Categorias

Relatos Eróticos

Ultimas fotos

Photo
Enviada por narrador

Photo
Enviada por ELCASUAL

Photo
Enviada por rodolfosalinas


 

Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos)

Relato enviado por : napalmrelatos el 20/05/2015. Lecturas: 11594

etiquetas relato Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos)   Maduros .
Descargar en pdf Descarga el relato en pdf
Resumen
La mujer se concentraba en rebotar encima de su marido, por lo que solo se mordía los labios y se aferraba a las piernas de su esposo, dejando escapar gemidos ahogados.
- Mm!... mm!... um!.. um!.. am!... am!...-gemía la esposa-
Mi excitación iba en aumento, por lo que me comencé a frotar los pezones con mis dedos, una de las manos del hombre dejo libre una teta de la mujer y bajo hasta su peludo vientre, imagino que frotando su clítoris; ya que como dije no podía ver bien por la poca luz. La mujer ahora si gemía profundo y largo.
- Aaaahh!... plap!... uuummm!.. plap!... hay gordo!... aaah!... coges chingon!... aaah!.. plap!...-decía la esposa-
Así estuvieron por unos minutos hasta que el esposo exclamo.
- Gordita!... de a perrito mamacita, pa acabar!...



Relato
Desde el momento en que llegamos al hotel en el que nos hospedaríamos durante las olimpiadas universitarias, un señor de unos 50 o 60 años fue el encargado de llevar nuestras maletas hasta nuestras habitaciones, el pobre sudaba copiosamente mientras realizaba su labor, ya que las maletas y valijas donde los implementos deportivos se hallaban eran pesadas.
En un gesto de amabilidad le ofrecí una botella de agua mientras dejaba nuestras maletas en la habitación, el señor sonrió y tomo un gran sorbo; dándome las gracias, salió para seguir con sus labores, llevándose la botellita de agua en la mano.
Durante los momentos que teníamos libres o íbamos y veníamos de los entrenamientos o tiempos de alimentación, nos cruzábamos con el señor, él siempre sonreía al verme si me hacia una reverencia. Cosa que me parecía muy tierna, yo correspondía sonriendo y agitando la mano para saludarlo.
Como ya dije rondaba los 60, su abdomen prominente lo hacía verse como una botarga, no muy alto apenas llegaba al 1.50 de altura o menos, su piel morena, cara redonda, labios gruesos, ojos grandes y algo rasgados, cabello muy corto tipo militar, como se imaginan no era un modelo de revista ni mucho menos atractivo.
Pero si muy amable y atento, en varias de las ocasiones que nos cruzamos en los pasillos, lo sorprendimos mirándonos morbosamente, como quien dice se hacia sus chaquetitas mentales.
A mis compañeras eso les parecía indígnate, sucio y no menos pervertido, solo porque era un hombre mayor y no atractivo, pero a mí que desde siempre he tenido atracción por los hombres mayores me parecía morboso y me ponía algo caliente.
Un día después de la orgia con el staff de coucheo, Salí de mi habitación para ir a desayunar, mi cabello aún estaba húmedo y lo traía suelto. Espere el ascensor y al abrirse la puerta mire que el señor estaba dentro, me sonrió de inmediato y dijo.
- Baja?...
- Aja!... gracias!...-respondí entrando-
La música de ascensor sonaba, sentía la mirada del señor sobre mi cuerpo. Comenzando a excitarme, mire por el rabillo del ojo y lo vi recargado en la esquina derecha del ascensor.
- Ya a desayunar?...-pregunto el hombre-
- Si!... es la comida más importante del día!...-respondí girando para verlo-
- Aah!... muy bien señorita!... hay algún tipo de juegos o porque hay tantos chicos y chicas con pants?...-pregunto el señor-
- Aja!... las olimpiadas universitarias!...-respondí sonriendo-
El tintineo del ascensor bajando los pisos sonaba en el ambiente. Mis nervios aumentaban, discretamente mire su entre pierna, pero su prominente abdomen no dejaba ver nada.
- A propósito!... muchas gracias por el agua que me regalo!... estuvo duro el trabajo el día que llegaron!...-exclamo sonriente-
- De nada!...-respondí-
El ding!... del ascensor interrumpió nuestra charla y tres chicas de otra universidad entraron al ascensor, saludando.
- Buenos días!...
El señor y yo respondimos de la misma manera, pero ellas miraron al señor de forma despectiva, lo que me molesto bastante. Sintiéndose menos el señor se colocó de lado y se quedó en silencio.
La puerta del ascensor se abrió en la planta baja, gire para mirar al señor y dije.
- Cuídese, que tenga buen día!...
El hombre sonrió y respondió.
- Muchas gracias señorita!... igualmente!...
Las tres chicas me miraron con ojos de asombro y todas salimos del ascensor, caminé unos pasos y mire hacia atrás, notando que el hombre me miraba morbosamente el trasero. Sonreí y la puerta del ascensor se cerró.
Esa tarde al regresar del entrenamiento vespertino, en el cual no hice nada por la lesión fingida, mire al hombre hablando con una mujer de la misma edad con algunas canas en el cabello, morena, el clásico cuerpo de una mujer madura, senos caídos, abdomen grande y flácido y un trasero enorme y parado, enfundado en una falda de flores. El hombre el beso en los labios despidiéndose de ella, entendí que se trataba de su esposa.
