LOS DOS QUERIAMOS

Soy aquel que dado a un problema congénito, por tener un testículo de más; tengo entre las piernas, un pene descomunal, ya compartí con Uds. Casi todas mis encuentros sexuales de lo mas variado, sería tedioso, contar todo de vuelta, cansado de ser rechazado por que ninguna mujer quería saber nada de tener, que aguantar tanta carne adentro, pero a medida que me desinhibí, la cosa cambio, en mi mente, de querer operarme, llegue a pensar, ni loco, el destino me hizo así, busquemos, a las que les gusta, esta tripa, y justamente lo que voy a contar es lo que sucedió, en mi pueblo de residencia.
Lo que me sucedió, con Lerena, una viuda joven, que por amigas en común se había enterado de mi reputación, y según comentarios, no creía que yo era tan dotado, entre ellas jorobaba con migo, en sus reuniones, entre sus amigas de las cuales; yo empomaba a una en secreto, casada, audaz, (descaradamente por que la carcomió la curiosidad, se me había, entregado y me había volteado, en mi negocio).
Esta amiga me contó, Lerena tuvo un tiempo de recato, después de su viudez, pero estaba muy deseosa de tener sexo, y ella la jorobaba con migo, Lerena le decía Salí loca, no estoy regalada ni desesperada, pero ella me decía que siempre era la que mas, prestaba atención cuando jorobaban por mi pedazo.
Un día, de casualidad, me topo, con Lerena y mi amiga, en un Bar me la presento, ese encuentro casual, nos dio pie para conocernos, y de a poco en cada ocasión, de encontrarnos, nos fue haciendo entrar en confianza, hasta que llego el día que me animo a invitarla, a cenar (como toda viuda estaba, muy bien, me encantaba su culo, sus senos, era tan sensual), que sabiendo que existía curiosidad de parte de ella e interés, de parte mía por voltearla, así que la llevaría a la practica, fuimos a cenar, en la cena ella estaba como exultante y siempre con la segunda intención salimos, yo le dije que la noche estaba en pañales, como para cortar le dije de ir a tomar algo, me dijo directamente, “tomémoslo en casa, si no te molesta” para allá fuimos y ya en el lugar la cosa no tardo en darse había un notorio interés por Lerena, de develar el misterio de mi pedazo, a los minutos, fue al grano diciendo es verdad lo que se comenta de Ud. respecto su sexo, le digo, no se que se comenta, “Bueno no piense mal de mí, pero es muy exagerado, el comentario del tamaño, de su miembro, que es difícil de creer”, “bueno, no se pero si, verdad soy un poco dotado” la cosa fue subiendo de tono, ensalce todos sus atributos, le puse sensualidad, hasta que las miradas se cruzaron fijas, y con una sola intención, tome la delantera la bese, de a poco, nuestras lengua se cruzaban, las manos entraba, mi sable a pleno, no resistió sus manos fueron hacia el
Dijo a la pucha, le digo note asustaras, y y me dejaras así, ella no que va, me tomo de la mano fuimos a sus aposentos, ella se desvistió, era apetecible, su físico, cuando mi verga quedo a su vista sus ojos desorbitados, no hablaba, por un rato le dije “Lerena ,Lerena ehh ahh si pero pe ro eso es una animalada” “no tengas miedo tranquila yo se que hacer” me coloque el tope de goma, y tarde mucho en penetrarla, la bese por todo el cuerpo, le chupe su vagina, ella tímidamente, me masturbo, hasta que de a poco se soltó y entro a relajarse, en un omento, la lleve con su cabeza hacia, mi verga, la incite a chuparla, abrió grande la boca y comenzó a chupar sus cachetes se inflaban cuando mi cabeza, golpeaba en ellos, le indique que lamiera, la cabeza, y produjo en mi el momento sublime, de ponerla de espalda, y abrir bien las piernas, cerro los ojos mi pedazo, comenzó a dilatar mientras entraba despacio en su caverna, que no era grande mas bien estrecha, su goce, se noto de entrada, sus quejidos, se notaban, esto se fue de a poco combinando hasta que sentí notoriamente, su orgasmo, seguí ya frenéticamente, era música, sentir que me pedía mas, y mas termine largando tanta leche, que sentí tanto placer, como hacia rato no sentía, cuando nos relajamos fumando un cigarrillo, se soltó, me dijo sabes como me siento, “como” “como cuando lo hice por primera vez a los quince años” me reí digo queres decir que es debut y despedida, no ni loca te dejo escapar.
Seguimos se adapto a mi d forma que ya por un tiempo fui su semental