La tenista y el vestuario

Después de mucho insistir, mi hija consiguió que la llevara a tomar clases de tenis...elegí un club que tenía cierto prestigio en la ciudad y los mejores profes de la ciudad y la zona...De allí habían salido varios buenos jugadores, que habían llegado a profesionales y hasta un top ten...Actualmente la estrella del lugar era Lola, una nena adolescente, que estaba teniendo actuaciones muy buenas ya en torneos de mayores...
Pasados los dos meses de asistir a clases, me llama uno de los profes de mi hija para comentarme lo bien que se había adaptado y de las muy buenas condiciones que tenia, que de seguir así, en semanas más la harían participar de un torneo...Y esto sucedió...no solo participó, sino que lo ganó, por lo que una nueva crack se asomaba en el club...
En medio de un torneo, meses después de ganar el primero y dos torneos más, mientras jugaba mi hija contra otra niña, se acercó el coordinador de tenis del club con una chica a su lado, la cual me presentó como Lola, la gran estrella, que se encontraba lesionada y estaba en la ciudad visitando a su familia...la primera impresión era de soberbia y un poco de agrande...ella me saludó y se sentó a mi lado..era bonita, de pelo castaño, cuerpo bien formado, piernas fuertes, pechos de buen tamaño, piel tostada por el sol y unos terribles ojos verdes...yo atendía al juego de mi hija, cuando me sacó conversación, destacando la actuación de mi hija y confesando que no podía creer que hacia tan poco que jugaba...entablamos conversación y al terminar el juego la invité a tomar algo en el buffet junto con mi hija, que se moría por conocerla...hasta ahí todo tranqui, era una niña para mí, podía ser mi hija...tenía físico de mujer, pero sus modos eran de una típica adolescente, salvo cuando charlábamos, se notaba cierta madurez...Después de beber algo y charlar, Lola se ofreció a darle un par de clases a mi hija antes de volver al circuito mundial...Aceptamos gustosos...
El día de la primer clase Lola ya estaba en la cancha peloteando al llegar nosotros...y al verla fue cuando mi lívido se me encendió y ya no la vi como una chica más...vestía una musculosa blanca, pegada al cuerpo, que le resaltaba el tamaño de sus hermosos y juveniles pechos...pollerita verde y súper corta, que dejaba asomar unas calzas blancas, que marcaban sus curvas y que en cada movimiento que realizaba para golpear la bola, dejaba entrever su entrepierna, cómo se abría....solo podía pensar en su cuerpo desnudo ante mí, todo húmedo de sudor, a mi disposición...
Al vernos se acercó a saludarnos y seguido comenzó con sus lecciones...le enseñaba posiciones, como pararse, como deslizarse, y al dar los ejemplos más de una vez dejaba sus atributos a mi vista para ser disfrutados...
Esa noche, ya en mi hogar, mi señora gozó de muy buen sexo, después de mucho tiempo, gracias a las calzitas blancas de Lola...