Subí a mi habitación y me duche, baje a cenar y volví a mi habitación. Me sentía algo deseosa y caliente, por lo que decidí masturbarme un poco. Logre llegar a mi orgasmo, pero eso no bastaba, pensé en ir a ver a los entrenadores de nuevo pero no quería tanto ajetreo. Se subí los pantalones y Salí de la habitación, decidí caminar por los jardines del hotel para clamarme un poco.
Estuve caminando por espacio de media hora, el aire fresco de la noche me relajo de a poco. En una de esas tantas vueltas divise a la esposa del botones, parada al inicio de la rampa del estacionamiento subterráneo.
Segundos después su esposo salió por la parte de debajo de la rampa, haciendo señas de que se diera prisa. Eso me llamo la atención, por lo que decidí seguirlos a distancia. Baje la rampa de prisa y mire por el borde de la pared, los dos entraban aun cuarto pequeño, al acercarme mire que la puerta no estaba cerrada, un tabique impedía que lo hiciera. Sobre la puerta estaba un letrero enorme que decía.
- Peligro!... alta tensión no pase!...
Así que me dije, Maly regresa a tu habitación ya!... pero la curiosidad como siempre, mato al gato; abrí la puerta despacio y entre al cuarto, camine unos cuantos pasos y escuche.
- Ándale gorda!... que no tengo mucho tiempo!...
Me agazape detrás de unos tubos de ventilación y por la separación de los mismos pude ver a la pareja. El hombre sentado sobre un pequeño banco comiendo a placer con los pantalones hasta los tobillos, su esposa se había despojado del vestido floreado y puesta de rodilla le pegaba unas buenas mamadas de pene.
El hombre muy quitado de la pene degustaba sus alimentos mientras su esposa se esforzaba por chuparle el pito, no podía ver el miembro del señor ya que el enorme trasero de su esposa cubierto por un calzón que más bien parecía una tienda de campaña me lo impedía, solo apreciaba su cabeza subiendo y bajando desesperadamente.
El hombre no emitía ni un sonido, más que el de su boca al tragar los alimentos, una vez que este termino de alimentar al cuerpo dijo.
- Ahora si gordita!... vamos alimentar al chango!...
La señora dejo de mamar pito y se enderezó el hombre le quito el brasier y la puse de pie bajando su calzón, para dejarla completamente desnuda, el cuerpo de la mujer era muy grande, varios pliegues se notaban en los costados de su espalda, su tetas eran enormes pero colgaban tanto que casi le llegaban al ombligo, sus piernas regordetas y llenas de celulitis; mientras que sus nalgas eran increíblemente grandes y llenas de carne.
Trataba de ver la herramienta del hombre pero debido a la poca luz y los cuerpos llenos de curvas me resultaba imposible. Me parecía muy morbosos ver aquellos dos maduros o más bien abuelitos, teniendo sexo, la cachondez de las palabras del hombre, la mujer lo besaba con pasión mientras le jalaba el instrumento.
La mujer giro quedando de espaldas a su marido, este abrió las piernas para dejar espacio para el voluptuoso cuerpo de su esposa, la tomo de las gordas nalgas abriéndoselas; ella se sentó en si miembro y comenzó a subir y bajar despacio, el golpeteo de sus nalgas en las piernas y pubis de su marido y sus tetas aguadas rebotando contra su abdomen, generaban una melodía con buen ritmo.
- Plap, plop, plap, plop, plap, plop, plap, plop, plap, plop, plap, plop…-se escuchaba en el pequeño cuarto-
Su marido tomo sus tetas con las dos manos dejándose de escuchar el PLOP!... solo el PLAP!... de sus nalgas azotando en contras de su marido.
- Así, así gordita!... aah!... que rico coges todavía!... aaah!...-decía entre gemidos el hombre-
La mujer se concentraba en rebotar encima de su marido, por lo que solo se mordía los labios y se aferraba a las piernas de su esposo, dejando escapar gemidos ahogados.
- Mm!... mm!... um!.. um!.. am!... am!...-gemía la esposa-
Mi excitación iba en aumento, por lo que me comencé a frotar los pezones con mis dedos, una de las manos del hombre dejo libre una teta de la mujer y bajo hasta su peludo vientre, imagino que frotando su clítoris; ya que como dije no podía ver bien por la poca luz. La mujer ahora si gemía profundo y largo.
- Aaaahh!... plap!... uuummm!.. plap!... hay gordo!... aaah!... coges chingon!... aaah!.. plap!...-decía la esposa-
Así estuvieron por unos minutos hasta que el esposo exclamo.
- Gordita!... de a perrito mamacita, pa acabar!...
La mujer se levantó de encima de su esposo, un Plaz!... se escuchó ya que su pito azoto contra su panza, eso me indicaba que el hombre estaba dotado: su esposa se recargo sobre el banco y abrió las piernas su enorme trasero se notaba demasiado gordo, su esposo se colocó detrás de ella y abriéndole las nalgotas la clavo de un golpe.
- Aaaah!... gordo!... aaaaayy!... así que rico!...-gimió la esposa-
- Chiquita!... estas bien buena!... aaaah!... te voy a dar duro mamita, porque ya se me va acabar el descanso!...-dijo el esposo y comenzó un violento mete saca-
