- Yo tambien lo disfrute, entonces no hay mas que explicar- fue su unica respuesta.
Con Vicky hemos tenido muchos otros encuentros, ese verano y todos los que le siguieron. Aunque
hasta el dia de hoy no ha querido decirme el motivo por el cual hizo lo que hizo esa noche. A decir
verdad ya no me interesa, estoy disfrutando una aventura muy exitante con ella y nadie se a enterado