…, entonces al verme las piernas casi te mueres…, el ver o mirar no va conmigo, a mi me gusta manipular acariciando estas hermosas piernas para energizarme, al tiempo que bajo mis manos acariciando sus piernas por sobre su falda para luego por la abertura lateral de la falda ingresar mis dedos y frotar acariciando sus muslos…, oye que haces reclama, pero no retira mis manos…, sigo acariciando sus nalgas me arrodillo frente a ella mirándole a los ojos eso la anula en sus reacciones beso sus piernas acariciándolas con mis labios y lamiéndolas. Ella...
Relato
Llega al colegio donde estudiábamos el tercer año de la enseñanza profesional un alumno del norte del país, sus características físicas lo acusaban de tener sangre asiática en sus venas, pronto conocimos su mal genio y el agrado por los deportes de este Pepe.
Fácilmente se liaba en discusiones con sus compañeros y era hasta un poco grosero en su trato cuando estaba de mal humor. Quizás por eso amigo no tenía y costaba que fuera admitido en un grupo de trabajo.
Me enferme por varios días y al volver a estudiar me formaron grupo de trabajo con adivinen, con Pepe como compañero. Trabajábamos en la maquinaria y este pateaba el suelo cuando algo salía mal, me reía y le comentaba fuera que te duelen los pies de tanto patear ¿Por qué mejor no pones atención en lo que haces? Mira si no programas bien el esquema la culpa no es de la máquina sino tuyo, si no sabes pregunta, sino eres capaz de apretar una tuerca bien es que eres una persona sin deseos de superarte, por favor exígete que la nota es de nosotros dos y no quiero mala nota. Mi profesor me escuchaba y miraba a Pepe diciéndole tienes el mejor compañero aprovéchalo. Poco a poco fue preguntando y poniendo atención mejorando el trabajo, al final obtuve nota máxima y el por supuesto también estaba feliz, tanto que me invito a almorzar en su casa por los logros. Acepte.
Al llegar a gritos comentaba su excelente nota a su madre que estaba en casa, pero no se veía. Aparece de repente abraza al hijo y feliz le dice ¿es cierto esa nota?, y mostrándome le dice ahí tienes quien me guío hasta lograrlo. Era una mujer asiática sus ojos oblicuos como todos los de su raza, pequeña de tamaño cuando mucho un metro y medio, me llegaba a la altura de mis oídos, a pesar de ser un chico de 17 años, y ella tenía, me había confiado su hijo de 17 igual a mi edad, 39 años, quien se había casado con su padre un chileno de 55 años hace ya 20 años, era una mujer delgada, pero se notaban sus curvas y sus senos abultaban en su pecho, vestía ropas asiáticas lo que no modelaban bien su cuerpo, eso sí tenía en las piernas unas rasgaduras en sus muslos hasta la altura de casi sus calzones. Mostraba unas agradables piernas. Feliz con la noticia de su hijo me abraza y me besa en mi cabello lo que hace que baje mi cabeza enterrándomela entre sus senos, tenía un agradable olor a perfumes de flores. Y como su traje en esa parte tenía también rasgaduras mis labios saborearon la piel de esos senos.
Pepe me dice debo llevarle el almuerzo a mi padre en el trabajo, esta esperándolo. Vuelvo luego es como diez calles.
Al salir Pepe su madre se acerca y me da las gracias por ayudar a su hijo, bueno le digo cumplo con ser un buen compañero, no me dice el me cuenta que tiene problemas con su compañeros, tu eres el único que le hablas y le explicas, tú le ayudas en las tareas. Mi hijo al igual que yo no tiene apoyo del padre, a ver le digo como es eso de que el papá no ayuda a su mujer y al hijo, si, me dice, llevo casada con él veinte años creo, pero solo los 10 primeros me tomo en cuenta luego me ignora y cuando quiere sexo me agarra me tira en la cama me ocupa y luego se olvida de mí. No entiendo te agarra te tira en la cama, me imagino que te acaricia, ja…ja… me dice ya te detallé me agarra me usa y chao…, hace diez años que no le intereso, ni me mira ni me acaricia, yo hago comida china que vendo y con eso me visto él apenas me da dinero para ambos…, tu dices que pasa pues no me ama…, pero como puede no amar a una mujer tan hermosa y con maravillosas piernas que estoy viendo le digo, oye, no seas mirón dice arreglándose su vestido tapándose las piernas que me mostraba hasta sus muslos, lo hermoso se mira le digo al tiempo que acercándome a ella y no se por que reacciono así, me reclino en su pecho, diciéndole cuando me abrazaste y me tuviste apoyado en tu pecho tu fragancia casi me mata de pasión…, entonces al verme las piernas casi te mueres…, el ver o mirar no va conmigo, a mi me gusta manipular acariciando estas hermosas piernas para energizarme, al tiempo que bajo mis manos acariciando sus piernas por sobre su falda para luego por la abertura lateral de la falda ingresar mis dedos y frotar acariciando sus muslos…, oye que haces reclama, pero no retira mis manos…, sigo acariciando sus nalgas me arrodillo frente a ella mirándole a los ojos eso la anula en sus reacciones beso sus piernas acariciándolas con mis labios y lamiéndolas. Ella deja escapar por sus labios una protesta de placer…, me toma mi cabeza y retándome me dice ¿quieres que nos vea en estos menesteres mi hijo?..., déjame tengo un marido que no me toma en cuenta, pero es mi marido…, levantándose y levantándome, mientras nos miramos a los ojos…, no me rechaza, pero tiene miedo…, estoy viuda de cariño hace diez años y tu me acaricias ¿quieres que me apasione y me excite?, sentimos la puerta y nos separamos ella va a la cocina, cuando Pepe llega a mi lado ella aparece desde la cocina y nos llama para ubicar el servicio y la ubicación para la merienda.