Las nalgas de la esposa parecían gelatinas a medio cuajar, se agitaban con cada embestida de su marido.
- Plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!..-se escuchaba en el cuarto-
- Gordita!... gordita!... ahhh!... que rico!... te gusta mami!... te gusta?...-gemía el esposo-
- Aha!.. si, si, si!... me gusta mucho!... aaah!... plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, plap, ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!.. ah!... ah!..-respondió la esposa-
De un momento a otro el hombre saco su herramienta de la vagina de su esposa y descargo dos grandes chorros de semen sobre la espalda y trasero de su mujer.
- Aaaaaah!... mamacitaaa!... uuuuyyy!... todavía la aguantas!... aaaah!...-decía el hombre-
La señora solo gemía despacio y trataba de tomar aire. Como en la posición en la que estaba era un poco incomoda, moví mi pie para sentarme en el suelo, lo que provoco que este chocara contras el tubo de metal, produciendo un sonido que alerto a la pareja.
El hombre se subió los pantalones de prisa, su esposa se cubrió con su vestido tomándolo del suelo, el hombre camino hasta la puerta, observo inquieto. Se encogió de hombros y volvió, me quede helada y sin poder hacer nada, pero fue inútil. El señor me vio sentada entre los tubos de ventilación del hotel, con ojos grandes y tratando de sujetar sus pantalones dijo.
- Señorita!... que hace ahí!... se va a electrocutar!... salga por favor!...
Me extendió la mano para ayudarme a salir de mi escondite, en ningún momento sintió vergüenza o intento disculparse. Aquello me pareció extraño, ya que a mí sí me había dado vergüenza estar espiándolos.
- Dígame está bien so se lastimo?... no se quemó?... esos tubos están calientes!...-dijo el señor revisándome sin dejar de sujetar sus pantalones-
- Estoy bien, no se preocupe!... y perdóneme!...-respondí avergonzada-
El señor me miro extrañado y sonriendo respondió.
- Perdonarla porque?... que a poco no le gusto el show!...
Me reí como tonta y con la cabeza gacha respondí.
- Pues estuvo bueno!...
El señor me tomo del brazo y me llevo hasta donde estaba su esposa, la cual ya se había vestido de nuevo y dijo.
- Mira gordita tenemos visitas!...
- Buenas noches señorita!...-dijo la esposa saludándome-
Levante la cabeza y con los cachetes rojos por la vergüenza respondí.
- Buenas noches señora!... discúlpeme!...
Ella sonrió y dijo.
- Nada no se preocupe, también tenemos hijas y muchas veces nos espiaban cuando lo hacíamos… así que no pasa nada!...
Sus palabras me aliviaron un poco, pero aun así me sentía apenada. El señor se vistió de nuevo y dijo.
- Señorita!... no me lo vaya a tomar a mal!... pero me gustaría invitarla a participar con nosotros en mi casita, después de que salga de trabajar!... qué dice?... se anima?...
Ni dude siquiera y respondí.
- Si está bien!...
- Somos humildes pero vera que la va a pasar rebien!...-exclamo sonriente al igual que su esposa-
El señor se despidió de su esposa diciéndole.
- Mamita, te preparas todo… ok!... te amo!...
Se despidió de mí y me aclaro que me vería en la avenida, en el sitio de taxis como a las 23:30 horas. Salió del cuarto dejándonos a su esposa y a mí dentro. La confianza del hombre me hacía sentir tranquila, su esposa se despidió de mi con un beso en la mejilla y salió, unos minutos más tarde Salí y subí a mi habitación. Mire el reloj y apenas eran las 21:00 horas, encendí el televisor y me recosté en la cama, una hora más tarde la maestra Diana toco a mi puerta y dijo que se iba a la cama, pregunto si estaba bien, a lo que respondí que sí. Se despidió y supe que no habría problema para escabullirme.
Como a las 23:15, Salí de la habitación caminando de prisa y sin zapatos, llevaba puesto un pants negro, me había quitado el de la universidad para no levantar sospechas. Llegue a la planta baja y Salí del hotel, camine hasta el sitio de taxis y el señor me esperaba sentado en una banca, se había duchado y cambiado de ropa. Lo salude y los dos abordamos un taxi. Él le indico a donde nos llevaría y arrancamos.
Tardamos unos 20 minutos en llegar a una colonia bastante humilde, las calles eran de tierra, y el auto daba saltos debido al mal estado de la calle. Durante todo el camino el señor no dejo de hablar conmigo, en ocasiones me tocaba las piernas y eso comenzaba a excitarme, al fin llegamos a una casa la cual lucia sin terminar, el señor pago el importe de la dejada y dijo.
- Vamos pa bajo!...
Bajamos del taxi y caminamos unos cuantos pasos hasta la puerta de la casa, los perros ladraban y una nube de polvo se levantaba mientras el taxi se alejaba, ya no había marcha atrás. La puerta se abrió y su esposa sonriente lo saludo con un beso y después a mí.
Entramos hasta la sala de estar, de inmediato note que su esposa llevaba una bata corta de satín color azul, el señor exclamo.
- Siéntese señorita!... que le ofrezco?... una cerveza, un chínguere, o que se le antoja?...
- Ya sé!... gordita pásate el Tequila!... vamos a empezar a calentar motores!...-dijo a su esposa-