La siguiente clase llegamos antes...el clima estaba medio fresco, por lo que Lola vestía para la oración un pantalón largo deportivo y un buzo, lo que ocultaba lo que me había mostrado el día anterior...pero con el correr de los minutos el clima se templó bastante, por lo que Lola se quitó primero el buzo...llevaba una musculosa rosa ajusta...sus tetas se insinuaban a mis ojos...al rato se quitó sus pantalones...solo vestía unas calzas celestes...hoy se veía más que el día anterior...que hermoso panorama...me deleité toda la clase viéndola moverse, estirarse, agacharse, hasta que al terminar su voz me trajo de nuevo al mundo, pero no por mucho tiempo...un calambre la aquejaba y me pedía ayuda para estirar la pantorrilla...en segundos había abandonado mi silla y con ella recostada en el piso, tome su pie y lo tire hacia atrás para estirar la zona...ella se recostó totalmente mientras yo le trataba de relajar la pantorrilla...también aprovechaba para observar su físico...que hermosa que era...todo fibra, la piel suave y sedosa...le acariciaba la pantorrilla para relajar y para sentir para mí su suavidad...al pararse me agradeció y me besó la mejilla...mi hija se había alejado a otra cancha, a jugar con unas amigas de su edad, mientras yo me mostraba preocupado por Lola y su lesión...me dijo que no preocupara que estaba bien...la acompañé al vestuario y al llegar a la puerta otro calambre la atacó...la acompañé adentro...gracias a Dios no había nadie adentro...la recosté boca abajo en un banco y le masajié la pierna buscando que se relajara...según ella hacia muy buenos masajes..nunca había masajeado a nadie, ni a mi esposa, pero bueno...ella se sentó y me agradeció nuevamente...yo la miré y sin más la besé...ella primero se sorprendió, pero inmediatamente correspondió mi beso...nos paramos y contra los casilleros del vestuario la aprisioné mientras acariciaba sus hermosas y torneadas piernas...ella me frenó...me alejó de ella y fue hacia la puerta...pensé que me había mandado una cagada...pero no, solo cerró la puerta con llave y volvió a mi...la calza que vestía me permitía recorrer su cuerpo...acariciaba y apretaba su culito duro y ancho...metía mis manos en su húmeda entrepierna, de sudor y excitación...lentamente metí mis dedos hasta penetrar esa cueva totalmente mojada...un grito de placer y excitación salió como ahogado de su boca....la tumbe sobre el banco que antes nos había servido de camilla, boca abajo...bajé su calza hasta las rodillas y sacando mi verga dura como vidrio, la penetré lentamente....mis manos tomaban sus pechos ya libres de ropas, acompañando mis movimientos de pelvis...metía, sacaba, metía sacaba....aumente mi ritmo mientras nos besábamos y mordíamos nuestros labios....la cogía con tantas ganas…sentir ese cuerpo firme, no solo por el deporte, sino por su edad…sus tetas eran como dos manzanas que esperaban ser mordidas, su culo firme y duro…finalmente, llegando al éxtasis, saque mi pene y derramé mis líquidos en el suelo, ya que no sabía si ella se cuidaba o no….agotado me senté y ella se subió a mí y continuamos besándonos…ahí pude probar el sabor salado de su piel al besar y lamer sus hermosos pechos…sus pezones bien parados sucumbieron ante mis dientes y mis labios…ella no dejaba de moverse sobando su mojada conchita en mi verga…lentamente se fue erectando de nuevo…ella se arrodillo en el piso y me empezó a chupar la pija hasta endurecerla de nuevo….se subió nuevamente a mí y se metió mi verga de un solo movimiento…se quedó quieta un momento, abrazada a mí, hasta que los lentos movimientos empezaron….subía y bajaba, subía y bajaba…cada vez más ritmo, más velocidad…mi boca alternaba entre su hermosa boca y sus tetas que se bamboleaban al ritmo de los movimientos…cada vez más rápido…la tomé de sus hermosas nalgas y parándome la aprisioné contra los casilleros, y de parado, un hermoso orgasmo nos abrazó a los dos…gemimos muy fuerte, casi fue un grito…nos quedamos tirados en el piso, agotados y disfrutando del momento…entonces ella se paró y me dijo que tenía que irme, que alguien podía entrar me besó apasionadamente y ya totalmente desnuda se dirigió a la ducha…se detuvo un instante y me sonrió…me saludo con su mano y me dijo que la había pasado muy bien, que seguiríamos en contacto…ver su cuerpo entero era como una visión enviada por los dioses….salí y busqué a mi hija para volver a mi casa…estaba como ido, sin poder creer lo que me acababa de pasar…acababa de tener sexo con una diosa que siempre creí inalcanzable, era algo increíble y hermoso…