Merendamos manjares asiáticos y luego Pepe dice debo arreglarme para ir a karate y sale a su dormitorio vamos me dice le contesto que voy a casa donde no me han visto. Ah dice. Al salir paso al lado de Nako la madre, y rozando su cuerpo le digo vuelvo cuando salga tu hijo, me mira me toma de una mano algo me quiere decir y calla, me voy en casa digo que voy a ir con Pepe al gimnasio, mentiras voy a su casa justo llego cuando este va saliendo en su bicicleta espero que se aleje y voy a su casa, estaba excitado la madre de este con su físico oriental me había provocado estimulando mis hormonas no sabía que haría, pero necesitaba verla, sentirla y ojala recorrerla con mis manos todo su cuerpo. Golpeo y ella sale abrirme, me dice Pepe ya se fue, lo se digo no vengo por Pepe, vengo por verte a ti…, estas loco soy una mujer casada y tu un muchacho, trata de cerrar la puerta no puede y entro…, la miro a sus ojos diciéndole no puede una maravillosa y estupenda mujer ser ignorada diez años, eres estupenda y debes sentirte acariciada y coqueteada no despreciada, tomo una de sus manos y le miro directamente a los ojos diciéndole si quieres me voy o sigo diciendo cosas lindas de ti…, se muerde los labios me sonríe y dice, tu sabrás lo que deseas eso si después debes callar todo, esto nunca pasó, ¿bien claro?
No suelto su mano sino que tiro de ella y la atrapo entre mis brazos diciéndole… piropos, eres una mujer llena de ternuras, llena de atenciones y delicadeza …, la mimo acariciándole su cabello con apasionamiento, calor y excitación, me dice entre suspiros acaso no me deseas acariciarme mi vientre. Que me dicen bajo mis manos y acaricio sus pechos y continuo con su vientre no parando de bajar mis manos hasta detenerse sobre su vagina la cual acaricio y buscando por el costado ingreso bajo sus vestimentas que placer sentir su piel rozar mis dedos…, ella con sus ojos cerrados me dejaba acariciarla y cuando llego a su vagina por debajo de sus vestimentas trata de pararme, pero era tarde entre gemidos y suspiros hipados me dice déjame este cuerpo no te pertenece, ¡ah! por favor déjame Mmm…¡oh!
Suéltame me estas excitando y hace años que mi vagina no es acariciada por macho alguno… ¡oh!…, ¡ah! … ¡oh!, quieres poseerme y sentirte mi macho, mi semental, sentirme tuya, eres un muchacho pero quieres sentirte poderoso, bueno hazlo soy tuya, soy muy vieja para ti, pero…, y se recuesta sacándose sus calzones y subiéndose su falda hasta la cintura. Desesperado no aguanto más y de dos potentes empotradas la empalo con mi pene hasta su matriz…, despacio reclama que me haces doler, nadie te impedirá que sea tuya, pero con amor y cariño mientras, hace años que no me penetran con un pene tan tieso y esa cabezota que tienes…, me destrozas esa cabeza es mas gruesa que mi puño, me besaba. Nos besamos mutuamente y ella comienza una danza con sus caderas moviéndolas de una forma circular que prontamente me lleva a mi clímax, quiero lanzar mis chorros de semen desesperado en su matriz y ella me comprimir mi pene diciéndome entre suspiros y gemidos de excitación, espérame que ya me llegan, ah…, oh, juntos logremos un delicioso enlace sexual, mientras me enlaza con sus piernas por mi retaguardia, no termina de hablar cuando entre chillidos anuncia soy tuya, ah, mis orgasmos, soy tuya…, ah, y al mismo tiempo recibe en su vientre chorros de mi leche, oh que caliente es tu leche dice, tanta leche mía, eres mío, mi machito…, eres un niño para mi, pero querías poseerme, ahora soy tuya que harás tendrás que seguir dándome sexo ya me probaste y te probé, me encanto ahora soy tu hembra seré tuya cuantas veces quieras , mi marido medio borrachín apenas me utiliza sexualmente, pero tu eres potente y me saciaste ahora aguanta soy tu hembra…, por unos minutos nos acariciamos, besamos …, luego ella despierta de la torpeza y dice…¡sal! Que puede llegar mi hijo y nos pillan, va al baño se lava y vuelve diciéndome tú te lo buscaste, ahora dime que quieres. Se que soy muy vieja para ti, pero…, quiero conservarte y sentirte mi macho, mi semental, sentirme tuya, ¿quieres sentirte poderoso?, bueno te diré que me encantó ser tuya, me encanto sentirme acariciada, empotrada y apareada por tu inmensa cabezota que tienes destrozándome mi vagina como que sangro donde la penetraste con ese durmiente y esa inmensa cabezota.
Ahora ándate que puede llegar mi hijo y que explicación le damos, vuelve cualquier día que no este mi hijo te estaré esperando, me besa y me hecha de su casa.
Ambos iniciamos a besarnos con toda pasión, con aun más pasión que la primera vez, mientras nos besamos Armando comenzó a tocarme mi zona intima debajo la falda de mi vestido y como consecuencia a esto de inmediato me moje toda, ¡Quiero hacerte el amor! Me dijo suavemente al oído, -Lo sé y también quiero- le conteste.
Relato erótico enviado por putita golosa el 29 de August de 2010 a las 23:31:22 - Relato porno leído 513555 veces