La señora tomo una botella de tequila de la alacena y tres caballitos, se sentó en el sofá junto a nosotros. Sirvió tres mediadas iguales de tequila en los tres vasitos, cada quien tomo uno y dijimos.
- Saludddd!...
Y hasta el fondo, de inmediato sentí el calor del alcohol recorriendo mi cuerpo.
- Otro?...-pregunto el señor-
Que hasta ese momento no sabía ni su nombre y nunca lo sabría.
- Aja!...-respondí-
Volvieron a servir los tres caballitos y de nuevo hasta el fondo; y llego el tercero y el cuarto…
El calor de mi cuerpo provocado por el tequila, me hizo despojarme de la chamarra del pants, de inmediato el señor se quedó mirando mis tetas y dijo.
- Ya viste gordita!... se parecen a las de Cami!...
- Si gordo, de hecho toda ella se le parece mucho!...-respondió su esposa-
Cami?... quine demonios era Cami!...
- Perdón pero quien es Cami?...-pregunte-
Ambos se miraron y la señora respondió.
- Era nuestra hija, falleció hace ya tres años!... y usted señorita se le parece mucho, ahora sé porque mi viejo quiso invitarla a participar esta noche!...
Vaya!... así que los abuelitos se cogían a su hija!... pensé en silencio.
- Oh!... lo siento mucho no quise importunarlos!...-respondí-
- Nada!... ándele señorita, no se me achicopale!... necesita algo más?...-respondió el señor preguntando-
- Sí, me deja pasar a su baño!...-respondí-
Su esposa se levantó del sofá y me acompaño hasta el cuarto de baño, al cerrar la puerta me mire al espejo y me sentí mareada. Me quite la camiseta y el brasier, me baje los pantalones del pants y me quite las pantis. Dejando mi cuerpo desnudo, los cuatro tequilas habían cumplido su objetivo, desinhibiéndome en su totalidad.
Me enredé en un toalla y Salí del baño, volví hasta donde se encontraba la pareja; al verme los dos se dijeron algo al oído. La esposa se levantó y subió las escaleras, el señor al verme se abrió los pantalones y comenzó a masturbarse por encima de su ropa interior, a los pocos minutos bajo con una mochila en las manos. La coloco sobre la mesa de café y volvió a sentarse, yo seguía de pie y me tocaba por debajo de la toalla, dejándole ver un poco de mi sexo al señor y su esposa.
- Muy bien señorita, voy a empezar con mi gordita!... y cuando usted quiera se puede unir a nosotros!...-dijo el señor poniéndose de pie y comenzando a desnudarse-
Has te ese momento pude ver bien su fierro, ni pequeño ni gigante, más bien normal muy parecido al de mi hermanastro Miguel o el coach Ovidio, gordito y muy obscuro, cubierto de vello; sus huevos estaban casi pegados a su pubis pero bastante grandes.
Cuando el señor estuvo completamente desnudo, puso de pie a su esposa y le quito la bata se satín, su voluminoso cuerpo estaba cubierto por un conjunto de lencería del mismo color de la bata, que consistía en brasier y pantis de encaje, sus pliegues se marcaban por todo su cuerpo, su trasero enorme se miraba asfixiado por las pantis, mientras que sus tetas gordas se notaba levantadas, ilusión óptica solamente.
Su esposo comenzó a besarla y acariciarla, mientras que ella tomo su pene y comenzó a masturbarlo, como ya dije me parecía morboso ver como se calentaban los abuelitos, el esposo le quito el brasier lo que provoco que sus tetotas cayeran hasta su abdomen, yo me quite la toalla que enredaba mi cuerpo y comencé a tocarme con las dos manos, los maduritos me miraban de reojo sin dejar de tocarse y besarse.
- Vas pa abajo gordita!...-exclamo el esposo-
De inmediato la señora se sentó en el sofá, comenzando a chuparle la herramienta.
- Mmgg!... mmgg!... mmgg!... mmgg!... mmgg!... gordita!... aaah que rico!... mami!...-decía el esposo-
El hombre volteo su rostro para mirar lo que yo hacía, me miro sonriente y pregunto.
- Esta cómoda, señorita?... no se avergüence!...
Aquello me saco del trance y camine hasta sentarme a un lado de su esposa. La mire chupar miembro, mientras mis manos acariciaban uno de los muslos y el prominente abdomen de su esposo. Ella tomo la mano que acariciaba la panza de su esposo y la bajo hasta sus huevos, comencé a jugar con ellos, el hombre se retorcía y gemía profundamente.
- Aaaaahhh!... oooouuuh!... señorita que suaves manitas!... aaaah!... así mis niñas!... asii!...
De un momento a otro mi mano que pasaba por su muslo, se fue hasta su nalga, el hombre me miro y la tomo delicadamente, la llevo hasta la separación de sus nalgas; comencé a subir y bajar por lo largo de su raya, cada que mis dedos pasaban por encima de su ano, el hombre daba un saltito y soltaba un gemido, notaba que eso le gustaba, pase unas cuantas veces más mis dedos por su ano; para después dejar que mis dedos presionaran su agujero.
- Mira gordo!... la niña sabe lo que te gusta!...-exclamó la esposa sacándose el pene de su esposo de la boca-
- Aja!... esta nena sabe lo que hace!...-respondió el esposo-
Lo mire fijamente y pregunte.
- Le gusta esto señor?...
- Me encanta nena!... me pone más caliente!... ya verás cómo me lo hace mi gordita!...-respondió el esposo-
