Llega el viernes

Al día siguiente me dice que como lo vamos hacer para que su marido no se de cuenta, esta muchacha lo había tomado en serio y no le podía fallar. Por lo que le dije que cuando se durmiera su marido satisfecho ella fuera a abrir la puerta del departamento y permitiera entrar al macho que le mandaría iría de negro para identificarlo…, y donde lo haremos mi departamento es chico dice, entonces digo el viernes como tu entras tarde al salir tu marido deja la puerta de este departamento junta y entrara de negro el chico que te envío, esta mujer de 27 años era mas caliente que yo… me dice que bueno.
Hoy viernes Leo espera la salida del marido para ingresar a su encuentro, Silvana, esta joven mujer siente remordimiento de lo que hará y trata de conversar con Leo, esta sentada en un sillón solo cubierta por su delgada y corta camisola de dormir de tul, que poco cubre a la mujer, Leo no tiene debilidades, si al ver a su nueva profesora con esta ropa se excita y comienza a acariciarla, abrazarla y coquetearla cautivándola para llevarla a la cama…, diez minutos le dura la duda a Silvana, luego se entrega a ese deleite de las caricias y ardiente por satisfacerse deja que el macho la controle y la lleve a su cama, cinco minutos de ser acariciada y besada en su cuello y senos despojan a la profesora de sus escrúpulos y recelos entregándose al placer de las caricias mas cuando Leo se mete entre sus piernas saca ese delgado y pequeño calzón y comienza a lamerla, y besar su vagina, que diferencia con su marido que solo la abre de piernas y adentro sin caricias, sentía esa lengua entrando en su canal vaginal buscando su clítoris lo encuentra y lo lame, succiona sacando gemidos de pasión de la entregada hembra, si la estaban excitando y preparando para satisfacerla y llevarla al fenomenal momento de que ella como mujer gritara y solicitara…, métemelo por favor métemelo…, me estas desesperando, su cuerpo se agitaba revolcándose en su cama y su cadera subía y bajaba como si la estuvieran gozando carnalmente…, gemía y se trastornaba alterada por las caricias dadas a sus genitales necesitaba ser penetrada su vientre sentía contracciones t estremecimientos que subían y bajaban por su cuerpo, estaba estimulada provocada para ser inducida al apareamiento, pero el macho aun la acariciaba la quería aún mas estimulada de pronto ella siente contraerse su cuerpo y vibrar en un temblor de convulsiones y sus hormonas no soportan más y temblando siente los estremecidos de sus orgasmos sin haber sido penetrada, su vagina se moja como si hubiese estado miándose al salir sus emisiones del placer al estímulo de un macho en su cuerpo, si su primer orgasmo como mujer lujuriosa, carnal. Este era macho y siente cuando este la gira colocándola en cuatro patas en la cama, con un almohadón en su vientre, y en la posición de perrito la penetra salvajemente de un empujón con su pene que debido a lo mojada de su vagina llega hasta el fondo de su matriz golpeando sus paredes y llevándola nuevamente a un nuevo orgasmo…, o como la estaban apareando, si eso necesitaba y entrega su cuerpo sin oposiciones al macho que en esos momentos metía y sacaba en duros impulsos su pene de su vagina, lo extraía hasta casi salirse y luego en un fuerte encajamiento la hacia gritar de gozo y placer…, la estaban descalabrando en este coito, pero le gustaba y gemía apasionada solicitando mas…, más. Diez o mas minutos la estuvieron zarandeando, sus caderas tenían vida propias meneándose hábilmente necesitaba otro orgasmo siente nuevamente a su vientre estremecerse y brotar de sus entrañas nuevas emulsiones de placer cayendo sobre la cama semi desmayada, pero el macho continuaba en sus maniobras carnales y de pronto siente en su matriz chorros de espermas caliente bañando sus entrañas el macho estaba vaciando sus emisiones de semen en grandes cantidades en su cuerpo inundando su útero y vagina… había recibido el semen de otro macho en su matriz, había sido infiel a su marido, pero no se arrepentía este semental si que sabía extraerle sus orgasmos y satisfacerla carnalmente. Ambos caen sobre su cama, estaban satisfechos y saciados. En eso suena la campanilla del reloj anunciando que debe preparase para ir al colegio, pero no, avisaría que estaba indispuesta no despreciaría a este macho necesitaba mas fogosidades de placer… tenía a su macho en su cama desnudo ambos y no lo desatendería, sería de este macho nuevamente…
Esa mañana otras dos veces fue de su encantador macho, cuando su vagina inflamada y adolorida no pudo más se calmo y despidió a su novel y activo nuevo macho hasta la próxima semana, te estaré esperando el próximo viernes por la mañana, le dice al despedirlo.
