Me gustan las mujeres maduras

Tengo 16 años y no miro mis chicas del barrio, me gusta mirar y hasta me enamoro de las mujeres maduras, si estas son casadas mejor por si quedan embarazadas, si tienen hijos mas me gustan así yo les hago un hermanito, me gustan aquellas con protuberantes senos y con buenas caderas para afirmarme en el coito, desde los 14 años que estoy conviviendo y maniobrando a varias mujeres maduras mayores y sobre todo a dos ( ver Arnoldo), se me olvidaba me presento soy Arnoldo vivo con mis abuelos por que mi madre hace ya cerca de siete años me vino a dejar en sus manos y se olvido de mí, nada puedo decir de mis abuelos me ayudan como pueden de cariño no me falta, aunque son muy desconfiados cuando salgo y sobre todo por las noches, bueno tengo por amante a lo menos tres a cuatro veces al mes de dos damas maduras y sobre los 50 años, me encantan sobre todo cuando me disponen con observaciones para hacer de nuestros apareamientos mas placenteros. De ellas he aprendido mucho y sus instrucciones me han servido para lograr encantar a otras mujeres maduras, casadas con hijos..., ninguna se ha quejado de quedar insatisfechas todas me buscan luego para que nuevamente me aparee con ellas cuando pueden y están solas para gritar a gusto cuando le llegan sus orgasmos.
Es el caso de Nuria la madre de una de mis compañeras de colegio que celebrando su cumpleaños nos invita a su casa al anochecer, esta es una mujer madura de preciosos senos y un trasero de películas con 38 años a cuesta, además esta separada de su marido desde hace meses por estar este en comisión en el extranjero y ella esta de comérsela y necesita macho por que niños que llegaba a esta fiesta, era acariciado por ella, no así las mujeres..., se notaba la falta de macho en ella, al llegar había observado su conducta entonces esperé ser el último y estar a solas en mi llegada..., me recibe con abrazos y caricias en mi cabello y me quiere dar un beso en mi mejilla espero el momento oportuno y giro mi cabeza para ser besado en mis labios, no permitiéndole separarse prontamente sino que la retengo en el abrazo y trato de introducir mi lengua en su boca, no lo logro, pero ella queda respirando excitada debido a mis caricias en sus senos, me mira y me dice, veo que eres un machito..., mas bien le digo un macho usted no sería la primera mujer mayor con la que estaría satisfaciéndola en la cama, me mira asombrada y se retira...
Durante la fiesta ella sirve embelecos y al pasar a mi lado siempre metía mis manos en alguna parte de su cuerpo y ella miraba sin decirme nada, sabía que la estaba excitando en un momento dado de la fiesta todos estaban muy alegres y bailando, ella estaba en la cocina, esta quedaba aislada por un corredor del salón donde bailaban me escurrí hasta ella disimuladamente, al llegar Nuria la madre me mira con sorpresa y me dice que quieres..., bebida digo ..., en le frío me dice hay..., abro este y la botella la coloco en la parte baja del frío, diciéndole no hay..., se acerca la busca y se agacha al tomarla..., aprovecho para cogerla de sus cinturas y arrimo mi cuerpo junto a su trasero apretándola contra mi cuerpo..., que haces me dice entre resoplos alterados..., mirándome, le digo se que estas excitadísima para ser apareada, te falta macho ya que tu marido no esta desde hace meses, quieres retribuirte con una buena copula, pero temes lo que dirán si la gente se entera..., te aseguro, se callar, y de mi nada saldrá, las otras mujeres maduras lo saben y por eso copulan conmigo, estas estimulada e aguijoneada por satisfacerte de tus orgasmos que revolucionan tus hormonas, te ofrezco mi ayuda y será nuestro secreto ahora o nunca decídete, ella se desliga de mi cuerpo y me mira seriamente respirando fuerte y alterada, nada dice..., insisto tu conoces tu casa y sabes el lugar mas aislado y protegido de ella donde podemos acariciarnos in problemas, se separa de mí y abre la puerta de la cocina caminando por el pasillo, pienso dentro de mí, si se voltea quiere que la siga, en eso se voltea me mira y abre una puerta donde hay una escala al segundo piso la deja abierta para que entre, al entrar la cierro y ella sube los escalones, le sigo sus pisadas al llegar abre otra puerta y entramos a otro pasillo que al final tiene una puerta, me espera que entre y cierra con llave la puerta, la cojo entre mis brazos y la beso, ella responde a mis besos y me permite que mi lengua entre en su boca, luego la acaricio y beso su garganta camino a sus senos, se aparta y abre la puerta del