- Y si se los meto?...-pregunte refiriéndome a mis dedos-
- Todavía no nena!...-exclamo el esposo-
Vaya, con el viejo; le gustaba que se lo cogieran…. Eso me excito aún más. Mis dedos siguieron jugando con su agujero, mientras que su esposa me dio a mamar la verga de su esposo.
- Anda nena prueba!...-dijo apuntándome con la herramienta de su esposo-
De inmediato me la trague hasta la mitad, mi mano seguía jugando con su huevos, mi lengua rodeaba su glande cuando su herramienta salía de mi boca, un que el hombre se había duchado y cambiado, muchas gotas de sudor resbalaban por su panza, cayendo en mi frente y cara, un ligero aroma a orina hacían más excitante las mamadas.
- Mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... sssssssh!... le gusta señor?... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... ahhh!... ssssh!... le gusta señora?... mmmggg!... mmmggg!... mmmggg!... shhhh!...-decía mientras mamaba miembro-
Los dos se miraban sin decir nada, la mujer acariciaba ahora el culo de su marido, mientras que besaba su pubis y mi boca cada que la verga de su marido salía de mi boca.
- Niña!... ooh!... chupas bien rico!... ahhh!...-gemía el hombre-
- Te gusta gordito?...-preguntaba la esposa-
- Aja!... mama riquísimo!...-respondió el esposo-
- Me chupas un poquito nena?...-pregunto la esposa-
Deje de inmediato el falo del esposo en paz y cambiamos de posición, ahora la esposa se tendió sobre el sofá, recargando sus hombros en el respaldo, el esposo se incoó sobre su panza de ella y flexionó una rodilla dándole a mama su verga, yo me puse de rodillas y abrí sus piernas, para mí era la primera vez en una situación lésbica y bisexual.
Me metí en medio de sus gordas piernas, y abrí su oso peludo, porque eso no era una conejita, era un oso lleno de pelo empapado y pegajoso. Comencé a pasar mi lengua por encima de su gran frijol, quitando con los dedos el abundante vello que lo cubría, la señora estiraba las manos tratando de sujetar mi cabeza pero le era meramente imposible, las grandes arcadas de la esposa me indicaban que se estaba comiendo todo el falo de su marido.
Mis dedos comenzaron a introducirse dentro del oso de la mujer, mientras que mi boca chupaba su clítoris con desenfreno.
- Mmmgg!... ggguuaaww!... mmgg!... gguuaaww!... así, mis niñas oooh!... que rico!... mmm!... la, la, la, la, la… mmm!... mmgg!... gguuaaww!... mmgg!... gguuaaww!...-gemíamos todos-
De pronto la petición del esposo me sorprendió bastante.
- Señorita!... ahora si!... métame un dedito en el culo!... por favor!...-dijo con los ojos cerrados y disfrutando-
Humedecí mi dedo medio de la mano izquierda en los jugos de su esposa y lo lleve hasta su separación de las nalgas, él se las abrió con las dos manos y encontré su negro agujero, puse el dedo encima y sin mayor problema se hundió hasta la mitad.
- Aaah!... señorita!... que bien lo hace!... dele caña a mi agujerito!...-exclamo el esposo-
Comencé a meter y sacar mi dedo de su culo, mientras no dejaba de chupar el frijol de su esposa y meterle los dedos en la vagina, aquello me tenía realmente frenética y deseosa, por lo que ya mi conejita escurría de fluido.
Así estuvimos por varios minutos hasta que el esposo dijo.
- Me da permiso de chuparle su pepita señorita?...
Eso me sorprendió bastante, siempre me habían tratado como una puta, pero esta vez me pedían permiso.
- Aja!...-respondí de inmediato-
El esposo se bajó del sofá sacándole el miembro de la boca a su esposa, se colocó detrás de mí y arrodillado me empezó a mamar la coneja. Ahora si las manos de su esposa me tomaron de los cabellos, lo que hizo que dejara por la paz su frijolito y sacara mis dedos de su vagina, mi cara se hundió en su sexo empapado, después de unos segundos ella me soltó de los cabellos, ayudándome a levantar su vientre el cual no me dejaba respirar. La lengua del marido me daba tanto placer que mis gemidos se ahogaban en la vagina de su esposa, lamia mi coneja de principio a fin, metiendo su lengua en su totalidad en mi empapada conejita, con su dedo pulgar me oprimía el frijol y lo masajeaba suavemente.
- Ooh!... ohh!... oh!... ahh!... ahh!... niña, niñaa!... me vas a hacer venirme!... aahh!...-gemía la esposa-
- Vente mamita, vente!...-exclamo el esposo sacando su cara de mi trasero-
La señora se convulsionaba producto del placer que mi boca le daba, yo estaba como una loca, me comía su oso con fervor, después de unos segundos no pudo más y dejo escapar un largo gemido, su oso se empapo; haciendo lo mismo con mi cara, sentí que me ahogaba con el fluido, por lo que tosí un poco pero sin dejar de lamer sus paredes internas.
- Uuuuuuuuuummmm!... nenaaa!... aaaaaaaaaaah!... yaaaa!... yaaaaaaa!...
Su esposo saco su cabeza de mi trasero y miro como terminaba su esposa. Sentí como uno de sus dedos me penetraba la coneja y dijo.
- Mmm!... esta lista señorita!... usted sígale ahí con mi mujer!...
