Mientras mi mano acariciaba sus piernas empezando por las rodillas, luego los muslos y la atraía hacia mí clavándola con gran fuerza en sus entrañas, me tenía ardiente de pasión y estaba ella pagando sus anhelos de ser copulada por un joven macho
Relato
Ese día Leticia en el almuerzo en la oficina pregunta a Faby si es verdad lo de su marido, no le dice Faby no es mi marido, es mi cuñado el portentoso si deseas te lo presento, pero sin responsabilidad si te lleva a la cama, eso deseo dice Leticia nunca he estado con un macho frenético y sobresaliente, mi marido es del montón y además complicado en las batallas carnales, nunca cumple bien. Imagínate siete años casados, a mis treinta años apenas un hijo de cinco años.
Al salir a sus casas esta se acerca a Faby y le dice, quiero conocer a tu cuñado, y tu marido no se enojará, llega siempre después de las ocho y son recién las 18:30 horas.
Fabiola llama a su cuñado y le dice prepárate te llevo otra golosa y esta es joven, pero esta angustiada por lo poco que su marido sabe recompensarla en la cama.
Llegan a casa y el cuñado con tres tragos preparados las esperaba en bata en la cama matrimonial viendo una película sexy, sírvanse dice y recuéstense a mi lado es buena esta película, me pondré cómoda dice Faby sacándose el vestido y en ropa interior se recuesta sobre la cama, Leticia complicada queda en pie, para luego en comprometida acción se saca sus ropas y se va a tender en la cama, también en calzones, sujetadores, medias y ligas, Faby maliciosamente la ubica al medio al lado del macho..., este estira sus manos diciéndole lindas medias y se las recorre, sacándoselas de su liguero y luego manosea su vagina Leticia comienza a jadear, rezonga, pero no quita las manos.... Leticia poco a poco va sublevándose, sus hormonas sensuales habían despertado después de meses de postración por culpa de su marido, ahora un macho un adolescente macho la activaba y la calentaba su piel erizada por las maniobras de este macho su vagina comenzaba a mojarse, deseaba sexo se entregaría a un semental adolescente... su mente y su cuerpo deseaban sexo, necesitaban calmar sus pasiones si..., sería de este macho..., no le impide cuando este saca su diminuto calzón inundado por sus líquidos vaginales su boca se pega su vagina, y su lengua se introduce en ella buscando su clítoris, sin poder evitarlo un alarido de pasión sale de su boca gimiendo le solicita sexo..., tómame..., poséeme..., soy tuya..., seré tu hembra...., soy tu puta.
El muchacho la acomoda abres sus piernas y apunta la cabeza ancha, abultada contra su vagina y ella siente como ese cuerpo de carne, nervio y músculos entra abriendo sus carnes vaginales sin ocupar desde hace tiempo y ella gime, llora desesperada ante la penetración y comienza a mover sus caderas con ansia y desesperación..., esta copulando con este muchacho, se entrega feliz al apareo de este chico, ella solo meneaba sus caderas. Casi trastornada por el placer de ser poseída, se entregaba satisfecha, pero mi marido no sabe saciarme y aun mas es poco adicto al sexo, para él el acto es sagrado solo para tener hijos y no para consolar a su mujer desesperada, fogosa, ardiente, gozadora apasionada y carnalmente vulnerable… si soy una mujer casi trastornada por el placer de ser poseída, soy casi una ninfomaníaca y he encontrado en este muchacho mi solución, mis sacudidas y estremecimientos fueron desvergonzados, escandalosos, como me meneaba, me apareaba desesperadamente con todas mis fuerzas, mis caderas se agitaban lujuriosamente, el macho se aprovecha para empotrarme salvajemente mis entrañas rebosándome mi matriz de su tibia leche, semen y espermas. Sentía esos líquidos deslizarse por mis muslos, nalgas y caer sobre las sabanas, mi joven semental me tenia agarrada de mis caderas en cada eyaculación mas fuerte me apretaba a su cuerpo, yo casi inconciente por placer que había dado en este apareamiento gemía, jadeaba, chillaba recompensada por mi adolescente amo y desde hoy sería el dueño de mi cuerpo.
Esa noche Faby nuevamente tuvo su noche feliz siendo penetrada antes de dormirse por su cuñado luego este se duerme agotado hasta el otro día de amanecida eso de las siete llega Leticia venía desesperada al abrirle Fabiola le dice donde esta tu cuñado, aún duerme le dice lo necesito urgente o voy a enloquecer de pasión toda la noche soñé con él y que me tenía toda la noche apareada sin descanso imagínate como vengo de caliente... entra en el dormitorio se saca sus ropas y desnuda se ubica en la cama a mi lado y me dice ya mi amo comete a tu esclava sexual que lo único que desea servirte en la cama poséeme. Por supuesto le di en el gusto..., que mujer. Esta mujer estaba desesperada en su excitación carnal, apenas apoyé mi miembro en sus entrepiernas y mi glande entreabrió su vulva, la cual estaba muy húmeda, comenzó esta una ardiente, impetuosa y apasionada entrega moviendo sus caderas en un vaivén exquisito llamándome a un agraciado coito frotándose ella con ardiente pasión y entrega al macho que la estaba en esos momentos enloqueciendo de pasión, gimoteaba, suspiraba y se encaramaba tratando de que ese pene la satisficiera en el menor tiempo posible. Sin quererlo me movía con desesperación con mi pene ensartado en su matriz, me movía encima de ella desesperado. Agarré sus senos con cada mano apretándolas con fuerza. Mientras mi mano acariciaba sus piernas empezando por las rodillas, luego los muslos y la atraía hacia mí clavándola con gran fuerza en sus entrañas, me tenía ardiente de pasión y estaba ella pagando sus anhelos de ser copulada por un joven macho…. Como se quejaba y gemía entre adolorida por mis empotradas y sus placeres de ser satisfecha carnalmente. Estaban llegando sus orgasmos aceleré mis movimientos y ella sin disimulos me abraza y gime en mis oídos soy tuya…, oh…, ah…, estremeciéndose su cuerpo mientras me dice, como me satisface al entregarse mojando mi pene con sus fluidos lo que me lleva a vaciar en su matriz mis ríos de semen con el beneplácito de ella que los recibe entre sollozos y gozos de placer. Finalizada la tarea le dice a Faby vamos a laborar ahora si que puedo calmada mis furiosas adrenalinas, calmadas hasta la tarde que me traerás a tu casa, no te molesta ¿verdad? que ocupe a tu cuñado para descargarme y hacer de el mi amo carnal y yo su puta esclava sexual.
Todas las mañana venía por su ración y por las tarde a recompensarse de sus pasiones luego se iba así durante los tres días de esta semana.
Finalizadas mis vacaciones visitaba la casa de Leticia cada dos o tres días por supuesto era muy bien recibido por ella y en la cama éramos dos verdaderos energúmenos ansiosos de sexo... finalizado el semestre Leticia estaba con dos meses de embarazo gestado en nuestros encuentros amorosos.
Pensaba para mi en mis raciocinios personales había embarazado a mi cuñada, a su amiga Camila, su colega del aseo Genoveva la mujer mas madura que había embarazado con sus 42 años y ahora era mi mujer embarazada Leticia a mis 18 años tenía tres hijas nacidas y otra en Leticia por nacer, eso si todas llevaban los apellidos de los maridos de las mujeres que eran mías cada vez que las visitaba.