fondo entramos a una pequeña puerta de un cuarto donde por la ventana entra la tenue luz de la luna y se ve el salón done bailan mis compañeros..., es la pieza del planchado en donde hay una estrecha cama con prendas por planchar ella los coge y deja sobre la mesa del planchado, la estrecha cama queda libre..., por detrás la abrazo y recogiendo su falda de la cota falda del vestido recorro sus piernas, gime y respira con gran ruido, se esta soltando de sus preocupaciones, gira y me abraza, mientras mi mano se mete entre su calzón y vagina esta está mas que húmeda, esta en verdad empapada, bajo el calzón a la vez que me arrodillo y beso su vagina, esta hembra se estremece y se dobla cayendo sobre esa cama, no pierdo tiempo saco mis ropas y comienzo a desbotonar su vestido saliendo al aire esos deliciosos pechos que beso y chupo, se trastorna la mujer gruñendo de satisfacción, y abre mas sus piernas, me ubico entre ellas desnudo toma ella mi pene lo amasa y dice es grande para ser tu un niño, y es mas grueso que el de Ricardo mi marido, me vas a partir si me lo metes, veras que no le digo tu vagina se lo tragara completo y satisfecha, comienzo a empujar en su vagina y ella gime patalea en el aire, duele me dice llevo muchos meses sin uso..., clavo con fuerza este y ella grita acosada por mi pene al entrar hasta el fondo de sus paredes vaginales... despacio duele dice, no tengo compasión de ella y penetro rápidamente su matriz entrando y sacando mi pene de su canal vaginal que placer, ella gemía y se estremecía satisfecha, de pronto grita ahí vienen soy tuya, mis orgasmos soy tu mujer, se arquea y se atiesa bañando mi pene en el interior de su matriz con sus fluidos, ya me dice tranquilo ya fui tuya, duele..., por dos minutos mas estuve sobre ella en pleno acto carnal en eso descargo mis ríos de semen en su matriz, que haces me dice me meas, no respondo son mis leches y semen que están regando tu útero y ella nuevamente me agarra mis brazos se tuerce y de sus labios salen balbuceos de placer al llegarle un nuevo orgasmo al sentirse inyectada por esa esperma que la moja tibia en su interior. ¡Oh, me dice nuevamente tuya! Eres un poderoso macho..., luego me susurra a mis oídos puedes venir el sábado mi hija por las mañana va a deportes y quedo sola desde la diez hasta mas allá de las 12:30 horas.
Por supuesto el sábado era un centinela en la esquina de su casa esperando la salida de su hija y compañera de curso..., sale juntándose con unas amigas que iban pasando y se van..., me arriesgo y me aproximo a la casa, la puerta estaba entre junta y paso en el living que visión está Nuria solo cubierta con su corto y traslucido baby doll, esa prenda apenas la cubría ¡que visión! Si mi pene brinco en mis pantalones de gusto. Esa mujer estaba entregada a mí. Me agaché y metí mi cabeza entre sus piernas, a la primera
lamida en su pubis lanzó un suspiro y dio dos pasos hacia atrás para apoyarse
en la pared y dejarse hacer. Parecía estar muy necesitada de cariño, se lo metí entre sus piernas abiertas e inicié la largamente la añorada penetración, ella, que también se agitaba en todas direcciones, presa del placer. Me costaba mantenerme dentro de ella de tanto que se movía. Sentía su vagina bien mojada. Mi pene se deslizaba a las mil maravillas, lentamente para disfrutarlo, lo cierto es que me fue imposible no acelerar la velocidad para gozar con ella lo antes posible. Estaba exquisita y lo sabía gritaba y gemía como una niña mientras la gozaba y llenaba sus entrañas con mi leche. Después un calmado reposo y ella me propone que sea su amante y venga todos los sábados a esa hora que ella estará esperándome. Ahora déjame asearme que tus leches junto con las mías bajan por mis piernas. Esta hembra madura veinte y dos años mayor que mí me solicita ser su amante y que la visite todos los sábados. Si vendría todos los sábados y también algunos días de la semana. Hace seis meses que la visito los sábados como ella solicitó y por mi cuenta los martes por la tarde que tenía libre, dos veces a la semana es cubierta y saciada apareándose conmigo, claro que su marido vuelve en este mes y tendremos que tener cuidado de no ser sorprendidos, un día antes de que llegue su marido ese sábado me da una noticia, tanto aparearse conmigo obtuvo un premio, está embarazada de mis espermios depositados en su matriz, como llega su marido le echaremos la culpa a él de este embarazo. Mi compañera de curso tendrá un hermanito fecundado por mí, su compañero de curso, y ella lo cuidara con su madre.