Me acerco su pene el cual se había puesto un poco flácido, lo metió despacio en mi coneja y lo dejo ahí hasta que el calor de mi sexo, comenzó a despertar al animal. Poco a poco su pito fue tomando dureza dentro de mi coneja, sentía como mis paredes vaginales se expandían con el aumento de tamaño de su verga.
- Mmmm!... agggww!... sssshhh!... ahhh!... señor que rico!...-gemí dejando el oso de su esposa-
- Aaaahh!... señorita!... esta usted empapada y caliente!... uuh!... me dejaría llamarla por otro nombre!...-dijo el esposo gimiendo-
Sabía que quería recordar a su hija fallecida, así que respondí.
- Aja!... llámeme como quiera!... pero cójame rico!...
De inmediato el esposo me tomo de las caderas y con cadencia a suavidad me comenzó a bombear la coneja. Metí mi cabeza de nuevo en medio de las piernas de su esposa, mientras ella se chupaba los pezones de sus caídas tetas.
- Pap, pap, pap, pap, pap, pap…-ese sonido clásico de sexo que otro hora había sido brutal ahora era suave y cadencioso-
- Aaah!... mmm!... papii!... cógeme aaah!... mmm!...-gemía sacando la cabeza del oso de su mujer-
La señora comenzó a resbalarse en el sofá, hasta quedar con las caderas fuera del asiento, el morbo y las penetraciones de esposo a mi coneja me hicieron perder el control, el placer se desbordo y tomando las piernas de su esposa intente levantarlas, pero en verdad eran pesadas, por lo que ella tuvo que ayudarme, dejando su cola totalmente abierta, su negro ano se miraba brilloso por los fluidos que escurrían hasta él.
Lamí toda su raya desde el ano hasta el frijol, regresando a su agujero, lamiéndolo varias veces, la mezcla de sudor y fluidos vaginales hacían el mi lengua comenzara a entrar en el asterisco de la señora, ella gemía y se aferraba a su muslos. Su marido seguía con las penetraciones suaves y profundas, todos gemíamos y disfrutábamos del momento.
- Aaah!... nena!... ahhh!... mmm!... cami!... ahhh!... mmm!... papi cógeme más!... aaah!... así, asi!... mmm!... mi niña!... ahhh!... lame, lame!...
Había aceptado el juego de rol, convirtiéndome en su hija fallecida. En un momento el esposo comenzó a palmearme las nalgas despacio, yo metí un dedo en el culo de su esposa y lamia su oso de nuevo. La esposa se apretaba las tetas víctima del placer que le daba, mi coneja se mojaba más y más, comenzando a presagiar el inminente orgasmo. Las palmadas en las nalgas seguían suavemente, el dedo pulgar del señor me poso sobre mi ano, comenzando a aplicarle presión, después de unos segundos entro sin problema, estaba dudando si me contendría de no pedir que me la metiera por el culo, ya que es solo se lo reservaba a papa.
Pero el no pregunto nada solo se excitaba metiendo su dedo en mi ano y dejándolo ahí. Su esposa tuvo su segundo orgasmo, explotando de nuevo en mi cara, mis cabellos se pegaban a mi frente por lo empapada que estaba de sudor y fluido vaginal; pocos segundos después llego el mío, dejando escapar un gemido largo y lleno de placer, me derrame sobre la verga del hombre. El esposo se detuvo por completo y dijo.
- Le toca a tu mami!...
Saco su verga de mi coneja, empapada se puso de pie y me ayudo a levantarme, las piernas me temblaban aun por el orgasmo, mi coneja chorreaba liquido por mis muslos, la señora se levantó del sofá con trabajos, su cuerpo al igual que le mío temblaba, el esposo abrió la mochila que había traído su esposa y del interior saco un bote de lubricante y un dildo muy parecido a su verga. Dio la vuelta y nos miró a las dos, volvió a la maleta y saco otro dildo pero este más grande de color negro, junto con varias cintas de tela.
- Ponte esto Cami!... y después te toca mami!...-dijo el hombre-
Me paso el pito más grande, un condón y un arnés de tela, su esposa me ayudo a ponérmelo y una vez que estuvo listo y en su lugar, el esposo exclamo.
- Cami!... me vas a dar por el culo mientras me cojo a tu mami!...
Esas palabras me pusieron aún más caliente, me iba a coger a un hombre… no podía creerlo.
Su esposa se colocó en posición doggy, sobre el sofá; el detrás de ella y yo detrás de él, la penetro despacio y dejo su verga dentro de ella. Y dijo.
- Cami ponle lubricante a la cosa esa!...
Tome el lubricante y lo unte sobre el condón ya lubricado, me volví a colocar detrás de él, le puse el pito plástico en medio de las nalgas y él se inclinó un poco hacia el frente, abrí sus nalgas con las manos para ver en donde estaba su agujero, coloque el glande del pito de plástico encima y él lo tomo con su mano, diciendo.
- Empuja Cami!... empuja!... mami!... no te muevas!...-dijo a su esposa-
Aplique presión sobre el dildo y la sensación era extraña, el morbo de penetrar aun hombre era intenso, pero al mismo tiempo el dildo presionaba mi frijol, lo que provocaba descargas eléctricas en todo mi cuerpo. Poco a poco el pito plástico le comenzó a abrir el ano, logrando entrar la cabeza y una cuarta parte en su agujero.
- Aaaaaahhh!... Camii!... aaaaah!.... te estas cogiendo a papi!... aaaah!...-gemía el esposo-