Lola se reincorporó al circuito mundial y como nunca seguía el tenis femenino con la excusa de que era para compartir con mi hija, pero en realidad era para seguir a Lola…no podía dejar de pensar en ella…
Después de un par de meses, recibí una llamada de un número desconocido…era ella…me preguntó por como andaba, que me extrañaba, que deseaba verme, que se masturbaba pensando en nosotros en ese vestuario…me hizo parar mi pija al decirme esas cosas…en días más estaría por la ciudad y necesitaba verme…
Finalmente llegó el día…nos encontramos en el club como algo normal, charló con mi hija de cómo andaba su tenis, intercambiamos palabras siempre relacionadas con el deporte, hasta que quedamos solos…me decía que fueron los mejores partidos que había jugado en mucho tiempo los que disputó después de estar conmigo…ella tenía experiencia sexual a pesar de su corta edad, tanto con chicos como con chicas, pero lo que había tenido conmigo era lo mejor que le había pasado en su vida sexual…me acarició la mano y con una mirada pícara se dirigió hacia el vestuario en el que habíamos intimado…la seguí lentamente, y al entrar la encontré sentada en la punta del banco, con sus piernas abiertas y pasando su dedo en su entrepierna, como preparando terreno…entré y trabé la puerta…ella me dijo que me quedara tranquilo que ese vestuario era exclusivo para ella, que nadie más lo usaría….me acerqué y ella me bajó lentamente mi pantalón, y después de acariciar mi verga, mientras me miraba con sus ojos verdes, se metió mi verga en su boca… me la chupó hasta que casi reventaba de llena de sangre…quería sexo mi pija…le quité su remera y su sostén, para dejar sus tetas al aire… se las acariciaba mientras ella seguía con su labor….empecé a moverme como cogiendola por la boca, hasta que por fin su boca se llenó de mi leche…ella me miró y se tragó todo, pasando la lengua limpiando los restos…la recosté en el banco y le saqué su pantaloncito corto…una bombachita de algodón gris se hizo presente…se notaba mojada en la zona de la conchita…quería probar esos sabores…la quité lentamente y me zambullí en esa conchita de labios gruesos…me dí un banquete son sus jugos …mi lengua se divertía metiéndose en su cuevita provocando pequeños espasmos de placer…ella gemía mientras me acariciaba la cabeza…después de un rato de chupar y lamer su entrepierna, y con mi verga lista, me incorporé y la poseí de un solo movimiento…ella gimió mientras me abrazaba y me apretaba contra ella…nos quedamos solo besándonos los dos conectados…despacio, empecé a moverme dentro de ella…fui aumentando mi ritmo, mientras me comía sus hermosos pechos…se la metía cada vez más rápido y con más fuerza, a lo que ella respondía con quejidos pero sin pararme, me pedía más….hasta que por fin me vine dentro de ella, con un gran gemido, y me quede recostado sobre ella recuperando la respiración….ella me acariciaba la espalda mientras me sujetaba con sus piernas, como pidiendo que no saliera nunca de sus adentros…nos incorporamos y yo pensaba que ya todo había terminado, pero no…me tomó de la mano, y después de desnudarnos, nos dirigimos a las duchas…sin parar de besarnos, nos metimos debajo del agua tocándonos, acariciándonos…su culo sobando mi pija, mis manos acariciando sus pechos y metiéndose en su entrepierna…mis dedos penetrando su conchita….hasta que apoyó sus manos en la pared dejando su culito a mi merced…el jabón que teníamos en el cuerpo ayudó mucho…me coloqué detrás y fui metiendo mi cabeza de la verga en su hermosa cola…ella lo recibió con un grito de dolor…le dije que se relajara….fui metiendo cada vez más hasta que toda mi verga estaba dentro suyo….una vez que ella se acostumbró a tenerla adentro, metí y saque hasta que una mezcla de leche y sangre se derramaba de su culito….le había dolido bastante, pero lo había disfrutado…las próximas lo gozaría más, me dijo…terminamos de bañarnos y después de vestirnos salimos disimuladamente hacia el buffet del club…primero yo, después salió ella…allí me esperaba desde hacia un rato mi hija…le dije que me había vuelto a casa y que recién llegaba…justo apareció Lola y nos saludo como si nada…nos dijo que se volvía al circuito y que esperaba estar más en contacto con nosotros…yo le dije que porque no venía a casa a cenar antes de partir y así charlábamos un poco más…me dijo que no había problemas…que esa noche no, pero la del próximo día no tenía problemas…Pero de lo sucedido en esa cena se enterarán en un próximo relato….