Me acordé de ti...

Anoche me acordé de ti...
me recorté el vello púvico y el de los testículos, hasta el del alrededor de mi ano.
eso me excitó un poco y me dieron ganas de masturbarme, así que empecé a tocarme
muy suavemente, hasta frotarme toda mi verga que ya tenía bien erecta.

Así que estiré mi prepucio para sentir rico en mi glande, cerre los ojos
y empece a divagar con tu cuerpo, tus grandes piernas velludas
imaginaba besar tus nalgas, lamer tus piernas, ariciar tus pies,
oler tus testículos enormes y flácidos
con tu verga gruesa ya bien dura que sigue en espera
de la humedad cálida de mi boca...

Comencé a recordar las veces que te he mamado tu deliciosa verga
en distintas ocasiones como aquella vez:
en la secundaria, que traias un short blanco
y sacaste tu pene por un lado y comencé a mamarlo
hasta tragar tu semen...

en el patio de tu casa, hacía mucho frío
pero eso no impidió probar el sabor inconfundible
de tu verga...

en mi casa, me encontraba junto al escritorio
así que solo bajaste la bragueta de tu pantalón de mezclilla,
te lo chupe tanto y echaste tu orgasmo en mi cara...

en mi cama, cuando me cogiste por primera vez,
recordaba cada centímetro de tu verga como me iba
abriendo, porque su grosor es lo más rico que tiene
y te dejé que llenaras el culito de tu lechita caliente...

todos estos recuerdos invadieron mi mente, añorando tu sabor
y por fin pude eyacular, contigo y sin ti...
te extraño, siempre te llevaré
en mi pensamiento.