Las descargas de placer que la presión del pito plástico me daba en el frijol, me estaban poniendo como loca, entonces el esposo exclamo.
- Muy bien Camiii!... ahhh!... agarra el ritmo nenita!...
Y comenzó a meter y sacar su pito del oso de su mujer, lo tome de las caderas comenzando a hacer los mismo, el vaivén era suave y cadencioso, el pito plástico se hundía mas en su agujero con cada empujón, el placer en mi frijol seguía arrancándome gemidos de placer.
- Ahhh!... ahhh!... papi!... papi!... ahhh!... así Cami!... así cógete a papi!... aaah!... mami también lo está sintiendo!... ummm!... ummm!... nena!... aaahh!... asi nena!... mmm!. Empújasela a papi!... aaah!...
Mis empujones en el culo del señor hacían que su verga se clavara más en el oso de su mujer, logrando que ella se excitara más y más. La señora se pegó su tercer orgasmo de la noche minutos después, yo seguía cogiéndome al señor y mi frijol disfrutaba con cada empujón; mi segundo orgasmo llego enseguida. El esposo saco su verga del oso de su mujer y la azoto varias veces en sus nalgas, síntoma de que él quería terminar también pero se estaba aguantando para mí.
- Cambio gordo!... le quiero dar a la niña!...-exclamó su mujer-
Oh por dios!... me iba a coger su esposa, el señor dejo que su esposa saliera de su posición, ella se incorporó y me sonrió, tomo el otro dildo y se lo coloco, le dio un vaso tequilero a su esposo y camino hasta quedar detrás de mí.
- Mi amor esto te va a gustar, veras!...-exclamo la mujer y me penetro la coneja-
- Uuummmm!... mami!... ahhh!...-gemí-
El empujón que me dio la mujer provoco que el pito plástico se clavara hasta el fondo en el ano del esposo.
- Aaaah!... Camii!... aaaah!... uuuuyyy ya me entro todito!... aaaah!... sssss!... espérate mami!... aaaah!...-dijo el esposo pidiéndole que se detuviera a su esposa-
Unos segundos después la señora comenzó a moverse, metiendo y sacando el pene de plástico de mi coneja, yo hice lo mismo con el esposo, y este se masturbaba despacio. El había quedado ahora en posición doggy sobre el sofá, yo detrás de él y su esposa detrás de mí.
- Aaah!... ahhh!... que rico trenecito!... ahhh!... así mis niñass!... ahhh!... te gusta papa?... te gusta mami?... aja!... me encanta mi amor!... ah!... si me gusta hijita!...-gemíamos los tres-
En el momento en que la esposa me sacaba el pene de plástico de la coneja, yo hacía lo mismo sacándolo del culo del esposo. La mujer y yo gozábamos con los choques eléctricos que los pitos plásticos nos daban en el frijol a las dos. Nos estuvimos dando duro por varios minutos, la esposa me tomo de las tetas y pego las suyas en mi espalda, el roce de sus pezones en mi piel me excitaba mucho, ella hacia círculos dentro de mi coneja con el pene plástico lo que me provocaba enormes descargas de placer, hasta que ella y yo llegamos a nuestro orgasmo respectivo, cuarto para ella y tercero para mí, el esposo se había derramado ya en el vaso tequilero, llenándolo por completo.
- Aaahhhh!... ahhhhhh!... que ricooo!... ahhhh!... mi niña!... ahhh!... uuuuuuuff!... mamita!... que rico me cogiste!... Camiii!... uuuuyy!... que rico nenita!...-gemíamos sofocados y exhaustos-
La esposa me saco el pene plástico de la coneja, despacio y con cuidado saque el mío del culo del marido, este de dio vuelta y nos ofreció el vasito tequilero lleno de esperma.
- Salud!...-dijo levantándolo-
Su esposa lo tomo con la mano y lo bebió de un jalón, enjuago su boca con el semen y acercándose a mí me beso pensándome una buen parte del semen de su esposo. Lo saboree y lo trague.
- Aahhh!... papi sabe rico!...-dije con voz de tonta-
Su esposa hizo lo mismo y beso a su marido, los tres nos recostamos en el sofá y descansamos un poco.
El sueño nos venció a los tres, así que dormimos por espacio de unas dos horas más o menos, al despertar, volvimos a darnos duro los tres, primero el esposo nos cogió a las dos, después su esposa a él y yo a ella pero por el ano, él se derramo sobre las tetas de su mujer y yo las limpie.
Ella después de eso subió a su habitación porque estaba exhausta, me quede con el señor y seguimos jugando al papa y la hija por espacio de unas dos horas más, en las que le mame la verga, me volvió a coger y me lleno la boca de semen…
Quedándonos en coma sobre el piso de la sala de estar, al día siguiente muy temprano su esposa nos despertó, nos duchamos y desayunamos como en familia, la felicidad se reflejaba en los ojos de los dos, yo me sentía cansada y esa tarde había partido eliminatorio, salimos de su casa y regresamos al hotel.
Al llegar el señor me detuvo me beso la mejilla y dijo.
- Gracias señorita!... no sabe cuan felices nos hace!... extrañamos mucho a nuestra niña!...
Lo abrace sin importarme nada y entre al hotel, eran más o menos las 6:15 a.m. subí a mi habitación y dormí toda la mañana, alegando que me sentía mal del estómago no fui a entrenar, solo al partido, esa tarde ganamos y logramos llegar a la final.
Y así fue mi aventura con el botones, su esposa y mi primera experiencia Lésbica y Bisexual….