Al siguiente viernes Silvana cambia el horario a Leo y lo recibe alrededor de las 14.30 horas ambos vienen del colegio entran a casa y Silvana vestía muy sexy con una blusa apretada y un gran escote que se veían partes de sus senos, una falda verde pegada al cuerpo cortísima sobre sus rodillas, mostrando parte de sus muslos, enfundadas en unas medias también verdes y sujetas por un liguero, si se agachaba mucho se podía ver la punta de su diminuta braga blanca, cuando Leo la vio en el colegio le sacudieron sus hormonas excitándose hasta mojar sus calzoncillos, por la erección del pene que llegó a destilar unas gotas de su semen en ellos.
Así que esa tarde estaba más que excitado y deseaba aparearse con ella como fuese…, penas ingresan a la casa este la atraca contra el sofá y baja el cierre de la falda sacándola fuertemente casi rompiéndola, sus bragas diminutas corrieron igual suerte y su blusa voló por los aire, la tenía desnuda apenas sus senos afirmado por un débil y pequeño sujetador sus medias afirmadas por su blanco liguero y sus zapatos tacón alto, se desnuda casi destrozando su ropa y mete su cabeza entre las piernas succionado su vagina y adueñándose del clítoris que mordía y apretaba haciendo que la mujer chillara de dolor y pasión…, lo mismo con los pezones que saco de su sujetador fueron apretados por su boca y le causaron a Silvana escalofríos de gozo que recorrieron su cuerpo, cinco minutos después estaba siendo duramente empotrada contra la alfombra del recibidor arqueando placenteramente su cuerpo para sentir mejor el pene del macho saboreando su vagina, era exquisito ser penetrada con furiosa pasión, no como su marido que apenas la penetraba, gritaba, gemía, corcoveaba, meneaba su trasero sin vergüenza ninguna, estaba arrebatada, embriagada en este placer de sentirse apasionadamente saturada por ese pene que trituraba su vagina y sus entrañas se debatían aceleradas por entregar sus orgasmos ante tan deliciosa pasión carnal del macho. Como se estremecía entregándole a su amante sus fluidos que ella sentía por la cantidad que entregada, bajaba por sus nalgas y caía en la alfombra donde su violador la tenía ensartada con su maravilloso y gozoso pene que .llevándola a la cúspide del placer carnal amoroso la desvanecía de gozo al sentirse satisfecha de sus ímpetus hormonales. El macho no estaba conforme y la gira parando su culo con los almohadones del sofá y comienza a acariciar su ano y besa este mientras un dedo de su mano repartía los flujos por ella irrigada empapando el orificio negro ubicando su pene en este, se estremece al comprender lo que este muchacho quería y se menea exageradamente para no ser penetrada por su orto, pero el macho es fuerte y sus deseos le proporcionan mayor habilidades y prontamente siente ese pene profanando su culo y adentrándose en sus intestinos, le causaba dolor y placer al gritar no sabía si era de dolor o de gozo unos minutos después ambos cuerpos acompasados gozaban del placer de ser penetrada por su hermoso trasero recibiendo este los ríos de semen emanados del pene de su macho regalón. Le había desflorado su hermoso trasero, no podría sentarse cómodamente por algunos días por esta penetración, pero la había satisfecho el sentirse embetunada por el semen del macho en sus intestinos, había, su nuevo macho, gozado todos sus agujeros boca, vagina y ahora su trasero. Y lo que sabría dentro de unos días mas que este semental la había fecundado uno de sus óvulos preñándola, tendría su primer hijo de otro macho, no de su marido, su infidelidad a menos de tres meses de casada le había pasado la cuenta.