Fin...


Otros relatos eroticos Maduros

desvirgada por un anciano

Categoria: Maduros
El anciano trató de resitirse a la seducción de una chiquilla de 15 años, cayendo finalmente en la tentación y haciéndole conocer el sexo.
Relato erótico enviado por paula el 02 de January de 2006 a las 12:15:31 - Relato porno leído 341943 veces
El dinero, lleva a una adolescente de 15 años a dar su cuerpo a dos viejos, que, como lobos hambrientos, lo disfrutarán sin miramientos.
Relato erótico enviado por Anonymous el 20 de July de 2005 a las 19:32:16 - Relato porno leído 283947 veces

follando con mi portero

Categoria: Maduros
Una quinceañera caliente, logra lo que tanto ansía: descubrir que el sexo va mas allá de meterse tímidamente un dedito. Su portero le dará una dulce lección.
Relato erótico enviado por euterpe el 11 de October de 2004 a las 10:03:00 - Relato porno leído 196028 veces

el papa de mi mejor amiga

Categoria: Maduros
Me fui de vacaciones con una amiga y su papa termino cogiendome hasta por el culito.
Relato erótico enviado por verito el 16 de July de 2006 a las 19:13:40 - Relato porno leído 170579 veces
Esta historia ocurrió en Arequipa y es totalmente cierta. Mi sobrina era tímida pero terminó gustándole el sexo.
Relato erótico enviado por blackcat el 21 de January de 2005 a las 16:37:46 - Relato porno leído 143644 veces
Si te ha gustado Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos) vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.

Por eso dedica 30 segundos a valorar Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos). napalmrelatos te lo agradecerá.


Comentarios enviados para este relato
zorraputita (20 de May de 2015 a las 06:05) dice: Felicidades buen relato

katebrown (18 de October de 2022 a las 21:29) dice: SEX? GOODGIRLS.CF


Registrate y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos).
Vota el relato el relato "Los Juegos del Sexo: El Botones, Su Esposa y Yo… ( CON fotos)" o agrégalo a tus favoritos
Votos del Relato

Puntuación Promedio: 0
votos: 0

No puedes votar porque no estás registrado